'Cuando' en la Biblia
Bienaventurados sois cuando os vituperaren y os persiguieren, y dijeren de vosotros todo mal por mi causa, mintiendo.
Cuando pues haces limosna, no hagas tocar trompeta delante de ti, como hacen los hipócritas en las sinagogas y en las plazas, para ser estimados de los hombres: de cierto os digo, que ya tienen su recompensa.
Mas cuando tú haces limosna, no sepa tu izquierda lo que hace tu derecha;
Y cuando oras, no seas como los hipócritas; porque ellos aman el orar en las sinagogas, y en los cantones de las calles en pie, para ser vistos de los hombres: de cierto os digo, que ya tienen su pago.
Mas tú, cuando oras, éntrate en tu cámara, y cerrada tu puerta, ora á tu Padre que está en secreto; y tu Padre que ve en secreto, te recompensará en público.
Y cuando ayunáis, no seáis como los hipócritas, austeros; porque ellos demudan sus rostros para parecer á los hombres que ayunan: de cierto os digo, que ya tienen su pago.
Mas tú, cuando ayunas, unge tu cabeza y lava tu rostro;
Y he aquí, toda la ciudad salió á encontrar á Jesús: Y cuando le vieron, le rogaban que saliese de sus términos.
Y Jesús les dijo: ¿Pueden los que son de bodas tener luto entre tanto que el esposo está con ellos? mas vendrán días cuando el esposo será quitado de ellos, y entonces ayunarán.
Mas cuando os entregaren, no os apuréis por cómo ó qué hablaréis; porque en aquella hora os será dado qué habéis de hablar.
Mas cuando os persiguieren en esta ciudad, huid á la otra: porque de cierto os digo, que no acabaréis de andar todas las ciudades de Israel, que no venga el Hijo del hombre.
Cuando el espíritu inmundo ha salido del hombre, anda por lugares secos, buscando reposo, y no lo halla.
Entonces dice: Me volvere á mi casa de donde salí: y cuando viene, la halla desocupada, barrida y adornada.
El cual á la verdad es la más pequeña de todas las simientes; mas cuando ha crecido, es la mayor de las hortalizas, y se hace árbol, que vienen las aves del cielo y hacen nidos en sus ramas.
Y oyéndo lo Jesús, se apartó de allí en un barco á un lugar descierto, apartado: y cuando las gentes lo oyeron, le siguieron á pie de las ciudades.
Y cuando fué la tarde del día, se llegaron á él sus discípulos, diciendo: El lugar es desierto, y el tiempo es ya pasado: despide las gentes, para que se vayan por las aldeas, y compren para sí de comer.
¿Por qué tus discípulos traspasan la tradición de los ancianos? porque no se lavan las manos cuando comen pan.
Mas él respondiendo, les dijo: Cuando es la tarde del día, decís: Sereno; porque el cielo tiene arreboles.
Y respondiendo Jesús, dijo: Oh generación infiel y torcida! ¿hasta cuándo tengo de estar con vosotros? ¿hasta cuándo os tengo de sufrir? traédmele acá.
Y Jesús les dijo: De cierto os digo, que vosotros que me habéis seguido, en la regeneración, cuando se sentará el Hijo del hombre en el trono de su gloria, vosotros también os sentaréis sobre doce tronos, para juzgar á las doce tribus de Israel.
Y cuando fué la tarde del día, el señor de la viña dijo á su mayordomo: Llama á los obreros y págales el jornal, comenzando desde los postreros hasta los primeros.
Y como vino al templo, llegáronse á él cuando estaba enseñando, los príncipes de los sacerdotes y los ancianos del pueblo, diciendo. ¿Con qué autoridad haces esto? ¿y quién te dió esta autoridad?
Y cuando se acercó el tiempo de los frutos, envió sus siervos á los labradores, para que recibiesen sus frutos.
Pues cuando viniere el señor de la viña, ¿qué hará á aquellos labradores?
Ay de vosotros, escribas y Fariseos, hipócritas! porque rodeáis la mar y la tierra por hacer un prosélito; y cuando fuere hecho, le hacéis hijo del infierno doble más que vosotros.
Y sentándose él en el monte de las Olivas, se llegaron á él los discípulos aparte, diciendo: Dinos, ¿cuándo serán estas cosas, y qué señal habrá de tu venida, y del fin del mundo?
Por tanto, cuando viereis la abominación del asolamiento, que fué dicha por Daniel profeta, que estará en el lugar santo, (el que lee, entienda),
De la higuera aprended la parábola: Cuando ya su rama se enternece, y las hojas brotan, sabéis que el verano está cerca.
Así también vosotros, cuando viereis todas estas cosas, sabed que está cercano, á las puertas.
Bienaventurado aquel siervo, al cual, cuando su señor viniere, le hallare haciendo así.
Y cuando el Hijo del hombre venga en su gloria, y todos los santos ángeles con él, entonces se sentará sobre el trono de su gloria.
Entonces los justos le responderán, diciendo: Señor, ¿cuándo te vimos hambriento, y te sustentamos? ¿ó sediento, y te dimos de beber?
¿Y cuándo te vimos huésped, y te recogimos? ¿ó desnudo, y te cubrimos?
¿O cuándo te vimos enfermo, ó en la cárcel, y vinimos á ti?
Entonces también ellos le responderán, diciendo: Señor, ¿cuándo te vimos hambriento, ó sediento, ó huésped, ó desnudo, ó enfermo, ó en la cárcel, y no te servimos?
Y os digo, que desde ahora no beberé más de este fruto de la vid, hasta aquel día, cuando lo tengo de beber nuevo con vosotros en el reino de mi Padre.
Resultados de Búsqueda por Versiones
- J2000 (52)
- LBDA (109)
- NBLH (110)
- RV (85)
- SEV (52)
- RV1909 (36)
Resultados de Búsqueda por Libro
- Génesis (66)
- Éxodo (57)
- Levítico (64)
- Números (67)
- Deuteronomio (110)
- Josué (30)
- Jueces (29)
- Rut (2)
- 1 Samuel (40)
- 2 Samuel (39)
- 1 Reyes (33)
- 2 Reyes (42)
- 1 Crónicas (7)
- 2 Crónicas (36)
- Esdras (3)
- Nehemías (6)
- Ester (3)
- Job (46)
- Salmos (93)
- Proverbios (40)
- Eclesiastés (11)
- Cantares (1)
- Isaías (43)
- Jeremías (51)
- Lamentaciones (4)
- Ezequiel (92)
- Daniel (11)
- Oseas (7)
- Amós (2)
- Jonás (1)
- Miqueas (4)
- Habacuc (6)
- Sofonías (1)
- Zacarías (9)
- Malaquías (5)
- Mateo (36)
- Marcos (34)
- Lucas (58)
- Juan (38)
- Hechos (22)
- Romanos (9)
- 1 Corintios (16)
- 2 Corintios (11)
- Gálatas (4)
- Efesios (1)
- Filipenses (1)
- Colosenses (2)
- 1 Tesalonicenses (1)
- 2 Tesalonicenses (3)
- 1 Timoteo (1)
- 2 Timoteo (2)
- Tito (2)
- Hebreos (5)
- Santiago (6)
- 1 Pedro (9)
- 2 Pedro (2)
- 1 Juan (3)
- 3 Juan (1)
- Judas (1)
- Apocalipsis (24)