Parallel Verses
Biblia del Jubileo 2000 (Grátis)
Entonces Jesús dijo a sus discípulos: De cierto os digo, que el rico difícilmente entrará en el Reino de los cielos.
La Biblia de las Américas
Y Jesús dijo a sus discípulos:
Reina Valera 1909
Entonces Jesús dijo á sus discípulos: De cierto os digo, que un rico difícilmente entrará en el reino de los cielos.
La Nueva Biblia de los Hispanos
Jesús dijo entonces a Sus discípulos:
Spanish: Sagradas Escrituras 1569
Entonces Jesús dijo a sus discípulos: De cierto os digo, que el rico difícilmente entrará en el Reino de los cielos.
Spanish: Reina Valera Gómez
Entonces Jesús dijo a sus discípulos: De cierto os digo, que difícilmente entrará un rico en el reino de los cielos.
New American Standard Bible
And Jesus said to His disciples, "Truly I say to you, it is hard for a rich man to enter the kingdom of heaven.
Artículos
Referencias Cruzadas
Mateo 13:22
Y el que fue sembrado entre espinos, éste es el que oye la Palabra; pero la congoja de este siglo y el engaño de las riquezas, ahogan la Palabra, y se hace infructuosa.
Marcos 10:23
Entonces Jesús, mirando alrededor, dice a sus discípulos: ¡Cuán difícilmente entrarán en el Reino de Dios los que tienen riquezas!
Lucas 18:24
Y viendo Jesús que se había entristecido mucho, dijo: ¡Cuán dificultosamente entrarán en el Reino de Dios los que tienen riquezas!
1 Corintios 1:26
Porque mirad, hermanos, vuestra vocación: que no sois muchos sabios según la carne, no muchos poderosos, no muchos nobles;
1 Timoteo 6:9-10
Porque los que quieren enriquecerse, caen en tentación y en lazo, y en muchas codicias locas y dañosas, que hunden a los hombres en destrucción y perdición.
Deuteronomio 6:10-12
Y será, cuando el SEÑOR tu Dios te hubiere introducido en la tierra que juró a tus padres Abraham, Isaac, y Jacob, para dártela a ti; ciudades grandes y buenas que tú no edificaste;
Deuteronomio 8:10-18
Y comerás y te saciarás, y bendecirás al SEÑOR tu Dios por la buena tierra que te habrá dado.
Job 31:24-25
Si puse en el oro mi esperanza, y dije al oro: Mi confianza eres tú;
Salmos 49:6-7
Los que confían en sus haciendas, y en la muchedumbre de sus riquezas se jactan,
Salmos 49:16-19
No temas cuando se enriquece alguno, cuando aumenta la gloria de su casa;
Proverbios 11:28
El que confía en sus riquezas, caerá; mas los justos reverdecerán como ramos.
Proverbios 30:8-9
Vanidad y palabra mentirosa aparta de mí; no me des pobreza ni riquezas; manténme del pan de mi juicio;
Mateo 5:20
Porque os digo, que si vuestra justicia (rectitud) no fuere mayor que la de los escribas y de los fariseos, no entraréis en el Reino de los cielos.
Mateo 18:3
Y dijo: De cierto os digo, que si no os convirtiereis, y fuereis como niños, no entraréis en el Reino de los cielos.
Mateo 21:31
¿Cuál de los dos hizo la voluntad del padre? Dicen ellos: El primero. Les dijo Jesús: De cierto os digo, que los publicanos y las rameras os van delante al Reino de Dios.
Lucas 12:15-21
Y les dijo: Mirad, y guardaos de toda avaricia; porque la vida del hombre no consiste en la abundancia de los bienes que posee.
Lucas 16:13-14
Ningún siervo puede servir a dos señores; porque o aborrecerá al uno y amará al otro, o se allegará al uno y menospreciará al otro. No podéis servir a Dios y a las riquezas.
Lucas 16:19-28
Había un hombre rico, que se vestía de púrpura y de lino fino, y hacía cada día banquete con esplendidez.
Juan 3:3
Respondió Jesús, y le dijo: De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere otra vez, no puede ver el Reino de Dios.
Juan 3:5
Respondió Jesús: De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere de agua y de Espíritu, no puede entrar en el Reino de Dios.
Hechos 14:22
confirmando los ánimos de los discípulos, exhortándoles a que permanecieran en la fe, y enseñándoles que es necesario que por muchas tribulaciones entremos en el Reino de Dios.
Santiago 1:9-11
El hermano que es de baja suerte, gloríese en su alteza;
Santiago 2:6
Mas vosotros habéis afrentado al pobre. ¿No os oprimen los ricos con tiranía, y ellos os llevan con violencia a los juzgados?
Santiago 5:1-4
Ea, ya ahora, oh ricos, llorad aullando por vuestras miserias que os vendrán.