'Os' en la Biblia
Y dijo Dios: He aquí que os he dado toda planta que da semilla, que está sobre la faz de toda la tierra; y todo árbol en que hay fruto de árbol que da semilla, os será para comer.
Y os he dado a toda bestia de la tierra, y a todas las aves de los cielos, y a todo lo que se mueve sobre la tierra en que hay vida; y toda planta verde les será para comer. Y fue así.
Pero la serpiente era astuta, más que todos los animales del campo que Jehová Dios había hecho; la cual dijo a la mujer: ¿Conque Dios os ha dicho: No comáis de todo árbol del huerto?
Todo lo que se mueve y vive, os será para mantenimiento; así como las legumbres y plantas verdes; os lo he dado todo.
Y dijo: Señores míos, he aquí os ruego que vengáis a casa de vuestro siervo y paséis en ella la noche, y lavaréis vuestros pies; y por la mañana os levantaréis y seguiréis vuestro camino. Y ellos respondieron: No, sino que en la plaza pasaremos la noche.
He aquí ahora yo tengo dos hijas que no han conocido varón; os las sacaré fuera, y haced de ellas como bien os pareciere; solamente a estos varones no hagáis nada, pues que vinieron a la sombra de mi tejado.
Y Hamor habló con ellos, diciendo: El alma de mi hijo Siquem se ha apegado a vuestra hija; os ruego que se la deis por esposa.
Entonces os daremos nuestras hijas, y nosotros tomaremos las vuestras; y habitaremos con vosotros, y seremos un solo pueblo.
Y cuando se sintió el hambre en toda la tierra de Egipto, el pueblo clamó a Faraón por pan. Y dijo Faraón a todos los egipcios: Id a José, y haced lo que él os dijere.
Y cuando Jacob vio que en Egipto había alimentos, Jacobo dijo a sus hijos: ¿Por qué os estáis mirando?
Y José les dijo: Eso es lo que os he dicho, afirmando que sois espías:
Entonces Rubén les respondió, diciendo: ¿No os hablé yo y dije: No pequéis contra el joven; y no escuchasteis? He aquí también su sangre es requerida.
y traedme a vuestro hermano el menor, para que yo sepa que no sois espías, sino hombres de verdad: así os daré a vuestro hermano, y negociaréis en la tierra.
Y el Dios Omnipotente os dé misericordia delante de aquel varón, y os suelte al otro vuestro hermano, y a este Benjamín. Y si he de ser privado de mis hijos, séalo.
Y él respondió: Paz a vosotros, no temáis; vuestro Dios y el Dios de vuestro padre os dio el tesoro en vuestros costales: yo recibí vuestro dinero. Y sacó a Simeón a ellos.
Ahora pues, no os entristezcáis, ni os pese de haberme vendido acá; que para preservación de vida me envió Dios delante de vosotros:
Y he aquí, vuestros ojos ven, y los ojos de mi hermano Benjamín, que mi boca os habla.
y tomad a vuestro padre y vuestras familias, y venid a mí, que yo os daré lo bueno de la tierra de Egipto y comeréis la grosura de la tierra.
Y no os preocupéis por vuestros bienes, porque el bien de la tierra de Egipto será vuestro.
Y sucederá que cuando Faraón os llamare y dijere: ¿Cuál es vuestro oficio?
Y José dijo: Dad vuestros ganados, y yo os daré por vuestros ganados, si se ha acabado el dinero.
Entonces José dijo al pueblo: He aquí hoy os he comprado y a vuestra tierra para Faraón; he aquí semilla para vosotros, sembrad la tierra.
Y dijo Israel a José: He aquí, yo muero, pero Dios estará con vosotros y os hará volver a la tierra de vuestros padres.
Y llamó Jacob a sus hijos, y dijo: Juntaos, y os declararé lo que os ha de acontecer en los postreros días.
Y pasados los días de su luto, habló José a los de la casa de Faraón, diciendo: Si he hallado ahora gracia en vuestros ojos, os ruego que habléis en oídos de Faraón, diciendo:
Ahora, pues, no tengáis miedo; yo os sustentaré a vosotros y a vuestros hijos. Así los consoló, y les habló al corazón.
Y José dijo a sus hermanos: Yo moriré; mas Dios ciertamente os visitará, y os hará subir de esta tierra a la tierra que juró a Abraham, a Isaac, y a Jacob.
Y José tomó juramento de los hijos de Israel, diciendo: Dios ciertamente os visitará, y haréis llevar de aquí mis huesos.