Por tanto, confesaos vuestros pecados unos a otros, y orad unos por otros para que seáis sanados. La oración eficaz del justo puede lograr mucho.

Tened por sumo gozo, hermanos míos, el que {os} halléis en diversas pruebas,

Pero si alguno de vosotros se ve falto de sabiduría, que {la} pida a Dios, el cual da a todos abundantemente y sin reproche, y le será dada.

¿Está alguno entre vosotros enfermo? Que llame a los ancianos de la iglesia y que ellos oren por él, ungiéndolo con aceite en el nombre del Señor;

Toda buena dádiva y todo don perfecto viene de lo alto, desciende del Padre de las luces, con el cual no hay cambio ni sombra de variación.

La religión pura y sin mácula delante de {nuestro} Dios y Padre es ésta: visitar a los huérfanos y a las viudas en sus aflicciones, {y} guardarse sin mancha del mundo.

¿De qué sirve, hermanos míos, si alguno dice que tiene fe, pero no tiene obras? ¿Acaso puede esa fe salvarlo?

Sed hacedores de la palabra y no solamente oidores que se engañan a sí mismos.

Por tanto, someteos a Dios. Resistid, pues, al diablo y huirá de vosotros.

y dais atención especial al que lleva la ropa lujosa, y decís: Tú siéntate aquí, en un buen lugar; y al pobre decís: Tú estate allí de pie, o siéntate junto a mi estrado;

Habéis condenado {y} dado muerte al justo; él no os hace resistencia.

Pero El da mayor gracia. Por eso dice: DIOS RESISTE A LOS SOBERBIOS PERO DA GRACIA A LOS HUMILDES.

¿{Oh almas} adúlteras! ¿No sabéis que la amistad del mundo es enemistad hacia Dios? Por tanto, el que quiere ser amigo del mundo, se constituye enemigo de Dios.

{Esto} sabéis, mis amados hermanos. Pero que cada uno sea pronto para oír, tardo para hablar, tardo para la ira;

Que nadie diga cuando es tentado: Soy tentado por Dios; porque Dios no puede ser tentado por el mal y El mismo no tienta a nadie.

Bienaventurado el hombre que persevera bajo la prueba, porque una vez que ha sido aprobado, recibirá la corona de la vida que {el Señor} ha prometido a los que le aman.

Tú crees que Dios es uno. Haces bien; también los demonios creen, y tiemblan.

¿Sufre alguno entre vosotros? Que haga oración. ¿Está alguno alegre? Que cante alabanzas.

No piense, pues, ese hombre, que recibirá cosa alguna del Señor,

Hermanos míos, no os hagáis maestros muchos {de vosotros}, sabiendo que recibiremos un juicio más severo.

Porque el sol sale con calor abrasador y seca la hierba, y su flor se cae y la hermosura de su apariencia perece; así también se marchitará el rico en medio de sus empresas.

Porque cualquiera que guarda toda la ley, pero tropieza en un {punto,} se ha hecho culpable de todos.

Hermanos míos, no tengáis vuestra fe en nuestro glorioso Señor Jesucristo con {una actitud} de favoritismo.

y el rico en su humillación, pues él pasará como la flor de la hierba.

¿De dónde {vienen} las guerras y los conflictos entre vosotros? ¿No vienen de vuestras pasiones que combaten en vuestros miembros?

Acercaos a Dios, y El se acercará a vosotros. Limpiad vuestras manos, pecadores; y vosotros de doble ánimo, purificad vuestros corazones.

Santiago, siervo de Dios y del Señor Jesucristo: A las doce tribus que están en la dispersión: Saludos.

Mirad también las naves; aunque son tan grandes e impulsadas por fuertes vientos, son, sin embargo, dirigidas mediante un timón muy pequeño por donde la voluntad del piloto quiere.

Así también la fe por sí misma, si no tiene obras, está muerta.

A aquel, pues, que sabe hacer {lo} bueno y no lo hace, le es pecado.

Por tanto, hermanos, sed pacientes hasta la venida del Señor. Mirad {cómo} el labrador espera el fruto precioso de la tierra, siendo paciente en ello hasta que recibe {la lluvia} temprana y {la} tardía.

Sino que cada uno es tentado cuando es llevado y seducido por su propia pasión.

¿Quién es sabio y entendido entre vosotros? Que muestre por su buena conducta sus obras en mansedumbre de sabiduría.

En el ejercicio de su voluntad, El nos hizo nacer por la palabra de verdad, para que fuéramos las primicias de sus criaturas.

Porque así como el cuerpo sin {el} espíritu está muerto, así también la fe sin {las} obras está muerta.

¿Oíd ahora, ricos! Llorad y aullad por las miserias que vienen sobre vosotros.

Oíd ahora, los que decís: Hoy o mañana iremos a tal o cual ciudad y pasaremos allá un año, haremos negocio y tendremos ganancia.

¿no habéis hecho distinciones entre vosotros mismos, y habéis venido a ser jueces con malos pensamientos?

Por lo cual, desechando toda inmundicia y {todo} resto de malicia, recibid con humildad la palabra implantada, que es poderosa para salvar vuestras almas.

Sin embargo, no sabéis cómo será vuestra vida mañanaqué es vuestra vida?}>>. {Sólo} sois un vapor que aparece por un poco de tiempo y luego se desvanece.

Vosotros veis que el hombre es justificado por {las} obras y no sólo por {la} fe.

Pero que pida con fe, sin dudar; porque el que duda es semejante a la ola del mar, impulsada por el viento y echada de una parte a otra.

Si en verdad cumplís la ley real conforme a la Escritura: AMARAS A TU PROJIMO COMO A TI MISMO, bien hacéis.

Pero la sabiduría de lo alto es primeramente pura, después pacífica, amable, condescendiente, llena de misericordia y de buenos frutos, sin vacilación, sin hipocresía.

Pero el que mira atentamente a la ley perfecta, la {ley} de la libertad, y permanece {en ella,} no habiéndose vuelto un oidor olvidadizo sino un hacedor eficaz, éste será bienaventurado en lo que hace.

Codiciáis y no tenéis, {por eso} cometéis homicidio. Sois envidiosos y no podéis obtener, {por eso} combatís y hacéis guerra. No tenéis, porque no pedís.

Si alguno se cree religioso, pero no refrena su lengua, sino que engaña a su {propio} corazón, la religión del tal es vana.

Pedís y no recibís, porque pedís con malos propósitos, para gastar{lo} en vuestros placeres.

Pero alguno dirá: Tú tienes fe y yo tengo obras. Muéstrame tu fe sin las obras, y yo te mostraré mi fe por mis obras.

Hermanos míos, si alguno de entre vosotros se extravía de la verdad y alguno le hace volver,

Hermanos míos amados, escuchad: ¿No escogió Dios a los pobres de este mundo {para ser} ricos en fe y herederos del reino que El prometió a los que le aman?

Y sobre todo, hermanos míos, no juréis, ni por el cielo, ni por la tierra, ni con ningún otro juramento; antes bien, sea vuestro sí, sí, y vuestro no, no, para que no caigáis bajo juicio.

Pero, ¿estás dispuesto a admitir, oh hombre vano, que la fe sin obras es estéril?

Hermanos, no habléis mal los unos de los otros. El que habla mal de un hermano o juzga a su hermano, habla mal de la ley y juzga a la ley; pero si tú juzgas a la ley, no eres cumplidor de la ley, sino juez {de ella.}

y la oración de fe restaurará al enfermo, y el Señor lo levantará, y si ha cometido pecados le serán perdonados.

Porque todos tropezamos de muchas maneras. Si alguno no tropieza en lo que dice, es un hombre perfecto, capaz también de refrenar todo el cuerpo.

y se cumplió la Escritura que dice: Y ABRAHAM CREYO A DIOS Y LE FUE CONTADO POR JUSTICIA, y fue llamado amigo de Dios.

Y la lengua es un fuego, un mundo de iniquidad. La lengua está puesta entre nuestros miembros, la cual contamina todo el cuerpo, es encendida por el infierno e inflama el curso de {nuestra} vida.

Sed también vosotros pacientes; fortaleced vuestros corazones, porque la venida del Señor está cerca.

Humillaos en la presencia del Señor y El os exaltará.

Con ella bendecimos a {nuestro} Señor y Padre, y con ella maldecimos a los hombres, que han sido hechos a la imagen de Dios;

Si un hermano o una hermana no tienen ropa y carecen del sustento diario,

Afligíos, lamentad y llorad; que vuestra risa se torne en llanto y vuestro gozo en tristeza.

Después, cuando la pasión ha concebido, da a luz el pecado; y cuando el pecado es consumado, engendra la muerte.

sabiendo que la prueba de vuestra fe produce paciencia,

Elías era un hombre de pasiones semejantes a las nuestras, y oró fervientemente para que no lloviera, y no llovió sobre la tierra por tres años y seis meses.

Mirad {que} tenemos por bienaventurados a los que sufrieron. Habéis oído de la paciencia de Job, y habéis visto el resultado del proceder del Señor, que el Señor es muy compasivo, y misericordioso.

pues después de mirarse a sí mismo e irse, inmediatamente se olvida de qué clase de persona es.

sepa que el que hace volver a un pecador del error de su camino salvará su alma de muerte, y cubrirá multitud de pecados.

{Sólo} hay un dador de la ley y juez, que es poderoso para salvar y para destruir; pero tú, ¿quién eres que juzgas a tu prójimo?

Porque si alguno es oidor de la palabra, y no hacedor, es semejante a un hombre que mira su rostro natural en un espejo;

y que la paciencia tenga {su} perfecto resultado, para que seáis perfectos y completos, sin que {os} falte nada.

Pero vosotros habéis menospreciado al pobre. ¿No son los ricos los que os oprimen y personalmente os arrastran a los tribunales?

Más bien, {debierais} decir: Si el Señor quiere, viviremos y haremos esto o aquello.

Pero ahora os jactáis en vuestra arrogancia; toda jactancia semejante es mala.

¿No blasfeman ellos el buen nombre por el cual habéis sido llamados?

Porque todo género de fieras y de aves, de reptiles y de {animales} marinos, se puede domar y ha sido domado por el género humano,

Pero si mostráis favoritismo, cometéis pecado {y} sois hallados culpables por la ley como transgresores.

¿Acaso, hermanos míos, puede una higuera producir aceitunas, o una vid higos? Tampoco {la fuente de agua} salada {puede} producir agua dulce.

de la misma boca proceden bendición y maldición. Hermanos míos, esto no debe ser así.

Pues el que dijo: NO COMETAS ADULTERIO, también dijo: NO MATES. Ahora bien, si tú no cometes adulterio, pero matas, te has convertido en transgresor de la ley.

¿Acaso una fuente por la misma abertura echa {agua} dulce y amarga?

Porque si en vuestra congregación entra un hombre con anillo de oro y vestido de ropa lujosa, y también entra un pobre con ropa sucia,

Vuestras riquezas se han podrido y vuestras ropas están comidas de polilla.

Y otra vez oró, y el cielo dio lluvia y la tierra produjo su fruto.

Vuestro oro y vuestra plata se han oxidado, su herrumbre será un testigo contra vosotros y consumirá vuestra carne como fuego. Es en los últimos días que habéis acumulado tesoros.

Habéis vivido lujosamente sobre la tierra, y {habéis} llevado una vida de placer desenfrenado; habéis engordado vuestros corazones en el día de la matanza.

Ahora bien, si ponemos el freno en la boca de los caballos para que nos obedezcan, dirigimos también todo su cuerpo.

¿No fue justificado por las obras Abraham nuestro padre cuando ofreció a Isaac su hijo sobre el altar?

Porque el juicio {será} sin misericordia para el que no ha mostrado misericordia; la misericordia triunfa sobre el juicio.

Así también la lengua es un miembro pequeño, y {sin embargo,} se jacta de grandes cosas. Mirad, ¡qué gran bosque se incendia con tan pequeño fuego!

Pero si tenéis celos amargos y ambición personal en vuestro corazón, no seáis arrogantes y {así} mintáis contra la verdad.

Porque donde hay celos y ambición personal, allí hay confusión y toda cosa mala.

Pero que el hermano de condición humilde se gloríe en su alta posición,

Mirad, el jornal de los obreros que han segado vuestros campos {y} que ha sido retenido por vosotros, clama {contra vosotros;} y el clamor de los segadores ha llegado a los oídos del Señor de los ejércitos.

{siendo} hombre de doble ánimo, inestable en todos sus caminos.

Y de la misma manera, ¿no fue la ramera Rahab también justificada por {las} obras cuando recibió a los mensajeros y los envió por otro camino?

Así hablad y así proceded, como los que han de ser juzgados por {la} ley de la libertad.

Hermanos, tomad como ejemplo de paciencia y aflicción a los profetas que hablaron en el nombre del Señor.

pero ningún hombre puede domar la lengua; {es} un mal turbulento {y} lleno de veneno mortal.

¿O pensáis que la Escritura dice en vano: El celosamente anhela el Espíritu que ha hecho morar en nosotros?

Amados hermanos míos, no os engañéis.

Esta sabiduría no es la que viene de lo alto, sino que es terrenal, natural, diabólica.

Ya ves que la fe actuaba juntamente con sus obras, y como resultado de las obras, la fe fue perfeccionada;

Hermanos, no os quejéis unos contra otros, para que no seáis juzgados; mirad, el Juez está a las puertas.

pues la ira del hombre no obra la justicia de Dios.

Y la semilla cuyo fruto es la justicia se siembra en paz por aquellos que hacen la paz.

y uno de vosotros les dice: Id en paz, calentaos y saciaos, pero no les dais lo necesario para {su} cuerpo, ¿de qué sirve?