'Tengo' en la Biblia
Entonces Jesús, llamando junto a sí a sus discípulos, {les} dijo: Tengo compasión de la multitud, porque hace ya tres días que están conmigo y no tienen qué comer; y no quiero despedirlos sin comer, no sea que desfallezcan en el camino.
y gritando a gran voz, dijo*: ¿Qué tengo yo que ver contigo, Jesús, Hijo del Dios Altísimo? Te imploro por Dios que no me atormentes.
Tengo compasión de la multitud porque hace ya tres días que están conmigo y no tienen qué comer;
Pues yo también soy hombre puesto bajo autoridad, y tengo soldados bajo mis órdenes; y digo a éste: ``Ve", y va; y a otro: ``Ven", y viene; y a mi siervo: ``Haz esto", y lo hace.
Y respondiendo Jesús, le dijo: Simón, tengo algo que decirte: Y él dijo*: Di, Maestro.
Al ver a Jesús, gritó y cayó delante de El, y dijo en alta voz: ¿Qué tengo yo que ver contigo, Jesús, Hijo del Dios Altísimo? Te ruego que no me atormentes.
Y he aquí, un hombre de la multitud gritó, diciendo: Maestro, te suplico que veas a mi hijo, pues es el único que tengo,
porque un amigo mío ha llegado de viaje a mi {casa,} y no tengo nada que ofrecerle";
Y pensaba dentro de sí, diciendo: `` ¿Qué haré, ya que no tengo dónde almacenar mis cosechas?"
Pero de un bautismo tengo que ser bautizado, y ¡cómo me angustio hasta que se cumpla!
Y el mayordomo se dijo a sí mismo: `` ¿Qué haré? Pues mi señor me quita la administración. No tengo fuerzas para cavar, y me da vergüenza mendigar.
pues tengo cinco hermanos, de modo que él los prevenga, para que ellos no vengan también a este lugar de tormento."
Mirad mis manos y mis pies, que soy yo mismo; palpadme y ved, porque un espíritu no tiene carne ni huesos como veis que yo tengo.
Respondió la mujer y le dijo: No tengo marido. Jesús le dijo*: Bien has dicho: ``No tengo marido",
Pero El les dijo: Yo tengo para comer una comida que vosotros no sabéis.
El enfermo le respondió: Señor, no tengo a nadie que me meta en el estanque cuando el agua es agitada; y mientras yo llego, otro baja antes que yo.
Pero el testimonio que yo tengo es mayor que {el de} Juan; porque las obras que el Padre me ha dado para llevar a cabo, las mismas obras que yo hago, dan testimonio de mí, de que el Padre me ha enviado.
Tengo mucho que decir y juzgar de vosotros, pero el que me envió es veraz; y yo, las cosas que oí de El, éstas digo al mundo.
¿Quién de vosotros me prueba {que tengo} pecado? Y si digo verdad, ¿por qué vosotros no me creéis?
Jesús respondió: Yo no tengo ningún demonio, sino que honro a mi Padre, y vosotros me deshonráis a mí.
Tengo otras ovejas que no son de este redil; a ésas también me es necesario traerlas, y oirán mi voz, y serán un rebaño {con} un solo pastor.
Nadie me la quita, sino que yo la doy de mi propia voluntad. Tengo autoridad para darla, y tengo autoridad para tomarla de nuevo. Este mandamiento recibí de mi Padre.
Aún tengo muchas cosas que deciros, pero ahora no {las} podéis soportar.
Pilato entonces le dijo*: ¿A mí no me hablas? ¿No sabes que tengo autoridad para soltarte, y que tengo autoridad para crucificarte?
Después de esto, sabiendo Jesús que todo se había ya consumado, para que se cumpliera la Escritura, dijo*: Tengo sed.
Pero Pedro dijo: No tengo plata ni oro, mas lo que tengo, te doy: en el nombre de Jesucristo el Nazareno, ¡anda!
porque yo estoy contigo, y nadie te atacará para hacerte daño, porque yo tengo mucho pueblo en esta ciudad.
Pero no tengo nada definido sobre él para escribirle a mi señor. Por eso lo he traído ante vosotros, y especialmente ante ti, rey Agripa, para que después de que se le interrogue, yo tenga algo que escribir.
Tengo obligación tanto para con los griegos como para con los bárbaros, para con los sabios como para con los ignorantes.
de que tengo gran tristeza y continuo dolor en mi corazón.
En cuanto a las doncellas no tengo mandamiento del Señor, pero doy mi opinión como el que habiendo recibido la misericordia del Señor es digno de confianza.
Pero en mi opinión, será más feliz si se queda como está; y creo que yo también tengo el Espíritu de Dios.
Porque si predico el evangelio, no tengo nada de qué gloriarme, pues estoy bajo el deber {de hacerlo;} pues ¡ay de mí si no predico el evangelio!
Porque si hago esto voluntariamente, tengo recompensa; pero si {lo hago} en contra de mi voluntad, un encargo se me ha confiado.
Si yo hablara lenguas humanas y angélicas, pero no tengo amor, he llegado a ser {como} metal que resuena o címbalo que retiñe.
Y si tuviera {el don de} profecía, y entendiera todos los misterios y todo conocimiento, y si tuviera toda la fe como para trasladar montañas, pero no tengo amor, nada soy.
Y si diera todos mis bienes para dar de comer {a los pobres,} y si entregara mi cuerpo para ser quemado, pero no tengo amor, de nada me aprovecha.
Pues por la mucha aflicción y angustia de corazón os escribí con muchas lágrimas, no para entristeceros, sino para que conozcáis el amor que tengo especialmente por vosotros.
Mucha es mi confianza en vosotros, tengo mucho orgullo de vosotros, lleno estoy de consuelo y sobreabundo de gozo en toda nuestra aflicción.
Me gozo de que en todo tengo confianza en vosotros.
Si tengo que gloriarme, me gloriaré en cuanto a mi debilidad.
Yo tengo confianza respecto a vosotros en el Señor de que no optaréis por otro punto de vista; pero el que os perturba llevará su castigo, quienquiera que sea.
Pues a nadie {más} tengo del mismo sentir mío {y} que esté sinceramente interesado en vuestro bienestar.
Pero lo he recibido todo y tengo abundancia; estoy bien abastecido, habiendo recibido de Epafrodito lo que habéis enviado: fragante aroma, sacrificio aceptable, agradable a Dios.
Porque quiero que sepáis qué gran lucha tengo por vosotros y por los que están en Laodicea, y por todos los que no me han visto en persona,
Porque tengo presente la fe sincera {que hay} en ti, la cual habitó primero en tu abuela Loida y {en} tu madre Eunice, y estoy seguro que en ti también.
Por lo cual, aunque tengo mucha libertad en Cristo para mandarte {hacer} lo que conviene,
no obstante, por causa del amor {que te tengo, te} ruego, siendo como soy, Pablo, anciano, y ahora también prisionero de Cristo Jesús,
Pero alguno dirá: Tú tienes fe y yo tengo obras. Muéstrame tu fe sin las obras, y yo te mostraré mi fe por mis obras.
Aunque tengo muchas cosas que escribiros, no quiero {hacerlo} con papel y tinta, sino que espero ir a vosotros y hablar cara a cara, para que vuestro gozo sea completo.
No tengo mayor gozo que éste: oír que mis hijos andan en la verdad.
y el que vive, y estuve muerto; y he aquí, estoy vivo por los siglos de los siglos, y tengo las llaves de la muerte y del Hades.
`Pero tengo {esto} contra ti: que has dejado tu primer amor.
`Pero tengo unas pocas cosas contra ti, porque tienes ahí a los que mantienen la doctrina de Balaam, que enseñaba a Balac a poner tropiezo ante los hijos de Israel, a comer cosas sacrificadas a los ídolos y a cometer {actos de} inmoralidad.
`Pero tengo {esto} contra ti: que toleras a esa mujer Jezabel, que se dice ser profetisa, y enseña y seduce a mis siervos a que cometan actos inmorales y coman cosas sacrificadas a los ídolos.
`Porque dices: ``Soy rico, me he enriquecido y de nada tengo necesidad"; y no sabes que eres un miserable y digno de lástima, y pobre, ciego y desnudo,