'Estoy' en la Biblia
Porque donde están dos o tres congregados en mi nombre, allí estoy en medio de ellos.
enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado; y he aquí, yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del siglo. Amén.
Y respondiendo el ángel le dijo: Yo soy Gabriel, que estoy delante de Dios; y soy enviado a hablarte, y a darte este evangelio.
Y él le dijo: Señor, aparejado estoy a ir contigo aun a cárcel y a muerte.
Hijitos, aun un poco estoy con vosotros. Me buscaréis; mas, como dije a los judíos: Donde yo voy, vosotros no podéis venir; y ahora os lo digo.
Y si me fuere, y os aparejare el lugar, vendré otra vez, y os tomaré a mí mismo, para que donde yo estoy, vosotros también estéis.
Jesús le dice: ¿Tanto tiempo hace que estoy con vosotros, y no me has conocido, Felipe? El que me ha visto, ha visto (también) al Padre; ¿cómo, pues, dices tú: Muéstranos el Padre?
He aquí, la hora viene, y ya es venida, que seréis esparcidos cada uno por su cabo, y me dejaréis solo; mas no estoy solo, porque el Padre está conmigo.
Y ya no estoy en el mundo; mas éstos están en el mundo, y yo a ti vengo. Padre Santo, a los que me has dado, guárdalos en tu Nombre, para que sean una cosa, como también nosotros.
Padre, aquellos que me has dado, quiero que donde yo estoy, ellos estén también conmigo; para que vean mi claridad que me has dado; por cuanto me has amado desde antes de la constitución del mundo.
porque yo estoy contigo, y ninguno te podrá hacer mal; porque yo tengo mucho pueblo en esta ciudad.
Entonces Pablo respondió: ¿Qué hacéis llorando y afligiéndome el corazón? Porque yo no sólo estoy presto a ser atado, mas aun a morir en Jerusalén por el Nombre del Señor Jesús.
Y Pablo dijo: Ante el tribunal de César estoy, donde conviene que sea juzgado. A los judíos no he hecho injuria alguna, como tú sabes muy bien.
Y Pablo dijo : No estoy loco, excelentísimo Festo, sino que hablo palabras de verdad y de templanza.
Así que, por esta causa, os he llamado para veros y hablaros; porque por la esperanza de Israel estoy rodeado de esta cadena.
Así que, en cuanto a mí, presto estoy a anunciar el Evangelio también a los que estáis en Roma.
Por lo cual estoy cierto que ni la muerte, ni la vida, ni ángeles, ni principados, ni potestades, ni lo presente, ni lo por venir,
Pero cierto estoy yo de vosotros, hermanos míos, que aun sin mi exhortación estáis llenos de caridad, llenos de todo conocimiento, de tal manera que podáis amonestaros los unos a los otros.
Mucho atrevimiento tengo para con vosotros, mucho me glorío de vosotros; lleno estoy de consolación, sobreabundo de gozo en todas nuestras tribulaciones.
Así que me gozo de que en todo estoy confiado de vosotros.
He aquí estoy aparejado para ir a vosotros la tercera vez, y no os seré gravoso; porque no busco vuestras cosas, sino a vosotros; porque no han de atesorar los hijos para los padres, sino los padres para los hijos.
Estoy maravillado de que tan pronto os hayáis traspasado del que os llamó en la gracia de Cristo, a otro evangelio;
Con Cristo estoy juntamente colgado en el madero, y vivo, no ya yo, sino vive Cristo en mí; y lo que ahora vivo en la carne, lo vivo por la fe del Hijo de Dios, el cual me amó, y se entregó a sí mismo por mí.
Bueno es ser celosos en bien siempre; y no solamente cuando estoy presente con vosotros.
querría cierto estar ahora con vosotros, y mudar mi voz; porque estoy avergonzado de vosotros.
porque de ambas cosas estoy puesto en estrecho) teniendo deseo de ser desatado, y estar con Cristo, lo cual es mucho mejor;
Sé estar humillado, y sé tener abundancia; en todo y por todo estoy enseñado, así para estar saciado como para tener hambre, así para tener abundancia como para padecer necesidad.
Pero todo lo he recibido, y tengo abundancia; estoy lleno, habiendo recibido de Epafrodito lo que enviasteis, olor de suavidad, sacrificio acepto, agradable a Dios.
Porque aunque estoy ausente en cuerpo, no obstante en espíritu estoy con vosotros, gozándome y mirando vuestro orden y la firmeza de vuestra fe en el Cristo.
orando también juntamente por nosotros, que el Señor nos abra la puerta de la palabra, para que hablemos el misterio del Cristo, (por el cual aun estoy preso),
trayendo a la memoria la fe no fingida que está en ti, la cual residió primero en tu abuela Loida, y en tu madre Eunice; y estoy cierto que está en ti también.
Por tanto no te avergüences de dar testimonio del Señor nuestro, ni de mí, que estoy preso por él; antes sé participante de los trabajos del Evangelio por el poder de Dios,
Por lo cual así mismo padezco esto, pero no me avergüenzo; porque yo sé a quien he creído, y estoy cierto que es poderoso para guardar mi depósito para aquel día.
y tan terrible cosa era lo que se veía, que Moisés dijo: Estoy asombrado y temblando).
Porque tengo por justo, (en tanto que estoy en este tabernáculo), de incitaros con amonestación,
Porque tú dices: Yo soy rico, y estoy enriquecido, y no tengo necesidad de ninguna cosa; y no conoces que tú eres un desventurado y miserable y pobre y ciego y desnudo;
He aquí, que yo estoy parado a la puerta y llamo; si alguno oyere mi voz, y abriere la puerta, entraré a él, y cenaré con él, y él conmigo.
Cuanto ella se ha glorificado, y ha estado en deleites, tanto dadle de tormento y llanto; porque dice en su corazón: Yo estoy sentada reina, y no soy viuda, y no veré llanto.