'Me' en la Biblia
pues yo ni lo recibí de hombre, ni tampoco me fue enseñado, sino por revelación de Jesucristo.
Mas cuando agradó a Dios, que me apartó desde el vientre de mi madre, y me llamó por su gracia,
Pero de aquellos que parecían ser algo (lo que hayan sido, no me importa: Dios no hace acepción de personas); a mí, pues, los que parecían ser algo nada me comunicaron.
Antes por el contrario; cuando vieron que el evangelio de la incircuncisión me había sido encomendado, como a Pedro el de la circuncisión
y cuando Jacobo, Cefas, y Juan, que parecían ser columnas, percibieron la gracia que me fue dada, nos dieron a mí y a Bernabé las diestras de compañerismo, para que nosotros fuésemos a los gentiles, y ellos a la circuncisión.
Porque si las cosas que destruí, las mismas vuelvo a edificar, transgresor me hago.
Con Cristo estoy juntamente crucificado; mas vivo, ya no yo, sino que Cristo vive en mí; y lo que ahora vivo en la carne, lo vivo en la fe del Hijo de Dios, el cual me amó y se entregó a sí mismo por mí.
Me temo de vosotros, que haya trabajado en vano con vosotros.
Os ruego, hermanos, que seáis como yo; porque yo soy como vosotros: Ningún agravio me habéis hecho.
y no desechasteis ni menospreciasteis mi prueba que estaba en mi carne, antes me recibisteis como a un ángel de Dios, como a Cristo Jesús.
¿Me he hecho, pues, vuestro enemigo, porque os digo la verdad?
Mas lejos esté de mí gloriarme, salvo en la cruz de nuestro Señor Jesucristo, por el cual el mundo me es crucificado a mí, y yo al mundo.
De aquí en adelante nadie me cause molestias; porque yo llevo en mi cuerpo las marcas del Señor Jesús.