'Saúl' en la Biblia
Pero un mensajero vino a Saúl diciendo: Apresúrese y venga, pues los Filisteos han hecho una incursión en la tierra.
Regresó entonces Saúl, {dejando} de perseguir a David, y fue al encuentro de los Filisteos. Por eso llamaron a aquel lugar la Peña de Escape.
Cuando Saúl regresó de perseguir a los Filisteos, le dieron aviso: ``David está en el desierto de En Gadi."
Entonces Saúl tomó de todo Israel 3,000 hombres escogidos, y fue en busca de David y de sus hombres por los peñascos de las cabras monteses.
Llegó a unos rediles de ovejas en el camino, donde {había} una cueva, y Saúl entró {en ella} para hacer sus necesidades. Y David y sus hombres estaban sentados en los rincones de la cueva.
Y los hombres de David le dijeron: ``Mira, {este es} el día del que el SEÑOR te habló: `Voy a entregar a tu enemigo en tu mano, y harás con él como bien te parezca.'" Entonces David se levantó y cortó a escondidas la orilla del manto de Saúl.
Aconteció después de esto que la conciencia de David le remordía, porque había cortado la orilla {del manto} de Saúl.
David contuvo a sus hombres con {estas} palabras y no les permitió que se levantaran contra Saúl. Y Saúl se levantó, {salió} de la cueva, y siguió {su} camino.
Después {de esto} David se levantó, salió de la cueva y dio voces tras Saúl, diciendo: `` ¡Mi señor el rey!" Y cuando Saúl miró hacia atrás, David inclinó su rostro a tierra y se postró.
Y dijo David a Saúl: `` ¿Por qué escucha usted las palabras de los hombres, que dicen: `Mire que David procura su mal'?
Cuando David acabó de decir a Saúl estas palabras, Saúl dijo: `` ¿Es ésta tu voz, David, hijo mío?" Entonces Saúl alzó su voz y lloró.
Y David se {lo} juró a Saúl. Y Saúl se fue a su casa, pero David y sus hombres subieron al refugio.
Pues Saúl había dado a su hija Mical, mujer de David, a Palti, hijo de Lais, que {era} de Galim.
Entonces vinieron los Zifeos a Saúl en Guibeá y {le} dijeron: `` ¿No está David escondido en la colina de Haquila, {que está} frente a Jesimón (al desierto)?"
Se levantó, pues, Saúl y descendió al desierto de Zif, teniendo consigo 3,000 hombres escogidos de Israel, para buscar a David en el desierto de Zif.
Y acampó Saúl en la colina de Haquila, que está frente a Jesimón, junto al camino, y David permanecía en el desierto. Cuando vio que Saúl venía tras él al desierto,
David envió espías, y supo que Saúl en verdad se acercaba.
Se levantó David y vino al lugar donde Saúl había acampado. Y vio David el lugar donde estaban acostados Saúl y Abner, hijo de Ner, el comandante de su ejército. Saúl dormía en medio del campamento y el pueblo estaba acampado alrededor de él.
Entonces habló David a Ahimelec el Hitita y a Abisai, hijo de Sarvia, hermano de Joab y les preguntó: `` ¿Quién descenderá conmigo a {donde está} Saúl en el campamento?" ``Yo descenderé contigo," dijo Abisai.
David y Abisai llegaron de noche al campamento. Saúl estaba durmiendo en medio del campamento, con su lanza clavada en tierra a su cabecera, y Abner y la gente estaban acostados alrededor de él.
Tomó, pues, David la lanza y la vasija de agua de {junto a} la cabecera de Saúl, y se fueron. Pero nadie {lo} vio ni {lo} supo, tampoco nadie se despertó, pues todos estaban dormidos, ya que un sueño profundo de parte del SEÑOR había caído sobre ellos.
Entonces Saúl reconoció la voz de David y dijo: `` ¿Es ésta tu voz, David, hijo mío?" Y David respondió: ``Mi voz es, mi señor el rey."
Saúl dijo: ``He pecado. Vuelve, David, hijo mío, porque no volveré a hacerte daño pues mi vida fue muy estimada en tus ojos hoy. Yo he actuado neciamente y he cometido un grave error."
``Bendito seas, David, hijo mío, ciertamente harás {grandes cosas} y prevalecerás," respondió Saúl. David siguió por su camino y Saúl se volvió a su lugar.
Entonces David se dijo: ``Ahora bien, voy a perecer algún día por la mano de Saúl. Lo mejor para mí es huir a la tierra de los Filisteos. Saúl se cansará, {y no} me buscará más en todo el territorio de Israel, y escaparé de su mano."
Y le dieron la noticia a Saúl que David había huido a Gat, y no lo buscó más.
Samuel había muerto, y todo Israel lo había llorado, y lo habían sepultado en Ramá su ciudad. Y Saúl había echado de la tierra a los adivinos y espiritistas.
Así que los Filisteos se reunieron, fueron y acamparon en Sunem; y Saúl reunió a todo Israel y acamparon en Gilboa.
Al ver Saúl el campamento de los Filisteos, tuvo miedo y su corazón se turbó en gran manera.
Y Saúl consultó al SEÑOR, pero el SEÑOR no le respondió ni por sueños, ni por Urim, ni por profetas.
Entonces Saúl dijo a sus siervos: ``Búsquenme una mujer que sea adivina para ir a consultarla." Y sus siervos le dijeron: ``Hay una mujer en Endor que es adivina."
Saúl se disfrazó poniéndose otras ropas y fue con dos hombres. Llegaron de noche a ver a la mujer, y él dijo: ``Te ruego que evoques por mí a un espíritu, y que hagas subir al que yo te diga."
Pero la mujer le dijo: ``Usted sabe lo que Saúl ha hecho, cómo ha echado de la tierra a los que son adivinos y espiritistas. ¿Por qué, pues, pone trampa contra mi vida para hacerme morir?"
Saúl le juró por el SEÑOR: ``Vive el SEÑOR que ningún castigo vendrá sobre ti por esto."
Cuando la mujer vio a Samuel, clamó a gran voz; y la mujer le dijo a Saúl: `` ¿Por qué me ha engañado? ¡Usted es Saúl!"
``No temas; pero, ¿qué ves?" le dijo el rey. Y la mujer respondió a Saúl: ``Veo a un ser divino subiendo de la tierra."
`` ¿Qué aspecto tiene?" le dijo él. Y ella dijo: ``Un anciano sube, y está envuelto en un manto." Y Saúl supo que era Samuel, e inclinando su rostro a tierra, se postró ante él.
Entonces Samuel dijo a Saúl: `` ¿Por qué me has perturbado haciéndome subir?" Y Saúl respondió: ``Estoy en gran angustia, pues los Filisteos hacen guerra contra mí; Dios se ha apartado de mí y ya no me responde ni por los profetas ni por sueños; por esto te he llamado, para que me reveles lo que debo hacer."
Al instante Saúl cayó por tierra cuan largo era, y tuvo gran temor por las palabras de Samuel; además estaba sin fuerzas, porque no había comido nada en todo el día y toda la noche.
La mujer se acercó a Saúl, y viendo que estaba aterrorizado, le dijo: ``Mire, su sierva le ha obedecido y he puesto mi vida en peligro al oír las palabras que usted me habló.
Y {lo} trajo delante de Saúl y de sus siervos, y comieron. Después se levantaron y se fueron aquella noche.
Entonces los jefes de los Filisteos dijeron: `` ¿Qué {hacen aquí} estos Hebreos?" Y Aquis dijo a los jefes de los Filisteos: `` ¿No {ven} que éste es David, el siervo de Saúl, rey de Israel, que ha estado conmigo estos días, o {más bien} estos años, y no he hallado falta en él desde el día en que se pasó {a mí} hasta hoy?"
" ¿No es éste David, de quien cantaban en las danzas, diciendo: `Saúl mató a sus miles, Y David a sus diez miles'?"
Los Filisteos persiguieron muy de cerca a Saúl y a sus hijos, y mataron a Jonatán, a Abinadab y a Malquisúa, hijos de Saúl.
La batalla se intensificó contra Saúl, y los arqueros lo alcanzaron y fue gravemente herido por ellos.
Entonces Saúl dijo a su escudero: ``Saca tu espada y traspásame con ella, no sea que vengan estos incircuncisos y me traspasen y hagan burla de mí." Pero su escudero no quiso, porque tenía mucho miedo. Así que Saúl tomó su espada y se echó sobre ella.
Al ver su escudero que Saúl había muerto, él también se echó sobre su espada y murió con él.
Así murió Saúl aquel día, junto con sus tres hijos, su escudero y todos sus hombres.
Cuando los hombres de Israel que {estaban} al otro lado del valle, con los que {estaban} más allá del Jordán, vieron que los hombres de Israel habían huido y que Saúl y sus hijos habían muerto, abandonaron las ciudades y huyeron. Entonces vinieron los Filisteos y habitaron en ellas.
Al día siguiente, cuando vinieron los Filisteos a despojar a los muertos, hallaron a Saúl y a sus tres hijos caídos en el Monte Gilboa.
Cuando oyeron los habitantes de Jabes de Galaad lo que los Filisteos habían hecho a Saúl,
se levantaron todos los hombres valientes, y caminando toda la noche, tomaron el cuerpo de Saúl y los cuerpos de sus hijos del muro de Bet Sán, y volviendo a Jabes, los quemaron allí.
Después de la muerte de Saúl, habiendo regresado David de derrotar a los Amalecitas, David permaneció dos días en Siclag.
Al tercer día, un hombre llegó del campamento de Saúl con sus ropas rasgadas y polvo sobre su cabeza. Al llegar ante David, se inclinó a tierra y se postró.
David le preguntó: `` ¿Qué aconteció? Te ruego que me lo digas." Y él respondió: ``El pueblo ha huido de la batalla, y también muchos del pueblo han caído y han muerto; también Saúl y su hijo Jonatán han muerto."
Así que David le preguntó al joven que se lo había contado: `` ¿Cómo sabes que Saúl y su hijo Jonatán han muerto?"
El joven que se lo había contado, dijo: ``Yo estaba por casualidad en el Monte Gilboa, y vi que Saúl estaba apoyado sobre su lanza. Y que los carros y los jinetes lo perseguían de cerca.
Se lamentaron y lloraron y ayunaron hasta el atardecer por Saúl y por su hijo Jonatán, por el pueblo del SEÑOR y {por} la casa de Israel, porque habían caído a espada.
Entonces David entonó esta elegía por Saúl y por su hijo Jonatán,
Oh montes de Gilboa, No haya sobre ustedes rocío ni lluvia, ni campos de ofrendas; Porque allí fue deshonrado el escudo de los valientes, El escudo de Saúl, no ungido con aceite.
De la sangre de los muertos, de la grasa de los poderosos, El arco de Jonatán no volvía atrás, Y la espada de Saúl no volvía vacía.
Saúl y Jonatán, amados y amables en su vida, Y en su muerte no fueron separados; Más ligeros eran que águilas, Más fuertes que leones.
Hijas de Israel, lloren por Saúl, Que las vestía lujosamente de escarlata, Que ponía adornos de oro en sus vestidos.
Los hombres de Judá vinieron y ungieron allí a David como rey sobre la casa de Judá. Y avisaron a David: ``Fueron los hombres de Jabes de Galaad los que sepultaron a Saúl."
Y David envió mensajeros a los hombres de Jabes de Galaad, a decirles: ``Benditos sean del SEÑOR, porque han mostrado esta bondad a Saúl su señor, y lo han sepultado.
"Fortalezcan, pues, sus manos, y sean valientes porque Saúl su señor ha muerto, y la casa de Judá me ha ungido rey sobre ellos."
Pero Abner, hijo de Ner, comandante del ejército de Saúl, había tomado a Isboset, hijo de Saúl, y lo llevó a Mahanaim.
Isboset, hijo de Saúl, tenía cuarenta años cuando comenzó a reinar sobre Israel, y reinó dos años. La casa de Judá, sin embargo, siguió a David.
Abner, hijo de Ner, salió de Mahanaim a Gabaón con los siervos de Isboset, hijo de Saúl.
Se levantaron y pasaron en igual número, doce por Benjamín e Isboset, hijo de Saúl, y doce de los siervos de David.
Hubo larga guerra entre la casa de Saúl y la casa de David; pero David se iba fortaleciendo, mientras que la casa de Saúl se iba debilitando.
Durante la guerra que había entre la casa de Saúl y la casa de David, Abner se fortaleció en la casa de Saúl.
Y Saúl había tenido una concubina cuyo nombre era Rizpa, hija de Aja; entonces Isboset dijo a Abner: `` ¿Por qué te has llegado a la concubina de mi padre?"
Abner se enojó mucho por las palabras de Isboset, y dijo: `` ¿Acaso soy yo cabeza de perro que pertenece a Judá? Hoy he mostrado bondad hacia la casa de tu padre Saúl, hacia sus hermanos y hacia sus amigos, y no te he entregado en manos de David; sin embargo, tú me acusas hoy de una ofensa con esta mujer.
transferir el reino de la casa de Saúl y establecer el trono de David sobre Israel y sobre Judá desde Dan hasta Beerseba."
Y David respondió: ``Muy bien. Haré pacto contigo, pero una cosa demando de ti: No verás mi rostro a menos de que cuando vengas a verme traigas a Mical, la hija de Saúl."
Y David envió mensajeros a Isboset, el hijo de Saúl y le dijo: ``Dame a mi mujer Mical, con la cual me desposé por cien prepucios de los Filisteos."
Cuando oyó Isboset, hijo de Saúl, que Abner había sido muerto en Hebrón, se llenó de miedo, y todo Israel se turbó.
El hijo de Saúl {tenía} dos hombres que eran jefes de bandas: el nombre de uno era Baana, y el del otro Recab, hijos de Rimón el Beerotita, de la tribu de Benjamín (porque Beerot es también considerado {parte} de Benjamín,
Jonatán, hijo de Saúl, tenía un hijo lisiado de los pies. {Este} tenía cinco años cuando de Jezreel llegaron las noticias {de la muerte} de Saúl y Jonatán, y su nodriza lo tomó y huyó, pero sucedió que en su prisa por huir, él se cayó y quedó cojo. Su nombre {era} Mefiboset.
y trajeron la cabeza de Isboset a David en Hebrón, y dijeron al rey: ``Esta es la cabeza de Isboset, hijo de su enemigo Saúl, el que buscaba su vida; de esta manera el SEÑOR hoy ha concedido venganza a mi señor el rey sobre Saúl y sus descendientes."
porque cuando uno me avisó: `Saúl ha muerto,' pensando que me traía buenas noticias, yo lo prendí y lo maté en Siclag, lo cual fue el pago que le di por {sus} noticias.
"Ya desde antes, cuando Saúl aún era rey sobre nosotros, usted era el que guiaba a Israel en {sus} salidas y entradas. Y el SEÑOR le dijo: `Tú pastorearás a Mi pueblo Israel, y serás príncipe sobre Israel.'"
Sucedió que cuando el arca del SEÑOR entraba a la ciudad de David, Mical, hija de Saúl, miró desde la ventana y vio al rey David saltando y danzando delante del SEÑOR, y lo despreció en su corazón.
Pero al regresar David para bendecir su casa, Mical, hija de Saúl, salió al encuentro de David, y {le} dijo: `` ¡Cómo se ha distinguido hoy el rey de Israel! Se descubrió hoy ante los ojos de las criadas de sus siervos, como se descubriría sin decoro un insensato."
Y Mical, hija de Saúl, no tuvo hijos hasta el día de su muerte.
pero Mi misericordia no se apartará de él, como {la} aparté de Saúl a quien quité de delante de ti.
Entonces David dijo: `` ¿Hay todavía alguien que haya quedado de la casa de Saúl, para que yo le muestre bondad por amor a Jonatán?"
Y {había} un siervo de la casa de Saúl que se llamaba Siba, y lo llamaron ante David. Y el rey le dijo: `` ¿Eres tú Siba?" ``Su servidor," respondió él.
Y el rey le preguntó: `` ¿No queda aún alguien de la casa de Saúl a quien yo pueda mostrar la bondad de Dios?" Y Siba respondió al rey: ``Aún queda un hijo de Jonatán lisiado de ambos pies."
Y Mefiboset, hijo de Jonatán, hijo de Saúl, vino a David, y cayendo sobre su rostro, se postró. Y David dijo: ``Mefiboset." ``Su siervo," respondió él.
David le dijo: ``No temas, porque ciertamente te mostraré bondad por amor a tu padre Jonatán, y te devolveré toda la tierra de tu abuelo Saúl; y tú comerás siempre a mi mesa."
Entonces el rey llamó a Siba, siervo de Saúl, y le dijo: ``Todo lo que pertenecía a Saúl y a su casa, lo he dado al nieto de tu señor.
Entonces Natán dijo a David: ``Tú eres aquel hombre. Así dice el SEÑOR, Dios de Israel: `Yo te ungí rey sobre Israel y te libré de la mano de Saúl.
Al llegar el rey David a Bahurim, entonces, salió de allí un hombre de la familia de la casa de Saúl que se llamaba Simei, hijo de Gera. Cuando salió, iba maldiciendo,
"El SEÑOR ha hecho volver sobre ti toda la sangre derramada de la casa de Saúl, en cuyo lugar has reinado; el SEÑOR ha entregado el reino en mano de tu hijo Absalón. Aquí estás {prendido} en tu propia maldad, porque eres hombre sanguinario."
Con él {había} 1,000 hombres de Benjamín, y Siba, siervo de la casa de Saúl, y con él sus quince hijos y sus veinte siervos; y se apresuraron a {pasar} el Jordán delante del rey.
También Mefiboset, nieto de Saúl, descendió al encuentro del rey; y no se había aseado los pies, ni recortado el bigote, ni lavado la ropa, desde el día en que el rey se marchó hasta el día en que volvió en paz.
En los días de David hubo hambre por tres años consecutivos, y David buscó la presencia del SEÑOR. Y el SEÑOR dijo: ``Es por causa de Saúl y de su casa sangrienta, porque él dio muerte a los Gabaonitas."
Y llamó el rey a los Gabaonitas y les habló. (Los Gabaonitas no eran de los Israelitas, sino del remanente de los Amorreos, y los Israelitas habían hecho un pacto con ellos, pero Saúl había procurado matarlos en su celo por los Israelitas y los de Judá.)