'Cómo' en la Biblia
Porque así como los sufrimientos de Cristo son nuestros en abundancia, así también abunda nuestro consuelo por medio de Cristo.
Y nuestra esperanza respecto de vosotros {está} firmemente establecida, sabiendo que como sois copartícipes de los sufrimientos, así también {lo sois} de la consolación.
así como también nos habéis entendido en parte, que nosotros somos el motivo de vuestra gloria, así como también vosotros la nuestra en el día de nuestro Señor Jesús.
Pero como Dios es fiel, nuestra palabra a vosotros no es sí y no.
Pues tantas como sean las promesas de Dios, en El {todas} son sí; por eso también por medio de El, Amén, para la gloria de Dios por medio de nosotros.
quien también nos selló y {nos} dio el Espíritu en nuestro corazón como garantía.
Mas yo invoco a Dios como testigo sobre mi alma, que por consideración a vosotros no he vuelto a Corinto.
Pues no somos como muchos, que comercian con la palabra de Dios, sino que con sinceridad, como de parte de Dios {y} delante de Dios hablamos en Cristo.
¿Comenzamos otra vez a recomendarnos a nosotros mismos? ¿O acaso necesitamos, como algunos, cartas de recomendación para vosotros o de parte de vosotros?
el cual también nos hizo suficientes {como} ministros de un nuevo pacto, no de la letra, sino del Espíritu; porque la letra mata, pero el Espíritu da vida.
¿cómo no será aún con más gloria el ministerio del Espíritu?
y no {somos} como Moisés, {que} ponía un velo sobre su rostro para que los hijos de Israel no fijaran su vista en el fin de aquello que había de desvanecerse.
Pero nosotros todos, con el rostro descubierto, contemplando como en un espejo la gloria del Señor, estamos siendo transformados en la misma imagen de gloria en gloria, como por el Señor, el Espíritu.
Porque no nos predicamos a nosotros mismos, sino a Cristo Jesús como Señor, y a nosotros como siervos vuestros por amor de Jesús.
Y el que nos preparó para esto mismo es Dios, quien nos dio el Espíritu como garantía.
Por tanto, somos embajadores de Cristo, como si Dios rogara por medio de nosotros; en nombre de Cristo os rogamos: ¡Reconciliaos con Dios!
Y como colaboradores {con El}, también os exhortamos a no recibir la gracia de Dios en vano;
sino que en todo nos recomendamos a nosotros mismos como ministros de Dios, en mucha perseverancia, en aflicciones, en privaciones, en angustias,
en honra y en deshonra, en mala fama y en buena fama; como impostores, pero veraces;
como desconocidos, pero bien conocidos; como moribundos, y he aquí, vivimos; como castigados, pero no condenados a muerte;
como entristecidos, mas siempre gozosos; como pobres, pero enriqueciendo a muchos; como no teniendo nada, aunque poseyéndolo todo.
Ahora bien, en igual reciprocidad (os hablo como a niños) vosotros también abrid de par en par {vuestro corazón.}
¿O qué acuerdo tiene el templo de Dios con los ídolos? Porque nosotros somos el templo del Dios vivo, como Dios dijo: HABITARE EN ELLOS, Y ANDARE ENTRE ELLOS; Y SERE SU DIOS, Y ELLOS SERAN MI PUEBLO.
Porque si en algo me he jactado con él acerca de vosotros, no fui avergonzado, sino que {así} como os hemos dicho todo con verdad, así también nuestra jactancia ante Tito resultó ser {la} verdad.
Y su amor hacia vosotros abunda aún más al acordarse de la obediencia de todos vosotros, {y de} cómo lo recibisteis con temor y temblor.
y {esto} no como lo habíamos esperado, sino que primeramente se dieron a sí mismos al Señor, y luego a nosotros por la voluntad de Dios.
En consecuencia, rogamos a Tito que como él ya había comenzado antes, así también llevara a cabo en vosotros esta obra de gracia.
Mas así como vosotros abundáis en todo: en fe, en palabra, en conocimiento, en toda solicitud, y en el amor que hemos inspirado en vosotros, {ved} que también abundéis en esta obra de gracia.
No digo {esto} como un mandamiento, sino para probar, por la solicitud de otros, también la sinceridad de vuestro amor.
Ahora pues, acabad también de hacerlo; para que como {hubo} la buena voluntad para desearlo, así también {la haya} para llevarlo a cabo según lo que tengáis.
Como está escrito: EL QUE {recogió} MUCHO, NO TUVO DEMASIADO; Y EL QUE {recogió} POCO, NO TUVO ESCASEZ.
y no sólo {esto}, sino que también ha sido designado por las iglesias como nuestro compañero de viaje en esta obra de gracia, la cual es administrada por nosotros para la gloria del Señor mismo, y {para manifestar} nuestra buena voluntad;
Pero he enviado a los hermanos para que nuestra jactancia acerca de vosotros no sea hecha vana en este caso, a fin de que, como decía, estéis preparados;
Así que creí necesario exhortar a los hermanos a que se adelantaran en ir a vosotros, y prepararan de antemano vuestra generosa ofrenda, ya prometida, para que la misma estuviera lista como ofrenda generosa, y no como por codicia.
Que cada uno {dé} como propuso en su corazón, no de mala gana ni por obligación, porque Dios ama al dador alegre.
como está escrito: EL ESPARCIO, DIO A LOS POBRES; SU JUSTICIA PERMANECE PARA SIEMPRE.
ruego, pues, que cuando esté presente, no tenga que ser osado con la confianza con que me propongo proceder resueltamente contra algunos que nos consideran como si anduviéramos según la carne.
Vosotros veis las cosas según la apariencia exterior. Si alguno tiene confianza en sí mismo de que es de Cristo, considere esto dentro de sí otra vez: que así como él es de Cristo, también lo somos nosotros.
para que no parezca como que deseo asustaros con mis cartas.
Mas nosotros no nos gloriaremos desmedidamente, sino dentro de la medida de la esfera que Dios nos señaló como límite para llegar también hasta vosotros.
Pues no nos excedemos a nosotros mismos, como si no os hubiéramos alcanzado, ya que nosotros fuimos los primeros en llegar hasta vosotros con el evangelio de Cristo;
Porque celoso estoy de vosotros con celo de Dios; pues os desposé a un esposo para presentaros {como} virgen pura a Cristo.
Pero temo que, así como la serpiente con su astucia engañó a Eva, vuestras mentes sean desviadas de la sencillez y pureza {de la devoción} a Cristo.
Como la verdad de Cristo está en mí, este gloriarme no se me impedirá en las regiones de Acaya.
Porque los tales son falsos apóstoles, obreros fraudulentos, que se disfrazan como apóstoles de Cristo.
Y no es de extrañar, pues aun Satanás se disfraza como ángel de luz.
Por tanto, no es de sorprender que sus servidores también se disfracen como servidores de justicia; cuyo fin será conforme a sus obras.
Otra vez digo: nadie me tenga por insensato; pero si {vosotros lo hacéis,} recibidme aunque sea como insensato, para que yo también me gloríe un poco.
Lo que digo, no lo digo como lo diría el Señor, sino como en insensatez, en esta confianza de gloriarme.
¿Son servidores de Cristo? (Hablo como si hubiera perdido el juicio.) Yo más. En muchos más trabajos, en muchas más cárceles, en azotes un sinnúmero de veces, a menudo en peligros de muerte.
Pues ¿en qué fuisteis tratados como inferiores a las demás iglesias, excepto en que yo mismo no fui una carga para vosotros? ¡Perdonadme este agravio!