48 Versículos de la Biblia sobre ser buen padre
Versículos Más Relevantes
Pues si vosotros, siendo malos, sabéis dar buenas dádivas á vuestros hijos, ¿cuánto más vuestro Padre celestial dará el Espíritu Santo á los que lo pidieren de él?
Pues si vosotros, siendo malos, sabéis dar buenas dádivas á vuestros hijos, ¿cuánto más vuestro Padre que está en los cielos, dará buenas cosas á los que le piden?
Mucho se alegrará el padre del justo: Y el que engendró sabio se gozará con él.
Y seré á vosotros Padre, Y vosotros me seréis á mí hijos é hijas, dice el Señor Todopoderoso.
He aquí estoy aparejado para ir á vosotros la tercera vez, y no os seré gravoso; porque no busco vuestras cosas, sino á vosotros: porque no han de atesorar los hijos para los padres sino los padres para los hijos.
Padres, no irritéis á vuestros hijos, porque no se hagan de poco ánimo.
¿Y cuál padre de vosotros, si su hijo le pidiere pan, le dará una piedra?, ó, si pescado, ¿en lugar de pescado, le dará una serpiente?
Un Dios y Padre de todos, el cual es sobre todas las cosas, y por todas las cosas, y en todos vosotros.
MIRAD cuál amor nos ha dado el Padre, que seamos llamados hijos de Dios: por esto el mundo no nos conoce, porque no le conoce á él.
En esto son manifiestos los hijos de Dios, y los hijos del diablo: cualquiera que no hace justicia, y que no ama á su hermano, no es de Dios.
Sed, pues, vosotros perfectos, como vuestro Padre que está en los cielos es perfecto.
Toda buena dádiva y todo don perfecto es de lo alto, que desciende del Padre de las luces, en el cual no hay mudanza, ni sombra de variación.
¿Qué hombre hay de vosotros, á quien si su hijo pidiere pan, le dará una piedra?
MIRAD que no hagáis vuestra justicia delante de los hombres, para ser vistos de ellos: de otra manera no tendréis merced de vuestro Padre que está en los cielos.
Si el hombre engendrare ciento, y viviere muchos años, y los días de su edad fueren numerosos; si su alma no se hartó del bien, y también careció de sepultura, yo digo que el abortivo es mejor que él.
El hijo sabio alegra al padre: Mas el hombre necio menosprecia á su madre.
Corona de los viejos son los hijos de los hijos; Y la honra de los hijos, sus padres.
Las sentencias de Salomón. EL hijo sabio alegra al padre; Y el hijo necio es tristeza de su madre.
Así alumbre vuestra luz delante de los hombres, para que vean vuestras obras buenas, y glorifiquen á vuestro Padre que está en los cielos.
HIJOS, obedeced en el Señor á vuestros padres; porque esto es justo.
Y vosotros, padres, no provoquéis á ira á vuestros hijos; sino fhhijos; sino fh amonestación del Señor.
Porque como el Padre tiene vida en sí mismo, así dió también al Hijo que tuviese vida en sí mismo:
Padre de huérfanos y defensor de viudas, Es Dios en la morada de su santuario:
No améis al mundo, ni las cosas que están en el mundo. Si alguno ama al mundo, el amor del Padre no está en él.
Hijos, obedeced á vuestros padres en todo; porque esto agrada al Señor.
Los padres no morirán por los hijos, ni los hijos por los padres; cada uno morirá por su pecado.
Y vuestro padre no llaméis á nadie en la tierra; porque uno es vuestro Padre, el cual está en los cielos.
Honra á tu padre y á tu madre, que es el primer mandamiento con promesa,
Por otra parte, tuvimos por castigadores á los padres de nuestra carne, y los reverenciábamos, ¿por qué no obedeceremos mucho mejor al Padre de los espíritus, y viviremos?
Si alguno viene á mí, y no aborrece á su padre, y madre, y mujer, é hijos, y hermanos, y hermanas, y aun también su vida, no puede ser mi discípulo.
No seáis como vuestros padres, á los cuales dieron voces los primeros profetas, diciendo: Así ha dicho Jehová de los ejércitos: Volveos ahora de vuestros malos caminos, y de vuestras malas obras: y no atendieron, ni me escucharon, dice Jehová.
Honra á tu padre y á tu madre, porque tus días se alarguen en la tierra que Jehová tu Dios te da.
Oye, hijo mío, la doctrina de tu padre, Y no desprecies la dirección de tu madre:
Porque no sois vosotros los que habláis, sino el Espíritu de vuestro Padre que habla en vosotros.
Y el hijo le dijo: Padre, he pecado contra el cielo, y contra ti, y ya no soy digno de ser llamado tu hijo.
Para que seáis hijos de vuestro Padre que está en los cielos: que hace que su sol salga sobre malos y buenos, y llueve sobre justos é injustos.
El hijo necio es enojo á su padre, Y amargura á la que lo engendró.
No seáis como vuestros padres y como vuestros hermanos, que se rebelaron contra Jehová el Dios de sus padres, y él los entregó á desolación, como vosotros veis.
Me levantaré, é iré á mi padre, y le diré: Padre, he pecado contra el cielo y contra ti;
El que ama padre ó madre más que á mí, no es digno de mí; y el que ama hijo ó hija más que á mí, no es digno de mí.
Y el hermano entregará al hermano á la muerte, y el padre al hijo; y los hijos se levantarán contra los padres, y los harán morir.
Porque al que ama castiga, Como el padre al hijo á quien quiere.
TAMBIÉN digo: Entre tanto que el heredero es niño, en nada difiere del siervo, aunque es señor de todo;
Artículos Relacionados
- Conociendo a Dios, Efectos de
- Derechos
- Dios, perfección de
- El amor y el mundo
- La Bondad de Dios,
- La Paternidad de Dios,
- La actitud de su madre
- La dedicación del bebé
- La disciplina en la familia
- Las madres, responsabilidades de
- Los jóvenes
- Los padres
- Los padres, las responsabilidades de
- Malos Padres
- Obedientes a los padres
- Padres e hijos
- Presentación
- Respeto por los seres humanos
- Siendo un niño
- Siendo un papá
- Amar a los niños
- Amar a vuestra madre
- Amar a vuestros padres
- Dejar a los padres por un cónyuge
- El amor de Dios por nosotros
- El amor de los padres
- El amor de un padre
- El amor de una madre por sus hijos
- El amor familiar
- El cuidado y el amor de un padre
- El júbilo de los padres
- El padre
- El pan
- El respeto por los padres
- La crianza de los hijos
- La crianza de niños
- La maternidad
- La muerte de un niño
- La obediencia
- La paternidad
- La paternidad
- Las madres
- Las madres y los hijos
- Las responsabilidades de un padre
- Los errores de los padres
- Los niños
- Los niños buenos
- Los padres
- Los padres
- Los padres y las hijas
- Nuestro padre en el cielo