'Somos' en la Biblia
Y Abram dijo a Lot: Te ruego que no haya contienda entre nosotros, ni entre mis pastores y tus pastores, porque somos hermanos.
Y Jacob dijo a {los pastores:} Hermanos míos, ¿de dónde sois? Y ellos dijeron: Somos de Harán.
Todos nosotros somos hijos de un mismo padre; somos {hombres} honrados, tus siervos no son espías.
Entonces se dijeron el uno al otro: Verdaderamente somos culpables en cuanto a nuestro hermano, porque vimos la angustia de su alma cuando nos rogaba, y no lo escuchamos, por eso ha venido sobre nosotros esta angustia.
Pero nosotros le dijimos: ``Somos {hombres} honrados, no somos espías.
``Somos doce hermanos, hijos de nuestro padre; uno ya no existe, y el menor está hoy con nuestro padre en la tierra de Canaán."
Entonces dijo Judá: ¿Qué podemos decir a mi señor? ¿Qué podemos hablar y cómo nos justificaremos? Dios ha descubierto la iniquidad de tus siervos; he aquí, somos esclavos de mi señor, tanto nosotros como aquel en cuyo poder fue encontrada la copa.
Entonces sus hermanos vinieron también y se postraron delante de él, y dijeron: He aquí, somos tus siervos.
Entonces Faraón envió llamar a Moisés y Aarón y les dijo: Esta vez he pecado; el SEÑOR es el justo, y yo y mi pueblo somos los impíos.
y por la mañana veréis la gloria del SEÑOR, pues El ha oído vuestras murmuraciones contra el SEÑOR; ¿y qué somos nosotros para que murmuréis contra nosotros?
Y Moisés dijo: {Esto sucederá} cuando el SEÑOR os dé carne para comer por la tarde, y pan hasta saciar{os} por la mañana; porque el SEÑOR ha oído vuestras murmuraciones contra El. Pues ¿qué somos nosotros? Vuestras murmuraciones no son contra nosotros, sino contra el SEÑOR.
Respondieron ellos a Josué: Somos tus siervos. Y Josué les dijo: ¿Quiénes sois, y de dónde venís?
Y nuestros ancianos y todos los habitantes de nuestro país nos hablaron, diciendo: ``Tomad provisiones en vuestra mano para el camino, id a su encuentro y decidles: `Somos vuestros siervos; haced, pues, pacto con nosotros.'"
Y Josué dijo al pueblo: Vosotros sois testigos contra vosotros mismos de que habéis escogido al SEÑOR para servirle. Y dijeron: Testigos somos.
Y todo el pueblo que {estaba} en el atrio, y los ancianos, dijeron: Testigos {somos.} Haga el SEÑOR a la mujer que entra en tu casa como a Raquel y a Lea, las cuales edificaron la casa de Israel; y que tú adquieras riquezas en Efrata y seas célebre en Belén.
Cuando David lo supo después, dijo: Yo y mi reino somos inocentes para siempre delante del SEÑOR de la sangre de Abner, hijo de Ner.
Entonces todas las tribus de Israel fueron a David, en Hebrón, y dijeron: Henos aquí, hueso tuyo y carne tuya somos.
Pues ciertamente moriremos; somos como el agua derramada en tierra que no se vuelve a recoger. Pero Dios no quita la vida, sino designa medios para que el desterrado no sea alejado de él.
Y el que {estaba} a cargo de la casa, y el que {estaba} sobre la ciudad, los ancianos, y los ayos {de los hijos,} enviaron {palabra} a Jehú, diciendo: Somos tus siervos, haremos todo lo que nos digas, a nadie proclamaremos rey; haz lo que te parezca bien.
Jehú encontró a los parientes de Ocozías, rey de Judá, y dijo: ¿Quiénes sois vosotros? Y ellos respondieron: Somos parientes de Ocozías; y hemos descendido para saludar a los hijos del rey y a los hijos de la reina madre.
Entonces se congregó todo Israel en torno a David en Hebrón, y dijeron: He aquí, hueso tuyo y carne tuya somos.
Entonces el Espíritu vino sobre Amasai, jefe de los treinta, {el cual dijo:} Tuyos {somos,} oh David, y contigo {estamos,} hijo de Isaí. Paz, paz a ti, y paz al que te ayuda; ciertamente tu Dios te ayuda. Entonces David los recibió y los hizo capitanes del grupo.
Porque somos forasteros y peregrinos delante de ti, como lo fueron todos nuestros padres; como una sombra son nuestros días sobre la tierra, y no hay esperanza.
Y así nos respondieron, diciendo: ``Somos los siervos del Dios del cielo y de la tierra, y estamos reedificando el templo que fue construido hace muchos años, el cual un gran rey de Israel edificó y terminó.
Porque siervos somos; mas en nuestra servidumbre, nuestro Dios no nos ha abandonado, sino que ha extendido {su} misericordia sobre nosotros ante los ojos de los reyes de Persia, dándonos ánimo para levantar la casa de nuestro Dios y para restaurar sus ruinas, y dándonos una muralla en Judá y en Jerusalén.
Oye, oh Dios nuestro, cómo somos despreciados. Devuelve su oprobio sobre sus cabezas y entrégalos por despojo en una tierra de cautividad.
Había quienes decían: Nosotros, nuestros hijos y nuestras hijas somos muchos; por tanto, que se nos dé trigo para que comamos y vivamos.
He aquí, hoy somos esclavos, y en cuanto a la tierra que diste a nuestros padres para comer de sus frutos y de sus bienes, he aquí, somos esclavos en ella.
Porque nosotros somos de ayer y nada sabemos, pues nuestros días sobre la tierra son como una sombra.
¿Por qué somos considerados como bestias, y torpes a vuestros ojos?
Sabed que El, el SEÑOR, es Dios; El nos hizo, y no nosotros {a nosotros mismos;} pueblo suyo {somos} y ovejas de su prado.
Porque El sabe de qué estamos hechos, se acuerda de que somos {sólo} polvo.
Vamos palpando la pared como ciegos, y andamos a tientas como los que no tienen ojos; tropezamos al mediodía como al anochecer, entre los robustos {somos} como muertos.
Todos nosotros somos como el inmundo, y como trapo de inmundicia todas nuestras obras justas; todos nos marchitamos como una hoja, y nuestras iniquidades, como el viento, nos arrastran.
Mas ahora, oh SEÑOR, tú eres nuestro Padre, nosotros el barro, y tú nuestro alfarero; obra de tus manos somos todos nosotros.
No te enojes en exceso, oh SEÑOR, ni para siempre te acuerdes de la iniquidad; he aquí, mira, te rogamos, todos nosotros somos tu pueblo.
` ¿Cómo decís: ``Somos sabios, y la ley del SEÑOR está con nosotros"?, cuando he aquí, {la} ha cambiado en mentira la pluma mentirosa de los escribas.
¿Por qué has de ser como hombre desalentado, como guerrero incapaz de salvar? Sin embargo tú estás en medio nuestro, oh SEÑOR, y por tu nombre somos llamados; ¿no nos abandones!
¿Cómo podéis decir: ``Somos poderosos guerreros, y hombres valientes para la guerra"?
Todos los que los hallaban, los devoraban; y sus enemigos han dicho: ``No somos culpables, porque ellos han pecado contra el SEÑOR, morada de justicia, el SEÑOR, esperanza de sus padres."
Hijo de hombre, los que viven en estos lugares desolados de la tierra de Israel, dicen: Uno solo era Abraham, y poseyó la tierra; así que a nosotros que somos muchos se nos ha dado la tierra en posesión.
Y le preguntó: ¿Cómo te llamas? Y él le dijo*: Me llamo Legión, porque somos muchos.
Así también vosotros, cuando hayáis hecho todo lo que se os ha ordenado, decid: ``Siervos inútiles somos; hemos hecho {sólo} lo que debíamos haber hecho."
Ellos le contestaron: Somos descendientes de Abraham y nunca hemos sido esclavos de nadie. ¿Cómo dices tú: ``Seréis libres"?
Entonces lo insultaron, y le dijeron: Tú eres discípulo de ese {hombre;} pero nosotros somos discípulos de Moisés.
{Algunos} de los fariseos que estaban con El oyeron esto y le dijeron: ¿Acaso nosotros también somos ciegos?
Yo y el Padre somos uno.
La gloria que me diste les he dado, para que sean uno, así como nosotros somos uno:
A este Jesús resucitó Dios, de lo cual todos nosotros somos testigos.
y disteis muerte al Autor de la vida, al que Dios resucitó de entre los muertos, de lo cual nosotros somos testigos.
Y nosotros somos testigos de estas cosas; y {también} el Espíritu Santo, el cual Dios ha dado a los que le obedecen.
Y nosotros somos testigos de todas las cosas que hizo en la tierra de los judíos y en Jerusalén. Y también le dieron muerte, colgándole en una cruz.
y diciendo: Varones, ¿por qué hacéis estas cosas? Nosotros también somos hombres de igual naturaleza que vosotros, y os anunciamos el evangelio para que os volváis de estas cosas vanas a un Dios vivo, QUE HIZO EL CIELO, LA TIERRA, EL MAR, Y TODO LO QUE EN ELLOS HAY;
Creemos más bien que somos salvos por la gracia del Señor Jesús, de la misma manera que ellos también lo son.
y proclaman costumbres que no nos es lícito aceptar ni observar, puesto que somos romanos.
Mas Pablo les dijo: Aunque somos ciudadanos romanos, nos han azotado públicamente sin hacernos juicio y nos han echado a la cárcel; ¿y ahora nos sueltan en secreto? ¡De ninguna manera! Que ellos mismos vengan a sacarnos.
porque en El vivimos, nos movemos y existimos, así como algunos de vuestros mismos poetas han dicho: ``Porque también nosotros somos linaje suyo."
¿Entonces qué? ¿Somos nosotros mejores {que ellos}? De ninguna manera; porque ya hemos denunciado que tanto judíos como griegos están todos bajo pecado;
Así que, hermanos, somos deudores, no a la carne, para vivir conforme a la carne,
El Espíritu mismo da testimonio a nuestro espíritu de que somos hijos de Dios,
Tal como está escrito: POR CAUSA TUYA SOMOS PUESTOS A MUERTE TODO EL DIA; SOMOS CONSIDERADOS COMO OVEJAS PARA EL MATADERO.
Pero en todas estas cosas somos más que vencedores por medio de aquel que nos amó.
así nosotros, que somos muchos, somos un cuerpo en Cristo e individualmente miembros los unos de los otros.
pues si vivimos, para el Señor vivimos, y si morimos, para el Señor morimos; por tanto, ya sea que vivamos o que muramos, del Señor somos.
Así que, nosotros los que somos fuertes, debemos sobrellevar las flaquezas de los débiles y no agradarnos a nosotros mismos.
Porque nosotros somos colaboradores de Dios, {y} vosotros sois labranza de Dios, edificio de Dios.
Nosotros somos necios por amor de Cristo, mas vosotros, prudentes en Cristo; nosotros somos débiles, mas vosotros, fuertes; vosotros sois distinguidos, mas nosotros, sin honra.
Hasta el momento presente pasamos hambre y sed, andamos mal vestidos, somos maltratados y no tenemos dónde vivir;
nos agotamos trabajando con nuestras propias manos; cuando nos ultrajan, bendecimos; cuando somos perseguidos, lo soportamos;
sin embargo, para nosotros {hay} un solo Dios, el Padre, de quien proceden todas las cosas y nosotros somos para El; y un Señor, Jesucristo, por quien son todas las cosas y por medio del cual {existimos} nosotros.
Pero la comida no nos recomendará a Dios, {pues} ni somos menos si no comemos, ni {somos} más si comemos.
Puesto que el pan es uno, nosotros, que somos muchos, somos un cuerpo; pues todos participamos de aquel mismo pan.
¿O provocaremos a celos al Señor? ¿Somos, acaso, más fuertes que El?
Pero cuando somos juzgados, el Señor nos disciplina para que no seamos condenados con el mundo.
Aún más, somos hallados testigos falsos de Dios, porque hemos testificado contra Dios que El resucitó a Cristo, a quien no resucitó, si en verdad los muertos no resucitan.
Si hemos esperado en Cristo para esta vida solamente, somos, de todos los hombres, los más dignos de lástima.
el cual nos consuela en toda tribulación nuestra, para que nosotros podamos consolar a los que están en cualquier aflicción con el consuelo con que nosotros mismos somos consolados por Dios.
Pero si somos atribulados, es para vuestro consuelo y salvación; o si somos consolados, es para vuestro consuelo, que obra al soportar las mismas aflicciones que nosotros también sufrimos.
así como también nos habéis entendido en parte, que nosotros somos el motivo de vuestra gloria, así como también vosotros la nuestra en el día de nuestro Señor Jesús.
No es que queramos tener control de vuestra fe, sino que somos colaboradores {con vosotros} para vuestro gozo; porque en la fe permanecéis firmes.
Porque fragante aroma de Cristo somos para Dios entre los que se salvan y entre los que se pierden;
Pues no somos como muchos, que comercian con la palabra de Dios, sino que con sinceridad, como de parte de Dios {y} delante de Dios hablamos en Cristo.
y no {somos} como Moisés, {que} ponía un velo sobre su rostro para que los hijos de Israel no fijaran su vista en el fin de aquello que había de desvanecerse.
Por tanto, conociendo el temor del Señor, persuadimos a los hombres, pero a Dios somos manifiestos, y espero que también seamos manifiestos en vuestras conciencias.
Por tanto, somos embajadores de Cristo, como si Dios rogara por medio de nosotros; en nombre de Cristo os rogamos: ¡Reconciliaos con Dios!
¿O qué acuerdo tiene el templo de Dios con los ídolos? Porque nosotros somos el templo del Dios vivo, como Dios dijo: HABITARE EN ELLOS, Y ANDARE ENTRE ELLOS; Y SERE SU DIOS, Y ELLOS SERAN MI PUEBLO.
Vosotros veis las cosas según la apariencia exterior. Si alguno tiene confianza en sí mismo de que es de Cristo, considere esto dentro de sí otra vez: que así como él es de Cristo, también lo somos nosotros.
Esto tenga en cuenta tal persona: que lo que somos en palabra por carta, estando ausentes, lo {somos} también en hechos, estando presentes.
Porque ciertamente El fue crucificado por debilidad, pero vive por el poder de Dios. Así también nosotros somos débiles en El, sin embargo, viviremos con El por el poder de Dios para con vosotros.
Pues nos regocijamos cuando nosotros somos débiles, pero vosotros sois fuertes; también oramos por esto: que vosotros seáis hechos perfectos.
Nosotros {somos} judíos de nacimiento y no pecadores de entre los gentiles;
Así que, hermanos, no somos hijos de la sierva, sino de la libre.
Porque somos hechura suya, creados en Cristo Jesús para {hacer} buenas obras, las cuales Dios preparó de antemano para que anduviéramos en ellas.
Por tanto, dejando a un lado la falsedad, HABLAD VERDAD CADA CUAL CON SU PROJIMO, porque somos miembros los unos de los otros.
porque somos miembros de su cuerpo.
porque nosotros somos la {verdadera} circuncisión, que adoramos en el Espíritu de Dios y nos gloriamos en Cristo Jesús, no poniendo la confianza en la carne,
Así que todos los que somos perfectos, tengamos esta {misma} actitud; y si en algo tenéis una actitud distinta, eso también os lo revelará Dios;
porque todos vosotros sois hijos de la luz e hijos del día. No somos de la noche ni de las tinieblas.
Pero puesto que nosotros somos del día, seamos sobrios, habiéndonos puesto la coraza de la fe y del amor, y por yelmo la esperanza de la salvación.
si somos infieles, El permanece fiel, pues no puede negarse a sí mismo.