'Uno' en la Biblia
Entonces el SEÑOR Dios dijo: ``Ahora el hombre ha venido a ser como uno de Nosotros (Padre, Hijo y Espíritu Santo), conociendo ellos el bien y el mal. Cuidado ahora, no vaya a extender su mano y tome también del árbol de la vida, y coma y viva para siempre."
También salieron del arca todas las bestias, todos los reptiles, todas las aves y todo lo que se mueve sobre la tierra, cada uno según su especie.
De éstos, las costas de las naciones se dividieron en sus tierras, cada uno conforme a su lengua, según sus familias, en sus naciones.
A Heber le nacieron dos hijos: el nombre de uno {fue} Peleg, porque en sus días fue repartida la tierra, y el nombre de su hermano, Joctán.
Lot escogió para sí todo el Valle del Jordán, y viajó Lot hacia el oriente. Así se separaron el uno del otro.
Uno de los que escaparon vino y se lo hizo saber a Abram el Hebreo, que habitaba en el encinar de Mamre el Amorreo, hermano de Escol y hermano de Aner, y éstos eran aliados de Abram.
Dijo además Abram: ``No me has dado descendencia, y uno nacido en mi casa es mi heredero."
Pero la palabra del SEÑOR vino a él, diciendo: ``Tu heredero no será éste, sino uno que saldrá de tus entrañas, él será tu heredero."
Y {uno de ellos} dijo: ``Ciertamente volveré a ti por este tiempo el año próximo, y Sara tu mujer tendrá un hijo." Y Sara estaba escuchando a la puerta de la tienda que estaba detrás de él.
Cuando los habían llevado fuera, {uno le} dijo: ``Huye por tu vida. No mires detrás de ti y no te detengas en ninguna parte del valle. Escapa al monte, no sea que perezcas."
Cuando el agua del odre se acabó, ella dejó al muchacho debajo de uno de los arbustos.
Y {Dios} dijo: ``Toma ahora a tu hijo, tu único, a quien amas, a Isaac, y ve a la tierra de Moriah, y ofrécelo allí en holocausto sobre uno de los montes que Yo te diré."
Isaac sembró en aquella tierra, y cosechó aquel año ciento por uno. Y el SEÑOR lo bendijo.
y Mizpa (Vigía), porque dijo: ``Que el SEÑOR nos vigile a los dos cuando nos hayamos apartado el uno del otro.
Pero Jacob respondió: ``No, te ruego que si ahora he hallado gracia ante tus ojos, tomes el presente de mi mano, porque veo tu rostro como uno ve el rostro de Dios, y me has recibido favorablemente.
"Sólo con esta {condición} los complaceremos: si ustedes se hacen como nosotros, circuncidándose cada uno de sus varones;
Pero sucedió que al tercer día, cuando estaban {con más} dolor, dos hijos de Jacob, Simeón y Leví, hermanos de Dina, tomaron cada uno su espada y entraron en la ciudad, que estaba desprevenida, y mataron a todo varón.
"Ahora pues, vengan, matémoslo y arrojémoslo a uno de los pozos; y diremos: `Una fiera lo devoró.' Entonces veremos en qué quedan sus sueños."
Aconteció, además, que mientras daba a luz, uno {de ellos} sacó su mano, y la partera {la} tomó y le ató un {hilo} escarlata en la mano, diciendo: ``Este salió primero."
Entonces el copero y el panadero del rey de Egipto, que estaban encerrados en la cárcel, tuvieron ambos un sueño en una misma noche, cada uno su {propio} sueño, {y} cada sueño con su {propia} interpretación.
"él y yo tuvimos un sueño en una misma noche. Cada uno de nosotros soñó según la interpretación de su {propio} sueño.
"Y {estaba} allí con nosotros un joven Hebreo, un siervo del capitán de la guardia. Y se {los} contamos, y él nos interpretó los sueños. A cada uno interpretó su sueño.
Entonces José dijo a Faraón: ``Los {dos} sueños de Faraón son uno. Dios ha anunciado a Faraón lo que El va a hacer.
"Las siete vacas hermosas son siete años, y las siete espigas hermosas son siete años. Los dos sueños son uno.
"Envíen a uno de ustedes y que traiga a su hermano, mientras ustedes quedan presos, para que sean probadas sus palabras, {a ver si hay} verdad en ustedes. Y si no, ¡por vida de Faraón!, ciertamente son espías."
si son {hombres} honrados, que uno de sus hermanos quede encarcelado en su prisión. {El resto de} ustedes, vayan, lleven grano para el hambre de sus casas.
Entonces se dijeron el uno al otro: ``Verdaderamente somos culpables en cuanto a nuestro hermano, porque vimos la angustia de su alma cuando nos rogaba, y no lo escuchamos, por eso ha venido sobre nosotros esta angustia."
José mandó que les llenaran sus vasijas de grano y que devolvieran el dinero a cada uno {poniéndolo} en su saco, y que les dieran provisiones para el camino. Y así se hizo con ellos.
Y cuando uno {de ellos} abrió su saco para dar forraje a su asno en la posada, vio que su dinero estaba en la boca de su costal.
Entonces dijo a sus hermanos: ``{Me} ha sido devuelto mi dinero, y miren, está en mi costal." Y se les sobresaltó el corazón, y temblando se decían el uno al otro: `` ¿Qué es esto que Dios nos ha hecho?"
~`Eramos doce hermanos, hijos de nuestro padre. Uno ya no existe, y el menor está hoy con nuestro padre en la tierra de Canaán.'
``Entonces el hombre, el señor de aquel país, nos dijo: `Por esto sabré que son {hombres} honrados: dejen uno de sus hermanos conmigo y tomen {grano para} el hambre de sus casas, y márchense.
Cuando vaciaron sus sacos, el atado del dinero de cada uno {estaba} en su saco. Y al ver ellos y su padre los atados de su dinero, tuvieron temor.
"Y cuando llegamos a la posada, abrimos nuestros costales, y el dinero de cada uno estaba en la boca de su costal, todo nuestro dinero. Así que lo hemos vuelto a traer en nuestra mano.
Entonces {José} ordenó al mayordomo de su casa, diciendo: ``Llena de alimento los costales de los hombres, todo lo que puedan llevar, y pon el dinero de cada uno de ellos en la boca de su costal.
Ellos se dieron prisa. Cada uno bajó su costal a tierra, y cada cual abrió su costal.
Entonces ellos rasgaron sus vestidos, y después de cargar cada uno su asno, regresaron a la ciudad.
el uno salió de mi lado, y dije: ``Seguro que ha sido despedazado," y no lo he visto desde entonces.
Así compró José toda la tierra de Egipto para Faraón, pues los Egipcios vendieron cada uno su campo, porque el hambre era severa sobre ellos. Y la tierra llegó a ser de Faraón.
Todas estas son las doce tribus de Israel, y esto es lo que les dijo su padre cuando los bendijo. A cada uno lo bendijo con la bendición que le correspondía.