'Serán' en la Biblia
No derramarán vino al SEÑOR, ni él tomará contentamiento en sus sacrificios; como pan de enlutados les serán a ellos; todos los que coman de él, serán inmundos. Porque su pan por su alma no entrará en la Casa del SEÑOR.
Se apartó su corazón. Ahora serán convencidos; él quebrantará sus altares, asolará sus estatuas.
Por las becerras de Bet-avén serán atemorizados los moradores de Samaria; porque su pueblo lamentará a causa del becerro, y sus sacerdotes que en él se regocijaban por su gloria, la cual será disipada.
Y los altares de Avén serán destruidos, el pecado de Israel; crecerá sobre sus altares espino y cardo. Y dirán a los montes: Cubridnos; y a los collados: Caed sobre nosotros.
Por tanto, en tus pueblos se levantará alboroto, y todas tus fortalezas serán destruidas, como destruyó Salmán a Bet-arbel el día de la batalla; la madre fue arrojada sobre los hijos.
Por tanto, serán como la niebla de la mañana, y como el rocío de la madrugada que se pasa; como el tamo que la tempestad arroja de la era, y como el humo que de la chimenea sale.
Samaria será asolada, porque se rebeló contra su Dios; caerán a cuchillo; sus niños serán estrellados, y sus mujeres encintas serán abiertas.
Volverán los que se sentarán bajo su sombra; serán vivificados como trigo, y florecerán como la vid; su olor, como de vino del Líbano.
Y dijo: El SEÑOR bramará desde Sion, y dará su voz desde Jerusalén; y las estancias de los pastores serán destruidas, y se secará la cumbre del Carmelo.
Por tanto, el Señor DIOS dijo así: Un enemigo vendrá que cercará la tierra, y derribará de ti tu fortaleza, y tus palacios serán saqueados.
Que el día que visitaré las rebeliones de Israel sobre él, visitaré también sobre los altares de Bet-el; y serán cortados los cuernos del altar, y caerán a tierra.
Y heriré la Casa del invierno con la Casa del verano, y las casas de marfil perecerán; y muchas casas serán taladas, dijo el SEÑOR.
y los altares de Isaac serán destruidos, y los santuarios de Israel serán asolados; y me levantaré con espada sobre la casa de Jeroboam.
Y los cantores del templo aullarán en aquel día, dijo el Señor DIOS; los cuerpos muertos serán aumentados en todo lugar echados en silencio.
Pues los plantaré sobre su tierra, y nunca más serán arrancados de su tierra la cual yo les di, dijo el SEÑOR Dios tuyo.
Y tus valientes, oh Temán, serán amedrentados; porque todo hombre será talado del monte de Esaú por el estrago.
De la manera que vosotros bebisteis en mi santo monte, beberán, todos los gentiles de continuo; beberán, y engullirán, y serán como si no hubieran sido.
Y todas sus esculturas serán despedazadas, y todos sus dones serán quemados en fuego, y asolaré todos sus ídolos; porque de dones de rameras se juntó, y a dones de rameras volverán.
Por tanto, tú darás dones a Moreset-gat; las casas de Aczib serán en mentira a los reyes de Israel.
Y serán avergonzados los profetas, y se confundirán los adivinos; y ellos todos cubrirán su labio, porque no tendrán respuesta de Dios.
Tu mano se alzará sobre tus enemigos, y todos tus adversarios serán talados.
Porque como espinas entretejidas, mientras se embriagarán los borrachos, serán consumidos del fuego, como las estopas llenas de sequedad.
Así dijo el SEÑOR: Aunque más reposo tengan, y sean tantos, así serán talados, y él pasará. Bien que te he afligido, no más te afligiré.
Tus príncipes serán como langostas, y tus grandes como langostas de langostas que se sientan en vallados en día de frío; salido el sol se mudan, y no se conoce el lugar donde estuvieron.
Y serán sus caballos más ligeros que tigres, y más agudos que lobos de tarde; y sus jinetes se multiplicarán; vendrán de lejos sus caballeros, y volarán como águilas que se apresuran a la comida.
Porque la higuera no florecerá, ni en las vides habrá fruto; la obra de la oliva mentirá, y los labrados no darán mantenimiento; las ovejas serán taladas de la majada, y en los corrales no habrá vacas;
El remanente de Israel no hará iniquidad, ni dirá mentira, ni en boca de ellos se hallará lengua engañosa; porque ellos serán apacentados y dormirán, y no habrá quien los espante.
Clama aún, diciendo: Así dice el SEÑOR de los ejércitos: Aún serán ensanchadas mis ciudades por la abundancia del bien; y aún consolará el SEÑOR a Sion, y escogerá todavía a Jerusalén.
Porque he aquí yo alzo mi mano sobre ellos, y serán despojo a sus siervos, y sabréis que el SEÑOR de los ejércitos me envió.
Y se unirán muchos gentiles al SEÑOR en aquel día, y me serán por pueblo, y moraré en medio de ti; y entonces conocerás que el SEÑOR de los ejércitos me ha enviado a ti.
Y las calles de la ciudad serán llenas de muchachos y muchachas, que jugarán en ellas.
y los traeré, y habitarán en medio de Jerusalén; y me serán por pueblo, y yo seré a ellos por Dios con verdad y con justicia.
y quitaré su sangre de su boca, y sus abominaciones de sus dientes, y quedarán de ellos también para nuestro Dios, y serán como capitanes en Judá, y Ecrón como el jebuseo.
Y de Efraín talaré los carros, y los caballos de Jerusalén; y los arcos de guerra serán quebrados; y hablará paz a los gentiles; y su Señorío será de mar a mar, y desde el río hasta los fines de la tierra.
Y los salvará en aquel día el SEÑOR su Dios como a rebaño de su pueblo; porque serán engrandecidos en su tierra como piedras preciosas de corona.
Y serán como valientes, que en la batalla pisan al enemigo en el lodo de las calles; y pelearán, porque el SEÑOR será con ellos; y los que cabalgan en caballos serán avergonzados.
Porque yo fortificaré la Casa de Judá, y guardaré la Casa de José; y los haré volver, porque de ellos tendré piedad; y serán como si no los hubiera desechado; porque yo soy el SEÑOR su Dios, que los oiré.
Yo les silbaré y los juntaré, porque yo los he redimido; y serán multiplicados como fueron multiplicados.
Y será en aquel día, que yo pondré a Jerusalén por piedra pesada a todos los pueblos; todos los que se la cargaren serán despedazados, y todos los gentiles de la tierra se juntarán contra ella.
Y acontecerá en toda la tierra, dijo el Señor, que las dos partes serán taladas en ella, y se perderán; y la tercera quedará en ella.
He aquí, el día del SEÑOR viene, y tus despojos serán repartidos en medio de ti.
Porque yo reuniré a todos los gentiles en batalla contra Jerusalén; y la ciudad será tomada, y las casas serán saqueadas, y las mujeres serán forzadas; y la mitad de la ciudad irá en cautiverio, mas el remanente del pueblo no será talado de la ciudad.
Y Judá también peleará contra Jerusalén. Y serán reunidas las riquezas de todos los gentiles de alrededor: oro, y plata, y ropas de vestir, en gran abundancia.
En aquel tiempo estará grabado sobre las campanillas de los caballos: SANTIDAD AL SEÑOR; y las ollas en la casa del SEÑOR serán como los tazones delante del altar.
Y serán míos, dijo el SEÑOR de los ejércitos, en el día que yo tengo de hacer tesoro; y los perdonaré como el hombre que perdona a su hijo que le sirve.
Porque he aquí, viene el día ardiente como un horno; y todos los soberbios, y todos los que hacen maldad, serán estopa; y aquel día que vendrá, los abrasará, dijo el SEÑOR de los ejércitos, el cual no les dejará ni raíz ni rama.
Y hollaréis a los malos, los cuales serán ceniza bajo las plantas de vuestros pies, en el día que yo hago, dijo el SEÑOR de los ejércitos.
Bienaventurados los que tienen hambre y sed de justicia (o rectitud) , porque ellos serán saciados.
Bienaventurados los pacificadores; porque ellos serán llamados hijos de Dios.
Y orando, no seáis prolijos, como los mundanos que piensan que por su palabrería serán oídos.
mas si tu ojo fuere malo, todo tu cuerpo será tenebroso. Así que, si la lumbre que hay en ti son tinieblas, ¡cuántas serán las mismas tinieblas!
Mas buscad primeramente el Reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas.
mas los hijos del Reino serán echados en las tinieblas de afuera; allí será el lloro y el crujir de dientes.
Y los enemigos del hombre serán los de su casa.
Y si yo por Beelzebú echo fuera los demonios, ¿vuestros hijos por quién los echan? Por tanto, ellos serán vuestros jueces.
Y dijo: Por tanto, el hombre dejará padre y madre, y se unirá a su mujer, y serán dos en una carne.
Mas muchos primeros serán postreros, y postreros primeros.
Así los primeros serán postreros, y los postreros primeros; porque muchos son llamados, mas pocos escogidos.
Y sentándose él en el Monte de las Olivas, se llegaron a él los discípulos aparte, diciendo: Dinos, ¿cuándo serán estas cosas, y qué señal habrá de tu venida, y del fin del siglo?
Muchos entonces serán escandalizados; y se entregarán unos a otros, y unos a otros se aborrecerán.
Y si aquellos días no fuesen acortados, ninguna carne sería salva; mas por causa de los escogidos, aquellos días serán acortados.
Y luego, después de la tribulación de aquellos días, el sol se obscurecerá, y la luna no dará su lumbre, y las estrellas caerán del cielo, y las virtudes de los cielos serán conmovidas.
Y serán reunidas delante de él todas las naciones; y los apartará los unos de los otros, como aparta el pastor las ovejas de los cabritos.
Entonces Jesús les dice: Todos vosotros seréis escandalizados en mí esta noche; porque escrito está: Heriré al Pastor, y las ovejas de la manada serán dispersas.
De cierto os digo que todos los pecados serán perdonados a los hijos de los hombres, y las blasfemias cualesquiera con que blasfemaren;
Y los que eran dos, serán hechos una carne; así que no son más dos, sino una carne.
Pero muchos primeros serán postreros, y postreros, primeros.
Dinos, ¿cuándo serán estas cosas? ¿Y qué señal habrá cuando todas las cosas han de ser acabadas?
Porque gente se levantará contra gente, y reino contra reino; y habrá terremotos en cada lugar, y habrá hambres y alborotos; principios de dolores serán éstos.
Porque aquellos días serán de aflicción, cual nunca fue desde el principio de la creación de las cosas que creó Dios, hasta este tiempo, ni será.
Y las estrellas caerán del cielo, y las virtudes que están en los cielos serán conmovidas;
Jesús entonces les dice: Todos seréis escandalizados en mí esta noche; porque escrito está: Heriré al pastor, y serán derramadas las ovejas.
Todo valle se rellenará, y se bajará todo monte y collado; y los caminos torcidos serán enderezados, y los caminos ásperos allanados;
pues si tú adorares delante de mí, serán todos tuyos.
Pues si yo echo fuera los demonios en Beelzebú, ¿vuestros hijos en quién los echan fuera? Por tanto, ellos serán vuestros jueces.
Por tanto, las cosas que dijisteis en tinieblas, a la luz serán oídas; y lo que hablasteis al oído en los aposentos, será pregonado en los tejados.
Mas procurad el Reino de Dios, y todas estas cosas os serán añadidas.
Y he aquí, hay postreros que serán primeros, y hay primeros que serán postreros.
Y Jesús, tomando aparte a los doce, les dijo: He aquí subimos a Jerusalén, y serán cumplidas todas las cosas que fueron escritas por los profetas, del Hijo del hombre.
Y caerán a filo de espada, y serán llevados cautivos a todas las naciones; y Jerusalén será hollada de los gentiles, hasta que los tiempos de los gentiles sean cumplidos.
desfalleciendo los hombres a causa del temor y expectación de las cosas que sobrevendrán a la redondez de la tierra; porque las virtudes de los cielos serán conmovidas.
Escrito está en los profetas: Y serán todos enseñados de Dios. Así que, todo aquel que oyó del Padre, y aprendió, viene a mí.
A los que soltaréis los pecados, les son sueltos; a los que los retuviereis, serán retenidos.
Vosotros sois los hijos de los profetas, y del Pacto que Dios concertó con nuestros padres, diciendo a Abraham: Y en tu Simiente serán benditas todas las familias de la tierra.
Mas yo juzgaré, dijo Dios, los gentiles a los cuales serán siervos; y después de esto saldrán y me servirán en este lugar.
Porque todos los que sin ley pecaron, sin ley también perecerán; y todos los que en la ley pecaron, por la ley serán juzgados;
porque no los oidores de la ley son justos para con Dios, sino los hacedores de la ley serán justificados.
Porque como por la desobediencia de un hombre muchos fueron hechos pecadores, así por la obediencia de uno, muchos serán hechos justos.
con esperanza que también las mismas criaturas serán libradas de la servidumbre de corrupción en la libertad gloriosa de los hijos de Dios.
Y será, que en el lugar donde les fue dicho: Vosotros no sois pueblo mío; allí serán llamados hijos del Dios viviente.
Y si el primer fruto es santo, también lo será el todo, y si la raíz es santa, también lo serán las ramas.
Y aun ellos, si no permanecieren en incredulidad, serán injertados; que poderoso es Dios para volverlos a injertar.
Porque si tú eres cortado de la oliva que es silvestre por naturaleza, y contra natura fuiste injertado en la buena oliva, ¿cuánto más éstos, que son las ramas naturales, serán injertados en su oliva?
¿O no sabéis que el que se junta con la ramera, es hecho con ella un cuerpo? Porque serán, dice, los dos (en) una carne.
Porque de la manera que en Adán todos mueren, así también en el Cristo todos serán vivificados.
En un momento, en un abrir de ojo, a la final trompeta; porque será tocada la trompeta, y los muertos serán levantados sin corrupción; mas nosotros seremos transformados.
¿Y qué consentimiento el templo de Dios con los ídolos? Porque vosotros sois el templo del Dios Viviente, como Dios dijo: Habitaré y andaré en ellos; y seré el Dios de ellos, y ellos serán mi pueblo.
Y viendo antes la Escritura que Dios por la fe había de justificar a los gentiles, evangelizó antes a Abraham, diciendo : Que todos los gentiles de la tierra serán benditos en ti.
Por esto dejará el hombre al padre y a la madre, y se allegará a su mujer, y serán dos en una carne.
los cuales serán castigados de eterna perdición por la presencia del Señor, y por la gloria de su potencia,