'Su' en la Biblia
- 1.Gé 1:11-Gé 18:19
- 2.Gé 18:21-Gé 27:22
- 3.Gé 27:26-Gé 36:43
- 4.Gé 37:1-Gé 46:1
- 5.Gé 46:4-Éx 12:22
- 6.Éx 12:29-Éx 28:21
- 7.Éx 28:26-Levítico 4:23
- 8.Levítico 4:24-Levítico 14:23
- 9.Levítico 14:25-Levítico 22:25
- 10.Levítico 22:27-Números 6:17
- 11.Números 6:18-Números 23:17
- 12.Números 23:18-Deuteronomio 4:13
- 13.Deuteronomio 4:20-Deuteronomio 24:12
- 14.Deuteronomio 24:13-Josué 13:27
- 15.Josué 14:2-Jueces 9:49
- 16.Jueces 9:54-Rut 2:19
- 17.Rut 2:20-1 Samuel 17:5
- 18.1 Samuel 17:7-1 Samuel 30:6
- 19.1 Samuel 30:12-2 Samuel 14:25
- 20.2 Samuel 14:26-1 Reyes 7:26
- 21.1 Reyes 7:31-1 Reyes 17:15
- 22.1 Reyes 17:19-2 Reyes 9:11
- 23.2 Reyes 9:13-2 Reyes 21:18
- 24.2 Reyes 21:19-1 Crónicas 9:1
- 25.1 Crónicas 9:19-1 Crónicas 27:11
- 26.1 Crónicas 27:12-2 Crónicas 20:25
- 27.2 Crónicas 20:30-2 Crónicas 33:25
- 28.2 Crónicas 34:2-Nehemías 11:20
- 29.Nehemías 12:24-Job 8:16
- 30.Job 8:18-Job 28:1
- 31.Job 28:9-Job 41:33
- 32.Job 42:8-Salmos 35:25
- 33.Salmos 35:27-Salmos 78:4
- 34.Salmos 78:7-Salmos 105:1
- 35.Salmos 105:3-Salmos 123:2
- 36.Salmos 124:3-Proverbios 7:13
- 37.Proverbios 7:20-Proverbios 20:7
- 38.Proverbios 20:8-Eclesiastés 1:6
- 39.Eclesiastés 2:3-Isaías 8:19
- 40.Isaías 8:21-Isaías 30:2
- 41.Isaías 30:7-Isaías 51:11
- 42.Isaías 51:14-Jeremías 7:24
- 43.Jeremías 7:26-Jeremías 27:12
- 44.Jeremías 28:11-Jeremías 50:16
- 45.Jeremías 50:18-Ezequiel 4:5
- 46.Ezequiel 4:13-Ezequiel 24:25
- 47.Ezequiel 25:9-Ezequiel 44:20
- 48.Ezequiel 44:26-Daniel 10:6
- 49.Daniel 11:3-Joel 2:19
- 50.Joel 2:20-Sofonías 1:12
- 51.Sofonías 1:13-Mateo 2:20
- 52.Mateo 2:21-Mateo 20:28
- 53.Mateo 21:37-Marcos 12:37
- 54.Marcos 12:38-Lucas 9:31
- 55.Lucas 9:32-Juan 7:38
- 56.Juan 7:53-Hechos 14:8
- 57.Hechos 15:14-1 Corintios 14:37
- 58.1 Corintios 15:10-Tito 1:15
- 59.Tito 3:4-1 Juan 4:20
- 60.1 Juan 4:21-Apocalipsis 21:3
- 61.Apocalipsis 21:7-Apocalipsis 22:19
mas no me oyeron ni inclinaron su oído; antes endurecieron su cerviz, e hicieron peor que sus padres.
Les dirás por tanto: Esta es la gente que no escuchó la voz del SEÑOR su Dios, ni tomó castigo; se perdió la fe, y de la boca de ellos fue cortada.
Trasquila tu cabello, y arrójalo, y levanta llanto sobre las alturas; porque el SEÑOR arrojó y dejó la nación de su furor.
Escuché y oí; no hablan derecho, no hay hombre que se arrepienta de su mal, diciendo: ¿Qué he hecho? Cada cual se volvió a su carrera, como caballo que arremete con ímpetu a la batalla.
Aun la cigüeña en el cielo conoce su tiempo, y la tórtola y la grulla y la golondrina guardan el tiempo de su venida; mas mi pueblo no conoció el juicio del SEÑOR.
Desde Dan se oyó el bufido de sus caballos; del sonido de los relinchos de sus fuertes tembló toda la tierra; y vinieron y devoraron la tierra y su abundancia, ciudad y moradores de ella.
He aquí voz del clamor de la hija de mi pueblo, que viene de la tierra lejana: ¿No está el SEÑOR en Sion? ¿No está en ella su Rey? ¿Por qué me hicieron airar con sus imágenes de talla, con vanidades de dios ajeno?
E hicieron que su lengua, como su arco, tirase mentira; y no se fortalecieron por verdad en la tierra; porque de mal en mal procedieron, y me han desconocido, dijo el SEÑOR.
Guárdese cada uno de su compañero, ni en ningún hermano tenga confianza; porque todo hermano engaña con falacia, y todo compañero anda con falsedad.
Y cada uno engaña a su compañero, y no hablan verdad; enseñaron su lengua a hablar mentira, se ocupan de hacer perversamente.
Saeta afilada es la lengua de ellos; engaño habla; con su boca habla paz con su amigo, y dentro de sí pone sus asechanzas.
antes se fueron tras la imaginación de su corazón, y en pos de los baales que les enseñaron sus padres;
Oíd, pues, oh mujeres, palabra del SEÑOR, y vuestro oído reciba la palabra de su boca; y enseñad endechas a vuestras hijas, y cada una a su amiga, lamentación.
Así dijo el SEÑOR: No se alabe el sabio en su sabiduría, ni se alabe el valiente en su valentía, ni el rico se alabe en sus riquezas.
Mas el SEÑOR Dios es la Verdad; él mismo es Dios Vivo y Rey Eterno; de su ira tiembla la tierra, y los gentiles no pueden sufrir su furor.
El que hace la tierra con su potencia, el que pone en orden el mundo con su saber, y extiende los cielos con su prudencia;
a su voz se da muchedumbre de aguas en el cielo, y hace subir las nubes de lo postrero de la tierra; hace los relámpagos con la lluvia, y hace salir el viento de sus escondederos.
Todo hombre es carnal en su ciencia. Avergüéncese de su vaciadizo todo fundidor, porque mentira es su obra de fundición, ni hay espíritu en ellos;
vanidad son, obra de escarnios; en el tiempo de su visitación perecerán.
No es como ellos la suerte de Jacob; porque él es el Hacedor de todo, e Israel es la vara de su herencia; el SEÑOR de los ejércitos es su Nombre.
Porque los pastores se enloquecieron, y no buscaron al SEÑOR; por tanto, no entendieron, y todo su ganado se esparció.
Conozco, oh SEÑOR, que el hombre no es señor de su propio camino, ni del hombre que camina es el ordenar sus pasos.
Derrama tu enojo sobre los gentiles que no te conocen, y sobre las naciones que no invocan tu Nombre; porque se comieron a Jacob, y lo devoraron, y le han consumido, y su morada destruyeron.
Mas no oyeron, ni inclinaron su oído, antes se fueron cada uno tras la imaginación de su corazón malvado; por tanto, traeré sobre ellos todas las palabras de este Pacto, el cual mandé que cumpliesen, y no lo cumplieron.
E irán las ciudades de Judá y los moradores de Jerusalén, y clamarán a los dioses a quienes queman ellos inciensos, los cuales no los podrán salvar en el tiempo de su mal.
Tú, pues, no ores por este pueblo, ni levantes por ellos clamor ni oración; porque yo no oiré el día que clamaren a mí en su aflicción.
Y yo como carnero o buey que llevan a degollar, pues no entendía que maquinaban contra mí designios, diciendo : Destruyamos el árbol con su fruto, y cortémoslo de la tierra de los vivientes, y no haya más memoria de su nombre.
y no quedará remanente de ellos; porque yo traeré mal sobre los varones de Anatot, año de su visitación.
Fue para mí mi heredad como león en breña; contra mí dio su voz; por tanto la aborrecí.
Así dijo el SEÑOR contra todos mis malos vecinos, que tocan la heredad que hice heredar a mi pueblo Israel: He aquí que yo los arrancaré de su tierra, y arrancaré de en medio de ellos la casa de Judá.
Y será que, después que los hubiere arrancado, tornaré y tendré misericordia de ellos, y los haré volver cada uno a su heredad, y cada cual a su tierra.
A este pueblo malo, que no quiere oír mis palabras, que anda en las imaginaciones de su corazón, y se fue en pos de dioses ajenos para servirles, y para encorvarse a ellos; y vendrá a ser como este cinto, que para ninguna cosa es bueno.
Entonces les has de decir: Así dijo el SEÑOR: He aquí que yo lleno de embriaguez a todos los moradores de esta tierra, y a los reyes que están sentados por David sobre su trono, y a los sacerdotes y los profetas, y todos a los moradores de Jerusalén;
¿Por ventura mudará el negro su pellejo, y el leopardo sus manchas? Así tampoco, podréis vosotros hacer bien, estando enseñados a hacer mal.
Así dijo el SEÑOR a este pueblo: Así amaron moverse, ni detuvieron sus pies; por tanto, el SEÑOR no los tiene en su voluntad; ahora se acordará de la maldad de ellos, y visitará su pecado.
Cuando ayunaren, yo no oiré su clamor, y cuando ofrecieren holocausto y ofrenda, no lo aceptaré; antes los consumiré con cuchillo, y con hambre, y con pestilencia.
Me dijo entonces el SEÑOR: En falso profetizan los profetas en mi nombre; no los envié, ni les mandé, ni les hablé; visión mentirosa, y adivinación, y vanidad, y engaño de su corazón os profetizan.
Y el pueblo a quien profetizan, echado será en las calles de Jerusalén por hambre y por espada; y no habrá quien los entierre, ellos, y sus mujeres, y sus hijos, y sus hijas; y sobre ellos derramaré su maldad.
Se enflaqueció la que dio a luz siete; se llenó de dolor su alma; su sol se le puso siendo aún de día; se avergonzó y se llenó de confusión; y lo que de ella quedare, lo entregaré a cuchillo delante de sus enemigos, dijo el SEÑOR.
ni por ellos partirán pan por luto, para consolarlos de su muerte; ni les darán a beber vaso de consolaciones por su padre o por su madre.
y vosotros habéis hecho peor que vuestros padres; porque he aquí que vosotros camináis cada uno tras la imaginación de su malvado corazón, no oyéndome a mí.
sino: Vive el SEÑOR, que hizo subir a los hijos de Israel de la tierra del aquilón, y de todas las tierras adonde los había arrojado; y los volveré a su tierra, la cual di a sus padres.
Porque mis ojos están puestos sobre todos sus caminos, los cuales no se me ocultaron, ni su maldad se esconde de la presencia de mis ojos.
Mas primero pagaré al doble su iniquidad y su pecado; porque contaminaron mi tierra con los cuerpos muertos de sus abominaciones, y de sus abominaciones llenaron mi heredad.
El pecado de Judá escrito está con cincel de hierro, y con punta de diamante; esculpido está en la tabla de su corazón, y en los cuernos de vuestros altares;
Así dijo el SEÑOR: Maldito el varón que confía en el hombre, y pone carne por su brazo, y su corazón se aparta del SEÑOR.
Porque él será como el árbol plantado junto a las aguas, que junto a la corriente echará sus raíces, y no verá cuando viniere el calor, y su hoja será verde; y en el año de sequía no se fatigará, ni dejará de hacer fruto.
Yo soy el SEÑOR, que escudriño el corazón, que pruebo los riñones, para dar a cada uno según su camino, según el fruto de sus obras.
Como la perdiz que hurta lo que no parió, es el que allega riquezas, y no con justicia; en medio de sus días las dejará, y en su postrimería será incipiente.
los cuales no oyeron, ni inclinaron su oído, antes endurecieron su cerviz, para no oír, ni recibir corrección.
Pero si esos gentiles se convirtieren de su maldad, contra el cual mal yo hablé, yo me arrepentiré del mal que había pensado hacerles.
Ahora, pues, habla ahora a todo hombre de Judá, y a los moradores de Jerusalén, diciendo: Así dijo el SEÑOR: He aquí que yo dispongo mal contra vosotros, y trazo contra vosotros designios; conviértase ahora cada uno de su mal camino, y mejorad vuestros caminos y vuestras obras.
Y dijeron: Es por demás: porque en pos de nuestras imaginaciones hemos de ir, y hemos de hacer cada uno el pensamiento de su malvado corazón.
para poner su tierra en desolación, y en silbos perpetuos; todo aquel que pasare por ella se maravillará, y meneará su cabeza.
Como viento solano los esparciré delante del enemigo; les mostraré las espaldas, y no el rostro, en el día de su perdición.
Mas tú, oh SEÑOR, conoces todo su consejo contra mí que es para muerte; no perdones su maldad, ni borres su pecado de delante de tu rostro, y tropiecen delante de ti; haz así con ellos en el tiempo de tu furor.
Y les haré comer la carne de sus hijos y la carne de sus hijas; y cada uno comerá la carne de su amigo, en el cerco y en el apuro con que los estrecharán sus enemigos y los que buscan sus almas.
Así dijo el SEÑOR de los ejércitos, Dios de Israel: He aquí yo traigo sobre esta ciudad y sobre todas sus villas todo el mal que hablé contra ella; porque han endurecido su cerviz, para no oír mis palabras.
Y daré toda la sustancia de esta ciudad, y todo su trabajo, y todas sus cosas preciosas; y todos los tesoros de los reyes de Judá daré en manos de sus enemigos, y los saquearán, y los tomarán, y los llevarán a Babilonia.
Y dije: No me acordaré más de él, ni hablaré más en su nombre. Pero, fue en mi corazón como un fuego ardiente y metido en mis huesos; trabajé por sufrirlo, y no pude.
porque no me mató en el vientre, y mi madre hubiera sido mi sepulcro, y su vientre concebimiento perpetuo.
El que se quedare en esta ciudad, morirá a cuchillo, o de hambre, o pestilencia; mas el que saliere, y se pasare a los caldeos que os tienen cercados, vivirá, y su alma le será por despojo.
Yo os visitaré conforme al fruto de vuestras obras, dijo el SEÑOR, y haré encender fuego en su breña, y consumirá todo lo que está alrededor de ella.
Porque si efectivamente obedeciereis esta palabra, entrarán por las puertas de esta Casa los reyes sentados por David sobre su trono, montados en carros y en caballos, él, y sus criados, y su pueblo.
Y muchos gentiles pasarán junto a esta ciudad, y dirán cada uno a su compañero: ¿Por qué lo hizo así el SEÑOR con esta gran ciudad?
Y dirán: Porque dejaron el Pacto del SEÑOR su Dios, y adoraron dioses ajenos, y les sirvieron.
Porque así dijo el SEÑOR, de Salum hijo de Josías, rey de Judá, que reina por Josías su padre: El que saliere de este lugar, no volverá acá más;
¡Ay del que edifica su casa y no en justicia, y sus salas y no en juicio, sirviéndose de su prójimo de balde, y no dándole el salario de su trabajo!
Por tanto, así dijo el SEÑOR, de Joacim hijo de Josías, rey de Judá: No lo llorarán, diciendo : ¡Ay, hermano mío! Y ¡ay, hermana! Ni lo lamentarán, diciendo: ¡Ay, señor! ¡Ay, su grandeza!
Y a la tierra a la cual levantan ellos su alma para tornar, allá no volverán.
¿Por ventura es este hombre Conías un ídolo vil, quebrado? ¿Es vaso con quien nadie se deleita? ¿Por qué fueron arrojados, él y su generación; fueron echados a tierra que no conocieron?
Así dijo el SEÑOR: Escribid que será este varón privado de generación, hombre a quien nada sucederá prósperamente en todos los días de su vida; porque ningún hombre de su simiente que se sentare sobre el trono de David, y que se enseñoreare sobre Judá, será jamás dichoso.
En sus días será salvo Judá, e Israel habitará confiado; y éste será su nombre que le llamarán: SEÑOR, JUSTICIA NUESTRA.
sino: Vive el SEÑOR que hizo subir y trajo la simiente de la Casa de Israel de tierra del aquilón, y de todas las tierras adonde los eché; y habitarán en su tierra.
A causa de los profetas mi corazón está quebrantado en medio de mí, todos mis huesos tiemblan; estuve como hombre borracho, y como hombre a quien dominó el vino, delante del SEÑOR, y delante de las palabras de su Santidad.
Porque la tierra está llena de adúlteros; porque a causa del juramento la tierra está desierta; las cabañas del desierto se secaron; la carrera de ellos fue mala, y su fortaleza no derecha.
Porque así el profeta como el sacerdote son fingidos: aun en mi Casa hallé su maldad, dijo el SEÑOR.
Por tanto, como resbaladeros en oscuridad les será su camino; serán empujados, y caerán en él; porque yo traeré mal sobre ellos, año de su visitación, dice el SEÑOR.
Y en los profetas de Jerusalén vi torpezas; cometían adulterios, y andaban por mentira, y esforzaban las manos de los malos, para que ninguno se convirtiese de su malicia; me fueron todos ellos como los moradores de Sodoma, y sus moradores como Gomorra.
Así dijo el SEÑOR de los ejércitos: No escuchéis las palabras de los profetas que os profetizan; os hacen desvanecer; hablan visión de su corazón, no de la boca del SEÑOR.
Dicen atrevidamente a los que me aíran: El SEÑOR dijo: Paz tendréis; y a cualquiera que anda tras la imaginación de su corazón, dijeron: No vendrá mal sobre vosotros.
Porque ¿quién estuvo en el secreto del SEÑOR, y vio, y oyó su palabra? ¿Quién estuvo atento a su palabra, y oyó?
No se apartará el furor del SEÑOR, hasta tanto que haya hecho, y hasta tanto que haya cumplido los pensamientos de su corazón; en lo postrero de los días lo entenderéis con entendimiento.
Y si ellos hubieran estado en mi secreto, también hubieran hecho oír mis palabras a mi pueblo; y les hubieran hecho volver de su mal camino, y de la maldad de sus obras.
¿Hasta cuándo será esto en el corazón de los profetas que profetizan mentira, y que profetizan el engaño de su corazón?
¿No piensan cómo hacen a mi pueblo olvidarse de mi Nombre con sus sueños que cada uno cuenta a su compañero, tanto que sus padres se olvidaron de mi nombre por Baal?
Por tanto, he aquí yo estoy contra los profetas, dice el SEÑOR, que hurtan mis palabras cada uno de su más cercano.
Y el profeta, y el sacerdote, y el pueblo, que dijere: Carga del SEÑOR; yo visitaré sobre tal hombre y sobre su casa.
Así diréis cada cual a su compañero, y cada cual a su hermano: ¿Qué respondió el SEÑOR, y qué habló el SEÑOR?
Y les daré corazón para que me conozcan, que yo soy el SEÑOR, y me serán por pueblo, y yo les seré a ellos por Dios; porque se volverán a mí de todo su corazón.
Y será que, cuando fueren cumplidos los setenta años, visitaré sobre el rey de Babilonia y sobre aquella gente su maldad, dijo el SEÑOR, y sobre la tierra de los caldeos; y yo la pondré en desiertos para siempre.
a Faraón rey de Egipto, y a sus siervos, a sus príncipes, y a todo su pueblo;
Tú, pues, profetizarás a ellos todas estas palabras, y les dirás: El SEÑOR bramará como león desde lo alto, y desde la morada de su Santidad dará su voz; enfurecido bramará sobre su morada; canción de lagareros cantará contra todos los moradores de la tierra.
Desamparó como leoncillo su morada; porque la tierra de ellos fue asolada por la ira del opresor, y por el enojo de su furor.
Por ventura oirán, y se tornarán cada uno de su mal camino; y me arrepentiré yo del mal que pienso hacerles por la maldad de sus obras.
los cuales sacaron a Urías de Egipto, y lo trajeron al rey Joacim, y lo hirió a cuchillo, y echó su cuerpo en los sepulcros del vulgo.
Y todos los gentiles le servirán a él, y a su hijo, y al hijo de su hijo, hasta que venga también el tiempo de su misma tierra; y le servirán muchas naciones y reyes grandes.
Y será, que la gente y el reino que no sirviere a Nabucodonosor rey de Babilonia, y que no pusiere su cuello debajo del yugo del rey de Babilonia, con espada y con hambre y con pestilencia visitaré a tal gente, dice el SEÑOR, hasta que yo los acabe de poner a todos bajo su mano.
Mas la gente que sometiere su cuello al yugo del rey de Babilonia, y le sirviere, la haré dejar en su tierra, dijo el SEÑOR, y la labrará, y morará en ella.
Y hablé también a Sedequías rey de Judá conforme a todas estas palabras, diciendo: Someted vuestros cuellos al yugo del rey de Babilonia, y servidle a él y a su pueblo, y vivid.
Resutados de la Búsqueda continuados...
- 1.Gé 1:11-Gé 18:19
- 2.Gé 18:21-Gé 27:22
- 3.Gé 27:26-Gé 36:43
- 4.Gé 37:1-Gé 46:1
- 5.Gé 46:4-Éx 12:22
- 6.Éx 12:29-Éx 28:21
- 7.Éx 28:26-Levítico 4:23
- 8.Levítico 4:24-Levítico 14:23
- 9.Levítico 14:25-Levítico 22:25
- 10.Levítico 22:27-Números 6:17
- 11.Números 6:18-Números 23:17
- 12.Números 23:18-Deuteronomio 4:13
- 13.Deuteronomio 4:20-Deuteronomio 24:12
- 14.Deuteronomio 24:13-Josué 13:27
- 15.Josué 14:2-Jueces 9:49
- 16.Jueces 9:54-Rut 2:19
- 17.Rut 2:20-1 Samuel 17:5
- 18.1 Samuel 17:7-1 Samuel 30:6
- 19.1 Samuel 30:12-2 Samuel 14:25
- 20.2 Samuel 14:26-1 Reyes 7:26
- 21.1 Reyes 7:31-1 Reyes 17:15
- 22.1 Reyes 17:19-2 Reyes 9:11
- 23.2 Reyes 9:13-2 Reyes 21:18
- 24.2 Reyes 21:19-1 Crónicas 9:1
- 25.1 Crónicas 9:19-1 Crónicas 27:11
- 26.1 Crónicas 27:12-2 Crónicas 20:25
- 27.2 Crónicas 20:30-2 Crónicas 33:25
- 28.2 Crónicas 34:2-Nehemías 11:20
- 29.Nehemías 12:24-Job 8:16
- 30.Job 8:18-Job 28:1
- 31.Job 28:9-Job 41:33
- 32.Job 42:8-Salmos 35:25
- 33.Salmos 35:27-Salmos 78:4
- 34.Salmos 78:7-Salmos 105:1
- 35.Salmos 105:3-Salmos 123:2
- 36.Salmos 124:3-Proverbios 7:13
- 37.Proverbios 7:20-Proverbios 20:7
- 38.Proverbios 20:8-Eclesiastés 1:6
- 39.Eclesiastés 2:3-Isaías 8:19
- 40.Isaías 8:21-Isaías 30:2
- 41.Isaías 30:7-Isaías 51:11
- 42.Isaías 51:14-Jeremías 7:24
- 43.Jeremías 7:26-Jeremías 27:12
- 44.Jeremías 28:11-Jeremías 50:16
- 45.Jeremías 50:18-Ezequiel 4:5
- 46.Ezequiel 4:13-Ezequiel 24:25
- 47.Ezequiel 25:9-Ezequiel 44:20
- 48.Ezequiel 44:26-Daniel 10:6
- 49.Daniel 11:3-Joel 2:19
- 50.Joel 2:20-Sofonías 1:12
- 51.Sofonías 1:13-Mateo 2:20
- 52.Mateo 2:21-Mateo 20:28
- 53.Mateo 21:37-Marcos 12:37
- 54.Marcos 12:38-Lucas 9:31
- 55.Lucas 9:32-Juan 7:38
- 56.Juan 7:53-Hechos 14:8
- 57.Hechos 15:14-1 Corintios 14:37
- 58.1 Corintios 15:10-Tito 1:15
- 59.Tito 3:4-1 Juan 4:20
- 60.1 Juan 4:21-Apocalipsis 21:3
- 61.Apocalipsis 21:7-Apocalipsis 22:19
Resultados de Búsqueda por Versiones
Resultados de Búsqueda por Libro
Artículos Relacionados
- Aceite en sacrificios
- Alabanza
- Arqueamiento
- Boca
- Casas
- Conocer la voluntad de Dios
- Corazón Humano
- Corazón, caído y redimido
- Cristo, nombres para
- Cuerpo
- Dios conoce todo
- Dios matando
- Discapacidad
- Edad cuando Coronado
- El Sol
- El matrimonio, las costumbres referentes a
- El pecado, y el carácter de Dios
- Expiación
- Falsa confianza
- Hijos primogénitos
- La voz de Dios
- Labios
- Las madres de los Reyes
- Las personas yendo a casa
- Lengua
- Locura, Efectos de
- Los gestos
- Los jefes
- Los padres, las responsabilidades de
- Mano de Dios
- Nombres y Títulos Para Cristo
- Oro
- Palabra de Dios
- Pelos
- Profecías mesiánicas
- Rostro de Dios
- Tiendas
- Trono
- Aquellos que serán cortados de Israel
- Dejar a los padres por un cónyuge
- Disfrutar la vida
- El amor de una madre por sus hijos
- El marido y la mujer
- El matrimonio entre un hombre y una mujer
- El matrimonio homosexual
- El nacimiento de Jesús
- El sexo antes del matrimonio
- Hacer ofrendas de cereal y libaciones
- La expiación de los sacerdotes
- La lista de los reyes de Israel
- La muerte de un familiar
- La muerte de una madre
- La obstaculización de la obra de Dios
- La redención
- La revelación de la salvación de Dios
- La revelación de las cosas de Dios
- La sangre
- Las personas con nombres apropiados
- Las relaciones entre padre e hija
- Los padres y las hijas
- Los reyes de todo Israel o Judá
- Los siete días para efectos legales
- Tener un bebé
- Un buen esposo