'Quién' en la Biblia
Porque llamé, y no quisisteis oír: Extendí mi mano, y no hubo quien atendiese;
porque Jehová al que ama castiga, como el padre al hijo a quien quiere.
No detengas el bien de aquél a quien es debido, cuando tuvieres poder para hacerlo.
Quien sea simple, venga acá. A los faltos de cordura dice:
Piedra preciosa es el don a quien lo posee; a dondequiera que se vuelve, prospera.
El espíritu del hombre soportará su enfermedad; mas ¿quién soportará al espíritu angustiado?
Como rugido de cachorro de león es el terror del rey; quien lo enfurece, contra su propia alma peca.
Muchos hombres proclaman cada uno su propia bondad; pero hombre de verdad, ¿quién lo hallará?
¿Quién podrá decir: Yo he limpiado mi corazón, limpio estoy de mi pecado?
Hay quien todo el día codicia; mas el justo da, y no escatima.
¿Para quién será el ay? ¿Para quién el dolor? ¿Para quién las rencillas? ¿Para quién las quejas? ¿Para quién las heridas en balde? ¿Para quién lo amoratado de los ojos?
porque su calamidad surgirá de repente; y la ruina de ambos, ¿quién la sabrá?
Porque mejor es que se te diga: Sube acá, y no que seas humillado delante del príncipe a quien tus ojos han visto.
Como quien liga la piedra en la honda, así hace el que al necio da honra.
Cruel es la ira, e impetuoso el furor; mas ¿quién podrá sostenerse delante de la envidia?
¿Quién subió al cielo, y descendió? ¿Quién encerró los vientos en sus puños? ¿Quién ató las aguas en un paño? ¿Quién afirmó todos los términos de la tierra? ¿Cuál es su nombre, y el nombre de su Hijo, si lo sabes?
No sea que me sacie, y te niegue, y diga: ¿Quién es Jehová? O que siendo pobre, hurte, y blasfeme el nombre de mi Dios.
Mujer virtuosa, ¿quién la hallará? Porque su estima sobrepasa largamente a la de piedras preciosas.