'Pues' en la Biblia
- 1.Gé 2:7-Éx 9:19
- 2.Éx 9:24-Deuteronomio 6:1
- 3.Deuteronomio 6:3-Jueces 9:34
- 4.Jueces 9:38-1 Samuel 19:4
- 5.1 Samuel 19:5-2 Samuel 19:26
- 6.2 Samuel 19:27-2 Reyes 12:21
- 7.2 Reyes 13:4-2 Crónicas 32:15
- 8.2 Crónicas 33:13-Salmos 116:1
- 9.Salmos 116:8-Jeremías 13:26
- 10.Jeremías 14:17-Daniel 4:18
- 11.Daniel 4:22-Mateo 24:42
- 12.Mateo 24:45-Juan 8:42
- 13.Juan 9:15-Romanos 9:19
- 14.Romanos 9:30-Filipenses 4:19
- 15.Colosenses 3:1-Apocalipsis 21:25
Oye pues, oh Israel, y cuida de ponerlos por obra, para que te vaya bien, y seáis multiplicados, como te ha prometido Jehová el Dios de tus padres, en la tierra que fluye leche y miel.
Conoce, pues, que Jehová tu Dios es Dios, Dios fiel, que guarda el pacto y la misericordia a los que le aman y guardan sus mandamientos, hasta las mil generaciones;
Las esculturas de sus dioses quemarás en el fuego: no codiciarás plata ni oro de sobre ellas para tomarlo para ti, para que no tropieces en ello, pues es abominación a Jehová tu Dios;
Guardarás, pues, los mandamientos de Jehová tu Dios, andando en sus caminos, y temiéndolo.
Sabe, pues, hoy que Jehová tu Dios es el que pasa delante de ti, fuego consumidor, que los destruirá y humillará delante de ti: y tú los echarás, y los destruirás luego, como Jehová te ha dicho.
No discurras en tu corazón cuando Jehová tu Dios los habrá echado de delante de ti, diciendo: Por mi justicia me ha metido Jehová a poseer esta tierra; pues por la impiedad de estas naciones Jehová las echa de delante de ti.
Me postré, pues, delante de Jehová cuarenta días y cuarenta noches (como me había postrado antes) porque Jehová dijo que os había de destruir.
Ahora, pues, Israel, ¿qué pide Jehová tu Dios de ti, sino que temas a Jehová tu Dios, que andes en todos sus caminos, y que lo ames, y sirvas a Jehová tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma;
Circuncidad pues el prepucio de vuestro corazón, y no endurezcáis más vuestra cerviz.
Amaréis, pues, al extranjero; porque extranjeros fuisteis vosotros en tierra de Egipto.
Amarás, pues, a Jehová tu Dios, y guardarás su ordenanza, y sus estatutos y sus derechos y sus mandamientos, todos los días.
Guardad, pues, todos los mandamientos que yo os prescribo hoy, para que seáis fortalecidos, y entréis y poseáis la tierra, a la cual pasáis para poseerla;
Guardaos, pues, que vuestro corazón no se infatúe, y os apartéis, y sirváis a dioses ajenos, y os inclinéis a ellos;
Cuidaréis, pues, de poner por obra todos los estatutos y derechos que yo presento hoy delante de vosotros.
No harás así a Jehová tu Dios; porque todo lo que Jehová aborrece, hicieron ellos a sus dioses; pues aun a sus hijos e hijas quemaban en el fuego a sus dioses.
No tendrán, pues, heredad entre sus hermanos: Jehová es su heredad, como Él les ha dicho.
No aborrecerás al idumeo, pues es tu hermano; no aborrecerás al egipcio, porque extranjero fuiste en su tierra.
En su día le darás su jornal, y no se pondrá el sol sin dárselo; pues es pobre, y con él sustenta su vida; para que no clame contra ti a Jehová, y sea en ti pecado.
Será pues, cuando Jehová tu Dios te hubiere dado reposo de tus enemigos alrededor, en la tierra que Jehová tu Dios te da por heredar para que la poseas, que raerás la memoria de Amalec de debajo del cielo: no te olvides.
Jehová tu Dios te manda hoy que cumplas estos estatutos y derechos; cuida, pues, de ponerlos por obra con todo tu corazón, y con toda tu alma.
Será pues, cuando hubieres pasado el Jordán, que levantaréis estas piedras que yo os mando hoy, en el monte de Ebal, y las revocarás con cal:
Oirás pues la voz de Jehová tu Dios, y cumplirás sus mandamientos y sus estatutos, que yo te ordeno hoy.
Y te pondrá sitio en todas tus ciudades, hasta que tus muros altos y fortificados en que tú confías caigan en toda tu tierra; te sitiará, pues, en todas tus ciudades y en toda tu tierra que Jehová tu Dios te hubiere dado.
y para con su chiquita que sale de entre sus pies, y para con sus hijos que dé a luz; pues los comerá a escondidas, a falta de todo, en el asedio y en el apuro con que tu enemigo te oprimirá en tus ciudades.
Moisés, pues, llamó a todo Israel, y les dijo: Vosotros habéis visto todo lo que Jehová ha hecho delante de vuestros ojos en la tierra de Egipto a Faraón y a todos sus siervos, y a toda su tierra;
Guardaréis, pues, las palabras de este pacto, y las pondréis por obra, para que prosperéis en todo lo que hiciereis.
Dirán, pues, todas las naciones: ¿Por qué hizo esto Jehová a esta tierra? ¿Qué significa el ardor de este gran furor?
Al cielo y a la tierra llamo hoy como testigos contra vosotros, de que os he puesto delante la vida y la muerte, la bendición y la maldición. Escoge, pues, la vida, para que vivas tú y tu simiente;
Y Jehová dijo a Moisés: He aquí se ha acercado el día en que has de morir; llama a Josué, y presentaos en el tabernáculo de la congregación para que yo le dé el cargo. Fueron, pues, Moisés y Josué, y se presentaron en el tabernáculo de la congregación.
Ahora, pues, escribe este cántico, y enséñalo a los hijos de Israel; ponlo en su boca, para que este cántico me sea por testigo contra los hijos de Israel.
Y sucederá que cuando les sobrevinieren muchos males y angustias, entonces este cántico responderá en su cara como testigo, pues no será olvidado de la boca de su linaje; porque yo conozco lo que se proponen, aun hoy, antes que los introduzca en la tierra que juré darles.
Y dio orden a Josué hijo de Nun, y dijo: Esfuérzate y sé valiente, pues tú meterás a los hijos de Israel en la tierra que les juré, y yo estaré contigo.
Y dijo: Esconderé de ellos mi rostro, veré cuál será su fin; pues son una generación perversa, hijos sin fe.
El que dijo a su padre y a su madre: No los he visto; Y no reconoció a sus hermanos, ni conoció a sus propios hijos; Pues ellos guardaron tu palabra, y observaron tu pacto.
Mi siervo Moisés ha muerto: levántate, pues, ahora, y pasa este Jordán, tú y todo este pueblo, a la tierra que yo les doy a los hijos de Israel.
Os ruego pues, ahora, que me juréis por Jehová, que como he hecho misericordia con vosotros, así la haréis vosotros con la casa de mi padre, de lo cual me daréis una señal segura;
Tú, pues, mandarás a los sacerdotes que llevan el arca del pacto, diciendo: Cuando hubiereis entrado hasta el borde del agua del Jordán, pararéis en el Jordán.
Tomad, pues, ahora doce hombres de las tribus de Israel, de cada tribu uno.
Y a los hijos de ellos, que Él había levantado en su lugar, Josué los circuncidó; pues eran incircuncisos, porque no habían sido circuncidados por el camino.
Cercaréis, pues, la ciudad todos los hombres de guerra, yendo alrededor de la ciudad una vez; y esto haréis seis días.
Fue, pues, Jehová con Josué, y su nombre se divulgó por toda la tierra.
Israel ha pecado, y aun han quebrantado mi pacto que yo les había mandado; pues aun han tomado del anatema, y hasta han hurtado, y también han mentido, y aun lo han guardado entre sus enseres.
Os acercaréis, pues, mañana por vuestras tribus; y la tribu que Jehová tomare, se acercará por sus familias; y la familia que Jehová tomare, se acercará por sus casas; y la casa que Jehová tomare, se acercará por los varones;
Josué, pues, levantándose de mañana, hizo venir a Israel por sus tribus; y fue tomada la tribu de Judá.
Y harás a Hai y a su rey como hiciste a Jericó y a su rey: sólo que sus despojos y sus bestias tomaréis para vosotros. Pondrás, pues, emboscadas a la ciudad detrás de ella.
Y ellos saldrán tras nosotros, hasta que los arranquemos de la ciudad; porque ellos dirán: Huyen de nosotros como la primera vez. Huiremos, pues, delante de ellos.
Entonces vosotros os levantaréis de la emboscada, y os echaréis sobre la ciudad; pues Jehová vuestro Dios la entregará en vuestras manos.
ellos usaron de astucia; pues fueron y se fingieron embajadores, y tomaron sacos viejos sobre sus asnos, y odres viejos de vino, rotos y remendados,
Así vinieron a Josué al campo en Gilgal, y le dijeron a él y a los de Israel: Nosotros venimos de tierra muy lejana: haced, pues, ahora alianza con nosotros.
Y los de Israel respondieron a los heveos: Quizá vosotros habitáis en medio de nosotros, ¿cómo, pues, podremos nosotros hacer alianza con vosotros?
Ahora, pues, vosotros sois malditos, y ninguno de vosotros será exento de ser siervo, y de ser leñador y sacar el agua para la casa de mi Dios.
Ahora pues, henos aquí en tu mano; lo que te pareciere bueno y recto hacer de nosotros, hazlo.
Envió pues a decir Adonisedec rey de Jerusalén, a Oham rey de Hebrón, y a Piream rey de Jarmut, y a Jafía rey de Laquis, y a Debir rey de Eglón:
Hirió, pues, Josué toda la región de las montañas, y del sur, y de la llanura, y de las cuestas, y a todos sus reyes, sin quedar nada; todo lo que tenía vida mató, como Jehová Dios de Israel lo había mandado.
Y volviendo Josué, tomó en el mismo tiempo a Hazor, e hirió a espada a su rey; pues Hazor había sido antes cabeza de todos estos reinos.
Tomó, pues, Josué toda aquella tierra, las montañas, y toda la región del sur, y toda la tierra de Gosén, y los bajos y los llanos, y las montañas de Israel y sus valles.
Tomó, pues, Josué toda la tierra, conforme a todo lo que Jehová había dicho a Moisés; y la entregó Josué a los israelitas por herencia, conforme a sus repartimientos de sus tribus; y la tierra reposó de la guerra.
Reparte, pues, tú ahora esta tierra en heredad a las nueve tribus, y a la media tribu de Manasés.
todo el reino de Og en Basán, el cual reinó en Astarot y Edrei, el cual había quedado del resto de los refaítas; pues Moisés los hirió, y los echó.
Éstos, pues, son los territorios que los hijos de Israel tomaron por heredad en la tierra de Canaán, lo cual les repartieron Eleazar sacerdote, y Josué hijo de Nun, y los principales de los padres de las tribus de los hijos de Israel.
Dame, pues, ahora esta montaña, de la cual habló Jehová aquel día; porque tú oíste en aquel día que los anaceos están allí, y que las ciudades son grandes y fortificadas. Quizá Jehová será conmigo, y los echaré como Jehová ha dicho.
De allí pasaba a Asmón, y salía al arroyo de Egipto; y sale este término al occidente. Éste, pues, os será el término del sur.
Ésta, pues, es la heredad de la tribu de los hijos de Judá por sus familias.
Recibieron pues heredad los hijos de José, Manasés y Efraín.
También hubo suerte para la tribu de Manasés, pues él era el primogénito de José; y Maquir, el primogénito de Manasés, y padre de Galaad, el cual fue hombre de guerra, tuvo a Galaad y a Basán.
Y Josué les respondió: Si eres pueblo tan grande, sube tú al monte, y corta para ti allí en la tierra del ferezeo y de los gigantes, pues que el monte de Efraín es angosto para ti.
Vosotros, pues, delinearéis la tierra en siete partes, y me traeréis la descripción aquí, y yo os echaré las suertes aquí delante de Jehová nuestro Dios.
Levantándose, pues, aquellos varones, fueron; y mandó Josué a los que iban para delinear la tierra, diciéndoles: Id, recorred la tierra, y delineadla, y volved a mí, para que yo os eche las suertes aquí delante de Jehová en Silo.
Fueron pues aquellos varones y pasearon la tierra, delineándola por ciudades en siete partes en un libro, y volvieron a Josué al campamento en Silo.
Y ahora, Jehová vuestro Dios ha dado reposo a vuestros hermanos, como se los había prometido; volved, pues, e id a vuestras tiendas, a la tierra de vuestra posesión que Moisés, siervo de Jehová, os dio al otro lado del Jordán.
Nosotros, pues, dijimos: Si aconteciere que tal digan a nosotros, o a nuestras generaciones en lo por venir, entonces responderemos: Mirad el símil del altar de Jehová, el cual hicieron nuestros padres, no para holocaustos o sacrificios, sino para que fuese testimonio entre nosotros y vosotros.
Y dijo Finees hijo del sacerdote Eleazar, a los hijos de Rubén, a los hijos de Gad, y a los hijos de Manasés: Hoy hemos entendido que Jehová está entre nosotros, pues que no habéis intentado esta traición contra Jehová. Ahora habéis librado a los hijos de Israel de la mano de Jehová.
Y los hijos de Rubén y los hijos de Gad pusieron por nombre al altar Ed; pues dijeron: Será un testimonio entre nosotros que Jehová es Dios.
Esforzaos pues mucho a guardar y hacer todo lo que está escrito en el libro de la ley de Moisés, sin apartaros de ello ni a derecha ni a izquierda;
pues Jehová ha echado de delante de vosotros a grandes y fuertes naciones, y hasta hoy nadie ha podido permanecer delante de vosotros.
Y he aquí que yo estoy para entrar hoy por el camino de toda la tierra; reconoced, pues, con todo vuestro corazón y con toda vuestra alma, que no se ha perdido una palabra de todas la buenas palabras que Jehová vuestro Dios había dicho de vosotros; todas os han venido, no ha faltado ninguna de ellas.
Ahora pues, temed a Jehová, y servidle con integridad y en verdad; y quitad de en medio los dioses a los cuales sirvieron vuestros padres al otro lado del río, y en Egipto; y servid a Jehová.
Y Jehová echó de delante de nosotros a todos los pueblos, y al amorreo que habitaba en la tierra; nosotros, pues, también serviremos a Jehová, porque Él es nuestro Dios.
Quitad, pues, ahora los dioses ajenos que están entre vosotros, e inclinad vuestro corazón a Jehová, Dios de Israel.
Y dijo Josué a todo el pueblo: He aquí esta piedra nos servirá de testigo, porque ella ha oído todas las palabras de Jehová que Él nos ha hablado; será, pues, testigo contra vosotros, para que no mintáis contra vuestro Dios.
Antes moró Aser entre los cananeos que habitaban en la tierra; pues no los echó.
Éstas, pues, son las naciones que dejó Jehová para probar con ellas a Israel, a todos aquellos que no habían conocido todas las guerras de Canaán;
Éstos, pues, fueron para probar por ellos a Israel, para saber si obedecerían a los mandamientos de Jehová, que Él había prescrito a sus padres por mano de Moisés.
Hicieron, pues, los hijos de Israel lo malo ante los ojos de Jehová; y olvidaron a Jehová su Dios, y sirvieron a los Baales, y a las imágenes de Asera.
Y habiendo esperado hasta estar confusos, pues que él no abría las puertas de la sala, tomaron la llave y abrieron; y he aquí su señor caído en tierra, muerto.
Vinieron pues, las nuevas a Sísara como Barac hijo de Abinoam había subido al monte de Tabor.
Y él le dijo: Te ruego me des a beber un poco de agua, pues tengo sed. Y ella abrió un odre de leche y le dio de beber, y le volvió a cubrir.
Y Jael, esposa de Heber, tomó una estaca de la tienda, y poniendo un mazo en su mano, vino a él calladamente, y le metió la estaca por las sienes, y lo enclavó en la tierra, pues él estaba cargado de sueño y cansado; y así murió.
Pues sucedía que cuando Israel había sembrado, subían los madianitas, y los amalecitas, y aun los hijos de los orientales subían contra ellos;
Levantándose, pues, de mañana Jerobaal, el cual es Gedeón, y todo el pueblo que estaba con él, acamparon junto a la fuente de Harod; y tenía el campamento de los madianitas al norte, más allá del collado de Moreh, en el valle.
Ahora, pues, haz pregonar, que lo oiga el pueblo, diciendo: El que teme y se estremece, madrugue y vuélvase desde el monte de Galaad. Y se volvieron de los del pueblo veintidós mil; y quedaron diez mil.
Llegó pues, Gedeón, y los cien hombres que llevaba consigo, a las afueras del campamento, al comienzo de la vigilia de la media noche, cuando acababan de renovar las centinelas; y tocaron las trompetas, y quebraron los cántaros que llevaban en sus manos.
Y Gedeón dijo: Pues cuando Jehová hubiere entregado en mi mano a Zeba y a Zalmuna, yo trillaré vuestra carne con espinas y abrojos del desierto.
Y dijo a Jeter su primogénito: Levántate, y mátalos. Mas el joven no desenvainó su espada, porque tenía temor; pues aún era muchacho.
Y los israelitas dijeron a Gedeón: Sé nuestro señor, tú, y tu hijo, y tu nieto; pues que nos has librado de mano de Madián.
Dijeron luego los árboles a la vid: Pues ven tú, reina sobre nosotros.
Ahora pues, si con verdad y con integridad habéis procedido en hacer rey a Abimelec, y si lo habéis hecho bien con Jerobaal y con su casa, y si le habéis pagado conforme a la obra de sus manos
(Pues que mi padre peleó por vosotros, y expuso su vida por libraros de mano de Madián;
Levántate pues, ahora de noche, tú y el pueblo que está contigo, y pon emboscadas en el campo.
Levantándose pues, de noche Abimelec y todo el pueblo que con él estaba, pusieron emboscada contra Siquem con cuatro compañías.
Resutados de la Búsqueda continuados...
- 1.Gé 2:7-Éx 9:19
- 2.Éx 9:24-Deuteronomio 6:1
- 3.Deuteronomio 6:3-Jueces 9:34
- 4.Jueces 9:38-1 Samuel 19:4
- 5.1 Samuel 19:5-2 Samuel 19:26
- 6.2 Samuel 19:27-2 Reyes 12:21
- 7.2 Reyes 13:4-2 Crónicas 32:15
- 8.2 Crónicas 33:13-Salmos 116:1
- 9.Salmos 116:8-Jeremías 13:26
- 10.Jeremías 14:17-Daniel 4:18
- 11.Daniel 4:22-Mateo 24:42
- 12.Mateo 24:45-Juan 8:42
- 13.Juan 9:15-Romanos 9:19
- 14.Romanos 9:30-Filipenses 4:19
- 15.Colosenses 3:1-Apocalipsis 21:25