'Me' en la Biblia
¿Qué es para mí la abundancia de vuestros sacrificios? --dice el SEÑOR. Harto estoy de holocaustos de carneros, y de sebo de ganado cebado; y la sangre de novillos, corderos y machos cabríos no me complace.
No traigáis más vuestras vanas ofrendas, el incienso me es abominación. Luna nueva y día de reposo, el convocar asambleas: ¿no tolero iniquidad y asamblea solemne!
Por tanto, declara el Señor, DIOS de los ejércitos, el Poderoso de Israel: ¿Ah!, me libraré de mis adversarios, y me vengaré de mis enemigos.
Entonces el SEÑOR me dijo: Toma para ti una tabla grande y escribe sobre ella en caracteres comunes: Veloz es el botín, rápida la presa.
Me acerqué a la profetisa, y ella concibió y dio a luz un hijo. Y el SEÑOR me dijo: Ponle por nombre Maher-shalal-hash-baz;
Pues así me habló el SEÑOR con gran poder y me instruyó para que no anduviera en el camino de este pueblo, diciendo:
He aquí, yo y los hijos que el SEÑOR me ha dado estamos por señales y prodigios en Israel, de parte del SEÑOR de los ejércitos que mora en el monte Sion.
Y en aquel día dirás: Te doy gracias, oh SEÑOR, porque aunque estabas airado conmigo, se ha apartado tu ira y me has consolado.
Pero tú dijiste en tu corazón: ``Subiré al cielo, por encima de las estrellas de Dios levantaré mi trono, y me sentaré en el monte de la asamblea, en el extremo norte.
``Subiré sobre las alturas de las nubes, me haré semejante al Altísimo."
Yo me levantaré contra ellos --declara el SEÑOR de los ejércitos-- y cortaré de Babilonia nombre y sobrevivientes, descendencia y posteridad --declara el SEÑOR.
Porque así me ha dicho el SEÑOR: Me estaré quieto y miraré desde mi morada, como calor resplandeciente al sol, como nube de rocío en el calor de la cosecha.
Una visión dura me ha sido mostrada: el pérfido obra pérfidamente, y el destructor destruye. Sube, Elam; sitia, Media. He puesto fin a todo gemir {que ella ha causado.}
Desvaría mi mente, el espanto me sobrecoge; el anochecer que anhelaba se me convirtió en terror.
porque así me ha dicho el Señor: Ve, pon centinela que dé aviso de lo que vea.
Pues así me ha dicho el Señor: En un año, como lo contaría un jornalero, terminará todo el esplendor de Cedar;
Pero el SEÑOR de los ejércitos me reveló al oído: Ciertamente esta iniquidad no os será perdonada hasta que muráis --dice el Señor, DIOS de los ejércitos.
No tengo furor. Si alguien me da zarzas {y} espinos en batalla, los pisotearé, los quemaré completamente,
Dijo entonces el Señor: Por cuanto este pueblo se {me} acerca con sus palabras y me honra con sus labios, pero aleja de mí su corazón, y su veneración hacia mí es {sólo} una tradición aprendida {de memoria},
¿Qué equivocación la vuestra! ¿Es acaso el alfarero como el barro, para que lo que está hecho diga a su hacedor: El no me hizo; o lo que está formado diga al que lo formó: El no tiene entendimiento?
Porque así me dice el SEÑOR: Tal como gruñe el león o el leoncillo sobre su presa, contra el que se reúne una multitud de pastores, {y} no se atemoriza de sus voces ni se acobarda por su multitud, así descenderá el SEÑOR de los ejércitos para combatir sobre el monte Sion y sobre su collado.
Ahora me levantaré --dice el SEÑOR-- ahora seré exaltado, ahora seré ensalzado.
`Pero si me decís: ``Nosotros confiamos en el SEÑOR nuestro Dios," ¿no es El aquel cuyos lugares altos y cuyos altares Ezequías ha quitado y ha dicho a Judá y a Jerusalén: ``Adoraréis delante de este altar"?
` ¿He subido ahora sin el {consentimiento} del SEÑOR contra esta tierra para destruirla? El SEÑOR me dijo: ``Sube contra esta tierra y destrúyela."'"
Pero el Rabsaces dijo: ¿Acaso me ha enviado mi señor para hablar estas palabras {sólo} a tu señor y a ti, {y} no a los hombres que están sentados en la muralla, {condenados} a comer sus propios excrementos y a beber su propia orina con vosotros?
éste les dijo: Así diréis a vuestro señor: ``Así dice el SEÑOR: `No temas por las palabras que has oído, con las que los siervos del rey de Asiria me han blasfemado.
Entonces Isaías, hijo de Amoz, envió a decir a Ezequías: Así dice el SEÑOR, Dios de Israel: ``Por cuanto me has rogado acerca de Senaquerib, rey de Asiria,
Yo dije: A la mitad de mis días he de entrar por las puertas del Seol; se me priva del resto de mis años.
Como tienda de pastor, mi morada es arrancada y alejada de mí; como tejedor enrollé mi vida. Del telar, El me cortó; del día a la noche acabas conmigo.
Como golondrina, {como} grulla, así me quejo, gimo como una paloma; mis ojos miran ansiosamente a las alturas. Oh Señor, estoy oprimido, sé tú mi ayudador.
¿Qué diré? Pues El me ha hablado y El mismo {lo} ha hecho. Andaré errante todos mis años a causa de la amargura de mi alma.
El SEÑOR me salvará; y tocaremos mis canciones en instrumentos de cuerda todos los días de nuestra vida en la casa del SEÑOR.
¿A quién, pues, me haréis semejante para que yo sea {su} igual? --dice el Santo.
Por mucho tiempo he guardado silencio, he estado callado y me he contenido. {Pero ahora} grito como mujer de parto, resuello y jadeo a la vez.
Vosotros sois mis testigos --declara el SEÑOR-- y mi siervo a quien he escogido, para que {me} conozcáis y creáis en mí, y entendáis que yo soy. Antes de mí no fue formado {otro} dios, ni después de mí {lo} habrá.
Me glorificarán las bestias del campo, los chacales y los avestruces, porque he puesto aguas en los desiertos y ríos en el yermo, para dar de beber a mi pueblo escogido.
Pero no me has invocado, Jacob, sino que te has cansado de mí, Israel.
No me has traído las ovejas de tus holocaustos, ni me has honrado con tus sacrificios. No te he abrumado exigiendo ofrendas, ni te he cansado exigiendo incienso.
No me has comprado con dinero caña aromática, ni con la grosura de tus sacrificios me has saciado; por el contrario me has abrumado con tus pecados, {y} me has cansado con tus iniquidades.
La mitad {del leño} quema en el fuego; sobre {esta} mitad prepara un asado, come carne y se sacia. También se calienta, y dice: ¡Ah!, me he calentado, he visto la llama.
Ninguno reflexiona; no tienen conocimiento ni inteligencia para decir: He quemado la mitad en el fuego, y también he cocido pan sobre sus brasas. He asado carne y {la} he comido; y del resto ¿haré una abominación? ¿Me postraré ante un pedazo de madera?
Recuerda estas cosas, Jacob, y {tú} Israel, porque mi siervo eres. Yo te he formado, siervo mío eres; Israel, no me olvidaré de ti.
Por amor a mi siervo Jacob y a Israel mi escogido, te he llamado por tu nombre; te he honrado, aunque no me conocías.
Yo soy el SEÑOR, y no hay ningún otro; fuera de mí no hay Dios. Yo te ceñiré, aunque no me has conocido,
¿A quién me asemejaréis, me igualaréis o me compararéis para que seamos semejantes?
Ahora pues, oye esto, voluptuosa, tú que moras confiadamente, que dices en tu corazón: ``Yo, y nadie más. No me quedaré viuda, ni sabré de pérdida de hijos."
Te sentiste segura en tu maldad y dijiste: ``Nadie me ve." Tu sabiduría y tu conocimiento te han engañado, y dijiste en tu corazón: ``Yo, y nadie más."
Acercaos a mí, escuchad esto: Desde el principio no he hablado en secreto, desde el momento en que sucedió, allí estaba yo. Y ahora me ha enviado el Señor DIOS, y su Espíritu.
Escuchadme, islas, y atended, pueblos lejanos. El SEÑOR me llamó desde el seno materno, desde las entrañas de mi madre mencionó mi nombre.
Ha hecho mi boca como espada afilada, en la sombra de su mano me ha escondido; me ha hecho también como saeta escogida, en su aljaba me ha escondido.
Y me dijo: Tú eres mi siervo, Israel, en quien yo mostraré mi gloria.
Y ahora dice el SEÑOR (el que me formó desde el seno materno para {ser} su siervo, para hacer que Jacob vuelva a El y que Israel se reúna con El, porque honrado soy a los ojos del SEÑOR y mi Dios ha sido mi fortaleza),
Pero Sion dijo: El SEÑOR me ha abandonado, el Señor se ha olvidado de mí.
Y dirás en tu corazón: `` ¿Quién me ha engendrado éstos? Pues yo había sido privada de mis hijos, y era estéril, desterrada y errante. Y a éstos, ¿quién los ha criado? He aquí, yo había sido dejada sola; {y} éstos, ¿dónde estaban?"
El Señor DIOS me ha dado lengua de discípulo, para que yo sepa sostener con una palabra al fatigado. Mañana tras mañana {me} despierta, despierta mi oído para escuchar como los discípulos.
El Señor DIOS me ha abierto el oído; y no fui desobediente, ni me volví atrás.
Di mis espaldas a los que {me} herían, y mis mejillas a los que {me} arrancaban la barba; no escondí mi rostro de injurias y esputos.
El Señor DIOS me ayuda, por eso no soy humillado, por eso como pedernal he puesto mi rostro, y sé que no seré avergonzado.
Cercano está el que me justifica; ¿quién contenderá conmigo? Comparezcamos juntos; ¿quién es el enemigo de mi causa? Que se acerque a mí.
He aquí, el Señor DIOS me ayuda; ¿quién es el que me condena? He aquí, todos ellos como un vestido se gastarán, la polilla se los comerá.
Porque esto es para mí como en los días de Noé, cuando juré que las aguas de Noé nunca más inundarían la tierra; así he jurado que no me enojaré contra ti, ni te reprenderé.
Que el extranjero que se ha allegado al SEÑOR, no diga: Ciertamente el SEÑOR me separará de su pueblo. Ni diga el eunuco: He aquí, soy un árbol seco.
Porque así dice el SEÑOR: A los eunucos que guardan mis días de reposo, escogen lo que me agrada y se mantienen firmes en mi pacto,
¿Y de quién te asustaste y tuviste miedo, cuando mentiste y no te acordaste de mí, ni pensaste en ello? ¿No es acaso porque he guardado silencio por mucho tiempo que no me temes?
A causa de la iniquidad de su codicia, me enojé y lo herí; escondí {mi rostro} y me indigné, y él siguió desviándose por el camino de su corazón.
Con todo me buscan día tras día y se deleitan en conocer mis caminos, como nación que hubiera hecho justicia, y no hubiera abandonado la ley de su Dios. Me piden juicios justos, se deleitan en la cercanía de Dios.
Ciertamente las costas me esperarán, y las naves de Tarsis {vendrán} primero, para traer a tus hijos de lejos, {y} su plata y su oro con ellos, por el nombre del SEÑOR tu Dios, y por el Santo de Israel que El te ha glorificado.
Entonces todos los de tu pueblo {serán} justos; para siempre poseerán la tierra, vástago de mi plantío, obra de mis manos, para que yo me glorifique.
El Espíritu del Señor DIOS está sobre mí, porque me ha ungido el SEÑOR para traer buenas nuevas a los afligidos; me ha enviado para vendar a los quebrantados de corazón, para proclamar libertad a los cautivos y liberación a los prisioneros;
En gran manera me gozaré en el SEÑOR, mi alma se regocijará en mi Dios; porque El me ha vestido de ropas de salvación, me ha envuelto en manto de justicia como el novio se engalana con una corona, como la novia se adorna con sus joyas.
Por amor de Sion no callaré, y por amor de Jerusalén no me estaré quieto, hasta que salga su justicia como resplandor, y su salvación se encienda como antorcha.
Miré, y no había quien ayudara, me asombré de que no hubiera quien apoyara; entonces me salvó mi brazo, y fue mi furor el que me sostuvo.
Me dejé buscar por los que no preguntaban {por mí;} me dejé hallar por los que no me buscaban. Dije: ``Heme aquí, heme aquí", a una nación que no invocaba mi nombre.
un pueblo que de continuo me provoca en mi propio rostro, sacrificando en huertos y quemando incienso sobre ladrillos;
por vuestras iniquidades y por las iniquidades de vuestros padres juntamente --dice el SEÑOR. Porque quemaron incienso en los montes, y en las colinas me injuriaron; por tanto mediré en su seno su obra pasada.
Sarón será pastizal para ovejas, y el valle de Acor para lugar de descanso de vacas, para mi pueblo que me busca.
yo os destinaré a la espada, y todos vosotros os encorvaréis para la matanza. Porque llamé, mas no respondisteis, hablé, mas no oísteis; hicisteis lo malo ante mis ojos y escogisteis aquello que no me complacía.
Me regocijaré por Jerusalén y me gozaré por mi pueblo; no se oirá más en ella voz de lloro ni voz de clamor.
también yo escogeré sus castigos, y traeré sobre ellos lo que temen. Porque llamé, mas nadie respondió, hablé, mas no escucharon; sino que hicieron lo malo ante mis ojos, y escogieron aquello que no me complacía.