'Si' en la Biblia
Hijo mío, si los pecadores te quisieren engañar, no consientas.
Si dijeren: Ven con nosotros, pongamos asechanzas para derramar sangre, acechemos sin motivo al inocente;
Hijo mío, si recibieres mis palabras, y mis mandamientos atesorares dentro de ti,
Si clamares a la inteligencia, y a la prudencia alzares tu voz;
Si como a la plata la buscares, y la procurares como a tesoros escondidos;
No pleitees con alguno sin razón, si él no te ha hecho agravio.
Cuando anduvieres no se estrecharán tus pasos; y si corrieres, no tropezarás.
Porque no duermen ellos, si no han hecho mal, y pierden su sueño, si no han hecho caer a alguno.
Sus caminos son inestables; no los conocerás, si no considerares el camino de vida.
Hijo mío, si salieres fiador por tu amigo, si estrechaste tu mano por el extraño,
pero si es sorprendido, pagará siete tantos, y dará toda la sustancia de su casa.
Si fueres sabio, para ti lo serás; mas si fueres escarnecedor, pagarás tú solo.
El hombre misericordioso hace bien a su propia alma; mas el cruel se atormenta a sí mismo.
Todas las cosas ha hecho Jehová para sí mismo, y aun al impío para el día malo.
El alma del que trabaja, trabaja para sí; porque su boca le anima.
¿De qué sirve el precio en la mano del necio para comprar sabiduría, si no tiene el corazón para ello?
La boca del necio es quebrantamiento para sí, y sus labios son lazos para su alma.
El hombre de grande ira llevará el castigo; y si tú lo libras, tendrás que volverlo a hacer.
Aun el muchacho es conocido por sus hechos, si su obra fuere limpia y recta.
Porque es cosa deliciosa, si las guardares dentro de ti; y si juntamente se afirmaren en tus labios.
Si no tienes para pagar, ¿Por qué han de quitar tu cama de debajo de ti?
y pon cuchillo a tu garganta, si tienes gran apetito.
No rehúses corregir al muchacho; porque si lo castigas con vara, no morirá.
Hijo mío, si tu corazón fuere sabio, también a mí se me alegrará el corazón;
Si flaqueares en el día de adversidad, tu fuerza será reducida.
Si dejares de librar a los que son llevados a la muerte, y a los que son llevados al matadero.
Si dijeres: Ciertamente no lo supimos; ¿Acaso no lo entenderá el que pesa los corazones, el que mira por tu alma? ¿No dará Él a cada hombre según sus obras?
Así será a tu alma el conocimiento de la sabiduría; si la hallares tendrá recompensa, y al fin tu esperanza no será cortada.
Si el que te aborrece tuviere hambre, dale de comer pan; y si tuviere sed, dale de beber agua:
Si el hombre sabio contendiere con el necio, que se enoje o que se ría, no tendrá reposo.
Si un gobernante presta atención a la palabra mentirosa, todos sus servidores serán impíos.
¿Quién subió al cielo, y descendió? ¿Quién encerró los vientos en sus puños? ¿Quién ató las aguas en un paño? ¿Quién afirmó todos los términos de la tierra? ¿Cuál es su nombre, y el nombre de su Hijo, si lo sabes?
Hay generación limpia en su propia opinión, si bien no se ha limpiado de su inmundicia.
Si neciamente te has enaltecido; y si mal pensaste, pon la mano sobre tu boca.