'Al' en la Biblia
Todos los años aquel hombre subía de su ciudad para adorar y ofrecer sacrificio al SEÑOR de los ejércitos en Silo. Allí los dos hijos de Elí, Ofni y Finees, eran sacerdotes del SEÑOR.
Pero Ana se levantó después de haber comido y bebido estando en Silo, y {mientras} el sacerdote Elí estaba sentado en la silla junto al poste de la puerta del templo del SEÑOR,
ella, muy angustiada, oraba al SEÑOR y lloraba amargamente.
Entonces hizo voto y dijo: ``Oh SEÑOR de los ejércitos, si Te dignas mirar la aflicción de Tu sierva, Te acuerdas de mí y no Te olvidas de Tu sierva, sino que das un hijo a Tu sierva, yo lo dedicaré al SEÑOR por todos los días de su vida y nunca pasará navaja sobre su cabeza."
Y a su debido tiempo, después de haber concebido, Ana dio a luz un hijo, y le puso por nombre Samuel (Oído por Dios), {diciendo:} ``Porque se lo he pedido al SEÑOR."
Subió el varón Elcana con toda su casa a ofrecer al SEÑOR el sacrificio anual y {a pagar} su voto.
Después de haberlo destetado, llevó consigo al niño, y lo trajo a la casa del SEÑOR en Silo, aunque el niño era pequeño. También llevó un novillo de tres años, un efa (22 litros) de harina y un odre de vino.
`` ¡Oh señor mío!" dijo Ana. ``Vive su alma, señor mío. Yo soy la mujer que estuvo aquí junto a usted orando al SEÑOR.
"Por lo cual yo también lo he dedicado al SEÑOR. Todos los días de su vida estará dedicado al SEÑOR." Y adoró allí al SEÑOR.
El SEÑOR da muerte y da vida; Hace bajar al Seol (región de los muertos) y hace subir.
Levanta del polvo al pobre, Del muladar levanta al necesitado Para hacer{los} sentar con los príncipes, Y heredar un sitio de honor; Pues las columnas de la tierra son del SEÑOR, Y sobre ellas ha colocado el mundo.
Los que se oponen al SEÑOR serán quebrantados, El tronará desde los cielos contra ellos. El SEÑOR juzgará los confines de la tierra, Dará fortaleza a Su rey, Y ensalzará el poder de Su ungido."
Entonces Elcana regresó a Ramá, a su casa. Y el niño Samuel {se quedó} sirviendo al SEÑOR delante del sacerdote Elí.
Pero los hijos de Elí {eran} hombres indignos; no conocían al SEÑOR
Además, antes de quemar la grasa, el criado del sacerdote venía y decía al hombre que ofrecía el sacrificio: ``Da al sacerdote carne para asar, pues no aceptará de ti carne cocida, sino solamente cruda."
Entonces Elí bendecía a Elcana y a su mujer, y decía: ``Que el SEÑOR te dé hijos de esta mujer en lugar del que ella dedicó al SEÑOR." Y regresaban a su casa.
El joven Samuel servía (ministraba) al SEÑOR en presencia de Elí. La palabra del SEÑOR escaseaba en aquellos días, y las visiones no eran frecuentes.
Y Samuel no conocía aún al SEÑOR, ni se le había revelado aún la palabra del SEÑOR.
El SEÑOR volvió a llamar a Samuel por tercera vez. Y él se levantó, fue a Elí y le dijo: ``Aquí estoy, pues me llamó." Entonces Elí comprendió que el SEÑOR estaba llamando al muchacho.
Cuando el pueblo volvió al campamento, los ancianos de Israel dijeron: `` ¿Por qué nos ha derrotado hoy el SEÑOR delante de los Filisteos? Tomemos con nosotros, de Silo, el arca del pacto del SEÑOR, para que vaya en medio de nosotros y nos libre del poder de nuestros enemigos."
Y aconteció que cuando el arca del pacto del SEÑOR entró al campamento, todo Israel gritó con voz tan fuerte que la tierra tembló.
Al oír los Filisteos el ruido del clamor, dijeron: `` ¿Qué {significa} el ruido de este gran clamor en el campamento de los Hebreos?" Entonces comprendieron que el arca del SEÑOR había llegado al campamento.
Y los Filisteos tuvieron temor, pues dijeron: ``Dios ha venido al campamento." Y añadieron: `` ¡Ay de nosotros! Porque nada como esto ha sucedido antes.
Cuando llegó, Elí estaba sentado en {su} asiento junto al camino esperando ansiosamente, porque su corazón temblaba por causa del arca de Dios. Así pues, el hombre fue a anunciar{lo} en la ciudad, y toda la ciudad prorrumpió en gritos.
Al oír Elí el ruido de los gritos, dijo: `` ¿Qué {significa} el ruido de este tumulto?" Entonces el hombre se acercó apresuradamente y dio la noticia a Elí.
Su nuera, la mujer de Finees, estaba encinta y a punto de dar a luz, y al oír la noticia que el arca de Dios había sido tomada y que su suegro y su marido habían muerto, se arrodilló y dio a luz, porque le sobrevinieron los dolores {de parto.}
Al tiempo que moría, las mujeres que estaban junto a ella le dijeron: ``No temas, porque has dado a luz un hijo." Ella no respondió ni prestó atención.
Pero llamó al niño Icabod (Sin gloria) y dijo: `` ¡Se ha ido la gloria de Israel!" por haber sido tomada el arca de Dios, y por {la muerte de} su suegro y de su marido.
Pero al levantarse temprano al día siguiente, otra vez Dagón había caído rostro en tierra delante del arca del SEÑOR. Y la cabeza de Dagón y las dos palmas de sus manos {estaban} cortadas sobre el umbral; sólo el tronco le quedaba a Dagón.
Y {los Filisteos} preguntaron: `` ¿Cuál será la ofrenda por la culpa que Le hemos de devolver?" Y ellos dijeron: ``Cinco tumores de oro y cinco ratones de oro {conforme} al número de los príncipes de los Filisteos, porque la misma plaga {estuvo} sobre todos ustedes y sobre sus príncipes.
"Harán, pues, semejanzas de sus tumores, y semejanzas de sus ratones que asolan la tierra, y darán gloria al Dios de Israel. Tal vez El alivie Su mano de sobre ustedes, de sobre sus dioses y de sobre su tierra.
" ¿Por qué entonces endurecen sus corazones, como endurecieron sus corazones los Egipcios y Faraón? Cuando El los trató severamente, ¿no dejaron ir al pueblo, y ellos se fueron?
"Ahora pues, tomen y preparen un carro nuevo y dos vacas con crías sobre las cuales no se haya puesto ningún yugo. Aten las vacas al carro y lleven sus becerros a casa, lejos de ellas.
Entonces los hombres lo hicieron así. Tomaron dos vacas con crías, las ataron al carro y encerraron sus becerros en casa.
{El pueblo de} Bet Semes estaba segando el trigo en el valle, y alzaron sus ojos y al ver el arca, se alegraron al ver{la.}
El carro llegó al campo de Josué el Bet Semita y se detuvo allí donde {había} una gran piedra; y ellos partieron la madera del carro y ofrecieron las vacas en holocausto al SEÑOR.
Los Levitas bajaron el arca del SEÑOR y la caja que estaba con ella, en la cual estaban los objetos de oro, y las colocaron sobre la piedra grande. Entonces los hombres de Bet Semes ofrecieron holocaustos e hicieron sacrificios aquel día al SEÑOR.
Estos son los tumores de oro que los Filisteos entregaron como ofrenda por la culpa al SEÑOR: uno por Asdod, uno por Gaza, uno por Ascalón, uno por Gat y uno por Ecrón;
y ratones de oro {conforme} al número de todas las ciudades de los Filisteos que pertenecían a los cinco príncipes, tanto de ciudades fortificadas como de aldeas sin murallas. La piedra grande sobre la cual colocaron el arca del SEÑOR {es testigo} hasta el día de hoy en el campo de Josué el Bet Semita.
{El Señor} hirió a los hombres de Bet Semes porque habían mirado dentro del arca del SEÑOR. De todo el pueblo hirió a 50,070 hombres, y el pueblo lloró porque el SEÑOR había herido al pueblo con gran mortandad.
Y los hombres de Bet Semes dijeron: `` ¿Quién puede estar delante del SEÑOR, este Dios santo? ¿Y a quién subirá {al alejarse} de nosotros?"
Pero pasó mucho tiempo, veinte años, desde el día en que el arca quedó en Quiriat Jearim; y toda la casa de Israel añoraba al SEÑOR.
Entonces Samuel habló a toda la casa de Israel: ``Si es que ustedes se vuelven al SEÑOR con todo su corazón, entonces quiten de entre ustedes los dioses extranjeros y a Astarot, y dirijan su corazón al SEÑOR, y sírvanle sólo a El; y El los librará de la mano de los Filisteos."
Los Israelitas quitaron a los Baales y a Astarot, y sirvieron sólo al SEÑOR.
Y Samuel dijo: ``Reúnan en Mizpa a todo Israel, y yo oraré al SEÑOR por ustedes."
Entonces los Israelitas dijeron a Samuel: ``No dejes de clamar al SEÑOR nuestro Dios por nosotros, para que El nos libre de la mano de los Filisteos."
Tomó Samuel un cordero de leche y lo ofreció como completo holocausto al SEÑOR; y clamó Samuel al SEÑOR por Israel y el SEÑOR le respondió.
Después volvía a Ramá, pues allí {estaba} su casa, y allí juzgaba a Israel; y edificó allí un altar al SEÑOR.
Pero fue desagradable a los ojos de Samuel que dijeran: ``Danos un rey que nos juzgue." Y Samuel oró al SEÑOR.
Entonces Samuel habló todas las palabras del SEÑOR al pueblo que le había pedido rey.
Cuando llegaron a la tierra de Zuf, Saúl dijo al criado que estaba con él: ``Ven, regresemos, no sea que mi padre deje {de preocuparse} por las asnas y se angustie por nosotros."
Entonces Saúl dijo a su criado: ``Pero, si vamos, ¿qué le llevaremos al hombre? Porque el pan de nuestras alforjas se ha acabado y no hay presente para llevar al hombre de Dios. ¿Qué tenemos?"
Y el criado volvió a responder a Saúl: ``Aquí tengo la cuarta parte de un siclo (unos tres gramos) de plata; se {lo} daré al hombre de Dios, y él nos indicará nuestro camino."
(Antiguamente en Israel, cuando uno iba a consultar a Dios, decía: ``Vengan, vamos al vidente;" porque al que hoy {se le llama} profeta, antes se le llamaba vidente.)
"Cuando entren en la ciudad lo encontrarán antes que suba al lugar alto a comer, pues el pueblo no comerá hasta que él llegue, porque él tiene que bendecir el sacrificio; después comerán los convidados. Suban ahora, que lo encontrarán enseguida."
Ellos, pues, subieron a la ciudad. Cuando entraban a la ciudad, Samuel salía hacia ellos para subir al lugar alto.
Respondió Samuel a Saúl: ``Yo soy el vidente. Sube delante de mí al lugar alto, pues hoy comerás conmigo, y por la mañana te dejaré ir y te declararé todo lo que está en tu corazón.
Y Samuel dijo al cocinero: ``Trae la porción que te di, de la cual te dije: `Ponla aparte.'"
Entonces el cocinero alzó el pernil con lo que estaba en él y {lo} colocó delante de Saúl. Y {Samuel} dijo: ``Esto es lo que estaba reservado. Pon{lo} delante de ti {y} come, porque ha sido guardado para ti hasta el momento señalado, ya que dije: He invitado al pueblo." Y Saúl comió con Samuel aquel día.
Se levantaron temprano, y al romper el alba Samuel llamó a Saúl en el terrado y le dijo: ``Levántate, para que yo te despida." Saúl se levantó, y ambos, Saúl y Samuel, salieron a la calle.
Mientras descendían a las afueras de la ciudad, Samuel dijo a Saúl: ``Dile al criado que pase delante de nosotros y siga, pero tú quédate para que yo te declare la palabra de Dios."
Cuando todos los que lo conocían de antes vieron que ahora profetizaba con los profetas, los del pueblo se decían unos a otros: `` ¿Qué le ha sucedido al hijo de Cis? ¿Está Saúl también entre los profetas?"
Cuando acabó de profetizar vino al lugar alto.
Después Samuel convocó al pueblo delante del SEÑOR en Mizpa;
Volvieron, pues, a consultar al SEÑOR: `` ¿Llegó ya el hombre aquí?" Y el SEÑOR respondió: ``Sí, está escondido junto al equipaje."
Y Samuel dijo a todo el pueblo: `` ¿Ven al que el SEÑOR ha escogido? En verdad que no hay {otro} como él entre todo el pueblo." Entonces todo el pueblo gritó, y dijo: `` ¡Viva el rey!"
Entonces Samuel dio al pueblo las ordenanzas del reino, y {las} escribió en el libro, el cual puso delante del SEÑOR. Y despidió Samuel a todo el pueblo, cada uno a su casa.
El Espíritu de Dios vino con poder sobre Saúl al escuchar estas palabras, y Saúl se enojó grandemente.
A la mañana siguiente, a la vigilia de la mañana (2 a 6 a.m.), Saúl dispuso al pueblo en tres compañías; y entraron en medio del campamento, e hirieron a los Amonitas hasta que calentó el día. Los que quedaron fueron dispersados, no quedando dos de ellos juntos.
Entonces Samuel dijo al pueblo: ``Vengan, vayamos a Gilgal y renovemos el reino allí."
Entonces Samuel dijo al pueblo: ``El SEÑOR es el que designó a Moisés y a Aarón, y el que sacó a sus padres de la tierra de Egipto.
"Cuando Jacob fue a Egipto y sus padres clamaron al SEÑOR, el SEÑOR envió a Moisés y a Aarón, quienes sacaron a sus padres de Egipto y los establecieron en este lugar.
"Pero ellos olvidaron al SEÑOR su Dios, y El los vendió en manos de Sísara, jefe del ejército de Hazor, en manos de los Filisteos y en manos del rey de Moab, los cuales pelearon contra ellos.
"Entonces clamaron al SEÑOR, y dijeron: `Hemos pecado porque hemos dejado al SEÑOR y hemos servido a los Baales y a Astarot; pero ahora, líbranos de la mano de nuestros enemigos, y te serviremos.'
"Si temen al SEÑOR y Le sirven, escuchan Su voz y no se rebelan contra el mandamiento del SEÑOR, entonces ustedes, como el rey que reine sobre ustedes, estarán siguiendo al SEÑOR su Dios.
" ¿No es ahora la siega del trigo? Yo clamaré al SEÑOR, para que mande truenos y lluvia. Entonces conocerán y verán que es grande la maldad que han hecho ante los ojos del SEÑOR, al pedir para ustedes un rey."
Clamó Samuel al SEÑOR, y el SEÑOR envió aquel día truenos y lluvia; y todo el pueblo temió grandemente al SEÑOR y a Samuel.
Entonces todo el pueblo dijo a Samuel: ``Ruega por tus siervos al SEÑOR tu Dios para que no muramos, porque hemos añadido {este} mal a todos nuestros pecados al pedir para nosotros un rey."
Y Samuel dijo al pueblo: ``No teman; aunque ustedes han hecho todo este mal, no se aparten de seguir al SEÑOR, sino sirvan al SEÑOR con todo su corazón.
"Solamente teman al SEÑOR y sírvanle en verdad con todo su corazón; pues han visto cuán grandes cosas ha hecho por ustedes.
Y Saúl escogió para sí 3,000 hombres de Israel, de los cuales 2,000 estaban con Saúl en Micmas y en la región montañosa de Betel (Casa de Dios), y 1,000 estaban con Jonatán en Geba de Benjamín. Y al resto del pueblo lo despidió, cada uno a su tienda.
Y los Filisteos se reunieron para pelear contra Israel: 30,000 carros, 6,000 hombres de a caballo y gente tan numerosa como la arena a la orilla del mar; y subieron y acamparon en Micmas, al oriente de Bet Avén.
El esperó siete días, conforme al tiempo que Samuel había señalado, pero Samuel no llegaba a Gilgal, y el pueblo se le dispersaba.
Y aconteció que un día Jonatán, hijo de Saúl, dijo al joven que llevaba su armadura: ``Ven y pasemos a la guarnición de los Filisteos que está al otro lado." Pero no se lo hizo saber a su padre.
Uno de los peñascos se levantaba al norte, frente a Micmas, y el otro al sur, frente a Geba.
Jonatán dijo al joven que llevaba su armadura: ``Ven y pasemos a la guarnición de estos incircuncisos; quizá el SEÑOR obrará por nosotros, pues el SEÑOR no está limitado a salvar con muchos o con pocos."
Y Saúl dijo al pueblo que {estaba} con él: ``Pasen lista ahora y vean quién ha salido de entre nosotros." Cuando ellos pasaron lista, notaron que Jonatán y su escudero no estaban.
Y sucedió que mientras Saúl hablaba con el sacerdote, el alboroto en el campamento de los Filisteos continuaba y aumentaba. Entonces Saúl dijo al sacerdote: ``Retira tu mano."
Entonces los Hebreos que de antes estaban con los Filisteos {y} que habían subido con ellos de los alrededores al campamento, aun ellos también {se unieron} con los Israelitas que {estaban} con Saúl y Jonatán.
Pero los hombres de Israel estaban en gran aprieto aquel día, porque Saúl había puesto al pueblo bajo juramento, diciendo: ``Maldito sea el hombre que tome alimento antes del anochecer, {antes} que me haya vengado de mis enemigos." Y nadie del pueblo probó alimento.
Y al entrar el pueblo en el bosque, vieron que la miel destilaba, pero nadie se llevó la mano a la boca, porque el pueblo temía el juramento.
Pero Jonatán no había oído cuando su padre puso al pueblo bajo juramento; por lo cual extendió la punta de la vara que {llevaba} en su mano, la metió en un panal de miel y se llevó la mano a la boca, y brillaron sus ojos.
Entonces uno del pueblo {le} dijo: ``Tu padre puso bajo estricto juramento al pueblo y dijo: `Maldito sea el hombre que tome alimento hoy.'" Y el pueblo estaba desfallecido.
Y edificó Saúl un altar al SEÑOR; éste fue el primer altar que él edificó al SEÑOR.
Entonces dijo a todo Israel: ``Ustedes estarán a un lado, y yo y mi hijo Jonatán estaremos al otro lado." Y el pueblo dijo a Saúl: ``Haz lo que bien te parezca."
Saúl entonces dijo al SEÑOR, Dios de Israel: ``Da {suerte} perfecta." Y fueron señalados Jonatán y Saúl, pero el pueblo quedó libre.
Entonces Saúl convocó al pueblo, y los contó en Telaim: 200,000 soldados de a pie, y 10,000 hombres de Judá.
Saúl derrotó a los Amalecitas desde Havila en dirección a Shur, que está al oriente de Egipto.
``Me pesa haber hecho rey a Saúl, porque ha dejado de seguirme y no ha cumplido Mis mandamientos." Y Samuel se conmovió, y clamó al SEÑOR toda la noche.
Y se levantó Samuel muy de mañana para {ir} al encuentro de Saúl; y se le dio aviso a Samuel: Saúl se ha ido a Carmel, donde se ha levantado un monumento para sí, y dando la vuelta, ha seguido adelante bajando a Gilgal.