'Ellos' en la Biblia
- 1.Gé 4:8-Éx 4:1
- 2.Éx 5:3-Levítico 20:16
- 3.Levítico 20:23-Números 16:31
- 4.Números 16:32-Deuteronomio 20:1
- 5.Deuteronomio 20:3-Josué 23:12
- 6.Josué 23:16-1 Samuel 16:6
- 7.1 Samuel 17:3-1 Reyes 20:25
- 8.1 Reyes 20:27-1 Crónicas 12:29
- 9.1 Crónicas 12:34-Esdras 1:6
- 10.Esdras 1:9-Job 21:8
- 11.Job 21:9-Salmos 105:27
- 12.Salmos 105:38-Isaías 42:16
- 13.Isaías 42:22-Jeremías 23:14
- 14.Jeremías 23:21-Ezequiel 3:4
- 15.Ezequiel 3:6-Ezequiel 31:17
- 16.Ezequiel 32:12-Oseas 8:4
- 17.Oseas 8:5-Mateo 9:15
- 18.Mateo 9:18-Marcos 6:50
- 19.Marcos 6:51-Lucas 11:19
- 20.Lucas 11:48-Juan 17:23
- 21.Juan 17:24-Hechos 19:3
- 22.Hechos 19:6-2 Tesalonicenses 2:11
- 23.1 Timoteo 5:24-Apocalipsis 21:14
Egipto se alegró en su salida; porque había caído sobre ellos su terror.
Y cubrieron las aguas a sus enemigos; no quedó uno de ellos.
Por lo que alzó su mano a ellos, para postrarlos en el desierto,
Y ensañaron a Dios con sus obras, y aumentó la mortandad en ellos.
También le irritaron en las aguas de Meriba; e hizo mal a Moisés por causa de ellos;
Y los entregó en poder de los gentiles, y se enseñorearon de ellos los que los aborrecían.
Muchas veces los libró; mas ellos se rebelaron a su consejo, y fueron humillados por su iniquidad.
y se acordaba de su pacto con ellos, y se arrepentía conforme a la muchedumbre de sus misericordias.
Hizo asimismo que tuvieran de ellos misericordia todos los que los tenían cautivos.
Hambrientos y sedientos, su alma desfallecía en ellos.
ellos han visto las obras del SEÑOR, y sus maravillas en el mar profundo.
Yo he sido para ellos objeto de oprobio; me miraban, y meneaban su cabeza.
Maldigan ellos, y bendice tú; levántense, mas sean avergonzados; y tu siervo sea alegrado.
Los ídolos de ellos son plata y oro, obra de manos de hombres.
Como ellos sean los que los hacen; cualquiera que en ellos confía.
Se engrosó el corazón de ellos como sebo; mas yo en tu ley me he deleitado.
Nunca jamás me olvidaré de tus mandamientos; porque con ellos me has vivificado.
Mucha paz tienen los que aman tu ley; y no hay para ellos tropiezo.
Yo soy pacífico; y cuando hablo, ellos guerrean.
Dichoso el varón que llenó su aljaba de ellos; no será avergonzado cuando hablare con los enemigos en la puerta.
Y dio la tierra de ellos en heredad, en heredad a Israel su pueblo.
Como ellos sean los que los hacen; y todos los que en ellos confían.
Al que sacó a Israel de en medio de ellos, porque para siempre es su misericordia;
Y dio la tierra de ellos en heredad, porque para siempre es su misericordia;
Tus ojos vieron mi cuerpo aun imperfecto, y en tu libro todos mis miembros estaban escritos; que fueron luego formados, sin faltar uno de ellos.
Caigan sobre ellos brasas; en el fuego los haga caer, en profundos hoyos de donde no salgan.
el cual hizo los cielos y la tierra, el mar, y todo lo que en ellos hay; el que guarda verdad para siempre;
para ejecutar en ellos el juicio escrito; gloria será esto para todos sus misericordiosos. Alelu-JAH.
hijo mío, no andes en camino con ellos; aparta tu pie de sus veredas;
mas ellos a su propia sangre espían, y a sus propias almas ponen asechanza.
cuyas veredas son torcidas, y ellos torcidos en sus caminos.
Porque no duermen ellos, si no hicieren mal; y pierden su sueño, si no han hecho caer.
El vino hace burlador, la cerveza alborotadora; y cualquiera que en ellos yerra, no será sabio.
El rey sabio esparce los impíos; y sobre ellos hace rodar la rueda.
El rico y el pobre se encontraron; a todos ellos los hizo el SEÑOR.
Espinas y lazos hay en el camino del perverso; el que guarda su alma se alejará de ellos.
porque el SEÑOR juzgará la causa de ellos, y despojará el alma de aquellos que los despojaren.
porque el redentor de ellos es el Fuerte, el cual juzgará la causa de ellos contra ti.
No tengas envidia de los hombres malos, ni desees estar con ellos;
mas los que lo reprenden, serán agradables, y sobre ellos vendrá bendición de bien.
Los que dejan la ley, alaban al impío; mas los que la guardan, contenderán con ellos.
Cuando los impíos son muchos, mucha es la prevaricación; mas los justos verán la ruina de ellos.
me hice huertos y jardines, y planté en ellos árboles de todos frutos.
Me hice estanques de aguas, para regar de ellos el bosque donde crecían los árboles.
Yo he conocido que no hay mejor para ellos, que alegrarse, y hacer bien en su vida.
Dije en mi corazón, en orden a la condición de los hijos de los hombres, que Dios los puede manifestar, y es para ver que ellos son bestias los unos a los otros.
Me volví y vi todas las violencias que se hacen debajo del sol; y he aquí las lágrimas de los oprimidos, y que no tienen consolador; y que la fuerza estaba en la mano de sus opresores, y para ellos no había consolador.
Y tuve por mejor que ellos al que no ha sido aún, porque no ha visto las malas obras que se hacen debajo del sol.
No tiene fin todo el pueblo que fue antes de ellos; tampoco los que vendrán después estarán con él contentos. También esto es vanidad y aflicción de espíritu.
Si violencias de pobres, y extorsión de derecho y de justicia vieres en la provincia, no te maravilles de esta licencia; porque alto está mirando sobre alto, y uno más alto está sobre ellos.
He aquí, solamente he hallado esto: que Dios hizo al hombre recto, mas ellos buscaron muchas perversiones.
Porque no se ejecuta en seguida la sentencia sobre la mala obra, el corazón de los hijos de los hombres está en ellos lleno para hacer mal.
Porque el hombre tampoco conoce su tiempo; como los peces que son presos en la mala red, y como las aves que se prenden en lazo, así son enlazados los hijos de los hombres en el tiempo malo, cuando cae de repente sobre ellos.
mas si el hombre viviere muchos años, y en todos ellos hubiere gozado de alegría; si después trajere a la memoria los días de las tinieblas, que serán muchos, todo lo que le habrá pasado, dirá haber sido vanidad.
Y acuérdate de tu Creador en los días de tu juventud, antes que vengan los malos días, y lleguen los años, de los cuales digas: No tengo en ellos contentamiento.
Pasando de ellos un poco, hallé luego al que mi alma ama; trabé de él, y no lo dejé, hasta que lo metí en la casa de mi madre, y en la cámara de la que me dio a luz.
Todos ellos tienen espadas, diestros en la guerra; cada uno su espada sobre su muslo, por los temores de la noche.
Aparta tus ojos de delante de mí, porque ellos me vencieron. Tu cabello es como manada de cabras, que se muestran en Galaad.
Oíd, cielos, y escucha tú, tierra; porque habla el SEÑOR: Crié hijos, y los engrandecí, y ellos se rebelaron contra mí.
Tus príncipes, prevaricadores y compañeros de ladrones; todos aman el soborno, y van tras las recompensas; no oyen en juicio al huérfano, ni llega a ellos la causa de la viuda.
Pues arruinada está Jerusalén, y Judá ha caído; porque la lengua de ellos y sus obras han sido contra el SEÑOR, para irritar los ojos de su majestad.
La prueba del rostro de ellos los convence; que como Sodoma predican su pecado, no lo disimulan. ¡Ay del alma de ellos! Porque amontonaron mal para sí.
No habrá entre ellos cansado, ni quien tropiece; ninguno se dormirá, ni le tomará sueño; a ninguno se le desatará el cinto de los lomos, ni se le romperá la correa de sus zapatos.
he aquí, por tanto, que el Señor hace subir sobre ellos aguas de río, impetuosas y muchas, es a saber, al rey de Asiria con todo su poder: el cual subirá sobre todos sus ríos, y pasará sobre todas sus riberas;
Y muchos tropezarán entre ellos; y caerán, y serán quebrantados; se enredarán, y serán presos.
El pueblo que andaba en tinieblas vio gran luz; los que moraban en tierra de sombra de muerte, luz resplandeció sobre ellos.
mas de aquí a muy poco tiempo, se acabará el furor y mi enojo, para fenecimiento de ellos.
Levantad bandera de ejemplo sobre un alto monte; alzad la voz a ellos; alzad la mano para que entren por puertas de príncipes.
Cualquiera que fuere hallado, será alanceado; y cualquiera que a ellos se juntare, caerá a espada.
Sus niños serán estrellados delante de ellos; sus casas serán saqueadas, y forzadas sus mujeres.
He aquí que yo despierto contra ellos a los medos, que no buscarán la plata, ni codiciarán oro.
Porque el SEÑOR tendrá piedad de Jacob, y todavía escogerá a Israel; y les hará reposar en su tierra; y a ellos se unirán extranjeros, y se allegarán a la familia de Jacob.
Todos ellos darán voces, y te dirán: ¿Tú también enfermaste como nosotros, y como nosotros fuiste?
Todos los reyes de los gentiles, todos ellos yacen con honra cada uno en su casa.
No serás contado con ellos en la sepultura; porque tú destruiste tu tierra, mataste a tu pueblo. No será para siempre la simiente de los malignos.
Porque yo me levantaré sobre ellos, dice el SEÑOR de los ejércitos, y raeré de Babilonia el nombre y las reliquias, hijo y nieto, dice el SEÑOR.
quebrantaré al asirio en mi tierra, y en mis montes lo hollaré; y su yugo será apartado de ellos, y su carga será quitada de su hombro.
Y serán dejados todos a las aves de los montes, y a las bestias de la tierra; sobre ellos tendrán el verano las aves; e invernarán todas las bestias de la tierra.
Y entregaré a Egipto en manos de señor duro; y rey violento se enseñoreará de ellos, dice el Señor DIOS de los ejércitos.
En aquel día será Egipto como mujeres: porque se asombrará y temerá, en la presencia de la mano alta del SEÑOR de los ejércitos, que él ha de levantar sobre ellos.
Carga de Tiro. Aullad, naves de Tarsis, porque destruida es Tiro hasta no quedar casa, ni entrada; de la tierra de Quitim es revelado a ellos.
Ve, pues, ahora, y escribe esta visión en una tabla delante de ellos; y asiéntala en un libro, para que quede hasta el día postrero, para siempre, por todos los siglos.
Y el egipcio hombre es, no Dios; y sus caballos carne, y no espíritu, de manera que al extender el SEÑOR su mano, caerá el ayudador, y caerá el ayudado, y todos ellos desfallecerán a una.
Porque el SEÑOR me dijo a mí de esta manera: Como el león, y el cachorro del león, brama sobre su presa, contra el cual, si se llega cuadrilla de pastores, no temerá por sus voces, ni se acobardará por el tropel de ellos; así el SEÑOR de los ejércitos descenderá a pelear por el Monte de Sion, y por su collado.
Los pueblos huyeron de la voz del estruendo; los gentiles fueron esparcidos, cuando tú te levantas contra ellos.
Mas vuestra presa será cogida como cuando cogen las orugas; correrá sobre ellos como de una a otra parte corren las langostas.
Porque el SEÑOR está airado sobre todos los gentiles, y enojado sobre todo el ejército de ellos; los destruirá y los entregará al matadero.
Y los muertos de ellos serán arrojados, y de sus cadáveres se levantará hedor; y los montes se desleirán por la multitud de su sangre.
Y con ellos vendrán abajo unicornios, y toros con becerros; y su tierra se embriagará de sangre, y su polvo se engrasará de grosura.
Preguntad de lo que está escrito en el libro del SEÑOR, y leed, si faltó alguno de ellos; ninguno faltó con su compañera; porque su boca mandó y su mismo Espíritu los ayuntó.
Florecerá profusamente, y también alabará y cantará con júbilo; la honra del Líbano le será dada, la hermosura del Carmelo y de Sarón. Ellos verán la gloria del SEÑOR, la hermosura del Dios nuestro.
Y habrá allí camino y calzada, y se llamará Camino de Santidad; no pasará por él hombre inmundo; y habrá para ellos en él quien los acompañe, de tal manera que los insensatos no yerren.
Ahora, pues, yo te ruego que des rehenes al rey de Asiria mi señor; y yo te daré dos mil caballos, si pudieres tú dar caballeros que cabalguen sobre ellos.
y a los dioses de ellos pusieron en fuego, porque no eran dioses, sino obra de manos de hombre, madera y piedra; por eso los deshicieron.
Señor, aun a todos los que vivirán, en estos quince años anunciaré la vida de mi espíritu en ellos; y cómo me hiciste dormir, y después me has dado vida.
Y se regocijó con ellos Ezequías, y les enseñó la casa de su tesoro: plata, y oro, y especierías, y ungüentos preciosos, y toda su casa de armas; y todo lo que se pudo hallar en sus tesoros; no hubo cosa en su casa y en todo su señorío, que Ezequías no les mostrara.
Como si nunca fueran plantados, como si nunca fueran sembrados, como si nunca su tronco hubiera tenido raíz en la tierra; y aun soplando en ellos se secan, y el torbellino los lleva como hojarasca.
Mirarás por ellos, y no los hallarás. Los que tienen contienda contigo, serán como nada; y los que contigo tienen pendencia, como cosa que no es.
He aquí, todos son vanidad; y las obras de ellos nada. Viento y confusión son sus vaciadizos.
Y guiaré a los ciegos por camino, que nunca supieron, les haré pisar por las sendas que nunca conocieron; delante de ellos tornaré las tinieblas en luz, y los rodeos en llanura. Estas cosas les haré, y nunca los desampararé.
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- 19.Marcos 6:51-Lucas 11:19
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