'Tabernáculo' en la Biblia
Antes, trajisteis el tabernáculo de Moloc, y la estrella de vuestro dios Remfan: Figuras que os hicisteis para adorarlas: Os transportaré, pues, más allá de Babilonia.
Nuestros padres tuvieron el tabernáculo del testimonio en el desierto, tal como Él lo había ordenado cuando dijo a Moisés que lo hiciese según el modelo que había visto.
el cual halló gracia delante de Dios, y pidió hacer tabernáculo para el Dios de Jacob.
Después de esto volveré, y reedificaré el tabernáculo de David, que está caído; y repararé sus ruinas, y lo volveré a levantar:
Porque sabemos que si nuestra casa terrenal, este tabernáculo, se deshiciere, tenemos de Dios un edificio, una casa no hecha de manos, eterna, en el cielo.
Porque nosotros que estamos en este tabernáculo gemimos con angustia; porque no quisiéramos ser desnudados, sino revestidos, para que lo mortal sea absorbido por la vida.
ministro del santuario, y del verdadero tabernáculo que el Señor levantó, y no el hombre.
los cuales sirven de ejemplo y sombra de las cosas celestiales, como fue advertido por Dios a Moisés cuando estaba por comenzar el tabernáculo: Mira, dice, haz todas las cosas conforme al modelo que te ha sido mostrado en el monte.
Porque el tabernáculo fue edificado así; la primera parte, en donde estaba el candelero, y la mesa, y los panes de la proposición; el cual es llamado el Santuario.
Y tras el segundo velo estaba la parte del tabernáculo que es llamado el Lugar Santísimo;
Y cuando estas cosas fueron así ordenadas, los sacerdotes siempre entraban en la primera parte del tabernáculo para hacer los oficios del servicio a Dios;
Dando en esto a entender el Espíritu Santo, que aún no estaba descubierto el camino al lugar santísimo, entre tanto que el primer tabernáculo estuviese en pie.
Mas estando ya presente Cristo, Sumo Sacerdote de los bienes que habían de venir, por el más amplio y más perfecto tabernáculo, no hecho de manos, es decir, no de esta creación;
Y además de esto roció también con sangre el tabernáculo y todos los vasos del ministerio.
Tenemos un altar, del cual no tienen derecho de comer los que sirven al tabernáculo.
Porque tengo por justo, en tanto que estoy en este tabernáculo, el incitaros con amonestación;
sabiendo que en breve debo dejar mi tabernáculo, como nuestro Señor Jesucristo me ha declarado.
Por esto están delante del trono de Dios, y le sirven día y noche en su templo; y el que está sentado sobre el trono extenderá su tabernáculo sobre ellos.
Y abrió su boca en blasfemias contra Dios, para blasfemar su nombre y su tabernáculo, y a los que moran en el cielo.
Y después de estas cosas miré, y he aquí el templo del tabernáculo del testimonio fue abierto en el cielo;
Y oí una gran voz del cielo que decía: He aquí el tabernáculo de Dios con los hombres, y Él morará con ellos; y ellos serán su pueblo, y Dios mismo estará con ellos, y será su Dios.