Parallel Verses
La Biblia de las Américas
El Seol y el Abadón nunca se sacian; tampoco se sacian los ojos del hombre.
Biblia del Jubileo 2000 (Grátis)
El Seol y el infierno nunca se sacian; así los ojos del hombre nunca están satisfechos.
Reina Valera 1909
El sepulcro y la perdición nunca se hartan: Así los ojos del hombre nunca están satisfechos.
La Nueva Biblia de los Hispanos
El Seol y el Abadón nunca se sacian; Tampoco se sacian los ojos del hombre.
Spanish: Sagradas Escrituras 1569
El sepulcro y la perdición nunca se sacian; así los ojos del hombre nunca están satisfechos.
Spanish: Reina Valera Gómez
El infierno y la perdición nunca se hartan: Así los ojos del hombre nunca se sacian.
New American Standard Bible
Sheol and Abaddon are never satisfied, Nor are the eyes of man ever satisfied.
Artículos
Referencias Cruzadas
Proverbios 30:15-16
La sanguijuela tiene dos hijas, {que dicen:} ¡Da{me!} ¡Da{me!} Hay tres cosas que no se saciarán, {y} una cuarta que no dirá: ¡Basta!
Eclesiastés 1:8
Todas las cosas son fatigosas, el hombre no puede expresar{las.} No se sacia el ojo de ver, ni se cansa el oído de oír.
Habacuc 2:5
Además, el vino traiciona al hombre arrogante, de modo que no se queda en casa. Porque ensancha su garganta como el Seol, y es como la muerte, que nunca se sacia; reúne para sí todas las naciones, y recoge para sí todos los pueblos.
Eclesiastés 6:7
Todo el trabajo del hombre es para su boca, sin embargo su apetito no se sacia.
Job 26:6
Desnudo está el Seol ante El, y el Abadón no tiene cobertura.
Proverbios 15:11
El Seol y el Abadón están delante del SEÑOR, ¿cuánto más los corazones de los hombres!
Proverbios 23:5
Cuando pones tus ojos en ella, ya no está. Porque {la riqueza} ciertamente se hace alas, como águila que vuela {hacia} los cielos.
Eclesiastés 2:10-11
Y de todo cuanto mis ojos deseaban, nada les negué, ni privé a mi corazón de ningún placer, porque mi corazón gozaba de todo mi trabajo, y ésta fue la recompensa de toda mi labor.
Eclesiastés 4:8
Había un {hombre} solo, sin sucesor, que no tenía hijo ni hermano, sin embargo, no había fin a todo su trabajo. En verdad, sus ojos no se saciaban de las riquezas, {y nunca se preguntó:} ¿Para quién trabajo yo y privo a mi vida del placer? También esto es vanidad y tarea penosa.
Eclesiastés 5:10-11
El que ama el dinero no se saciará de dinero, y el que ama la abundancia no {se saciará de} ganancias. También esto es vanidad.
Jeremías 22:17
Mas tus ojos y tu corazón sólo están para tu propia ganancia, para derramar sangre inocente, y para practicar la opresión y la violencia.
1 Juan 2:16
Porque todo lo que hay en el mundo, la pasión de la carne, la pasión de los ojos y la arrogancia de la vida, no proviene del Padre, sino del mundo.