'Acaso' en la Biblia
Entonces el SEÑOR dijo a Caín: ¿Dónde está tu hermano Abel? Y él respondió: No sé. ¿Soy yo acaso guardián de mi hermano?
Y Labán dijo a Jacob: ¿Acaso porque eres mi pariente has de servirme de balde? Hazme saber cuál será tu salario.
Y sus hermanos le dijeron: ¿Acaso reinarás sobre nosotros? ¿O acaso te enseñorearás sobre nosotros? Y lo odiaron aún más por causa de sus sueños y de sus palabras.
Y él {lo} contó a su padre y a sus hermanos; y su padre lo reprendió, y le dijo: ¿Qué es este sueño que has tenido? ¿Acaso yo, tu madre y tus hermanos vendremos a inclinarnos hasta el suelo ante ti?
Pero ellos dijeron: El hombre nos preguntó específicamente acerca de nosotros y nuestros familiares, diciendo: `` ¿Vive aún vuestro padre? ¿Tenéis {otro} hermano?" Y nosotros contestamos sus preguntas. ¿Acaso podíamos nosotros saber que él diría: ``Traed a vuestro hermano"?
Pero José les dijo: No temáis, ¿acaso estoy yo en lugar de Dios?
Y dijeron a Moisés: ¿Acaso no había sepulcros en Egipto para que nos sacaras a morir en el desierto? ¿Por qué nos has tratado de esta manera, sacándonos de Egipto?
¿Pues en qué se conocerá que he hallado gracia ante tus ojos, yo y tu pueblo? ¿No es acaso en que tú vayas con nosotros, para que nosotros, yo y tu pueblo, nos distingamos de todos los {demás} pueblos que están sobre la faz de la tierra?
¿Acaso concebí yo a todo este pueblo? ¿Fui yo quien lo dio a luz para que me dijeras: ``Llévalo en tu seno, como la nodriza lleva al niño de pecho, a la tierra que yo juré a sus padres"?
Entonces Balac dijo a Balaam: ¿No envié a llamarte con urgencia? ¿Por qué no viniste a mí? ¿Acaso no soy capaz de honrarte?
Balaam respondió a Balac: Mira, ahora he venido a ti. ¿Hay algo, acaso, que pueda decir? La palabra que Dios ponga en mi boca, ésa diré.
Cuando sities una ciudad por muchos días, peleando contra ella para tomarla, no destruirás sus árboles metiendo el hacha contra ellos; no los talarás, pues de ellos puedes comer. Porque, ¿es acaso el árbol del campo un hombre para que le pongas sitio?
`` ¿Acaso no han hallado el botín {y se lo} están repartiendo? ¿Una doncella, dos doncellas para cada guerrero; para Sísara un botín de tela de colores, un botín de tela de colores bordada, tela de colores de doble bordadura en el cuello del victorioso?"
Entonces Gaal, hijo de Ebed, dijo: ¿Quién es Abimelec y quién es Siquem para que le sirvamos? ¿No es acaso hijo de Jerobaal, y {no es} Zebul su oficial? Servid a los hombres de Hamor, padre de Siquem; pero ¿por qué hemos de servirle a él?
``Ahora pues, ¿eres tú mejor que Balac, hijo de Zipor, rey de Moab? ¿Acaso luchó él con Israel, o acaso peleó contra ellos?
Pero Noemí dijo: Volveos, hijas mías. ¿Por qué queréis ir conmigo? ¿Acaso tengo aún hijos en mis entrañas para que sean vuestros maridos?
Y {Goliat} se paró y gritó a las filas de Israel, diciéndoles: ¿Para qué habéis salido a poneros en orden de batalla? ¿Acaso no soy yo filisteo y vosotros siervos de Saúl? Escogeos un hombre y que venga contra mí.
Y el filisteo dijo a David: ¿Acaso soy un perro, que vienes contra mí con palos? Y el filisteo maldijo a David por sus dioses.
Se encendió la ira de Saúl contra Jonatán, y le dijo: ¡Hijo de perversa {y} rebelde! ¿Acaso no sé yo que prefieres al hijo de Isaí, para tu propia vergüenza y para vergüenza de la desnudez de tu madre?
¿Acaso me hacen falta locos, que me habéis traído a éste para que haga de loco en mi presencia? ¿Va a entrar éste en mi casa?
¿Acaso comencé hoy a consultar a Dios por él? Lejos esté esto de mí. No culpe el rey de nada a su siervo {ni} a ninguno de la casa de mi padre, porque tu siervo no sabe nada de todo este asunto.
Entonces Abner se enojó mucho por las palabras de Is-boset, y dijo: ¿Acaso soy yo cabeza de perro que pertenece a Judá? Hoy he mostrado bondad hacia la casa de tu padre Saúl, hacia sus hermanos y hacia sus amigos, y no te he entregado en manos de David; sin embargo, tú me acusas hoy de una ofensa con esta mujer.
Entonces David dijo: ¿Qué tengo yo que ver con vosotros, hijos de Sarvia, para que en este día me seáis adversarios? ¿Ha de morir hoy hombre alguno en Israel? ¿Acaso no sé que hoy soy rey sobre Israel?
Entonces todos los hombres de Judá respondieron a los hombres de Israel: Porque el rey es pariente cercano nuestro. ¿Por qué, pues, estáis enojados por esto? ¿Acaso hemos comido algo {a costa} del rey, o se nos ha dado algo?
Entonces el ángel del SEÑOR dijo a Elías tisbita: Levántate, sube al encuentro de los mensajeros del rey de Samaria y diles: `` ¿No hay acaso Dios en Israel para que vayáis a consultar a Baal-zebub, dios de Ecrón?"
Y ellos respondieron: Un hombre subió a nuestro encuentro y nos dijo: ``Id, volved al rey que os envió, y decidle: `Así dice el SEÑOR: `` ¿Acaso porque no hay Dios en Israel envías a consultar a Baal-zebub, dios de Ecrón? Por tanto, no bajarás del lecho al que has subido, sino que ciertamente morirás."'"
y le dijo: Así dice el SEÑOR: ``Por cuanto has enviado mensajeros a consultar a Baal-zebub, dios de Ecrón, ¿acaso porque no hay Dios en Israel para consultar su palabra?, no bajarás por tanto del lecho al que has subido, sino que ciertamente morirás."
Entonces ella dijo: ¿Acaso pedí un hijo a mi señor? ¿No dije: ``No me engañes?"
Y sucedió que cuando el rey de Israel leyó la carta, rasgó sus vestidos, y dijo: ¿Acaso soy yo Dios, para dar muerte y para dar vida, para que éste me mande {a decir} que cure a un hombre de su lepra? Pero considerad ahora, y ved cómo busca pleito conmigo.
Entonces él le dijo: ¿No iba {contigo} mi corazón, cuando el hombre se volvió de su carro para encontrarte? ¿Acaso es tiempo de aceptar dinero y de aceptar ropa, olivares, viñas, ovejas, bueyes, siervos y siervas?
Pero el Rabsaces les dijo: ¿Acaso me ha enviado mi señor para hablar estas palabras {sólo} a tu señor y a ti, y no a los hombres que están sentados en la muralla, {condenados} a comer sus propios excrementos y beber su propia orina con vosotros?
`` ¿Acaso alguno de los dioses de las naciones ha librado su tierra de la mano del rey de Asiria?
`` ¿Acaso los libraron los dioses de las naciones que mis padres destruyeron, {es decir,} Gozán, Harán, Resef y a los hijos de Edén que {estaban} en Telasar?
Y mientras hablaba con él, el {rey} le dijo: ¿Acaso te hemos constituido consejero real? Detente. ¿Por qué {buscas que} te maten? Entonces el profeta se detuvo, y dijo: Yo sé que Dios ha determinado destruirte, porque has hecho esto y no has escuchado mi consejo.
`` ¿Acaso no es el mismo Ezequías el que ha quitado sus lugares altos y sus altares, y ha dicho a Judá y a Jerusalén: `Delante de un solo altar adoraréis, y sobre él quemaréis incienso'?
Pero yo dije: ¿Huir un hombre como yo? ¿Acaso uno como yo entraría al templo para salvar su vida? No entraré.
Respondió Satanás al SEÑOR: ¿Acaso teme Job a Dios de balde?
¿Acaso rebuzna el asno montés junto a {su} hierba, o muge el buey junto a su forraje?
¿Acaso he dicho: ``Dadme {algo",} ``De vuestra riqueza ofrecedme un soborno",
¿Acaso hay injusticia en mi lengua? ¿No puede mi paladar discernir calamidades?
¿Acaso tuerce Dios la justicia o tuerce el Todopoderoso lo que es justo?
`` ¿Acaso tienes tú ojos de carne, o ves como el hombre ve?
¿Acaso sabes esto, que desde la antigüedad, desde que el hombre fue puesto sobre la tierra,
¿Acaso Aquél que me hizo a mí en el seno materno, no lo hizo {también} a él? ¿No fue uno mismo el que nos formó en la matriz?
¿Acaso me he alegrado en la destrucción de mi enemigo, o me he regocijado cuando el mal le sobrevino?
¿Acaso no han dicho los hombres de mi tienda: `` ¿Quién puede hallar a alguno que no se haya saciado con su carne?"
¿Acaso he cubierto mis transgresiones como Adán, ocultando en mi seno mi iniquidad,
Baten alegres las alas del avestruz, ¿acaso con el ala y plumaje del amoreña}>>?
¿Acaso por tu sabiduría se eleva el gavilán, extendiendo sus alas hacia el sur?
¿Acaso a tu mandato se remonta el águila y hace en las alturas su nido?
¿Acaso tienes tú un brazo como el de Dios, y truenas con una voz como la suya?
¿Acaso te hará muchas súplicas, o te hablará palabras sumisas?
¿Qué provecho hay en mi sangre si desciendo al sepulcro? ¿{Acaso} te alabará el polvo? ¿Anunciará tu fidelidad?
¿{Acaso} he de comer carne de toros, o beber sangre de machos cabríos?
Tú has tomado en cuenta mi vida errante; pon mis lágrimas en tu redoma; ¿{acaso} no están en tu libro?
así es el hombre que engaña a su prójimo, y dice: ¿Acaso no estaba yo bromeando?
Y cuando os digan: Consultad a los médium y a los adivinos que susurran y murmuran, {decid:} ¿No debe un pueblo consultar a su Dios? ¿{Acaso consultará} a los muertos por los vivos?
¿Acaso con la herida del que lo hirió fue herido, o como {con} la matanza de sus muertos fue muerto?
¿Acaso para sembrar se pasa arando el labrador todo el día, abriendo y rastrillando su tierra?
¿Qué equivocación la vuestra! ¿Es acaso el alfarero como el barro, para que lo que está hecho diga a su hacedor: El no me hizo; o lo que está formado diga al que lo formó: El no tiene entendimiento?
¿Acaso no queda ya muy poco {tiempo} para que el Líbano se convierta en campo fértil, y el campo fértil sea considerado bosque?
Pero el Rabsaces dijo: ¿Acaso me ha enviado mi señor para hablar estas palabras {sólo} a tu señor y a ti, {y} no a los hombres que están sentados en la muralla, {condenados} a comer sus propios excrementos y a beber su propia orina con vosotros?
``{Cuidado,} no sea que Ezequías os engañe, diciendo: `El SEÑOR nos librará.' ¿Acaso alguno de los dioses de las naciones ha librado su tierra de la mano del rey de Asiria?
`` ¿Acaso los libraron los dioses de las naciones que mis padres destruyeron, {es decir,} Gozán, Harán, Resef y a los hijos de Edén que {estaban} en Telasar?
¿Acaso no {lo} sabes? ¿Es que no {lo} has oído? El Dios eterno, el SEÑOR, el creador de los confines de la tierra no se fatiga ni se cansa. Su entendimiento es inescrutable.
¿Por qué cuando vine no había nadie, {y} cuando llamé no había quien respondiera? ¿Acaso es tan corta mi mano que no puede rescatar, o no tengo poder para librar? He aquí, con mi reprensión seco el mar, convierto los ríos en desierto; sus peces hieden por falta de agua, mueren de sed.
¿Y de quién te asustaste y tuviste miedo, cuando mentiste y no te acordaste de mí, ni pensaste en ello? ¿No es acaso porque he guardado silencio por mucho tiempo que no me temes?
¿Es ése el ayuno que yo escogí para que un día se humille el hombre? ¿Es acaso para que incline su cabeza como un junco, y para que se acueste en cilicio y ceniza? ¿Llamaréis a esto ayuno y día acepto al SEÑOR?
¿Es acaso mi heredad para mí como ave de rapiña de varios colores? ¿Están las aves de rapiña por todos lados contra ella? Id, reunid a todas las bestias del campo, traedlas para que {la} devoren.
También les dirás esta palabra: ``Así dice el SEÑOR, Dios de Israel: `Todo cántaro se llenará de vino.'" Y cuando ellos te digan: `` ¿Acaso no sabemos bien que todo cántaro ha de llenarse de vino?",
¿Acaso se paga mal por bien? Pues han cavado fosa para mí. Recuerda cómo me puse delante de ti para hablar bien en favor de ellos, para apartar de ellos tu furor.
¿Acaso te harás rey porque compites en cedro? ¿No comió y bebió tu padre y practicó el derecho y la justicia? Por eso le fue bien.
¿Es acaso este hombre Conías una vasija despreciada y rota? ¿Es un objeto indeseable? ¿Por qué han sido arrojados él y sus descendientes y echados a una tierra que no conocían?
¿Acaso le dieron muerte Ezequías, rey de Judá, y todo Judá? ¿No temió él al SEÑOR y suplicó el favor del SEÑOR, y el SEÑOR se arrepintió del mal que había pronunciado contra ellos? Nosotros, pues, estamos cometiendo un gran mal contra nosotros mismos.
Y, {dijeron las mujeres,} cuando nosotras quemábamos sacrificios a la reina del cielo y le derramábamos libaciones, ¿acaso sin saberlo nuestros maridos le hacíamos tortas con su imagen y le derramábamos libaciones?
¿Se toma madera de ella para hacer alguna obra? ¿Se toma acaso una estaca de ella para colgar alguna vasija?
`Tomaste además a tus hijos y a tus hijas que habías dado a luz para mí, y se los sacrificaste como alimento. ¿Acaso eran poca cosa tus prostituciones,
¿Acaso me complazco yo en la muerte del impío --declara el Señor DIOS-- y no en que se aparte de sus caminos y viva?
``Para la matanza ha sido afilada, para brillar como el rayo ha sido pulida." ¿Acaso hemos de alegrarnos, cuando el cetro de mi hijo desprecia toda vara?
¿Acaso me ofrecisteis sacrificios y ofrendas de cereal por cuarenta años en el desierto, oh casa de Israel?
Y el SEÑOR dijo: ¿Tienes acaso razón para enojarte?
Entonces dijo Dios a Jonás: ¿Tienes acaso razón para enojarte por causa de la planta? Y él respondió: Tengo razón para enojarme hasta la muerte.
¿Es acaso tiempo para que vosotros habitéis en vuestras casas artesonadas mientras esta casa está desolada?
Por sus frutos los conoceréis. ¿Acaso se recogen uvas de los espinos o higos de los abrojos?
Y Jesús les dijo: ¿Acaso los acompañantes del novio pueden estar de luto mientras el novio está con ellos? Pero vendrán días cuando el novio les será quitado, y entonces ayunarán.
Y tú, Capernaúm, ¿acaso serás elevada hasta los cielos? ¡Hasta el Hades descenderás! Porque si los milagros que se hicieron en ti se hubieran hecho en Sodoma, {ésta} hubiera permanecido hasta hoy.
Y todas las multitudes estaban asombradas, y decían: ¿Acaso no es éste el Hijo de David?
Y ellos, profundamente entristecidos, comenzaron a decirle uno por uno: ¿Acaso soy yo, Señor?
Y respondiendo Judas, el que le iba a entregar, dijo: ¿Acaso soy yo, Rabí? {Y} El le dijo: Tú {lo} has dicho.
Y Jesús les dijo: ¿Acaso pueden ayunar los acompañantes del novio mientras el novio está con ellos? Mientras tienen al novio con ellos, no pueden ayunar.
Y les decía: ¿Acaso se trae una lámpara para ponerla debajo de un almud o debajo de la cama? ¿No es para ponerla en el candelero?
Ellos comenzaron a entristecerse y a decirle uno por uno: ¿Acaso soy yo?
Entonces El les dijo: ¿Por qué me buscabais? ¿Acaso no sabíais que me era necesario estar en la casa de mi Padre?
Entonces Jesús les dijo: ¿Acaso podéis hacer que los acompañantes del novio ayunen mientras el novio está con ellos?
Les dijo también una parábola: ¿Acaso puede un ciego guiar a otro ciego? ¿No caerán ambos en un hoyo?
Y tú, Capernaúm, ¿acaso serás elevada hasta los cielos? ¡Hasta el Hades serás hundida!
O suponed que a uno de vosotros que es padre, su hijo le pide pan; ¿acaso le dará una piedra? O si {le pide} un pescado; ¿acaso le dará una serpiente en lugar del pescado?
O si le pide un huevo; ¿acaso le dará un escorpión?
¿Acaso le da las gracias al siervo porque hizo lo que se le ordenó?
Y les dijo: Cuando os envié sin bolsa, ni alforja, ni sandalias, ¿acaso os faltó algo? Y ellos contestaron: {No,} nada.