'Tus' en la Biblia
Entre tanto que éste hablaba, vino otro que dijo: Tus hijos y tus hijas estaban comiendo y bebiendo vino en casa de su hermano el primogénito;
Al que vacilaba, enderezaban tus palabras, y las rodillas de los que arrodillaban esforzabas.
¿No es éste tu temor, tu confianza, tu esperanza, y la integridad de tus caminos?
Y entenderás que tu simiente es mucha, y tus renuevos como la hierba de la tierra.
Los ojos de los que ahora me ven, no me verán más; tus ojos serán sobre mí, y dejaré de ser.
Porque tus hijos pecaron contra él, él los echó en el lugar de su rebelión.
Aun llenará tu boca de risa, y tus labios de gritos de alegría.
¿Te parece bien que oprimas, y que deseches la obra de tus manos, y que resplandezcas sobre el consejo de los impíos?
¿Son tus días como los días del hombre, o tus años como los tiempos humanos,
Tus manos me formaron y me compusieron todo en contorno, ¿y así me deshaces?
Renovando tus plagas contra mí, y aumentando conmigo tu furor, haciendo subir sobre mí ejércitos.
¿Tus mentiras harán callar a los hombres? ¿Y harás escarnio, y no habrá quien te avergüence?
Tú dices: Mi doctrina es pura, y yo soy limpio delante de tus ojos.
Si tú preparares tu corazón, y extendieres a él tus manos;
si alguna iniquidad hubiere en tu mano, y la echares de ti, y no consintieres que more maldad en tus habitaciones;
Entonces llamarás, y yo te responderé, a la obra de tus manos desearás.
Tu misma boca te condenará, y no yo; y tus mismos labios testificarán contra ti.
¿Por qué te enajena tu corazón, y por qué guiñan tus ojos,
Dicen pues a Dios: Apártate de nosotros, que no queremos el conocimiento de tus caminos.
¿Por ventura tiene su contentamiento el Omnipotente en que tú seas justificado, o le viene algún provecho de que tú hagas perfectos tus caminos?
Porque sacaste prenda a tus hermanos sin causa, e hiciste desnudar las ropas de los desnudos.
Orarás a él, y él te oirá; y tú pagarás tus promesas.
Determinarás asimismo una cosa, y te será firme; y sobre tus caminos resplandecerá luz.
La isla del inocente escapará; y en la limpieza de tus manos será guardado.
Si pudieres, respóndeme; dispón tus palabras, estás delante de mí.
De cierto tú dijiste a oídos míos, y yo oí la voz de tus palabras que decían:
Yo te responderé razones, y a tus compañeros contigo.
Si pecares, ¿qué habrás hecho contra él? Y si tus rebeliones se multiplicaren, ¿qué le harás tú?
¿Por ventura estimará él tus riquezas, ni del oro, ni de todas las fuerzas de la potencia?
¿Y eran calientes tus vestidos cuando él daba el reposo a la tierra del mediodía?
Ahora ciñe como varón tus lomos; yo te preguntaré, y hazme saber tú.
y dije: Hasta aquí vendrás, y no pasarás adelante, y allí parará el orgullo de tus ondas.
¿Has mandado tú a la mañana en tus días? ¿Has mostrado al alba su lugar,
¿Si sabías tú cuando habías de nacer, y si el número de tus días había de ser grande?
Cíñete ahora como varón tus lomos; yo te preguntaré, y explícame.
¿Jugarás por ventura con él como con pájaro, y lo atarás para tus niñas?
Y aconteció que después que habló el SEÑOR estas palabras a Job, el SEÑOR dijo a Elifaz temanita: Mi ira se encendió contra ti y tus dos compañeros, porque no habéis hablado por mí con rectitud, como mi siervo Job.