'Almas' en la Biblia
Todas las personas que descendieron de Jacob fueron setenta almas. Pero José estaba {ya} en Egipto.
``Y {esto} será para ustedes un estatuto perpetuo: en el mes séptimo, a los diez {días} del mes, humillarán sus almas y no harán obra alguna, ni el nativo ni el extranjero que reside entre ustedes.
"Será para ustedes día de reposo, de descanso solemne, para que humillen sus almas; es estatuto perpetuo.
~`Porque la vida de la carne está en la sangre, y Yo se la he dado a ustedes sobre el altar para hacer expiación por sus almas. Porque es la sangre, por razón de la vida, la que hace expiación.'
~`Ustedes harán una distinción entre el animal limpio y el inmundo, entre el ave limpia y la inmunda; no hagan sus almas abominables por causa de animal o de ave o de cosa alguna que se arrastra sobre la tierra, los cuales Yo he apartado de ustedes por inmundos.
``A los diez {días} de este séptimo mes será el día de expiación; será santa convocación para ustedes, y humillarán sus almas y presentarán una ofrenda encendida al SEÑOR.
"Será día de completo reposo para ustedes, y humillarán sus almas; a los nueve días del mes por la tarde, de una tarde a otra tarde, guardarán su reposo."
Desde la ciudad gimen los hombres, Y claman las almas de los heridos, Pero Dios no hace caso a {su} súplica.
Preparó senda para Su ira; No libró sus almas de la muerte, Sino que entregó sus vidas a la plaga,
Los que aman al SEÑOR, aborrezcan el mal; El guarda las almas de Sus santos; Los libra de la mano de los impíos.
Subieron a los cielos, descendieron a las profundidades, Sus almas se consumían por el mal.
El fruto del justo es árbol de vida, Y el que gana almas es sabio.
Así dice el SEÑOR: ``Párense en los caminos y miren, Y pregunten por los senderos antiguos, Cuál es el buen camino, y anden por él; Y hallarán descanso para sus almas. Pero dijeron: `No andaremos {en él.}'
"Todas las almas son Mías; tanto el alma del padre como el alma del hijo Mías son. El alma que peque, ésa morirá.
"Hay conspiración de sus profetas en medio de Jerusalén, como león rugiente que desgarra la presa. Han devorado almas, de las riquezas y cosas preciosas se han apoderado, las viudas se han multiplicado en medio de ella.