'Irá' en la Biblia
No aprovecharán las riquezas en el día de la ira; mas la justicia librará de la muerte.
El loco al momento da a conocer su ira; mas el que cubre la injuria es cuerdo.
La respuesta suave quita la ira; mas la palabra áspera hace subir el furor.
La ira del rey es mensajero de muerte; mas el hombre sabio la evitará.
Como el bramido del cachorro de león es la ira del rey; y su favor como el rocío sobre la hierba.
El de grande ira llevará la pena; porque aun si lo librares seguirá lo mismo.
El don en secreto amansa el furor, y el presente en el seno, la fuerte ira.
El que sembrare iniquidad, iniquidad segará; y se consumirá la vara de su ira.
El que pasando se deja llevar de la ira en pleito ajeno, es como el que toma al perro por las orejas.
Pesada es la piedra, y la arena pesa; mas la ira del loco es más pesada que ambas cosas.
Cruel es la ira, e impetuoso el furor; mas ¿quién parará delante de la envidia?
Los hombres burladores enlazan la ciudad; mas los sabios apartan la ira.
Ciertamente el que exprime la leche, sacará manteca; y el que recio se suena las narices, sacará sangre; y el que provoca la ira, causará contienda.