'Su' en la Biblia
nos predestinó para adopción como hijos para sí mediante Jesucristo, conforme al beneplácito de su voluntad,
para alabanza de la gloria de su gracia que gratuitamente ha impartido sobre nosotros en el Amado.
En El tenemos redención mediante su sangre, el perdón de nuestros pecados según las riquezas de su gracia
nos dio a conocer el misterio de su voluntad, según el beneplácito que se propuso en El,
también hemos obtenido herencia, habiendo sido predestinados según el propósito de aquel que obra todas las cosas conforme al consejo de su voluntad,
a fin de que nosotros, que fuimos los primeros en esperar en Cristo, seamos para alabanza de su gloria.
que nos es dado como garantía de nuestra herencia, con miras a la redención de la posesión {adquirida de Dios}, para alabanza de su gloria.
{Mi oración es que} los ojos de vuestro corazón sean iluminados, para que sepáis cuál es la esperanza de su llamamiento, cuáles son las riquezas de la gloria de su herencia en los santos,
y cuál es la extraordinaria grandeza de su poder para con nosotros los que creemos, conforme a la eficacia de la fuerza de su poder,
el cual obró en Cristo cuando le resucitó de entre los muertos y le sentó a su diestra en los {lugares} celestiales,
la cual es su cuerpo, la plenitud de aquel que lo llena todo en todo.
a fin de poder mostrar en los siglos venideros las sobreabundantes riquezas de su gracia por {su} bondad para con nosotros en Cristo Jesús.
aboliendo en su carne la enemistad, la ley de {los} mandamientos {expresados} en ordenanzas, para crear en sí mismo de los dos un nuevo hombre, estableciendo {así} la paz,
del cual fui hecho ministro, conforme al don de la gracia de Dios que se me ha concedido según la eficacia de su poder.
que os conceda, conforme a las riquezas de su gloria, ser fortalecidos con poder por su Espíritu en el hombre interior;
de quien todo el cuerpo (estando bien ajustado y unido por la cohesión que las coyunturas proveen), conforme al funcionamiento adecuado de cada miembro, produce el crecimiento del cuerpo para su propia edificación en amor.
Esto digo, pues, y afirmo juntamente con el Señor: que ya no andéis así como andan también los gentiles, en la vanidad de su mente,
entenebrecidos en su entendimiento, excluidos de la vida de Dios por causa de la ignorancia que hay en ellos, por la dureza de su corazón;
Por tanto, dejando a un lado la falsedad, HABLAD VERDAD CADA CUAL CON SU PROJIMO, porque somos miembros los unos de los otros.
a fin de presentársela a sí mismo, una iglesia en toda su gloria, sin que tenga mancha ni arruga ni cosa semejante, sino que fuera santa e inmaculada.
Así también deben amar los maridos a sus mujeres, como a sus propios cuerpos. El que ama a su mujer, a sí mismo se ama.
Porque nadie aborreció jamás su propio cuerpo, sino que lo sustenta y lo cuida, así como también Cristo a la iglesia;
POR ESTO EL HOMBRE DEJARA A SU PADRE Y A SU MADRE, Y SE UNIRA A SU MUJER, Y LOS DOS SERAN UNA SOLA CARNE.
En todo caso, cada uno de vosotros ame también a su mujer como a sí mismo, y que la mujer respete a su marido.
Por lo demás, fortaleceos en el Señor y en el poder de su fuerza.
Resultados de Búsqueda por Versiones
Resultados de Búsqueda por Libro
Artículos Relacionados
- Conocer la voluntad de Dios
- Cuerpo de Cristo
- Fuerza espiritual,
- Gracia, Descripción de
- La generosidad de Dios,
- La unidad, del pueblo de Dios
- Los miembros del Cuerpo de Cristo
- Amar a vuestra esposa
- Conocer el reino de Dios
- El amor del matrimonio
- El amor incondicional
- El amor y la fortaleza
- El empoderamiento
- El marido y la mujer
- El poder de Cristo
- Expresar sus alabanzas
- La eficiencia
- La fe y la fortaleza
- La fortaleza y el amor
- La fortaleza y la fe
- La gracia de Dios
- La herencia
- La misericordia y la gracia
- La redención