'Llegó' en la Biblia
Cus fue el padre de Nimrod, que llegó a ser poderoso en la tierra.
Y Abram se llegó a Agar, y ella concibió. Cuando ella vio que había concebido, miraba con desprecio a su señora.
El sol había salido sobre la tierra cuando Lot llegó a Zoar.
Los niños crecieron, y Esaú llegó a ser diestro cazador, hombre del campo. Pero Jacob {era} hombre pacífico, que habitaba en tiendas.
Isaac se enriqueció, y siguió engrandeciéndose hasta que llegó a ser muy poderoso,
Pero tan pronto como Isaac había terminado de bendecir a Jacob, y apenas había salido Jacob de la presencia de su padre Isaac, su hermano Esaú llegó de su cacería.
Llegó a cierto lugar y pasó la noche allí, porque el sol se había puesto; tomó una de las piedras del lugar, la puso de cabecera y se acostó en aquel lugar.
Todavía estaba él hablando con ellos, cuando llegó Raquel con las ovejas de su padre, pues ella era pastora.
Y al anochecer tomó a su hija Lea y se la trajo, y {Jacob} se llegó a ella.
Jacob se llegó también a Raquel, y amó más a Raquel que a Lea; y sirvió a Labán durante otros siete años.
Raquel le dio a su sierva Bilha por mujer, y Jacob se llegó a ella.
Entonces Jacob se les adelantó, y se inclinó hasta el suelo siete veces hasta que llegó cerca de su hermano.
Jacob llegó sin novedad a la ciudad de Siquem, que está en la tierra de Canaán, cuando vino de Padán Aram, y acampó frente a la ciudad.
Llegó Jacob a Luz, es decir, Betel, que está en la tierra de Canaán, él y todo el pueblo que estaba con él.
Y cuando José llegó a sus hermanos, lo despojaron de su túnica, la túnica de muchos colores que llevaba puesta.
Allí Judá vio a la hija de un Cananeo llamado Súa. La tomó, y se llegó a ella.
`` ¿Qué prenda {tengo} que darte?" preguntó Judá. ``Tu sello, tu cordón y el báculo que tienes en la mano," dijo ella. Y él se {los} dio y se llegó a ella, y ella concibió de él.
Pero el SEÑOR estaba con José, que llegó a ser un hombre próspero, y vivía en la casa de su amo el Egipcio.
Así José halló gracia ante sus ojos y llegó a ser su siervo personal, lo hizo mayordomo sobre su casa y entregó en su mano todo lo que poseía.
Cuando Judá llegó con sus hermanos a casa de José, él estaba aún allí, y ellos cayeron a tierra delante de él.
Israel salió con todo lo que tenía y llegó a Beerseba, y ofreció sacrificios al Dios de su padre Isaac.
Así compró José toda la tierra de Egipto para Faraón, pues los Egipcios vendieron cada uno su campo, porque el hambre era severa sobre ellos. Y la tierra llegó a ser de Faraón.
Entonces José puso una ley respecto a la tierra de Egipto, {en vigor} hasta hoy: que Faraón {debía recibir} la quinta parte. Sólo la tierra de los sacerdotes no llegó a ser de Faraón.
"Al ver que el lugar de reposo era bueno Y que la tierra era agradable, Inclinó su hombro para cargar, Y llegó a ser esclavo en trabajos forzados.
Dios favoreció a las parteras; y el pueblo se multiplicó y llegó a ser muy poderoso.
Moisés apacentaba el rebaño de Jetro su suegro, sacerdote de Madián; condujo el rebaño hacia el lado occidental del desierto y llegó a Horeb, el monte de Dios.
Y hubo granizo muy intenso, y fuego centelleando continuamente en medio del granizo, muy pesado, tal como no había habido en toda la tierra de Egipto desde que llegó a ser una nación.
Partieron de Elim, y toda la congregación de los Israelitas llegó al desierto de Sin, que está entre Elim y Sinaí, el día 15 del segundo mes después de su salida de la tierra de Egipto.
Y aconteció que al tercer día, cuando llegó la mañana, hubo truenos y relámpagos y una densa nube sobre el monte y un sonido tan fuerte de trompeta, que hizo temblar a todo el pueblo que {estaba} en el campamento.
Hizo además cincuenta broches de oro, y unió las cortinas una a la otra con los broches, de manera que el tabernáculo llegó a ser una unidad.
Partiendo de Cades, toda la congregación de los Israelitas llegó al Monte Hor.
Pero Sehón no permitió a Israel pasar por su territorio. Y reunió Sehón a todo su pueblo y salió al encuentro de Israel en el desierto, y llegó a Jahaza y peleó contra Israel.
"Y tú responderás delante del SEÑOR tu Dios: `Mi padre fue un Arameo errante y descendió a Egipto y residió allí, {siendo} pocos en número; pero allí llegó a ser una nación grande, fuerte y numerosa.
Entonces llegó Moisés y habló todas las palabras de este cántico a oídos del pueblo, él, con Josué, hijo de Nun.
Y cuando ella llegó, Otoniel la persuadió a que pidiera un campo a su padre. Ella entonces se bajó del asno, y Caleb le dijo: `` ¿Qué quieres?"
Cuando llegó, tocó la trompeta en la región montañosa de Efraín; y los Israelitas descendieron con él de la región montañosa, {estando} él al frente de ellos.
Cuando Gedeón llegó {allí,} un hombre estaba contando un sueño a su amigo: ``Escuchen, tuve un sueño. Un pan de cebada iba rodando hasta el campamento de Madián, y llegó hasta la tienda y la golpeó de manera que cayó, y la volcó de arriba abajo y la tienda quedó extendida."
Gedeón llegó con los 100 hombres que estaban con él a las afueras del campamento, al principio de la guardia de medianoche, cuando apenas habían apostado la guardia. Entonces tocaron las trompetas y rompieron los cántaros que tenían en las manos.
~`Porque cuando subieron de Egipto, e Israel pasó por el desierto hasta el Mar Rojo y llegó a Cades,
Cuando Jefté llegó a su casa en Mizpa, su hija salió a recibirlo con panderos y con danzas. Ella era su única hija. Fuera de ella no tenía hijo ni hija.
Manoa se levantó y siguió a su mujer, y cuando llegó al hombre, le dijo: `` ¿Eres el hombre que habló a la mujer?" ``Yo soy," respondió él.
Entonces Sansón descendió a Timnat con su padre y con su madre, y llegó hasta los viñedos de Timnat. Y allí un león joven {venía} rugiendo hacia él.
Recogió la miel en sus manos y siguió adelante, comiéndo{la} mientras caminaba. Cuando llegó {adonde estaban} su padre y su madre, les dio {miel} y ellos comieron. Pero no les contó que había recogido la miel del cuerpo del león.
Sansón fue a Gaza, y allí vio a una ramera y se llegó a ella.
Y el hombre salió de la ciudad, de Belén de Judá, para residir donde encontrara {lugar;} y mientras proseguía su camino, llegó a la región montañosa de Efraín, a la casa de Micaía.
Cuando llegó a {donde estaba} su suegra, {ésta} le preguntó: `` ¿Cómo te fue, hija mía?" Y Rut le contó todo lo que Booz había hecho por ella.
Booz tomó a Rut y ella fue su mujer, y se llegó a ella. Y el SEÑOR hizo que concibiera, y ella dio a luz un hijo.
A la mañana siguiente se levantaron bien temprano, adoraron delante del SEÑOR y regresaron de nuevo a su casa en Ramá. Y Elcana se llegó a Ana su mujer, y el SEÑOR se acordó de ella.
Y un hombre de Benjamín corrió del campo de batalla, y llegó aquel mismo día a Silo, con sus vestidos rotos y polvo sobre su cabeza.
Cuando llegó, Elí estaba sentado en {su} asiento junto al camino esperando ansiosamente, porque su corazón temblaba por causa del arca de Dios. Así pues, el hombre fue a anunciar{lo} en la ciudad, y toda la ciudad prorrumpió en gritos.
Entonces enviaron el arca de Dios a Ecrón. Y sucedió que cuando el arca de Dios llegó a Ecrón, los Ecronitas clamaron y dijeron: ``Han traído el arca del Dios de Israel hasta nosotros para matarnos a nosotros y a nuestro pueblo."
El carro llegó al campo de Josué el Bet Semita y se detuvo allí donde {había} una gran piedra; y ellos partieron la madera del carro y ofrecieron las vacas en holocausto al SEÑOR.
Volvieron, pues, a consultar al SEÑOR: `` ¿Llegó ya el hombre aquí?" Y el SEÑOR respondió: ``Sí, está escondido junto al equipaje."
Tan pronto como terminó de ofrecer el holocausto, llegó Samuel; y Saúl salió a su encuentro para saludarle.
Y se levantó David muy de mañana, dejó el rebaño con un guarda, y tomando {las provisiones,} se fue como Isaí le había mandado. Llegó al perímetro del campamento cuando el ejército salía en orden de batalla, lanzando el grito de guerra.
Entonces él mismo fue a Ramá, y llegó hasta el pozo grande que está en Secú; y preguntó: `` ¿Dónde están Samuel y David? Y {alguien} dijo: ``Están en Naiot en Ramá."
Se escondió, pues, David en el campo. Cuando llegó la luna nueva, el rey se sentó a comer.
Cuando el muchacho llegó a la flecha que Jonatán había tirado, Jonatán le gritó al muchacho: `` ¿No está la flecha más allá de ti?"
Entonces llegó David a Nob, al sacerdote Ahimelec; y Ahimelec vino tembloroso al encuentro de David, y le dijo: `` ¿Por qué estás solo y {no hay} nadie contigo?"
Llegó a unos rediles de ovejas en el camino, donde {había} una cueva, y Saúl entró {en ella} para hacer sus necesidades. Y David y sus hombres estaban sentados en los rincones de la cueva.
Cuando David llegó a {donde estaban} los 200 hombres que, demasiado fatigados para seguir a David, se habían quedado en el torrente Besor, {éstos} salieron al encuentro de David y del pueblo que {estaba} con él, y David se acercó al pueblo y los saludó.
Cuando llegó David a Siclag, mandó {parte} del botín a los ancianos de Judá, sus amigos, diciendo: ``Aquí está un presente para ustedes del botín de los enemigos del SEÑOR."
Al tercer día, un hombre llegó del campamento de Saúl con sus ropas rasgadas y polvo sobre su cabeza. Al llegar ante David, se inclinó a tierra y se postró.
Llegó Abner adonde {estaba} David, en Hebrón, y con él veinte hombres. Y David preparó un banquete para Abner y los hombres que lo acompañaban.
Cuando llegó Joab y todo el ejército que {estaba} con él, le dieron aviso a Joab diciéndole: ``Abner, hijo de Ner, vino al rey, y él lo ha despedido y se ha ido en paz."
Entonces todo el pueblo se llegó a David para persuadirlo a que comiera pan mientras aún era de día. Pero David juró: ``Así me haga Dios y aun más, si pruebo pan o cosa alguna antes de ponerse el sol."
David {tenía} treinta años cuando llegó a ser rey, {y} reinó cuarenta años.
Cuando se dio aviso a David, {éste} reunió a todo Israel, cruzó el Jordán y llegó a Helam. Los Arameos se pusieron en orden de batalla para enfrentarse a David, y pelearon contra él.
Partió, pues, el mensajero, y llegó e informó a David todo lo que Joab le había enviado {a decir.}
Estando aún ellos en el camino, llegó a David el rumor que decía: ``Absalón ha dado muerte a todos los hijos del rey, y no ha quedado ni uno de ellos."
Levantaron, pues, una tienda en el terrado para Absalón, y él se llegó a las concubinas de su padre a la vista de todo Israel.
Cuando David llegó a Mahanaim, entonces Sobi, hijo de Nahas de Rabá, de los hijos de Amnón, Maquir, hijo de Amiel de Lodebar, y Barzilai el Galaadita de Rogelim,
Y cuando llegó el Cusita, dijo: ``Reciba mi señor el rey buenas noticias, porque el SEÑOR lo ha librado hoy de la mano de todos aquéllos que se levantaron contra usted."
Volvió el rey y llegó hasta el Jordán. Y Judá vino a Gilgal para ir al encuentro del rey, para conducir al rey al otro lado del Jordán.
Cuando David llegó a su casa en Jerusalén, el rey tomó las diez mujeres, las concubinas que había dejado para guardar la casa, las puso bajo custodia y les dio alimento, pero no se llegó a ellas. Ellas estuvieron encerradas hasta el día de su muerte, viviendo como viudas.
En mi angustia invoqué al SEÑOR, Sí, clamé a mi Dios; Desde Su templo oyó mi voz, Y mi clamor {llegó} a Sus oídos.
El {era} el más distinguido de los treinta, por eso llegó a ser su jefe; pero no igualó a los tres {primeros.}
Estaba aún hablando, cuando llegó Jonatán, hijo del sacerdote Abiatar. Y Adonías {le} dijo: ``Entra, pues tú eres hombre valiente y traerás buenas noticias."
Llegó a Jerusalén con un séquito muy grande, con camellos cargados de especias, y gran cantidad de oro y piedras preciosas. Cuando vino a Salomón, habló con él de todo lo que tenía en su corazón.
Así el rey Salomón llegó a ser más grande que todos los reyes de la tierra en riqueza y sabiduría.
Cuando Roboam llegó a Jerusalén, reunió a toda la casa de Judá y a la tribu de Benjamín, 180,000 hombres, guerreros escogidos, para pelear contra la casa de Israel y restituir el reino a Roboam, hijo de Salomón.
Así lo hizo la mujer de Jeroboam; se levantó, fue a Silo y llegó a casa de Ahías. Y Ahías no podía ver porque sus ojos se habían nublado a causa de su vejez.
Entonces la mujer de Jeroboam se levantó, se fue y llegó a Tirsa. {Y} al entrar ella por el umbral de la casa, el niño murió.
El se levantó y fue a Sarepta. Cuando llegó a la entrada de la ciudad, allí estaba una viuda recogiendo leña, entonces la llamó y {le} dijo: ``Te ruego que me consigas un poco de agua en un vaso para que yo beba."
Cuando llegó al rey, éste le dijo: ``Micaías, ¿iremos a Ramot de Galaad a pelear, o debemos desistir?" Y él le respondió: ``Suba, y tendrá éxito, y el SEÑOR {la} entregará en manos del rey."
Cuando el niño creció, llegó el día en que salió al campo adonde estaba su padre con los segadores,
Y ella fue y llegó al hombre de Dios en el Monte Carmelo. Cuando el hombre de Dios la vio a lo lejos, dijo a Giezi su criado: ``Mira, allá viene la Sunamita.
Pero cuando ella llegó al monte, al hombre de Dios, se abrazó de sus pies. Y Giezi se acercó para apartarla, pero el hombre de Dios dijo: ``Déjala, porque su alma está angustiada y el SEÑOR me lo ha ocultado y no me lo ha revelado."
Cuando llegó al monte, los tomó de sus manos y los guardó en la casa, luego despidió a los hombres y ellos se fueron.
Cuando llegó allá los capitanes del ejército estaban sentados, y él dijo: ``Capitán, tengo un mensaje para ti." Y Jehú dijo: `` ¿Para cuál de nosotros?" Y él dijo: ``Para ti, capitán."
Fue el jinete a su encuentro, y dijo: ``Así dice el rey: ` ¿Hay paz?'" Y Jehú dijo: `` ¿Qué tienes tú que ver con la paz? Ponte detrás de mí." Y el centinela le avisó: ``El mensajero llegó hasta ellos, pero no regresó."
El centinela le aviso de nuevo: ``El llegó hasta ellos, y no regresó; y el {modo de} guiar es como el guiar de Jehú, hijo de Nimsi, porque guía alocadamente."
Y llegó Jehú a Jezreel, y cuando Jezabel {lo} oyó, se pintó los ojos, adornó su cabeza y se asomó por la ventana.
Cuando les llegó la carta, tomaron a los hijos del rey y {los} degollaron, setenta personas, pusieron sus cabezas en canastas y se {las} enviaron a Jehú en Jezreel.
Cuando llegó a Samaria, mató a todos los que quedaban de Acab en Samaria, hasta acabar con ellos, conforme a la palabra que el SEÑOR había hablado a Elías.
Al oír Atalía el ruido de la guardia {y} del pueblo, se llegó al pueblo en la casa del SEÑOR,
Y le echaron mano; y cuando ella llegó a la entrada de los caballos de la casa del rey, allí la mataron.
Nabucodonosor, rey de Babilonia, llegó a la ciudad mientras sus siervos la tenían sitiada.
Cus fue el padre de Nimrod; éste llegó a ser poderoso sobre la tierra.
De los treinta en el segundo {grupo,} él fue el más distinguido y llegó a ser capitán de ellos; pero no igualó a los tres {primeros.}