'Iniquidad' en la Biblia

Como yo he visto, los que aran iniquidad Y siembran injuria, la siegan.

Porque la iniquidad no sale del polvo, Ni la molestia brota de la tierra.

Pues es esperanza al menesteroso, Y la iniquidad cerrará su boca.

Tornad ahora, y no haya iniquidad; Volved aún á considerar mi justicia en esto.

¿Hay iniquidad en mi lengua? ¿No puede mi paladar discernir las cosas depravadas?

¿Y por qué no quitas mi rebelión, y perdonas mi iniquidad? Porque ahora dormiré en el polvo, Y si me buscares de mañana, ya no seré.

Para que inquieras mi iniquidad, Y busques mi pecado,

Si pequé, tú me has observado, Y no me limpias de mi iniquidad.

Y que te declarara los arcanos de la sabiduría, Que son de doble valor que la hacienda! Conocerías entonces que Dios te ha castigado menos que tu iniquidad merece.

Porque él conoce á los hombres vanos: Ve asimismo la iniquidad, ¿y no hará caso?

Si alguna iniquidad hubiere en tu mano, y la echares de ti, Y no consintieres que more maldad en tus habitaciones;

¿Habéis de hablar iniquidad por Dios? ¿Habéis de hablar por él engaño?

Tienes sellada en saco mi prevaricación, Y coacervas mi iniquidad.

Porque tu boca declaró tu iniquidad, Pues has escogido el hablar de los astutos.

¿Cuánto menos el hombre abominable y vil, Que bebe la iniquidad como agua?

Concibieron dolor, y parieron iniquidad; Y las entradas de ellos meditan engaño.

A pesar de no haber iniquidad en mis manos, Y de haber sido mi oración pura.

Los cielos descubrirán su iniquidad, Y la tierra se levantará contra él.

Mis labios no hablarán iniquidad, Ni mi lengua pronunciará engaño.

¿No hay quebrantamiento para el impío, Y extrañamiento para los que obran iniquidad?

Porque es maldad é iniquidad, Que han de castigar los jueces.

Si encubrí, como los hombres mis prevaricaciones, Escondiendo en mi seno mi iniquidad;

Y va en compañía con los que obran iniquidad, Y anda con los hombres maliciosos.

Por tanto, varones de seso, oidme; Lejos esté de Dios la impiedad, Y del Omnipotente la iniquidad.

Despierta además el oído de ellos para la corrección, Y díce les que se conviertan de la iniquidad.

Guárdate, no tornes á la iniquidad; Pues ésta escogiste más bien que la aflicción.

¿Quién le ha prescrito su camino? ¿Y quién le dirá: Iniquidad has hecho?