'Caer' en la Biblia

Y Jehová Dios hizo caer sueño profundo sobre Adán, y se quedó dormido; entonces tomó una de sus costillas, y cerró la carne en su lugar;

Será Dan serpiente junto al camino, víbora junto a la senda, que muerde los talones de los caballos, y hace caer hacia atrás al cabalgador de ellos.

y estas aguas que dan maldición entren en tus entrañas, y hagan hinchar tu vientre y caer tu muslo. Y la mujer dirá: Amén, amén.

¿Y por qué nos trae Jehová a esta tierra para caer a espada y que nuestras esposas y nuestros chiquitos sean por presa? ¿No nos sería mejor volvernos a Egipto?

Manda a los hijos de Israel, y diles: Cuando hubiereis entrado en la tierra de Canaán, esto es, la tierra que os ha de caer en heredad, la tierra de Canaán según sus términos:

o bien, sin verlo, hizo caer sobre él alguna piedra, de que pudo morir, y muriere, y él no era su enemigo, ni procuraba su mal;

Pero una mujer dejó caer un pedazo de una rueda de molino sobre la cabeza de Abimelec y le quebró el cráneo.

y dejad caer algunos de los manojos, y la dejaréis que los recoja, y no la reprendáis.

Y Samuel creció, y Jehová fue con él, y no dejó caer a tierra ninguna de sus palabras.

Mas el pueblo dijo a Saúl: ¿Ha de morir Jonatán, el que ha hecho esta gran salvación en Israel? No será así. Vive Jehová, que no ha de caer un cabello de su cabeza en tierra, pues que ha obrado hoy con Dios. Así libró el pueblo a Jonatán, para que no muriese.

Y Saúl dijo: Decid así a David: El rey no desea dote alguna, sino cien prepucios de los filisteos, para tomar venganza de los enemigos del rey. Pero Saúl pensaba hacer caer a David en manos de los filisteos.

Pero si quieres ir, ve, esfuérzate para la batalla, pero Dios te hará caer delante de los enemigos; porque en Dios está el poder, o para ayudar, o para derribar.

Tú dices: He aquí he herido a Edom; y tu corazón se enaltece para gloriarte; ahora quédate en tu casa; ¿para qué provocas tu mal, para caer tú y Judá contigo?

Contó luego Amán a Zeres su esposa, y a todos sus amigos, todo lo que le había acontecido; y le dijeron sus sabios, y Zeres su esposa: Si Mardoqueo, delante de quien has comenzado a caer, es de la simiente de los judíos, no lo vencerás; antes caerás por cierto delante de él.

¿No debiera espantaros su majestad, y caer su pavor sobre vosotros?

Y harán caer sobre sí sus mismas lenguas; se espantarán todos los que los vieren.

Ciertamente los has puesto en deslizaderos; en asolamientos los harás caer.

Las hizo caer en medio de su campamento, alrededor de sus tiendas.

Porque no duermen ellos, si no han hecho mal, y pierden su sueño, si no han hecho caer a alguno.

Porque a muchos ha hecho caer heridos; y aun los hombres más fuertes han sido muertos por ella.

No es bueno tener respeto a la persona del impío, para hacer caer al justo de su derecho.

La pereza hace caer en profundo sueño; y el alma negligente padecerá hambre.

Entonces Él será por santuario; mas a las dos casas de Israel por piedra para tropezar, y por tropezadero para caer, y por lazo y por red a los moradores de Jerusalén.

por tanto os será este pecado como pared agrietada a punto de caer, y como grieta en muro alto, cuya caída viene súbita y repentinamente.

Ve, y proclama estas palabras hacia el norte, y di: Vuélvete, oh rebelde Israel, dice Jehová, y no haré caer mi ira sobre vosotros; porque misericordioso soy yo, dice Jehová, y no guardaré para siempre el enojo.

Y desvaneceré el consejo de Judá y de Jerusalén en este lugar; y les haré caer a espada delante de sus enemigos, y en las manos de los que buscan sus vidas; y daré sus cuerpos para comida de las aves del cielo y de las bestias de la tierra.

di a los que la recubren con lodo suelto, que caerá; vendrá lluvia torrencial, y enviaré piedras de granizo que la hagan caer, y viento tempestuoso la romperá.

Con espadas de fuertes haré caer a tu pueblo; todos ellos serán los poderosos de las naciones; y destruirán la soberbia de Egipto, y toda su multitud será deshecha.

Profetiza por tanto, y di: Así dice Jehová el Señor: Por cuanto os desolaron y os tragaron de todas partes, para que fueseis heredad a las otras naciones, y se os ha hecho caer en boca de habladores, y ser el oprobio de los pueblos,

Y en su caer serán ayudados de pequeño socorro; y muchos se juntarán a ellos con lisonjas.

Cuando fueren, extenderé sobre ellos mi red, los haré caer como aves del cielo; los castigaré conforme a lo que se ha oído en sus congregaciones.

Por tanto, si tu ojo derecho te es ocasión de caer, sácalo, y échalo de ti; pues mejor te es que se pierda uno de tus miembros, y no que todo tu cuerpo sea lanzado al infierno.

Y si tu mano derecha te es ocasión de caer, córtala, y échala de ti; pues mejor te es que uno de tus miembros se pierda, y no que todo tu cuerpo sea lanzado al infierno.

Por tanto, si tu mano o tu pie te hacen caer, córtalos y échalos de ti; mejor te es entrar en la vida cojo o manco, que teniendo dos manos o dos pies ser echado en el fuego eterno.

Y si tu ojo te hace caer, sácalo y échalo de ti; porque mejor te es entrar en la vida con un solo ojo, que teniendo dos ojos ser echado en el fuego del infierno.

Y si tu mano te es ocasión de caer, córtala; mejor te es entrar en la vida manco, que teniendo dos manos ir al infierno, al fuego que nunca será apagado;

Y si tu pie te es ocasión de caer, córtalo; mejor te es entrar en la vida cojo, que teniendo dos pies ser echado en el infierno, al fuego que nunca será apagado,

Y si tu ojo te es ocasión de caer, sácalo; mejor te es entrar al reino de Dios con un ojo, que teniendo dos ojos ser echado al fuego del infierno,

Y Él les dijo: Yo vi a Satanás caer del cielo como un rayo.

Y ellos estaban esperando cuándo se había de hinchar, o caer muerto de repente; mas habiendo esperado mucho, y viendo que ningún mal le venía, cambiaron de parecer y dijeron que era un dios.

Por tanto, ya no nos juzguemos los unos a los otros, antes bien, juzgad esto; que nadie ponga tropiezo u ocasión de caer al hermano.

¿Quién enferma, y yo no enfermo? ¿A quién se le hace caer, y yo no me enfurezco?

Horrenda cosa es caer en manos del Dios vivo.