'Allí' en la Biblia
Entonces el rey envió un capitán de cincuenta con sus cincuenta {hombres} a buscarlo. El capitán subió a él, y allí estaba {Elías} sentado en la cumbre del monte, y le dijo: ``Hombre de Dios, el rey dice: `Desciende.'"
Eliseo fue al manantial de las aguas, echó sal en él, y dijo: ``Así dice el SEÑOR: `He purificado estas aguas; de allí no saldrá más muerte ni esterilidad.'"
Después subió de allí a Betel (Casa de Dios); y mientras subía por el camino, unos muchachos salieron de la ciudad y se burlaban de él, diciéndole: `` ¡Sube, calvo; sube, calvo!"
De allí, Eliseo fue al Monte Carmelo, y desde allí regresó a Samaria.
Entonces tomó a su hijo primogénito que había de reinar en su lugar, y lo ofreció en holocausto sobre la muralla. Y hubo gran ira contra los Israelitas, quienes se apartaron de allí y regresaron a {su} tierra.
Un día pasaba Eliseo por Sunem, donde había una mujer distinguida, y ella lo persuadió a que comiera. Y sucedía que siempre que pasaba, entraba allí a comer.
"Te ruego que hagamos un pequeño aposento alto, con paredes, y pongamos allí para él una cama, una mesa, una silla y un candelero; y cuando venga a nosotros, se podrá retirar allí."
Y un día que Eliseo vino por allí, se retiró al aposento alto y allí se acostó.
"Que el SEÑOR perdone a su siervo en esto: Cuando mi señor entre en el templo de Rimón para adorar allí y se apoye en mi mano, y yo me incline en el templo de Rimón cuando tenga que adorar allí, que el SEÑOR perdone a su siervo por esto."
"Le rogamos que nos deje ir al Jordán, para que cada uno de nosotros tome de allí una viga, y nos hagamos allí un lugar donde habitar." Y él dijo: ``Vayan."
Entonces el hombre de Dios dijo: `` ¿Dónde cayó?" Y cuando le mostró el lugar, cortó un palo y {lo} echó allí, e hizo flotar el hierro.
Y el hombre de Dios envió {un mensaje} al rey de Israel: ``Procura no pasar por tal lugar, porque los Arameos van a bajar allí."
Entonces el rey de Israel envió {gente} al lugar que el hombre de Dios le había dicho; así que, al prevenirlo él, se cuidó {de ir} allí, {y esto} no una ni dos veces.
"Si decimos: `Vamos a entrar en la ciudad,' como el hambre está en la ciudad, moriremos allí; y si nos sentamos aquí, también moriremos. Ahora pues, vayamos y pasemos al campamento de los Arameos. Si nos perdonan la vida, viviremos; y si nos matan, pues moriremos."
Los leprosos se levantaron al anochecer para ir al campamento de los Arameos, y cuando llegaron a las afueras del campamento de los Arameos, resultó que no había nadie allí.
Cuando los leprosos llegaron a las afueras del campamento, entraron en una tienda y comieron y bebieron, y se llevaron de allí plata y oro y ropas, y fueron y {lo} escondieron; y volvieron y entraron en otra tienda y de allí {también} se llevaron {botín,} y fueron y {lo} escondieron.
Así que fueron y llamaron a los porteros de la ciudad, y les informaron: ``Fuimos al campamento de los Arameos, y vimos que no había nadie allí, ni siquiera {se oía} voz de hombre; solamente los caballos atados, también los asnos atados y las tiendas intactas."
Entonces Jehú montó en un carro y fue a Jezreel, porque Joram estaba allí en cama. Y Ocozías, rey de Judá, había descendido para ver a Joram.
Cuando Ocozías, rey de Judá, vio {esto,} huyó por el camino de la casa del huerto. Y Jehú lo persiguió y dijo: ``Mátenlo a él también en el carro." {Y lo hirieron} en la subida de Gur, que está en Ibleam. Y huyó a Meguido, y allí murió.
Cuando partió de allí, Jehú se encontró con Jonadab, hijo de Recab, {que venía} a su encuentro, lo saludó y le dijo: `` ¿Es recto tu corazón como mi corazón es con el tuyo?" Y Jonadab respondió: ``Lo es." {Y Jehú dijo: ``}Si lo es, da{me} la mano." Y le dio su mano y lo hizo subir al carro.
Y le echaron mano; y cuando ella llegó a la entrada de los caballos de la casa del rey, allí la mataron.
En Jerusalén conspiraron contra él, y Amasías huyó a Laquis; pero lo persiguieron hasta Laquis y allí lo mataron.
Entonces Manahem exigió este dinero a Israel, a todos los ricos poderosos, de cada uno cincuenta siclos (570 gr) de plata para pagar al rey de Asiria. Y el rey de Asiria se volvió y no se detuvo allí en el país.
En aquel tiempo Rezín, rey de Aram, recuperó a Elat para Aram, y echó a los Judíos de Elat completamente; y los Arameos vinieron a Elat y allí han morado hasta hoy.
Quemaron incienso allí en todos los lugares altos, como las naciones que el SEÑOR se había llevado al destierro de delante de ellos; e hicieron cosas malas provocando al SEÑOR.
Al principio de habitar ellos allí, no temieron al SEÑOR, así que el SEÑOR envió leones entre ellos que mataron a {muchos} de ellos.
Y el rey de Asiria ordenó: ``Lleven allá a uno de los sacerdotes que ustedes llevaron al destierro, y que él vaya y habite allí; y que les enseñe la costumbre del dios de la tierra."
~`Por tanto, así dice el SEÑOR acerca del rey de Asiria: ``El no entrará en esta ciudad, ni lanzará allí flecha alguna; tampoco vendrá delante de ella con escudo, ni levantará terraplén contra ella.
Y los altares que {estaban} sobre el techo, el aposento alto de Acaz que habían hecho los reyes de Judá, y los altares que había hecho Manasés en los dos atrios de la casa del SEÑOR el rey los derribó, los destrozó allí y arrojó su polvo al torrente Cedrón.
Al regresar, Josías vio los sepulcros que {estaban} allí en el monte, y envió a recoger los huesos de los sepulcros y {los} quemó sobre el altar, profanándolo, conforme a la palabra del SEÑOR que había proclamado el hombre de Dios que había anunciado estas cosas.
Y mató sobre los altares a todos los sacerdotes de los lugares altos que {estaban} allí, y quemó huesos humanos sobre ellos. Y regresó a Jerusalén.
Y el SEÑOR dijo: ``También quitaré a Judá de Mi presencia, como he quitado a Israel. Y desecharé a esta ciudad que Yo había escogido, a Jerusalén, y al templo del cual dije: `Mi nombre estará allí.'"
Faraón Necao hizo rey a Eliaquim, hijo de Josías, en lugar de Josías su padre, y cambió su nombre por el de Joacim. Pero tomó a Joacaz y {lo} llevó a Egipto, y allí murió.
Nabucodonosor sacó de allí todos los tesoros de la casa del SEÑOR, los tesoros de la casa del rey, y destrozó todos los utensilios de oro que Salomón, rey de Israel, había hecho en el templo del SEÑOR, tal como el SEÑOR había dicho.