'Estando' en la Biblia
Y el nacimiento de Jesucristo fue como sigue. Estando su madre María desposada con José, antes de que se consumara el matrimonio, se halló que había concebido por {obra del} Espíritu Santo.
Y sucedió que estando El sentado {a la mesa} en la casa, he aquí, muchos recaudadores de impuestos y pecadores llegaron y se sentaron {a la mesa} con Jesús y sus discípulos.
Estando reunidos los fariseos, Jesús les hizo una pregunta,
Y estando El sentado en el monte de los Olivos, se le acercaron los discípulos en privado, diciendo: Dinos, ¿cuándo sucederá esto, y cuál {será} la señal de tu venida y de la consumación de {este} siglo?
Y estando él sentado en el tribunal, su mujer le mandó {aviso,} diciendo: No tengas nada que ver con ese justo, porque hoy he sufrido mucho en sueños por causa de El.
Y sucedió que estando Jesús sentado {a la mesa} en casa de Leví, muchos recaudadores de impuestos y pecadores estaban comiendo con Jesús y sus discípulos; porque había muchos de ellos que le seguían.
Y llegaron a Capernaúm; y estando ya en la casa, les preguntaba: ¿Qué discutíais por el camino?
Y estando El sentado en el monte de los Olivos, frente al templo, Pedro, Jacobo, Juan y Andrés le preguntaban en privado:
Y estando El en Betania, sentado {a la mesa} en casa de Simón el leproso, vino una mujer con un frasco de alabastro de perfume muy costoso de nardo puro; {y} rompió el frasco y lo derramó sobre la cabeza de Jesús.
Y estando sentados {a la mesa} comiendo, Jesús dijo: En verdad os digo que uno de vosotros me entregará; el que come conmigo.
Estando Pedro abajo en el patio, llegó* una de las sirvientas del sumo sacerdote,
Y aconteció que mientras la multitud se agolpaba sobre El para oír la palabra de Dios, estando Jesús junto al lago de Genesaret,
Y aconteció que estando Jesús en una de las ciudades, he aquí, {había allí} un hombre lleno de lepra; y cuando vio a Jesús, cayó sobre su rostro y le rogó, diciendo: Señor, si quieres, puedes limpiarme.
Y aconteció que estando Jesús orando en cierto lugar, cuando terminó, le dijo uno de sus discípulos: Señor, enséñanos a orar, así como Juan enseñó también a sus discípulos.
Después que el dueño de la casa se levante y cierre la puerta, y vosotros, estando fuera, comencéis a llamar a la puerta, diciendo: ``Señor, ábrenos", El respondiendo, os dirá: ``No sé de dónde sois."
En el Hades alzó sus ojos, estando en tormentos, y vio* a Abraham a lo lejos, y a Lázaro en su seno.
Estando ellos oyendo estas cosas, continuando {Jesús,} dijo una parábola, porque El estaba cerca de Jerusalén y ellos pensaban que el reino de Dios iba a aparecer de un momento a otro.
Y estando en agonía, oraba con mucho fervor; y su sudor se volvió como gruesas gotas de sangre, que caían sobre la tierra.
Pero Pedro dijo: Hombre, yo no sé de qué hablas. Y al instante, estando él todavía hablando, cantó un gallo.
Y aconteció que estando ellas perplejas por esto, de pronto se pusieron junto a ellas dos varones en vestiduras resplandecientes;
y estando ellas aterrorizadas e inclinados sus rostros a tierra, ellos les dijeron: ¿Por qué buscáis entre los muertos al que vive?
Entonces buscaban a Jesús, y estando ellos en el templo, se decían unos a otros: ¿Qué os parece? ¿Que no vendrá a la fiesta?
Estas cosas os he dicho estando con vosotros.
Entonces, al atardecer de aquel día, el primero de la semana, y estando cerradas las puertas {del lugar} donde los discípulos se encontraban por miedo a los judíos, Jesús vino y se puso en medio de ellos, y les dijo*: Paz a vosotros.
Ocho días después, sus discípulos estaban otra vez dentro, y Tomás con ellos. Y estando las puertas cerradas, Jesús vino* y se puso en medio de ellos, y dijo: Paz a vosotros.
Y estando mirando fijamente al cielo mientras El ascendía, aconteció que se presentaron junto a ellos dos varones en vestiduras blancas,
Y estando él asido de Pedro y de Juan, todo el pueblo, lleno de asombro, corrió al pórtico llamado de Salomón, donde ellos estaban.
Y aconteció que cuando iba de camino, estando ya cerca de Damasco, como al mediodía, de repente una luz muy brillante fulguró desde el cielo a mi derredor,
acerca del cual, estando yo en Jerusalén, los principales sacerdotes y los ancianos de los judíos presentaron acusaciones contra él, pidiendo sentencia condenatoria contra él.
Pero estando yo perplejo cómo investigar estas cuestiones, le pregunté si estaba dispuesto a ir a Jerusalén y ser juzgado de estas cosas allá.
estando llenos de toda injusticia, maldad, avaricia {y} malicia; colmados de envidia, homicidios, pleitos, engaños {y} malignidad; {son} chismosos,
y estando plenamente convencido de que lo que {Dios} había prometido, poderoso era también para cumplirlo.
¿Fue llamado alguno {ya} circuncidado? Quédese circuncidado. ¿Fue llamado alguno estando incircuncidado? No se circuncide.
Sin embargo, no todos tienen este conocimiento; sino que algunos, estando acostumbrados al ídolo hasta ahora, comen {alimento} como si éste fuera sacrificado a un ídolo; y su conciencia, siendo débil, se mancha.
Porque todos nosotros debemos comparecer ante el tribunal de Cristo, para que cada uno sea recompensado por sus hechos estando en el cuerpo, de acuerdo con lo que hizo, sea bueno o sea malo.
y estando preparados para castigar toda desobediencia cuando vuestra obediencia sea completa.
Esto tenga en cuenta tal persona: que lo que somos en palabra por carta, estando ausentes, lo {somos} también en hechos, estando presentes.
Por esta razón os escribo estas cosas estando ausente, a fin de que cuando {esté} presente no tenga que usar de severidad según la autoridad que el Señor me dio para edificación y no para destrucción.
de quien todo el cuerpo (estando bien ajustado y unido por la cohesión que las coyunturas proveen), conforme al funcionamiento adecuado de cada miembro, produce el crecimiento del cuerpo para su propia edificación en amor.
estando convencido precisamente de esto: que el que comenzó en vosotros la buena obra, la perfeccionará hasta el día de Cristo Jesús.
Por la fe Abel ofreció a Dios un mejor sacrificio que Caín, por lo cual alcanzó el testimonio de que era justo, dando Dios testimonio de sus ofrendas; y por la fe, estando muerto, todavía habla.
Porque así también se adornaban en otro tiempo las santas mujeres que esperaban en Dios, estando sujetas a sus maridos.
sino santificad a Cristo como Señor en vuestros corazones, {estando} siempre preparados para presentar defensa ante todo el que os demande razón de la esperanza que hay en vosotros, pero {hacedlo} con mansedumbre y reverencia;
estaba encinta, y gritaba*, estando de parto y con dolores de alumbramiento.