Parallel Verses
Reina Valera 1909
En la multitud de mis pensamientos dentro de mí, Tus consolaciones alegraban mi alma.
La Biblia de las Américas
Cuando mis inquietudes se multiplican dentro de mí, tus consuelos deleitan mi alma.
Biblia del Jubileo 2000 (Grátis)
En la multitud de mis pensamientos dentro de mí, tus consolaciones alegraban mi alma.
La Nueva Biblia de los Hispanos
Cuando mis inquietudes se multiplican dentro de mí, Tus consuelos deleitan mi alma.
Spanish: Sagradas Escrituras 1569
En la multitud de mis pensamientos dentro de mí, tus consolaciones alegraban mi alma.
Spanish: Reina Valera Gómez
En la multitud de mis pensamientos dentro de mí, tus consolaciones alegraban mi alma.
New American Standard Bible
When my anxious thoughts multiply within me, Your consolations delight my soul.
Artículos
Referencias Cruzadas
Salmos 43:2-5
Pues que tú eres el Dios de mi fortaleza, ¿por qué me has desechado? ¿Por qué andaré enlutado por la opresión del enemigo?
Salmos 61:2
Desde el cabo de la tierra clamaré á ti, cuando mi corazón desmayare: A la peña más alta que yo me conduzcas.
Salmos 63:5-6
Como de meollo y de grosura será saciada mi alma; Y con labios de júbilo te alabará mi boca,
Salmos 73:12-16
He aquí estos impíos, Sin ser turbados del mundo, alcanzaron riquezas.
Salmos 77:2-10
Al Señor busqué en el día de mi angustia: Mi mal corría de noche y no cesaba: Mi alma rehusaba consuelo.
Jeremías 20:7-11
Alucinásteme, oh Jehová, y hállome frustrado: más fuerte fuiste que yo, y vencísteme: cada día he sido escarnecido; cada cual se burla de mí.
Habacuc 3:16-18
Oí, y tembló mi vientre; A la voz se batieron mis labios; Pudrición se entró en mis huesos, y en mi asiento me estremecí; Si bien estaré quieto en el día de la angustia, Cuando suba al pueblo el que lo invadirá con sus tropas.
Romanos 5:2-5
Por el cual también tenemos entrada por la fe á esta gracia en la cual estamos firmes, y nos gloriamos en la esperanza de la gloria de Dios.
2 Corintios 1:4-5
El cual nos consuela en todas nuestras tribulaciones, para que podamos también nosotros consolar á los que están en cualquiera angustia, con la consolación con que nosotros somos consolados de Dios.
1 Pedro 1:7-8
Para que la prueba de vuestra fe, mucho más preciosa que el oro, el cual perece, bien que sea probado con fuego, sea hallada en alabanza, gloria y honra, cuando Jesucristo fuera manifestado: