'Era' en la Biblia
``Tu madre era como una vid en tu viña, plantada junto a las aguas; estaba llena de frutos y ramas por la abundancia de aguas.
Y Aholá se prostituyó cuando era mía; y se apasionó de sus amantes, los asirios, vecinos suyos,
y di a los hijos de Amón: ``Oíd la palabra del Señor DIOS. Así dice el Señor DIOS: `Por cuanto dijiste: `` ¿Ajá!" contra mi santuario cuando era profanado, y contra la tierra de Israel cuando era desolada, y contra la casa de Judá cuando iba en cautiverio,
Elevarán una elegía por ti, y te dirán: `` ¿Cómo has perecido, habitada de los mares, la ciudad renombrada, que era poderosa en el mar! Ella y sus habitantes, infundían terror a todos sus vecinos.
`De lino fino bordado de Egipto era tu vela para que te sirviera de distintivo; de azul y púrpura de las costas de Elisa era tu pabellón.
`Tarsis era tu cliente por la abundancia de toda riqueza; con plata, hierro, estaño y plomo pagaban tus mercancías.
`Aram era tu cliente por la abundancia de tus productos; pagaban tus mercancías con turquesas, púrpura, bordados, lino fino, corales y rubíes.
`Damasco era tu cliente por la abundancia de tus productos, por la abundancia de toda riqueza, por el vino de Helbón y la lana blanca.
`En el Edén estabas, {en} el huerto de Dios; toda piedra preciosa era tu vestidura: el rubí, el topacio y el diamante, el berilo, el ónice y el jaspe, el zafiro, la turquesa y la esmeralda; y el oro, la hechura de tus engastes y de tus encajes, estaba en ti. El día que fuiste creado fueron preparados.
``He aquí, Asiria {era} un cedro en el Líbano de hermosas ramas y frondoso, de sombra abundante y de elevada estatura, y su copa estaba entre las nubes.
``Por eso su altura era mayor que la de todos los árboles del campo; se multiplicaban sus ramas y se alargaba su ramaje, extendiéndose a causa de las muchas aguas.
``Era, pues, hermoso en su grandeza, por la extensión de sus ramas; porque sus raíces estaban junto a muchas aguas.
Hijo de hombre, los que viven en estos lugares desolados de la tierra de Israel, dicen: Uno solo era Abraham, y poseyó la tierra; así que a nosotros que somos muchos se nos ha dado la tierra en posesión.
Me llevó allá; y he aquí, {había allí} un hombre cuyo aspecto era semejante al bronce, con un cordel de lino y una caña de medir en la mano, y estaba de pie en la puerta.
Había tres cámaras en cada lado, y sus pilares y sus pórticos eran de la misma medida que la primera puerta. Su longitud {era} de cincuenta codos, y la anchura de veinticinco codos.
La puerta y sus pórticos tenían ventanas todo alrededor como las otras ventanas; la longitud {era} de cincuenta codos y la anchura de veinticinco codos.
También sus cámaras, sus pilares y sus pórticos {eran} conforme a aquellas mismas medidas. Y la puerta y sus pórticos tenían ventanas todo alrededor; {era} de cincuenta codos de largo y veinticinco codos de ancho.
También sus cámaras, sus pilares, y sus pórticos {eran} conforme a aquellas mismas medidas. Y la puerta y sus pórticos tenían ventanas todo alrededor; {era} de cincuenta codos de largo y veinticinco codos de ancho.
{con} sus cámaras, sus pilares y sus pórticos. La puerta tenía ventanas todo alrededor; {era} de cincuenta codos de largo y veinticinco codos de ancho.
La longitud del pórtico {era} de veinte codos y la anchura de once codos; y junto a las gradas por donde se subía a él, {había} columnas junto a los pilares, una a un lado y otra al otro.
Entonces me llevó a la nave y midió los pilares; seis codos de ancho por un lado y seis codos de ancho por el otro {era} la anchura de cada pilar.
Y la anchura de la entrada {era} de diez codos, y los lados de la entrada {eran} de cinco codos por un lado y cinco codos por el otro. Midió la longitud {de la nave y tenía} cuarenta codos, y la anchura, veinte codos.
La anchura del muro exterior de las cámaras laterales {era} de cinco codos. Pero el espacio libre entre las cámaras laterales que pertenecían al templo
y las cámaras {exteriores} {era} de veinte codos de anchura por todos los lados alrededor del templo.
Y las entradas de las cámaras laterales que {daban} hacia el espacio libre {consistían en} una entrada hacia el norte y otra entrada hacia el sur; y la anchura del espacio libre {era} de cinco codos, todo alrededor.
El edificio que {estaba} enfrente de la zona separada, hacia el lado occidental, {tenía} setenta codos de ancho; y el muro del edificio {tenía} cinco codos de ancho, todo alrededor, y su longitud {era} de noventa codos.
Midió la longitud del edificio a lo largo del frente de la zona separada {que había} detrás de él, con una galería a cada lado, {y era} de cien codos; también {midió} la nave interior y los pórticos del atrio.
Los postes de la nave eran cuadrados, también {los} del frente del santuario; el aspecto de uno {era} como el aspecto del otro.
El altar {era} de madera de tres codos de alto, y su longitud de dos codos; sus esquinas, su base y sus lados {eran} de madera. Y él me dijo: Esta es la mesa que está delante del SEÑOR.
A lo largo de la longitud, {que era} de cien codos, {estaba} la puerta del norte; la anchura {era} de cincuenta codos.
Porque la longitud de las cámaras que {estaban} en el atrio exterior {era} de cincuenta codos; y {las que estaban} frente al templo {tenían} cien codos.
Y el corredor delante de ellas {era} semejante al de las cámaras que {estaban} al norte; su longitud era igual a su anchura; y todas sus salidas, así como sus disposiciones y sus entradas, {eran iguales.}
y he aquí, la gloria del Dios de Israel venía de la parte del oriente. Su voz {era} como el sonido de muchas aguas, y la tierra resplandecía de su gloria.
Y midió {otros} mil; {y ya era} un río que yo no pude vadear, porque las aguas habían crecido, aguas {que tenían que pasarse} a nado, un río que no se podía vadear.
Tú, oh rey, tuviste una visión, y he aquí, {había} una gran estatua; esa estatua {era} enorme y su brillo extraordinario; estaba en pie delante de ti y su aspecto {era} terrible.
La cabeza de esta estatua {era} de oro puro, su pecho y sus brazos de plata, y su vientre y sus muslos de bronce,
El rey Nabucodonosor hizo una estatua de oro cuya altura {era} de sesenta codos {y} su anchura de seis codos; la levantó en el llano de Dura, en la provincia de Babilonia.
Como la orden del rey era apremiante y el horno había sido calentado excesivamente, la llama del fuego mató a los que habían alzado a Sadrac, Mesac y Abed-nego.
``Y las visiones de mi mente, que vi {estando} en mi cama, fueron así: {Vi} un árbol en medio de la tierra, cuya altura {era} muy grande.
``El árbol creció y se hizo fuerte, su copa llegaba hasta el cielo, y {era} visible desde los confines de la tierra.
``Su follaje {era} hermoso y su fruto abundante, y en él {había} alimento para todos. Debajo de él hallaban sombra las bestias del campo, las aves del cielo hacían morada en sus ramas, y de él se alimentaban todos los seres vivientes.
``El árbol que viste, que se hizo fuerte y corpulento, cuya copa llegaba hasta el cielo y que era visible en toda la tierra,
y cuyo follaje {era} hermoso y su fruto abundante, y en el que había alimento para todos, debajo del cual moraban las bestias del campo y en cuyas ramas anidaban las aves del cielo,
y sobre ellos, tres funcionarios (uno de los cuales era Daniel) a quienes estos sátrapas rindieran cuenta, para que el rey no fuera perjudicado.
Entonces los funcionarios y sátrapas buscaron un motivo para acusar a Daniel con respecto a los asuntos del reino; pero no pudieron encontrar ningún motivo de acusación ni {evidencia alguna de} corrupción, por cuanto él era fiel, y ninguna negligencia ni corrupción {podía} hallarse en él.
La primera {era} como un león y tenía alas de águila. Mientras yo miraba, sus alas le fueron arrancadas, fue levantada del suelo y puesta sobre dos pies, como un hombre, y le fue dado corazón de hombre.
Después de esto seguí mirando en las visiones nocturnas, y he aquí, una cuarta bestia, terrible, espantosa y en gran manera fuerte que tenía enormes dientes de hierro; devoraba, desmenuzaba y hollaba los restos con sus pies. Era diferente de todas las bestias que le antecedieron y tenía diez cuernos.
Seguí mirando hasta que se establecieron tronos, y el Anciano de Días se sentó. Su vestidura era blanca como la nieve, y el cabello de su cabeza como lana pura, su trono, llamas de fuego, {y} sus ruedas, fuego abrasador.
Entonces quise saber la verdad acerca de la cuarta bestia, que era diferente de todas las demás, {y} en gran manera terrible, con sus dientes de hierro y sus garras de bronce, {y que} devoraba, desmenuzaba y hollaba los restos con sus pies,
y {la verdad} acerca de los diez cuernos que {tenía} en su cabeza, y del otro {cuerno} que había surgido, delante del cual cayeron tres de ellos, es decir, el cuerno que tenía ojos y una boca que hablaba con mucha arrogancia, y cuya apariencia era mayor que la de sus compañeros.
Alcé, pues, mis ojos y miré, y he aquí que un carnero estaba delante del río. Tenía dos cuernos, y los dos cuernos {eran} altos, pero uno {era} más alto que el otro, y el más alto creció el último.
En el año tercero de Ciro, rey de Persia, un mensaje fue revelado a Daniel, a quien llamaban Beltsasar. El mensaje era verdadero y {acerca} de un gran conflicto; él comprendió el mensaje y tuvo entendimiento de la visión.
Su cuerpo {era} como de berilo, su rostro tenía la apariencia de un relámpago, sus ojos {eran} como antorchas de fuego, sus brazos y pies como el brillo del bronce bruñido, y el sonido de sus palabras como el estruendo de una multitud.
Pues ella no sabía que era yo el que le daba el trigo, el mosto y el aceite, y le prodigaba la plata y el oro, {que} ellos usaban para Baal.
La sembraré para mí en la tierra, y tendré compasión de la que no recibió compasión, y diré al que no era mi pueblo: Tú eres mi pueblo, y él dirá: {Tú eres} mi Dios.
Ni la era ni el lagar los alimentarán, y el mosto les faltará.
Vigía con mi Dios {era} Efraín, un profeta; {sin embargo} el lazo de cazador está en todos sus caminos, y en la casa de su Dios hay {sólo} hostilidad.
Israel es un viñedo frondoso, dando fruto para sí mismo; según la abundancia de su fruto, así multiplicaba los altares; cuanto más rica {era} su tierra, más hermosos hacían sus pilares {sagrados}.
Cuando Israel era niño, yo lo amé, y de Egipto llamé a mi hijo.
Por tanto, serán como niebla de la mañana, y como rocío que pronto desaparece, como paja aventada de la era, y como humo de chimenea.
Yo destruí al amorreo delante de ellos, cuya altura {era} como la altura de los cedros, y {era} fuerte como las encinas; yo destruí su fruto por arriba y su raíz por abajo.
Esto me mostró el Señor DIOS: He aquí, El formaba enjambre de langostas cuando comenzaba a brotar la cosecha de primavera. Y he aquí, la cosecha de primavera {era} después de la siega del rey.
Y Jonás se levantó y fue a Nínive conforme a la palabra del SEÑOR. Y Nínive era una ciudad sumamente grande, de un recorrido de tres días.
Y oró al SEÑOR, y dijo: ¡Ah SEÑOR! ¿No era esto lo que yo decía cuando aún estaba en mi tierra? Por eso me anticipé a huir a Tarsis, porque sabía yo que tú eres un Dios clemente y compasivo lento para la ira y rico en misericordia, y que te arrepientes del mal {con que amenazas}.
Mas ellos no conocen los pensamientos del SEÑOR, ni comprenden su propósito, porque los ha recogido como gavillas en la era.
Aunque Nínive {era} como estanque de aguas desde la antigüedad; ahora ellos huyen. ¿Deteneos! ¡Deteneos! Pero nadie se vuelve.
¿Eres tú mejor que Tebas, la asentada junto al Nilo, rodeada de aguas, cuyo baluarte {era} el mar {y} las aguas su muralla?
Etiopía era {su} fortaleza, también Egipto, y no tenía límite. Fut y Libia estaban entre los que la ayudaban.
Y fue roto aquel día; así los afligidos del rebaño que me observaban, conocieron que era la palabra del SEÑOR.
Yo os he amado --dice el SEÑOR--. Pero vosotros decís: ¿En qué nos has amado? ¿No {era} Esaú hermano de Jacob? --declara el SEÑOR--. Sin embargo, yo amé a Jacob,
Mi pacto con él era de vida y paz, las cuales le di para que {me} reverenciara; y él me reverenció, y estaba lleno de temor ante mi nombre.
Y él, Juan, tenía un vestido de pelo de camello y un cinto de cuero a la cintura; y su comida era de langostas y miel silvestre.
El bieldo está en su mano y limpiará completamente su era; y recogerá su trigo en el granero, pero quemará la paja en fuego inextinguible.
cómo entró en la casa de Dios y comieron los panes consagrados, que no les era lícito comer, ni a él ni a los que estaban con él, sino sólo a los sacerdotes?
Y les advirtió que no revelaran quién era El;
Pero la barca estaba ya a muchos estadios de tierra, {y} era azotada por las olas, porque el viento era contrario.
Entonces ordenó a los discípulos que a nadie dijeran que El era el Cristo.
Pero al oír el joven estas palabras, se fue triste, porque era dueño de muchos bienes.
¿De dónde era el bautismo de Juan?, ¿del cielo o de los hombres? Y ellos discurrían entre sí, diciendo: Si decimos: ``Del cielo", El nos dirá: ``Entonces, ¿por qué no le creísteis?"
El centurión y los que estaban con él custodiando a Jesús, cuando vieron el terremoto y las cosas que sucedían, se asustaron mucho, y dijeron: En verdad éste era Hijo de Dios.
Su aspecto era como un relámpago, y su vestidura blanca como la nieve;
Y sanó a muchos que estaban enfermos de diversas enfermedades, y expulsó muchos demonios; y no dejaba hablar a los demonios, porque ellos sabían quién era El.
porque muchas veces había sido atado con grillos y cadenas, pero él había roto las cadenas y destrozado los grillos, y nadie era tan fuerte como para dominarlo.
Y los que cuidaban los cerdos huyeron y lo contaron en la ciudad y por los campos. Y {la gente} vino a ver qué era lo que había sucedido.
porque Herodes temía a Juan, sabiendo que era un hombre justo y santo, y lo mantenía protegido. Y cuando le oía se quedaba muy perplejo, pero le gustaba escucharlo.
Y cuando era ya muy tarde, sus discípulos se le acercaron, diciendo: El lugar está desierto y ya es muy tarde;
Y al verlos remar fatigados, porque el viento les era contrario, como a la cuarta vigilia de la noche, fue* hacia ellos andando sobre el mar, y quería pasarles de largo.
Pero cuando ellos le vieron andando sobre el mar, pensaron que era un fantasma y se pusieron a gritar;
La mujer era gentil, sirofenicia de nacimiento; y le rogaba que echara fuera de su hija al demonio.
Y le trajeron* a uno que era sordo y que hablaba con dificultad, y le rogaron* que pusiera la mano sobre él.
Pero ellos guardaron silencio, porque en el camino habían discutido entre sí quién {de ellos era} el mayor.
Y se le acercaron {algunos} fariseos, {y} para ponerle a prueba, le preguntaban si era lícito a un hombre divorciarse de su mujer.
Pero él, afligido por estas palabras, se fue triste, porque era dueño de muchos bienes.
Y cuando oyó que era Jesús el Nazareno, comenzó a gritar y a decir: ¡Jesús, Hijo de David, ten misericordia de mí!
Y viendo de lejos una higuera con hojas, fue {a ver} si quizá pudiera hallar algo en ella; cuando llegó a ella, no encontró más que hojas, porque no era tiempo de higos.
El bautismo de Juan, ¿era del cielo o de los hombres? Respondedme.
Entonces Judas Iscariote, que era uno de los doce, fue a los principales sacerdotes para entregarles a Jesús.
Habéis oído la blasfemia; ¿qué os parece? Y todos le condenaron, {diciendo} que era reo de muerte.
Era la hora tercera cuando le crucificaron.
Viendo el centurión que estaba frente a El, la manera en que expiró, dijo: En verdad este hombre era Hijo de Dios.