32 Versículo de la Biblia sobre el propósito

Y sabemos que á los que á Dios aman, todas las cosas les ayudan á bien, es á saber, á los que conforme al propósito son llamados.

Porque la Escritura dice de Faraón: Que para esto mismo te he levantado, para mostrar en ti mi potencia, y que mi nombre sea anunciado por toda la tierra.

Todas las cosas ha hecho Jehová por sí mismo, Y aun al impío para el día malo.

Porque para todo lo que quisieres hay tiempo y juicio; mas el trabajo del hombre es grande sobre él;

Y á la verdad yo te he puesto para declarar en ti mi potencia, y que mi Nombre sea contado en toda la tierra.

PARA todas las cosas hay sazón, y todo lo que se quiere debajo del cielo, tiene su tiempo:

Muchos pensamientos hay en el corazón del hombre; Mas el consejo de Jehová permanecerá.

Que nos salvó y llamó con vocación santa, no conforme á nuestras obras, mas según el intento suyo y gracia, la cual nos es dada en Cristo Jesús antes de los tiempos de los siglos,

Conforme á la determinación eterna, que hizo en Cristo Jesús nuestro Señor:

Porque Dios es el que en vosotros obra así el querer como el hacer, por su buena voluntad.

Cumplid mi gozo; que sintáis lo mismo, teniendo el mismo amor, unánimes, sintiendo una misma cosa.

Cada uno dé como propuso en su corazón: no con tristeza, ó por necesidad; porque Dios ama el dador alegre.

Yo conozco que todo lo puedes, Y que no hay pensamiento que se esconda de ti.

En él digo, en quien asimismo tuvimos suerte, habiendo sido predestinados conforme al propósito del que hace todas las cosas según el consejo de su voluntad,

Que anuncio lo por venir desde el principio, y desde antiguo lo que aun no era hecho; que digo: Mi consejo permanecerá, y haré todo lo que quisiere;

Porque somos hechura suya, criados en Cristo Jesús para buenas obras, las cuales Dios preparó para que anduviésemos en ellas.

Porque á la verdad David, habiendo servido en su edad á la voluntad de Dios, durmió, y fué juntado con sus padres, y vió corrupción.

Así será mi palabra que sale de mi boca: no volverá á mí vacía, antes hará lo que yo quiero, y será prosperada en aquello para que la envié.

Porque para esto sois llamados; pues que también Cristo padeció por nosotros, dejándonos ejemplo, para que vosotros sigáis sus pisadas:

¿O no tiene potestad el alfarero para hacer de la misma masa un vaso para honra, y otro para vergüenza?

Mas levántate, y ponte sobre tus pies; porque para esto te he aparecido, para ponerte por ministro y testigo de las cosas que has visto, y de aquellas en que apareceré á ti:

Mas en una casa grande, no solamente hay vasos de oro y de plata, sino también de madera y de barro: y asimismo unos para honra, y otros para deshonra.

Mas las fábulas profanas y de viejas desecha, y ejercítate para la piedad.

Porque no nos ha llamado Dios á inmundicia, sino á santificación.