'Gracia' en la Biblia
y dijo: Mi Señor, si ahora he hallado gracia en tus ojos, te ruego que no pases de tu siervo.
He aquí ahora ha hallado tu siervo gracia en tus ojos, y has engrandecido tu misericordia que has hecho conmigo dándome la vida; mas yo no podré escapar al monte, no sea que me alcance el mal y muera.
Y Labán le respondió: Halle yo ahora gracia en tus ojos, y quédate; pues he experimentado que Jehová me ha bendecido por tu causa.
Y tengo vacas, y asnos, y ovejas, y siervos y siervas; y envío a decirlo a mi señor, por hallar gracia en tus ojos.
Y él dijo: ¿Qué te propones con todas estas cuadrillas que he encontrado? Y él respondió: El hallar gracia en los ojos de mi señor.
Y dijo Jacob: No, yo te ruego, si he hallado ahora gracia en tus ojos, toma mi presente de mi mano, pues que he visto tu rostro, como si hubiera visto el rostro de Dios; y te has contentado conmigo.
Y Esaú dijo: Permíteme ahora dejar contigo algunos de los que vienen conmigo. Y él dijo: ¿Para qué esto? halle yo gracia en los ojos de mi señor.
Siquem también dijo al padre y a los hermanos de ella: Halle yo gracia en vuestros ojos, y daré lo que me dijereis.
Así halló José gracia en sus ojos, y le servía; y él le hizo mayordomo de su casa, y entregó en su poder todo lo que tenía.
Pero Jehová estaba con José, y extendió a él su misericordia, y le dio gracia ante los ojos del jefe de la cárcel.
Y ellos respondieron: La vida nos has dado: hallemos gracia en ojos de mi señor, y seamos siervos de Faraón.
Y llegaron los días de Israel para morir, y llamó a José su hijo, y le dijo: Si he hallado ahora gracia en tus ojos, te ruego que pongas tu mano debajo de mi muslo, y harás conmigo misericordia y verdad; te ruego que no me entierres en Egipto;
Y pasados los días de su luto, habló José a los de la casa de Faraón, diciendo: Si he hallado ahora gracia en vuestros ojos, os ruego que habléis en oídos de Faraón, diciendo:
Y yo daré a este pueblo gracia en los ojos de los egipcios, y sucederá que cuando saliereis, no saldréis con las manos vacías;
Y Jehová dio gracia al pueblo en los ojos de los egipcios. También Moisés era un gran varón a los ojos de los siervos de Faraón, y a los ojos del pueblo, en la tierra de Egipto.
Y Jehová dio gracia al pueblo delante de los egipcios, y les prestaron; y ellos despojaron a los egipcios.
Y si ninguna de estas tres cosas hiciere, ella saldrá de gracia sin dinero.
Y estará sobre la frente de Aarón: y llevará Aarón el pecado de las cosas santas, que los hijos de Israel hubieren consagrado en todas sus santas ofrendas; y sobre su frente estará continuamente para que hallen gracia delante de Jehová.
Y dijo Moisés a Jehová: Mira, tú me dices a mí: Saca este pueblo: y tú no me has declarado a quién has de enviar conmigo: sin embargo, tú dices: Yo te he conocido por tu nombre, y has hallado también gracia en mis ojos.
Ahora, pues, si he hallado gracia en tus ojos, te ruego que me muestres ahora tu camino, para que te conozca, y que halle gracia en tus ojos; y considera que este pueblo es tu gente.
¿Y en qué se conocerá aquí que he hallado gracia en tus ojos, yo y tu pueblo, sino en andar tú con nosotros, y que yo y tu pueblo seamos apartados de todos los pueblos que están sobre la faz de la tierra?
Y Jehová dijo a Moisés: También haré esto que has dicho, por cuanto has hallado gracia en mis ojos, y te he conocido por tu nombre.
Y dijo: Si ahora, Señor, he hallado gracia en tus ojos, vaya ahora el Señor en medio de nosotros; porque éste es pueblo de dura cerviz; y perdona nuestra iniquidad y nuestro pecado, y tómanos por tu heredad.
Y dijo Moisés a Jehová: ¿Por qué has hecho mal a tu siervo? ¿Y por qué no he hallado gracia en tus ojos, que has puesto la carga de todo este pueblo sobre mí?
Y si así lo haces tú conmigo, yo te ruego que me des muerte, si he hallado gracia en tus ojos; y que yo no vea mi mal.
Por tanto, dijeron, si hemos hallado gracia en tus ojos, que se dé esta tierra a tus siervos en heredad, y no nos hagas pasar el Jordán.
y con lo más precioso de la tierra y su plenitud; y la gracia del que habitó en la zarza venga sobre la cabeza de José, y sobre la coronilla del consagrado de sus hermanos.
Y él respondió: Yo te ruego, que si he hallado gracia delante de ti, me des señal de que tú has hablado conmigo.
Y Ruth la moabita dijo a Noemí: Te ruego que me dejes ir al campo, y recogeré espigas en pos de aquel a cuyos ojos hallare gracia. Y ella le respondió: Ve, hija mía.
Ella entonces bajando su rostro se inclinó a tierra, y le dijo: ¿Por qué he hallado gracia en tus ojos para que tú me reconozcas, siendo yo extranjera?
Y ella dijo: Señor mío, halle yo gracia delante de tus ojos; porque me has consolado, y porque has hablado al corazón de tu sierva, no siendo yo como una de tus criadas.
Y él dijo: Bendita seas tú de Jehová, hija mía; pues has hecho mejor tu postrera gracia que la primera, no yendo tras los jóvenes, sean pobres o ricos.
Y ella dijo: Halle tu sierva gracia delante de tus ojos. Y la mujer siguió su camino, y comió, y no estuvo más triste.
Y el joven Samuel crecía, y tenía gracia delante de Dios y de los hombres.
Y Saúl envió a decir a Isaí: Yo te ruego que esté David conmigo; porque ha hallado gracia en mis ojos.
Y David volvió a jurar, diciendo: Tu padre sabe claramente que yo he hallado gracia delante de tus ojos, y dirá: No sepa esto Jonatán, para que no tenga pesar; y ciertamente, vive Jehová y vive tu alma, que apenas hay un paso entre mí y la muerte.
Y dijo: Te ruego que me dejes ir, porque tenemos sacrificio los de nuestro linaje en la ciudad, y mi hermano mismo me lo ha mandado; por tanto, si he hallado gracia en tus ojos, haré una escapada ahora, y visitaré a mis hermanos. Por esto pues no ha venido a la mesa del rey.
Pregunta a tus criados, que ellos te lo dirán. Hallen, por tanto, estos jóvenes gracia en tus ojos, pues hemos venido en buen día; te ruego que des lo que tuvieres a mano a tus siervos, y a tu hijo David.
Y David dijo a Aquís: Si he hallado ahora gracia en tus ojos, séame dado lugar en algunas de las ciudades de la tierra, donde habite; porque ¿ha de morar tu siervo contigo en la ciudad real?
Entonces los príncipes de los filisteos se enojaron contra él, y le dijeron: Envía a este hombre, que se vuelva al lugar que le señalaste, y no venga con nosotros a la batalla, no sea que en la batalla se nos vuelva enemigo; porque ¿con qué cosa volvería mejor a la gracia de su señor que con las cabezas de estos hombres?
Y Joab se postró en tierra sobre su rostro, e hizo reverencia, y después que bendijo al rey, dijo: Hoy ha entendido tu siervo que he hallado gracia en tus ojos, rey señor mío; pues que ha hecho el rey lo que su siervo ha dicho.
Y el rey dijo a Sadoc: Vuelve el arca de Dios a la ciudad; que si yo hallare gracia en los ojos de Jehová, Él me volverá, y me dejará verla y a su tabernáculo:
Entonces el rey dijo a Siba: He aquí, sea tuyo todo lo que tiene Mefiboset. Y Siba inclinándose, respondió: Rey señor mío, halle yo gracia delante de ti.
Y ahora por un breve momento se mostró la gracia de Jehová nuestro Dios, para hacer que nos quedase un remanente libre, y para darnos estaca en su lugar santo, a fin de alumbrar nuestros ojos nu.estro Dios y darnos un poco de vida en nuestra servidumbre.
y dije al rey: Si le place al rey, y si tu siervo ha hallado gracia delante de ti, envíame a Judá, a la ciudad de los sepulcros de mis padres, para que yo la reedifique.
Y la joven agradó en sus ojos, y halló gracia delante de él; por lo que hizo que prestamente se le diesen sus atavíos para purificarse y sus raciones, y siete doncellas escogidas de la casa del rey; y la llevó con sus doncellas a lo mejor de la casa de las mujeres.
Y el rey amó a Esther sobre todas las mujeres, y halló gracia y benevolencia delante de él más que todas las vírgenes; y puso la corona real en su cabeza, y la hizo reina en lugar de Vasti.
Y fue que cuando el rey vio a la reina Esther que estaba en el patio, ella obtuvo gracia en sus ojos; y el rey extendió a Esther el cetro de oro que tenía en su mano. Entonces se acercó Esther y tocó la punta del cetro.
Si he hallado gracia en los ojos del rey, y si place al rey otorgar mi petición y conceder lo que pido, que venga el rey con Amán al banquete que yo les prepararé; y mañana haré conforme a lo que el rey ha mandado.
Entonces la reina Esther respondió y dijo: Oh rey, si he hallado gracia en tus ojos, y si place al rey, me sea dada mi vida por mi petición, y mi pueblo por mi demanda.
Y dijo: Si place al rey, y si he hallado gracia delante de él, y si la cosa es recta delante del rey, y agradable yo en sus ojos, sea escrito para revocar las cartas del designio de Amán hijo de Amadata agageo, que escribió para destruir a los judíos que están en todas las provincias del rey.
Yo no callaré en cuanto a sus miembros, ni lo de sus fuerzas y la gracia de su disposición.
Te has hermoseado más que los hijos de los hombres; la gracia se derramó en tus labios; por tanto Dios te ha bendecido para siempre.
Porque sol y escudo es Jehová Dios: Gracia y gloria dará Jehová; no quitará el bien a los que en integridad andan.
Aparta de mí el camino de mentira; y concédeme con gracia tu ley.
porque adorno de gracia serán a tu cabeza, y collares a tu cuello.
y hallarás gracia y buena opinión ante los ojos de Dios y de los hombres.
Y serán vida a tu alma, y gracia a tu cuello.
Ciertamente Él escarnece a los escarnecedores, y a los humildes da gracia.
Adorno de gracia dará a tu cabeza; corona de hermosura te entregará.
El buen entendimiento da gracia; mas el camino de los trasgresores es duro.
De más estima es el buen nombre que las muchas riquezas; y la buena gracia más que la plata y el oro.
El que ama la pureza de corazón, por la gracia de sus labios el rey será su amigo.
El que reprende al hombre, hallará después mayor gracia que el que lisonjea con la lengua.
Engañosa es la gracia, y vana la hermosura: La mujer que teme a Jehová, ésa será alabada.
Las palabras de la boca del sabio son gracia; mas los labios del necio causan su propia ruina.
Así dice Jehová: El pueblo que escapó de la espada halló gracia en el desierto, cuando fui yo para hacer reposar a Israel.
Y Dios puso a Daniel en gracia y en buena voluntad con el príncipe de los eunucos;
Tomad con vosotros palabras, y volved a Jehová, y decidle: Quita toda iniquidad, y acéptanos con gracia, y daremos becerros de nuestros labios.
Yo sanaré su rebelión, los amaré de pura gracia; porque mi ira se apartó de ellos.
¿Quién eres tú, oh gran monte? Delante de Zorobabel serás reducido a llanura; él sacará la primera piedra con aclamaciones, diciendo: Gracia, gracia a ella.
Y derramaré sobre la casa de David, y sobre los moradores de Jerusalén, el espíritu de gracia y de oración; y mirarán a mí, a quien traspasaron, y harán llanto sobre Él, como llanto sobre unigénito, afligiéndose sobre Él como quien se aflige sobre primogénito.
Sanad enfermos, limpiad leprosos, resucitad muertos, echad fuera demonios; de gracia recibisteis, dad de gracia.
Entonces el ángel le dijo: María, no temas, porque has hallado gracia delante de Dios.
Y el niño crecía, y se fortalecía en espíritu, lleno de sabiduría; y la gracia de Dios era sobre Él.
Y Jesús crecía en sabiduría y en estatura, y en gracia para con Dios y los hombres.
Y todos daban testimonio de Él, y estaban maravillados de las palabras de gracia que salían de su boca, y decían: ¿No es Éste el hijo de José?
Porque si amáis a los que os aman, ¿qué gracia tenéis? Porque también los pecadores aman a los que los aman.
Y si hacéis bien a los que os hacen bien, ¿qué gracia tenéis? Porque también los pecadores hacen lo mismo.
Y si prestáis a aquellos de quienes esperáis recibir, ¿qué gracia tenéis? Porque también los pecadores prestan a los pecadores, para recibir otro tanto.
Y el Verbo fue hecho carne, y habitó entre nosotros (y vimos su gloria, gloria como del unigénito del Padre), lleno de gracia y de verdad.
Y de su plenitud tomamos todos, y gracia por gracia.
Porque la ley por Moisés fue dada, pero la gracia y la verdad vinieron por Jesucristo.
Y con gran poder los apóstoles daban testimonio de la resurrección del Señor Jesús; y abundante gracia había sobre todos ellos.
y le libró de todas sus aflicciones, y le dio gracia y sabiduría en la presencia de Faraón, rey de Egipto, el cual le puso por gobernador sobre Egipto y sobre toda su casa.
el cual halló gracia delante de Dios, y pidió hacer tabernáculo para el Dios de Jacob.
El cual, cuando llegó y vio la gracia de Dios, se regocijó, y exhortó a todos a que con propósito de corazón permaneciesen en el Señor.
Y despedida la congregación, muchos de los judíos y de los religiosos prosélitos siguieron a Pablo y a Bernabé; quienes hablándoles, les persuadían a que permaneciesen en la gracia de Dios.
Con todo eso, ellos se detuvieron allí mucho tiempo, hablando con denuedo en el Señor, el cual daba testimonio a la palabra de su gracia, concediendo que señales y milagros fuesen hechos por las manos de ellos.
Y de allí navegaron a Antioquía, donde habían sido encomendados a la gracia de Dios para la obra que habían cumplido.
Antes creemos que por la gracia del Señor Jesucristo somos salvos, del mismo modo que ellos.
y Pablo, escogiendo a Silas, partió encomendado por los hermanos a la gracia de Dios,
Y queriendo él pasar a Acaya, los hermanos escribieron, exhortando a los discípulos que le recibiesen; y cuando él llegó, ayudó mucho a los que por la gracia habían creído.
Pero de ninguna cosa hago caso, ni estimo mi vida preciosa para mí mismo; con tal que acabe mi carrera con gozo, y el ministerio que recibí del Señor Jesús, para dar testimonio del evangelio de la gracia de Dios.
Y ahora, hermanos, os encomiendo a Dios y a la palabra de su gracia, la cual es poderosa para sobreedificaros, y daros herencia con todos los santificados.
por quien recibimos la gracia y el apostolado, para obediencia de la fe en todas las naciones, por su nombre;
A todos los que estáis en Roma, amados de Dios, llamados a ser santos. Gracia y paz a vosotros, de Dios nuestro Padre y del Señor Jesucristo.
siendo justificados gratuitamente por su gracia mediante la redención que es en Cristo Jesús;
Ahora bien, al que obra no se le cuenta el salario como gracia, sino como deuda.
Resutados de la Búsqueda continuados...
Resultados de Búsqueda por Versiones
Resultados de Búsqueda por Libro
Artículos Relacionados
- Abundancia, espiritual
- Acción de Gracias
- Acción de Gracias antes de las comidas
- Actitud hacia la gente de Dios
- Amabilidad
- Bendiciones
- Creciendo en Gracia
- Dando, de Talentos
- Día de Acción de Gracias, ofrecidos
- Favor divino
- Favor humano
- Fuerza espiritual,
- Gracia salvadora
- Gracia, Descripción de
- Gracia, en OT
- Gracia, y Jesucristo
- Gracias ofreciendo
- Habilitación de gracia
- Justificación En virtud del Evangelio
- La fuente de la gracia,
- La generosidad de Dios,
- La gracia de Dios,
- La gracia y la salvación
- La gracia y la vida cristiana
- La gracia, en las relaciones humanas
- La gracia, y el Espíritu Santo
- La misericordia de Dios, la respuesta a
- La oración, como alabanza y acción de gracias.
- La salvación, la necesidad y la base de
- La ética, y la gracia
- Riqueza de gracia
- Crecer
- Dar las gracias
- Dar las gracias al pueblo
- El favor
- El padre
- La adopción por la gracia de Dios
- La apostasía
- La belleza de las mujeres
- La generosidad
- La gracia
- La gracia dada a los hombres
- La gracia de Cristo
- La gracia de Dios
- La gracia de Dios
- La justificación por la gracia
- La misericordia y la gracia
- La muerte que provoca el pecado
- La paz para vosotros
- Los dones de Dios
- Los privilegios de los santos
- Ser salvado
- Tener fe