'Mas' en la Biblia

Porque el SEÑOR conoce el camino de los justos, mas el camino de los impíos perecerá.

Mas tú, oh SEÑOR, eres escudo en derredor mío, mi gloria, y el que levanta mi cabeza.

Mas yo, por la abundancia de tu misericordia entraré en tu casa; me postraré en tu santo templo con reverencia.

Acabe la maldad de los impíos, mas establece tú al justo, pues el Dios justo prueba los corazones y las mentes.

Mas yo en tu misericordia he confiado; mi corazón se regocijará en tu salvación.

Me libró de mi poderoso enemigo, y de los que me aborrecían, pues eran más fuertes que yo.

Se enfrentaron a mí el día de mi infortunio, mas el SEÑOR fue mi sostén.

Clamaron, mas no hubo quién {los} salvara; {aun} al SEÑOR {clamaron,} mas no les respondió.

{Mas} por toda la tierra salió su voz, y hasta los confines del mundo sus palabras. En ellos puso una tienda para el sol,

deseables más que el oro; sí, {más} que mucho oro fino, más dulces que la miel y que el destilar del panal.

Algunos {confían} en carros, y otros en caballos; mas nosotros en el nombre del SEÑOR nuestro Dios confiaremos.

Mas yo en mi integridad andaré; redímeme, y ten piedad de mí.

Aborrezco a los que confían en ídolos vanos; mas yo confío en el SEÑOR.

Los leoncillos pasan necesidad y tienen hambre, mas los que buscan al SEÑOR no carecerán de bien alguno.

Dirán todos mis huesos: SEÑOR, ¿quién como tú, que libras al afligido de aquel que es más fuerte que él, sí, al afligido y al necesitado de aquel que lo despoja?

Porque los malhechores serán exterminados, mas los que esperan en el SEÑOR poseerán la tierra.

Un poco más y no existirá el impío; buscarás con cuidado su lugar, pero él no estará {allí}.

Mas los humildes poseerán la tierra, y se deleitarán en abundante prosperidad.

Porque los brazos de los impíos serán quebrados; mas el SEÑOR sostiene a los justos.

El impío pide prestado y no paga, mas el justo es compasivo y da.

Mas la salvación de los justos viene del SEÑOR; El es su fortaleza en el tiempo de la angustia.

Mas yo, como el sordo, no oigo; {soy} como el mudo que no abre la boca.

Con castigos corriges al hombre por {su} iniquidad; como la polilla, consumes lo que es más precioso para él; ciertamente, todo hombre es sólo un soplo. (Selah)

porque me rodean males sin número; mis iniquidades me han alcanzado, y no puedo ver; son más numerosas que los cabellos de mi cabeza, y el corazón me falla.

Eres el más hermoso de los hijos de los hombres; la gracia se derrama en tus labios; por tanto, Dios te ha bendecido para siempre.

Has amado la justicia y aborrecido la iniquidad; por tanto Dios, tu Dios, te ha ungido con óleo de alegría más que a tus compañeros.

Mas el hombre, en {su} vanagloria, no permanecerá; es como las bestias que perecen.

He aquí, tú deseas la verdad en lo más íntimo, y en lo secreto me harás conocer sabiduría.

Purifícame con hisopo, y seré limpio; lávame, y seré más blanco que la nieve.

Amas el mal más que el bien, la mentira más que decir lo que es justo. (Selah)

Las palabras de su boca eran más blandas que la mantequilla, pero en su corazón {había} guerra; más suaves que el aceite eran sus palabras, sin embargo, eran espadas desnudas.

Pero tú, oh Dios, los harás caer al pozo de la destrucción; los hombres sanguinarios y engañadores no vivirán la mitad de sus días; mas yo en ti confiaré.

que no oye la voz de los que encantan, {ni siquiera} al {más} diestro encantador.

Mas tú, oh SEÑOR, te ríes de ellos; te burlas de todas las naciones.

Desde los confines de la tierra te invoco, cuando mi corazón desmaya. Condúceme a la roca que es más alta que yo.

Mas el rey se regocijará en Dios; {y} todo el que por El jura se gloriará, porque la boca de los que dicen mentiras será cerrada.

Las iniquidades prevalecen contra mí; {mas} nuestras transgresiones tú las perdonas.

Con grandes {prodigios} nos respondes en justicia, oh Dios de nuestra salvación, confianza de todos los términos de la tierra, y del más lejano mar;

Allí {va} Benjamín, el más joven, dirigiéndolos, los príncipes de Judá {con} su grupo, los príncipes de Zabulón, los príncipes de Neftalí.

Más que los cabellos de mi cabeza son los que sin causa me aborrecen; poderosos son los que quieren destruirme, sin razón son mis enemigos, me hacen devolver aquello que no robé.

Y {esto} agradará al SEÑOR más que {el sacrificio} de un buey, {o} de un novillo con cuernos y pezuñas.

Mas yo estoy afligido y necesitado; oh Dios, ven pronto a mí. Tú eres mi socorro y mi libertador; SEÑOR, no te tardes.

Mas yo esperaré continuamente, y aún te alabaré más y más.

Mas para mí, estar cerca de Dios es mi bien; en DIOS el Señor he puesto mi refugio, para contar todas tus obras.

Tiemblan la tierra y todos sus moradores, {mas} yo sostengo sus columnas. (Selah)

Resplandeciente eres, más majestuoso que los montes de caza.

¿Rechazará el Señor para siempre, y no mostrará más {su} favor?

la ira de Dios se alzó contra ellos y mató a algunos de los más robustos, y subyugó a los escogidos de Israel.

Mas con su boca le engañaban, y con su lengua le mentían.

Mas El, siendo compasivo, perdonaba {sus} iniquidades y no {los} destruía; muchas veces contuvo su ira, y no despertó todo su furor.

Mas a su pueblo lo sacó como a ovejas, como a rebaño los condujo en el desierto;

Para el director del coro; {según la tonada} a los Lirios; Testimonio. Salmo de Asaf.Presta oído, oh Pastor de Israel; tú que guías a José como un rebaño; tú que estás sentado {más alto que} los querubines; ¡resplandece!

Mas tú, Señor, eres un Dios compasivo y {lleno} de piedad, lento para la ira y abundante en misericordia y fidelidad.

El SEÑOR ama las puertas de Sion más que todas las {otras} moradas de Jacob.

Me has puesto en la fosa más profunda, en lugares tenebrosos, en las profundidades.

Mas yo, a ti pido auxilio, SEÑOR, y mi oración llega ante ti por la mañana.

Yo también lo haré {mi} primogénito, el más excelso de los reyes de la tierra.

Mas tú, oh SEÑOR, excelso eres eternamente.

Más que el fragor de muchas aguas, {más que} las poderosas olas del mar, es poderoso el SEÑOR en las alturas.

Porque todos los dioses de los pueblos son ídolos, mas el SEÑOR hizo los cielos.

Oh SEÑOR, Dios nuestro, tú les respondiste; fuiste para ellos un Dios perdonador, {mas} también vengador de sus {malas} obras.

Mas tú, SEÑOR, permaneces para siempre, y tu nombre por todas las generaciones.

Mas la misericordia del SEÑOR es desde la eternidad hasta la eternidad, para los que le temen, y su justicia para los hijos de los hijos,

E hizo que su pueblo se multiplicara mucho, y los hizo más fuertes que sus adversarios.

Mas tú, oh DIOS, Señor, por amor de tu nombre hazme {bien;} líbrame, pues es buena tu misericordia;

Maldigan ellos, pero tú bendice; cuando se levanten, serán avergonzados, mas tu siervo se alegrará.

Me he gozado en el camino de tus testimonios, más que en todas las riquezas.

Los lazos de los impíos me han rodeado, {mas} no me he olvidado de tu ley.

Antes que fuera afligido, yo me descarrié, mas ahora guardo tu palabra.

Casi me destruyen en la tierra, mas yo no abandoné tus preceptos.

Tus mandamientos me hacen más sabio que mis enemigos, porque son míos para siempre.

Tengo más discernimiento que todos mis maestros, porque tus testimonios son mi meditación.

Entiendo más que los ancianos, porque tus preceptos he guardado.

¿Cuán dulces son a mi paladar tus palabras!, {más} que la miel a mi boca.

Por tanto, amo tus mandamientos más que el oro, sí, más que el oro fino.

Pequeño soy, y despreciado, {mas} no me olvido de tus preceptos.

Angustia y aflicción han venido sobre mí, {mas} tus mandamientos son mi deleite.

Yo {amo} la paz, mas cuando hablo, ellos están por la guerra.

Mas a los que se desvían por sus caminos torcidos, el SEÑOR los llevará con los que hacen iniquidad. Paz sea sobre Israel.

Cántico de ascenso gradual.Desde lo {más} profundo, oh SEÑOR, he clamado a ti.

Mi alma {espera} al Señor más que los centinelas a la mañana; {sí, más que} los centinelas a la mañana.

A sus enemigos cubriré de vergüenza, mas sobre él resplandecerá su corona.

mas a Faraón y a su ejército destruyó en el mar Rojo, porque para siempre es su misericordia.

Porque el SEÑOR es excelso, y atiende al humilde, mas al altivo conoce de lejos.

{Si} tomo las alas del alba, {y si} habito en lo más remoto del mar,

Si los contara, serían más que la arena; al despertar aún estoy contigo.

Los aborrezco con el más profundo odio; se han convertido en mis enemigos.

Atiende a mi clamor, porque estoy muy abatido; líbrame de los que me persiguen, porque son más fuertes que yo.