103 casos

'Caballos' en la Biblia

Trajeron, pues, sus ganados a José, y José les dio pan a cambio de los caballos, las ovejas, las vacas y los asnos; aquel año les proveyó de alimento a cambio de todos sus ganados.

entonces la mano del SEÑOR vendrá {con} gravísima pestilencia sobre tus ganados que están en el campo: sobre los caballos, sobre los asnos, sobre los camellos, sobre las vacas y sobre las ovejas.

Los Egipcios los persiguieron {con} todos los caballos {y} carros de Faraón, su caballería y su ejército, y los alcanzaron acampados junto al mar, junto a Pi Hahirot, frente a Baal Zefón.

Entonces los Egipcios reanudaron la persecución, y entraron tras ellos en medio del mar todos los caballos de Faraón, sus carros y sus jinetes.

Porque los caballos de Faraón con sus carros y sus jinetes entraron en el mar, y el SEÑOR hizo volver sobre ellos las aguas del mar. Pero los Israelitas anduvieron por en medio del mar sobre tierra seca.

lo que hizo al ejército de Egipto, a sus caballos y a sus carros, al hacer que el agua del Mar Rojo los cubriera cuando los perseguían a ustedes, y el SEÑOR los destruyó completamente;

"Además, el{ rey} no tendrá muchos caballos, ni hará que el pueblo vuelva a Egipto para tener muchos caballos, pues el SEÑOR te ha dicho: `Jamás volverán ustedes por ese camino.'

``Cuando salgas a la batalla contra tus enemigos y veas caballos y carros, {y} pueblo más numeroso que tú, no tengas temor de ellos; porque el SEÑOR tu Dios que te sacó de la tierra de Egipto está contigo.

Salieron ellos, y todos sus ejércitos con ellos, tanta gente como la arena que está a la orilla del mar, con muchísimos caballos y carros.

Entonces el SEÑOR dijo a Josué: ``No temas a causa de ellos, porque mañana a esta hora Yo los entregaré a todos ellos muertos delante de Israel. Desjarretarás sus caballos y les quemarás sus carros."

Josué hizo con ellos como el SEÑOR le había mandado: desjarretó sus caballos y les quemó sus carros.

Entonces resonaron los cascos de los caballos Por el galopar, el galopar de sus valientes corceles.

David le tomó 1,700 hombres de a caballo y 20,000 soldados de a pie. David desjarretó los caballos de los carros, pero dejó {suficientes} de ellos para 100 carros.

Aconteció después de esto que Absalón consiguió un carro y caballos, y cincuenta hombres que corrieran delante de él.

También llevaban, cada uno según su obligación, cebada y paja para los caballos {de tiro} y los corceles al lugar donde debieran estar.

Cada uno de ellos traía su presente: objetos de plata y objetos de oro, vestidos, armas, especias, caballos y mulos; {y} así año tras año.

Los caballos de Salomón eran importados de Egipto y de Coa, y los mercaderes del rey {los} adquirían de Coa por cierto precio.

Entonces Acab dijo a Abdías: ``Ve por la tierra a todas las fuentes de agua y a todos los valles; quizá hallaremos hierba y conservaremos con vida los caballos y los mulos, y no tendremos que matar parte del ganado."

Entonces Ben Adad, rey de Aram, reunió todo su ejército, y tenía con él treinta y dos reyes con caballos y carros; y subió, sitió a Samaria y peleó contra ella.

El rey de Israel salió y atacó los caballos y los carros, y derrotó a los Arameos {causándoles} gran matanza.

Y le preguntó a Josafat: `` ¿Quieres venir conmigo a pelear {contra} Ramot de Galaad?" Respondió Josafat al rey de Israel: ``Yo soy como tú, mi pueblo como tu pueblo, mis caballos como tus caballos."

Y fue y envió {palabra} a Josafat, rey de Judá, diciendo: ``El rey de Moab se ha rebelado contra mí. ¿Irás conmigo a pelear contra Moab?" Y él respondió: ``Subiré. Yo soy como tú, mi pueblo como tu pueblo, mis caballos como tus caballos."

Vino, pues, Naamán con sus caballos y con su carro, y se paró a la entrada de la casa de Eliseo.

Entonces envió allá caballos, carros y un gran ejército; y llegaron de noche y cercaron la ciudad.

Y cuando el que servía al hombre de Dios se levantó temprano y salió, vio que un ejército con caballos y carros rodeaba la ciudad. Y su criado le dijo: `` ¡Ah, señor mío! ¿Qué haremos?"

Eliseo entonces oró, y dijo: ``Oh SEÑOR, Te ruego que abras sus ojos para que vea." Y el SEÑOR abrió los ojos del criado, y miró que el monte estaba lleno de caballos y carros de fuego alrededor de Eliseo.

Porque el Señor había hecho que el ejército de los Arameos oyera estruendo de carros y ruido de caballos, el estruendo de un gran ejército, de modo que se dijeron el uno al otro: ``Ciertamente el rey de Israel ha tomado a sueldo contra nosotros a los reyes de los Hititas y a los reyes de los Egipcios, para que vengan contra nosotros."

Por lo cual se levantaron y huyeron al anochecer, y abandonaron sus tiendas, sus caballos y sus asnos {y} el campamento tal como estaba, y huyeron para {salvar} sus vidas.

Así que fueron y llamaron a los porteros de la ciudad, y les informaron: ``Fuimos al campamento de los Arameos, y vimos que no había nadie allí, ni siquiera {se oía} voz de hombre; solamente los caballos atados, también los asnos atados y las tiendas intactas."

Entonces uno de sus siervos respondió: ``Deja que algunos {hombres} tomen cinco de los caballos que quedan, {de los} que quedan en la ciudad. Porque {en todo caso les sucederá} como a toda la multitud de Israel que queda en la ciudad, (como a toda la multitud de Israel que {ya} ha perecido), vamos a enviar{los} y veamos {qué sucede."}

Así que tomaron dos carros con caballos, y el rey {los} envió en pos del ejército de los Arameos, diciendo: ``Vayan y vean."

Y Jehú les dijo: ``Echenla abajo." Y la echaron abajo y parte de su sangre salpicó la pared y los caballos, y él la pisoteó.

``Ahora, cuando esta carta llegue a ustedes, como los hijos de su señor están con ustedes, así como también los carros y los caballos y una ciudad fortificada y las armas,

Y le echaron mano; y cuando ella llegó a la entrada de los caballos de la casa del rey, allí la mataron.

Lo trajeron sobre caballos y fue sepultado en Jerusalén con sus padres en la ciudad de David.

"Ahora pues, te ruego que llegues a un acuerdo con mi señor el rey de Asiria, y yo te daré 2,000 caballos, si por tu parte puedes poner jinetes sobre ellos.

A la entrada de la casa del SEÑOR, junto a la cámara de Natán Melec, el oficial que {estaba} en las dependencias, quitó los caballos que los reyes de Judá habían dedicado al sol, y prendió fuego a los carros del sol.

David le tomó 1,000 carros y 7,000 hombres de a caballo y 20,000 soldados de a pie; David desjarretó todos los caballos de los carros, pero dejó {suficientes} caballos para 100 carros.

Los caballos de Salomón eran importados de Egipto y de Coa, y los mercaderes del rey los adquirían de Coa por cierto precio.

Cada uno de ellos traía su presente: objetos de plata y objetos de oro, vestidos, armas, especias, caballos y mulos; {y} así año tras año.

Salomón tenía 4,000 establos para los caballos y carros y 12,000 hombres de a caballo, y los situó en las ciudades de carros y en Jerusalén, junto al rey.

Y traían para Salomón caballos de Egipto y de todos los países.

Así que le echaron mano, y cuando ella llegó a la entrada de la Puerta de los Caballos de la casa del rey, allí la mataron.

Lo trajeron en caballos y lo sepultaron con sus padres en la ciudad de David.

Más arriba de la Puerta de los Caballos, los sacerdotes hicieron reparaciones cada uno frente a su casa.

Mardoqueo escribió en nombre del rey Asuero y sellaron las cartas con el anillo del rey, y se enviaron por medio de correos a caballo, que montaban en corceles engendrados por caballos reales.

Se ha llenado su tierra de plata y de oro, Y no tienen fin sus tesoros. Su tierra se ha llenado de caballos, Y no tienen fin sus carros.

Sus flechas están afiladas y todos sus arcos entesados. Los cascos de sus caballos son como pedernal y las ruedas {de sus carros} como torbellino.

El grano es triturado, Pero no lo seguirán trillando indefinidamente; Debido a que la rueda de la carreta y sus caballos {lo} dañarán, No lo triturarán {más.}

Pues los Egipcios son hombres, y no Dios, Y sus caballos son carne, y no espíritu. El SEÑOR, pues, extenderá Su mano, Y el que ayuda tropezará, Y el que recibe ayuda caerá; Todos ellos a una perecerán.

"Ahora pues, te ruego que llegues a un acuerdo con mi señor el rey de Asiria, y yo te daré 2,000 caballos, si por tu parte puedes poner jinetes sobre ellos.

"Entonces traerán a todos sus hermanos de todas las naciones como ofrenda al SEÑOR, en caballos, en carros, en literas, en mulos y en camellos, a Mi santo monte, Jerusalén," dice el SEÑOR, ``tal como los Israelitas traen su ofrenda de grano en vasijas limpias a la casa del SEÑOR.

Miren, él sube como las nubes, Y sus carros como un torbellino; Sus caballos son más ligeros que las águilas. ¡Ay de nosotros, porque estamos perdidos!"

Eran caballos cebados {y} fogosos, Cada cual relinchando tras la mujer de su prójimo.

Desde Dan se oye el resoplido de sus caballos; Al sonido de los relinchos de sus corceles, Tiembla toda la tierra; Vienen y devoran la tierra y cuanto hay en ella, La ciudad y los que en ella habitan.

``Si corriste con los de a pie y te cansaron, ¿Cómo, pues, vas a competir con los caballos? Si caes en tierra de paz, ¿Cómo te irá en la espesura del Jordán?

entonces entrarán por las puertas de esta ciudad reyes y príncipes que se sienten sobre el trono de David; vendrán montados en carros y caballos, ellos y sus príncipes, los hombres de Judá y los habitantes de Jerusalén; y esta ciudad será habitada para siempre.

"Porque si en verdad observan este mandato, entonces entrarán reyes por las puertas de esta casa, y se sentarán en el lugar de David, en su trono. {Entrarán} montados en carros y caballos, el rey, sus siervos y su pueblo.

"Y todo el valle de los cadáveres y de las cenizas, y todos los campos hasta el arroyo Cedrón, hasta la esquina de la Puerta de los Caballos hacia el oriente, serán santos al SEÑOR. {La ciudad} no será arrancada ni derribada nunca jamás."

¡Aparejen los caballos, Monten los corceles! ¡Preséntense con los cascos {puestos!} ¡Tengan bruñidas las lanzas, Vístanse las corazas!

Suban, caballos, y corran furiosos, carros, Para que avancen los poderosos: Etiopía y Put, que manejan escudo, Y los de Lud, que manejan {y} entesan el arco.

``Porque ustedes se alegran, porque se regocijan, Saqueadores de Mi heredad, Porque saltan como novilla trilladora Y relinchan como caballos sementales,

Espada contra sus caballos y contra sus carros, Y contra todos los extranjeros que están en medio de ella, Y serán como mujeres. Espada contra sus tesoros, y serán saqueados.

Levanten señal (bandera) en la tierra, Toquen trompeta entre las naciones. Reúnan las naciones contra ella, Convoquen contra ella los reinos de Ararat, Mini y Asquenaz; Nombren contra ella capitán, Hagan subir caballos como langostas erizadas.

~`Pero se ha rebelado contra él enviando embajadores a Egipto para que le den caballos y muchas tropas. ¿Tendrá éxito? ¿Escapará el que hace tales cosas? ¿Puede romper el pacto y escapar?

"Y se apasionó de sus amantes, cuya carne es {como} la carne de los asnos y cuyo flujo es {como} el flujo de los caballos.

Porque así dice el Señor DIOS: ``Desde el norte voy a traer sobre Tiro a Nabucodonosor, rey de Babilonia, rey de reyes, con caballos, carros, jinetes y un gran ejército.

"Por la multitud de sus caballos, su polvo te cubrirá; por el estruendo de la caballería, de las carretas y de los carros, se estremecerán tus murallas cuando entre él por tus puertas como se entra en una ciudad en que se ha hecho brecha.

"Con los cascos de sus caballos pisoteará todas tus calles, a tu pueblo matará a espada, y tus fuertes columnas caerán por tierra.

"Los de Bet Togarmá daban caballos y corceles de guerra y mulos por tus mercancías.

"Te haré dar vuelta, pondré garfios en tus quijadas y te sacaré con todo tu ejército, caballos y jinetes, todos ellos bien equipados; una gran compañía {con} broquel y escudo, todos ellos empuñando espada;

"En mi mesa se hartarán de caballos y jinetes, de poderosos y de todos los hombres de guerra," declara el Señor DIOS.

"Pero Me compadeceré de la casa de Judá y los salvaré por el SEÑOR su Dios; y no los salvaré con arco, ni con espada, ni con batalla, ni con caballos ni jinetes."

Como aspecto de caballos es su aspecto, Y como corceles de guerra, así corren.

``Envié contra ustedes una plaga, como la {plaga} de Egipto, Maté a espada a sus jóvenes, junto con sus caballos capturados, E hice subir hasta sus narices el hedor de su campamento. Sin embargo, ustedes no se han vuelto a Mí," declara el SEÑOR.

¿Corren los caballos por la peña? ¿Se ara {en ella} con bueyes? Pues ustedes han convertido el derecho en veneno, Y el fruto de la justicia en amargura;

``Y sucederá en aquel día," declara el SEÑOR, ``Que exterminaré tus caballos de en medio de ti, También destruiré tus carros.

Chasquido de látigos, Ruido del crujir de ruedas, Galopar de caballos, Y saltar de carros;

``Sus caballos son más veloces que leopardos Y más astutos que lobos al anochecer. Al galope {vienen} sus jinetes, Sus jinetes vienen de lejos, Vuelan como águila que se precipita a devorar.

¿Te indignaste, SEÑOR, contra los ríos? ¿Contra los ríos {fue} Tu ira, Contra el mar Tu furor, Cuando montaste en Tus caballos, En Tus carros de victoria?

Marchaste por el mar con Tus caballos, En el oleaje de las inmensas aguas.

y volcaré el trono de los reinos y destruiré el poder de los reinos de las naciones; y volcaré el carro y a los que montan en él, y caerán los caballos y sus jinetes, cada uno por la espada de su hermano.

En una visión nocturna vi un hombre que iba montado en un caballo rojo. El hombre estaba entre los mirtos que había en la quebrada, y detrás de él, caballos rojos, castaños y blancos.

"Con uno de ellos salen los caballos negros hacia la tierra del norte, y los blancos salen tras ellos, mientras los pintos salen hacia la tierra del sur.

"Briosos salían los caballos, impacientes por ir a recorrer la tierra." Y el ángel dijo: ``Vayan, recorran la tierra." Y recorrieron la tierra.

En aquel día estará {grabado} en los cascabeles de los caballos: ``SANTIDAD AL SEÑOR." Y serán las ollas en la casa del SEÑOR como los tazones delante del altar.

Ahora bien, si ponemos el freno en la boca de los caballos para que nos obedezcan, dirigimos también todo su cuerpo.

El aspecto de las langostas era semejante al de caballos dispuestos para la batalla, y sobre sus cabezas {tenían} como coronas que parecían de oro, y sus caras eran como rostros humanos.

También tenían corazas como corazas de hierro. El ruido de sus alas era como el estruendo de carros, de muchos caballos que se lanzan a la batalla.

Así es como vi en la visión los caballos y a los que los montaban: {los jinetes} tenían corazas {color} de fuego, de jacinto y de azufre. Las cabezas de los caballos {eran} como cabezas de leones, y de sus bocas salía fuego, humo, y azufre.

Porque el poder de los caballos está en su boca y en sus colas; pues sus colas son semejantes a serpientes, tienen cabezas y con ellas hacen daño.

El lagar fue pisado fuera de la ciudad, y del lagar salió sangre {que subió} hasta los frenos de los caballos por una distancia como de 320 kilómetros.

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Las citas bíblicas son tomadas Nueva Biblia de los Hispanos © 2005 by The Lockman Foundation, La Habra, Calif, http://www.lockman.org. Usadas con permiso