'Nariz' en la Biblia
Formó, pues, Jehová Dios al hombre del polvo de la tierra, y sopló en su nariz aliento de vida; y fue el hombre un alma viviente.
Entonces le pregunté, y dije: ¿De quién eres hija? Y ella respondió: Hija de Betuel, hijo de Nacor, que le dio a luz Milca. Entonces le puse un pendiente sobre su nariz, y brazaletes sobre sus manos:
Humo subió de su nariz, y de su boca fuego consumidor, por el cual se encendieron carbones.
Entonces aparecieron los cauces del mar, y los fundamentos del mundo fueron descubiertos, a la reprensión de Jehová, al resoplido del aliento de su nariz.
Por cuanto te has airado contra mí, y tu estruendo ha subido a mis oídos, yo por tanto pondré mi gancho en tu nariz, y mi freno en tus labios, y te haré volver por el camino por donde viniste.
¿Le intimidarás tú como a alguna langosta? El resoplido de su nariz es formidable:
Lo toma con sus ojos; su nariz atraviesa el lazo.
Humo subió de su nariz, y de su boca fuego consumidor; carbones fueron por Él encendidos.
Entonces aparecieron los senderos de las aguas, y se descubrieron los cimientos del mundo, a tu reprensión, oh Jehová, por el soplo del aliento de tu nariz.
Como zarcillo de oro en la nariz de un cerdo, es la mujer hermosa y apartada de razón.
Ciertamente el que bate la leche, sacará mantequilla; y el que recio se suena la nariz, sacará sangre; y el que provoca la ira, causará contienda.
Tu cuello, como torre de marfil; tus ojos, como los estanques de Hesbón junto a la puerta de Bat-rabim; tu nariz, como la torre del Líbano, que mira hacia Damasco.
Dejaos del hombre, cuyo aliento está en su nariz; porque ¿de qué es él estimado?
Porque contra mí te airaste, y tu estruendo ha subido a mis oídos; pondré, pues, mi anzuelo en tu nariz, y mi freno en tus labios, y te haré volver por el camino por donde viniste.
El aliento de nuestra nariz, el ungido de Jehová fue apresado en sus fosos; de quien habíamos dicho: A su sombra tendremos vida entre las naciones.
Y me dijo: ¿No has visto, hijo de hombre? ¿Es cosa liviana para la casa de Judá hacer las abominaciones que hacen aquí? Después que han llenado la tierra de maldad, y han vuelto a provocarme a ira, y he aquí que se llevan el ramo a su nariz.
Y puse joyas en tu nariz, y zarcillos en tus orejas, y una hermosa diadema en tu cabeza.
Y pondré mi celo contra ti, y obrarán contigo con furor; te quitarán tu nariz y tus orejas, y lo que te quedare caerá a espada. Ellos tomarán a tus hijos y a tus hijas, y tu remanente será consumido por el fuego.