'Ellas' en la Biblia
Mirad las aves del cielo, que no siembran, ni siegan, ni recogen en graneros, y {sin embargo,} vuestro Padre celestial las alimenta. ¿No sois vosotros de mucho más valor que ellas?
Y viendo las multitudes, tuvo compasión de ellas, porque estaban angustiadas y abatidas como ovejas que no tienen pastor.
¿Qué os parece? Si un hombre tiene cien ovejas y una de ellas se ha descarriado, ¿no deja las noventa y nueve en los montes, y va en busca de la descarriada?
Y cinco de ellas eran insensatas, y cinco prudentes.
Y mientras ellas iban a comprar, vino el novio, y las que estaban preparadas entraron con él al {banquete} de bodas, y se cerró la puerta.
Y después de celebrar consejo, compraron con ellas el Campo del Alfarero para sepultura de los forasteros.
Y ellas, alejándose a toda prisa del sepulcro con temor y gran gozo, corrieron a dar las noticias a sus discípulos.
Y he aquí que Jesús les salió al encuentro, diciendo: ¿Salve! Y ellas, acercándose, abrazaron sus pies y le adoraron.
Y mientras ellas iban, he aquí, algunos de la guardia fueron a la ciudad e informaron a los principales sacerdotes de todo lo que había sucedido.
Y entrando en el sepulcro, vieron a un joven sentado al {lado} derecho, vestido con ropaje blanco; y ellas se asustaron.
Y saliendo ellas, huyeron del sepulcro, porque un {gran} temblor y espanto se había apoderado de ellas; y no dijeron nada a nadie porque tenían miedo.
Y ellos salieron y predicaron por todas partes, colaborando el Señor con ellos, y confirmando la palabra por medio de las señales que la seguían. {Ellas comunicaron inmediatamente a Pedro y a sus compañeros todas estas instrucciones. Y después de esto, Jesús mismo envió por medio de ellos, desde el oriente hasta el occidente, el mensaje sacrosanto e incorruptible de la salvación eterna.}
Pero María atesoraba todas estas cosas, reflexionando sobre ellas en su corazón.
añadió además a todas ellas, ésta: que encerró a Juan en la cárcel.
y sin embargo, a ninguna de ellas fue enviado Elías, sino a una mujer viuda de Sarepta, {en la tierra} de Sidón.
vio dos barcas que estaban a la orilla del lago, pero los pescadores habían bajado de ellas y lavaban las redes.
Pero ellos no entendían estas palabras, y les estaban veladas para que no las comprendieran; y temían preguntarle acerca de ellas.
y acercándose, le vendó sus heridas, derramando aceite y vino sobre {ellas;} y poniéndolo sobre su propia cabalgadura, lo llevó a un mesón y lo cuidó.
¿Qué hombre de vosotros, si tiene cien ovejas y una de ellas se pierde, no deja las noventa y nueve en el campo y va tras la que está perdida hasta que la halla?
Pero Jesús, volviéndose a ellas, dijo: Hijas de Jerusalén, no lloréis por mí; llorad más bien por vosotras mismas y por vuestros hijos.
Y aconteció que estando ellas perplejas por esto, de pronto se pusieron junto a ellas dos varones en vestiduras resplandecientes;
y estando ellas aterrorizadas e inclinados sus rostros a tierra, ellos les dijeron: ¿Por qué buscáis entre los muertos al que vive?
Entonces ellas se acordaron de sus palabras,
Eran María Magdalena y Juana y María, la {madre} de Jacobo; también las demás {mujeres} con ellas referían estas cosas a los apóstoles.
Examináis las Escrituras porque vosotros pensáis que en ellas tenéis vida eterna; y ellas son las que dan testimonio de mí;
Cuando saca todas las suyas, va delante de ellas, y las ovejas lo siguen porque conocen su voz.
Jesús les dijo: Os he mostrado muchas obras buenas {que son} del Padre. ¿Por cuál de ellas me apedreáis?
Pero os he dicho estas cosas para que cuando llegue la hora, os acordéis de que ya os había hablado de ellas. Y no os dije estas cosas al principio, porque yo estaba con vosotros.
Entonces, cuando bajaron a tierra, vieron* brasas {ya} puestas y un pescado colocado sobre ellas, y pan.
Entonces Pedro se levantó y fue con ellos. Cuando llegó, lo llevaron al aposento alto, y todas las viudas lo rodearon llorando, mostrando todas las túnicas y ropas que Dorcas solía hacer cuando estaba con ellas.
Pero si algunas de las ramas fueron desgajadas, y tú, siendo un olivo silvestre, fuiste injertado entre ellas y fuiste hecho participante con ellas de la rica savia de la raíz del olivo,
A otras iglesias despojé, tomando salario {de ellas} para serviros a vosotros;
Sin embargo, la ley no es de fe; al contrario, EL QUE LAS HACE, VIVIRA POR ELLAS.
Porque somos hechura suya, creados en Cristo Jesús para {hacer} buenas obras, las cuales Dios preparó de antemano para que anduviéramos en ellas.
en las cuales vosotros también anduvisteis en otro tiempo cuando vivíais en ellas.
Maridos, amad a vuestras mujeres y no seáis ásperos con ellas.
Esta comisión te confío, hijo Timoteo, conforme a las profecías que antes se hicieron en cuanto a ti, a fin de que por ellas pelees la buena batalla,
Reflexiona sobre estas cosas; dedícate a ellas, para que tu aprovechamiento sea evidente a todos.
Evita las palabrerías vacías {y} profanas, porque {los dados a ellas,} conducirán más y más a la impiedad,
persecuciones, sufrimientos, como los que me acaecieron en Antioquía, en Iconio {y} en Listra. ¡Qué persecuciones sufrí! Y de todas ellas me libró el Señor.
por medio de las cuales nos ha concedido sus preciosas y maravillosas promesas, a fin de que por ellas lleguéis a ser partícipes de {la} naturaleza divina, habiendo escapado de la corrupción que hay en el mundo por {causa de la} concupiscencia.
Porque si después de haber escapado de las contaminaciones del mundo por el conocimiento de nuestro Señor y Salvador Jesucristo, de nuevo son enredados en ellas y vencidos, su condición postrera viene a ser peor que la primera.
Asimismo en todas {sus} cartas habla en ellas de esto; en las cuales hay algunas cosas difíciles de entender, que los ignorantes e inestables tuercen--como también {tuercen} el resto de las Escrituras--para su propia perdición.
Así {también} Sodoma y Gomorra y las ciudades circunvecinas, a semejanza de aquéllos, puesto que ellas se corrompieron y siguieron carne extraña, son exhibidas como ejemplo al sufrir el castigo del fuego eterno.
Porque el poder de los caballos está en su boca y en sus colas; pues sus colas son semejantes a serpientes, tienen cabezas y con ellas hacen daño.
Y vi otra señal en el cielo, grande y maravillosa: siete ángeles que tenían siete plagas, las últimas, porque en ellas se ha consumado el furor de Dios.
y saldrá a engañar a las naciones que están en los cuatro extremos de la tierra, a Gog y a Magog, a fin de reunirlas para la batalla; el número de ellas es como la arena del mar.
Tenía un muro grande y alto con doce puertas, y en las puertas doce ángeles; y {en ellas había} nombres escritos, que son {los} de las doce tribus de los hijos de Israel.
Yo testifico a todos los que oyen las palabras de la profecía de este libro: Si alguno añade a ellas, Dios traerá sobre él las plagas que están escritas en este libro;