'Los' en la Biblia
Bienaventurado (Feliz) el que lee y los que oyen las palabras de la profecía y guardan las cosas que están escritas en ella, porque el tiempo está cerca.
Juan, a las siete iglesias que están en Asia (provincia occidental Romana de Asia Menor): Gracia y paz a ustedes, de parte de Aquél que es y que era y que ha de venir, y de parte de los siete Espíritus que están delante de Su trono,
y de parte de Jesucristo, el testigo fiel, el primogénito de los muertos y el soberano de los reyes de la tierra. Al que nos ama y nos libertó de nuestros pecados con Su sangre,
e hizo de nosotros un reino, sacerdotes para Dios, Su Padre, a El {sea} la gloria y el dominio por los siglos de los siglos. Amén.
EL VIENE CON LAS NUBES, y todo ojo Lo verá, aun los que Lo traspasaron; y todas las tribus (linajes y razas) de la tierra harán lamentación por El. Sí. Amén.
En medio de los candelabros, {vi} a uno semejante al Hijo del Hombre, vestido con una túnica que Le llegaba hasta los pies y ceñido por el pecho con un cinto de oro.
y el que vive, y estuve muerto. Pero ahora estoy vivo por los siglos de los siglos, y tengo las llaves de la muerte y del Hades (región de los muertos).
"En cuanto al misterio de las siete estrellas que viste en Mi {mano} derecha y de los siete candelabros de oro: las siete estrellas son los ángeles (mensajeros) de las siete iglesias, y los siete candelabros son las siete iglesias.
``Escribe al ángel de la iglesia en Efeso: `El que tiene las siete estrellas en Su {mano} derecha, Aquél que anda entre los siete candelabros de oro, dice esto:
``Yo conozco tus obras, tu fatiga y tu perseverancia, y que no puedes soportar a los malos, y has sometido a prueba a los que se dicen ser apóstoles y no lo son, y los has hallado mentirosos (falsos).
"Sin embargo tienes esto: que aborreces las obras de los Nicolaítas, las cuales Yo también aborrezco.
``Yo conozco tu tribulación y tu pobreza (pero tú eres rico), y la blasfemia de los que se dicen ser Judíos y no lo son, sino que son sinagoga de Satanás.
``Yo sé dónde moras: donde está el trono de Satanás. Guardas fielmente Mi nombre y no has negado Mi fe, aun en los días de Antipas, Mi testigo, Mi {siervo} fiel, que fue muerto entre ustedes, donde mora Satanás.
"Pero tengo unas pocas cosas contra ti, porque tienes ahí a los que mantienen la doctrina de Balaam, que enseñaba a Balac a poner tropiezo ante los Israelitas, a comer cosas sacrificadas a los ídolos y a cometer {actos de} inmoralidad.
"Así tú también tienes algunos que de la misma manera mantienen la doctrina de los Nicolaítas.
"Pero tengo {esto} contra ti: que toleras a esa mujer Jezabel, que se dice ser profetisa, y enseña y seduce a Mis siervos a que cometan actos inmorales y coman cosas sacrificadas a los ídolos.
"Por eso, la postraré en cama, y a los que cometen adulterio con ella {los arrojaré} en gran tribulación, si no se arrepienten de las obras de ella.
"A sus hijos mataré con pestilencia, y todas las iglesias sabrán que Yo soy el que escudriña las mentes y los corazones, y les daré a cada uno según sus obras.
"Pero a ustedes, a los demás que están en Tiatira, a cuantos no tienen esta doctrina, que no han conocido las cosas profundas de Satanás, como ellos {las} llaman, les digo, que no les impongo otra carga.
Y LAS REGIRA CON VARA DE HIERRO, COMO LOS VASOS DEL ALFARERO SON HECHOS PEDAZOS, como Yo también he recibido {autoridad} de Mi Padre.
``Escribe al ángel de la iglesia en Sardis: `El que tiene los siete Espíritus de Dios y las siete estrellas, dice esto: ``Yo conozco tus obras, que tienes nombre de que vives, pero estás muerto.
"Porque has guardado la palabra de Mi perseverancia, Yo también te guardaré de la hora de la prueba (de la tentación), esa {hora} que está por venir sobre todo el mundo para poner a prueba a los que habitan sobre la tierra.
"Yo reprendo y disciplino a todos los que amo. Sé, pues, celoso y arrepiéntete.
Y alrededor del trono {había} veinticuatro tronos. Y sentados en los tronos, veinticuatro ancianos vestidos de ropas blancas, con coronas de oro en la cabeza.
Del trono salían relámpagos, voces, y truenos. Delante del trono {había} siete lámparas de fuego ardiendo, que son los siete Espíritus de Dios.
Los cuatro seres vivientes, cada uno de ellos con seis alas, estaban llenos de ojos alrededor y por dentro, y día y noche no cesaban de decir: ``SANTO, SANTO, SANTO, {es} EL SEÑOR DIOS, EL TODOPODEROSO, el que era, el que es y el que ha de venir."
Y cada vez que los seres vivientes dan gloria, honor, y acción de gracias a Aquél que está sentado en el trono, al que vive por los siglos de los siglos,
los veinticuatro ancianos se postran delante de Aquél que está sentado en el trono, y adoran a Aquél que vive por los siglos de los siglos, y echan sus coronas delante del trono, diciendo:
Entonces uno de los ancianos me dijo: ``No llores; mira, el León de la tribu de Judá, la Raíz de David, ha vencido para abrir el libro y sus siete sellos."
Miré, y vi entre el trono (con los cuatro seres vivientes) y los ancianos, a un Cordero, de pie, como inmolado, que tenía siete cuernos y siete ojos, que son los siete Espíritus de Dios enviados por toda la tierra.
Cuando tomó el libro, los cuatro seres vivientes y los veinticuatro ancianos se postraron delante del Cordero. Cada uno tenía un arpa y copas de oro llenas de incienso, que son las oraciones de los santos.
Y los has hecho un reino y sacerdotes para nuestro Dios; y reinarán sobre la tierra."
Y miré, y oí la voz de muchos ángeles alrededor del trono y {de} los seres vivientes y {de} los ancianos. El número de ellos era miríadas de miríadas, y millares de millares,
Y oí decir a toda cosa creada que está en el cielo, sobre la tierra, debajo de la tierra y en el mar, y a todas las cosas que en ellos {hay}: ``Al que está sentado en el trono, y al Cordero, {sea} la alabanza, la honra, la gloria y el dominio por los siglos de los siglos."
Los cuatro seres vivientes decían: ``Amén," y los ancianos se postraron y adoraron.
Entonces vi cuando el Cordero abrió uno de los siete sellos, y oí a uno de los cuatro seres vivientes que decía, como con voz de trueno: ``Ven."
Entonces salió otro caballo, rojo. Al que estaba montado en él se le concedió quitar la paz de la tierra y que {los hombres} se mataran unos a otros; y se le dio una gran espada.
Y oí como una voz en medio de los cuatro seres vivientes que decía: ``Un litro de trigo por un denario (el salario de un día), y tres litros de cebada por un denario, y no dañes el aceite y el vino."
Y miré, y había un caballo amarillento. El que estaba montado en él se llamaba Muerte, y el Hades (región de los muertos) lo seguía. Y se les dio autoridad sobre la cuarta parte de la tierra, para matar con espada, con hambre, con pestilencia y con las fieras de la tierra.
Cuando el Cordero abrió el quinto sello, vi debajo del altar las almas de los que habían sido muertos a causa de la palabra de Dios y del testimonio que habían mantenido.
Clamaban a gran voz: `` ¿Hasta cuándo, oh Señor santo y verdadero, esperarás para juzgar y vengar nuestra sangre de los que moran en la tierra?"
Los reyes de la tierra, y los grandes, los comandantes, los ricos, los poderosos, y todo siervo y {todo} libre, se escondieron en las cuevas y entre las peñas de los montes,
y decían a los montes y a las peñas: ``Caigan sobre nosotros y escóndannos de la presencia de Aquél que está sentado en el trono y de la ira del Cordero.
Después de esto, vi a cuatro ángeles de pie en los cuatro extremos de la tierra, que detenían los cuatro vientos de la tierra, para que no soplara viento alguno, ni sobre la tierra ni sobre el mar ni sobre ningún árbol.
También vi a otro ángel que subía de donde sale el sol y que tenía el sello del Dios vivo. Y gritó a gran voz a los cuatro ángeles a quienes se les había concedido hacer daño a la tierra y al mar:
``No hagan daño, ni a la tierra ni al mar ni a los árboles, hasta que hayamos puesto un sello en la frente a los siervos de nuestro Dios."
Oí el número de los que fueron sellados: 144,000 sellados de todas las tribus de los Israelitas.
Todos los ángeles estaban de pie alrededor del trono y {alrededor} de los ancianos y de los cuatro seres vivientes. Estos cayeron sobre sus rostros delante del trono y adoraron a Dios,
diciendo: `` ¡Amén! La bendición, la gloria, la sabiduría, la acción de gracias, el honor, el poder y la fortaleza, {sean} a nuestro Dios por los siglos de los siglos. Amén."
Uno de los ancianos habló diciéndome: ``Estos que están vestidos con vestiduras blancas, ¿quiénes son y de dónde han venido?"
Y le respondí: ``Señor mío, usted lo sabe." Y él me dijo: ``Estos son los que vienen de la gran tribulación, y han lavado sus vestiduras y las han emblanquecido en la sangre del Cordero.
pues el Cordero que está en medio del trono los pastoreará y los guiará a manantiales de aguas de vida, y Dios enjugará toda lágrima de sus ojos."
Vi a los siete ángeles que están de pie delante de Dios, y se les dieron siete trompetas.
Otro ángel vino y se paró ante el altar con un incensario de oro, y se le dio mucho incienso para que {lo} añadiera a las oraciones de todos los santos sobre el altar de oro que estaba delante del trono.
De la mano del ángel subió ante Dios el humo del incienso con las oraciones de los santos.
Entonces los siete ángeles que tenían las siete trompetas se prepararon para tocarlas.
El primero tocó la trompeta, y vino granizo y fuego mezclados con sangre, y fueron arrojados a la tierra. Se quemó la tercera parte de la tierra, la tercera parte de los árboles y toda hierba verde.
Y murió la tercera parte de los seres que {estaban} en el mar y que tenían vida. Y la tercera parte de los barcos fue destruida.
El tercer ángel tocó la trompeta, y cayó del cielo una gran estrella, ardiendo como una antorcha, y cayó sobre la tercera parte de los ríos y sobre los manantiales de las aguas.
Entonces miré, y oí volar un águila en medio del cielo, que decía a gran voz: `` ¡Ay, ay, ay, de los que habitan en la tierra, a causa de los toques de trompeta que faltan, que los otros tres ángeles están para tocar!"
Del humo salieron langostas sobre la tierra, y se les dio poder como tienen poder los escorpiones de la tierra.
Se les dijo que no dañaran la hierba de la tierra, ni ninguna cosa verde, ni ningún árbol, sino {sólo} a los hombres que no tienen el sello de Dios en la frente.
No se les permitió matar a nadie, sino atormentar{los} por cinco meses. Su tormento era como el tormento de un escorpión cuando pica al hombre.
En aquellos días los hombres buscarán la muerte y no la hallarán; y ansiarán morir, y la muerte huirá de ellos.
Tienen colas parecidas a escorpiones, y aguijones. En sus colas {está} su poder para hacer daño a los hombres por cinco meses.
El sexto ángel tocó la trompeta, y oí una voz que salía de los cuatro cuernos del altar de oro que está delante de Dios,
y decía al sexto ángel que tenía la trompeta: ``Suelta a los cuatro ángeles que están atados junto al gran Río Eufrates."
Y fueron desatados los cuatro ángeles que habían sido preparados para la hora, el día, el mes, y el año, para matar a la tercera parte de la humanidad.
El número de los ejércitos de los jinetes {era} doscientos millones; yo escuché su número.
Así es como vi en la visión los caballos y a los que los montaban: {los jinetes} tenían corazas {color} de fuego, de jacinto y de azufre. Las cabezas de los caballos {eran} como cabezas de leones, y de sus bocas salía fuego, humo, y azufre.
Porque el poder de los caballos está en su boca y en sus colas; pues sus colas son semejantes a serpientes, tienen cabezas y con ellas hacen daño.
El resto de la humanidad, los que no fueron muertos por estas plagas, no se arrepintieron de las obras de sus manos ni dejaron de adorar a los demonios y a los ídolos de oro, de plata, de bronce, de piedra, y de madera, que no pueden ver ni oír ni andar.
y gritó a gran voz, como ruge un león. Y cuando gritó, los siete truenos emitieron sus voces.
Después que los siete truenos hablaron, iba yo a escribir, cuando oí una voz del cielo que decía: ``Sella las cosas que los siete truenos han dicho y no las escribas."
y juró por Aquél que vive por los siglos de los siglos, QUIEN CREO EL CIELO Y LAS COSAS QUE EN EL {hay,} Y LA TIERRA Y LAS COSAS QUE EN ELLA {hay,} Y EL MAR Y LAS COSAS QUE EN EL {hay}, que ya no habrá más demora.
Porque en los días de la voz del séptimo ángel, cuando esté para tocar la trompeta, entonces el misterio de Dios será consumado, como El lo anunció a Sus siervos los profetas.
Me fue dada una caña de medir (unos 3 m) semejante a una vara, y alguien dijo: ``Levántate y mide el templo de Dios y el altar, y a los que en él adoran.
Estos son los dos olivos y los dos candelabros que están delante del Señor de la tierra.
Ellos tienen poder para cerrar el cielo a fin de que no llueva durante los días en que ellos profeticen; y tienen poder sobre las aguas para convertirlas en sangre, y para herir la tierra con toda {suerte de} plagas todas las veces que quieran.
Cuando hayan terminado {de dar} su testimonio, la bestia que sube del abismo hará guerra contra ellos, los vencerá y los matará.
{Gente} de {todos} los pueblos, tribus, lenguas, y naciones, contemplarán sus cadáveres por tres días y medio, y no permitirán que sus cadáveres sean sepultados.
Los que moran en la tierra se regocijarán por ellos y se alegrarán, y se enviarán regalos unos a otros, porque estos dos profetas habían atormentado a los que moran en la tierra.
Pero después de los tres días y medio, el aliento de vida de parte de Dios vino a ellos y se pusieron en pie, y gran temor cayó sobre quienes los contemplaban.
Entonces ellos oyeron una gran voz del cielo que les decía: ``Suban acá." Y subieron al cielo en la nube, y sus enemigos los vieron.
En aquella misma hora hubo un gran terremoto y la décima parte de la ciudad se derrumbó, y siete mil personas murieron en el terremoto, y los demás, aterrorizados, dieron gloria al Dios del cielo.
El séptimo ángel tocó la trompeta, y hubo (se oyeron) grandes voces en el cielo, que decían: ``El reino del mundo ha venido a ser {el reino} de nuestro Señor y de Su Cristo (el Mesías). El reinará por los siglos de los siglos."
Y los veinticuatro ancianos que estaban sentados delante de Dios en sus tronos, se postraron sobre sus rostros y adoraron a Dios,
"Las naciones se enfurecieron, y vino Tu ira y {llegó} el tiempo de juzgar a los muertos y de dar la recompensa a Tus siervos los profetas, a los santos y a los que temen Tu nombre, a los pequeños y a los grandes, y de destruir a los que destruyen la tierra."
Estaba encinta, y gritaba por los dolores del parto y el sufrimiento de dar a luz.
Entonces oí una gran voz en el cielo, que decía: ``Ahora ha venido la salvación, el poder y el reino de nuestro Dios y la autoridad de Su Cristo (el Mesías), porque el acusador de nuestros hermanos, el que los acusa delante de nuestro Dios día y noche, ha sido arrojado.
"Por lo cual regocíjense, cielos y los que moran en ellos. ¡Ay de la tierra y del mar!, porque el diablo ha descendido a ustedes con gran furor, sabiendo que tiene poco tiempo."
Entonces el dragón se enfureció contra la mujer, y salió para hacer guerra contra el resto de la descendencia de ella, los que guardan los mandamientos de Dios y tienen el testimonio de Jesús.
La bestia que vi era semejante a un leopardo, sus pies eran como los de un oso y su boca como la boca de un león. El dragón le dio su poder, su trono, y gran autoridad.
Y abrió su boca con blasfemias contra Dios, para blasfemar Su nombre y Su tabernáculo, {es decir, contra} los que moran en el cielo.
Se le concedió hacer guerra contra los santos y vencerlos. Y se le dio autoridad sobre toda tribu, pueblo, lengua y nación.
Adorarán a la bestia todos los que moran en la tierra, cuyos nombres no han sido escritos desde la fundación del mundo en el Libro de la Vida del Cordero que fue inmolado.
Si alguien es destinado a la cautividad, a la cautividad va; si alguien ha de morir a espada, a espada ha de morir. Aquí está la perseverancia y la fe de los santos.
Vi otra bestia que subía de la tierra. Tenía dos cuernos semejantes a los de un cordero y hablaba como un dragón.
Ejerce toda la autoridad de la primera bestia en su presencia, y hace que la tierra y los que moran en ella adoren a la primera bestia, cuya herida mortal fue sanada.
También hace grandes señales, de tal manera que aun hace descender fuego del cielo a la tierra en presencia de los hombres.
Resutados de la Búsqueda continuados...
Resultados de Búsqueda por Versiones
Resultados de Búsqueda por Libro
Artículos Relacionados
- Amén
- Armageddon
- Babilonia
- Brimstone
- Criaturas cósmicas
- Cuatro Criaturas
- Cuernos en alegoría
- El azufre
- El grito de Dios
- El infierno, como una experiencia
- Humo
- La autoridad de los Discípulos
- La guerra espiritual, los enemigos en
- La victoria sobre el mal,
- La voz de Dios
- Las bestias