'Ella' en la Biblia
Todos los que á ella entraren, no volverán, Ni tomarán las veredas de la vida.
Porque los rectos habitarán la tierra, Y los perfectos permanecerán en ella;
Mas los impíos serán cortados de la tierra, Y los prevaricadores serán de ella desarraigados.
Más preciosa es que las piedras preciosas; Y todo lo que puedes desear, no se puede comparar á ella.
Ella es árbol de vida á los que de ella asen: Y bienaventurados son los que la mantienen.
No la dejes, y ella te guardará; Amala, y te conservará.
Engrandécela, y ella te engrandecerá: Ella te honrará, cuando tú la hubieres abrazado.
Desampárala, no pases por ella; Apártate de ella, pasa.
Aleja de ella tu camino, Y no te acerques á la puerta de su casa;
No codicies su hermosura en tu corazón, Ni ella te prenda con sus ojos:
Vase en pos de ella luego, Como va el buey al degolladero, Y como el loco á las prisiones para ser castigado;
Porque á muchos ha hecho caer heridos; Y aun los más fuertes han sido muertos por ella.
Porque mejor es la sabiduría que las piedras preciosas; Y todas las cosas que se pueden desear, no son de comparar con ella.
La bendición de Jehová es la que enriquece, Y no añade tristeza con ella.
Por la bendición de los rectos la ciudad será engrandecida: Mas por la boca de los impíos ella será trastornada.
La sana lengua es árbol de vida: Mas la perversidad en ella es quebrantamiento de espíritu.
La suerte se echa en el seno: Mas de Jehová es el juicio de ella.
Honra es del hombre dejarse de contienda: Mas todo insensato se envolverá en ella.
La ciudad de los fuertes tomó el sabio, Y derribó la fuerza en que ella confiaba.
Instruye al niño en su carrera: Aun cuando fuere viejo no se apartará de ella.
Sima profunda es la boca de las extrañas: Aquel contra el cual estuviere Jehová airado, caerá en ella.
También ella, como robador, acecha, Y multiplica entre los hombres los prevaricadores.
Y he aquí que por toda ella habían ya crecido espinas, Ortigas habían ya cubierto su haz, Y su cerca de piedra estaba ya destruída.
¿Hallaste la miel? come lo que te basta; No sea que te hartes de ella, y la vomites.
El que cavare sima, caerá en ella: Y el que revuelva la piedra, á él volverá.
El corazón de su marido está en ella confiado, Y no tendrá necesidad de despojo.
Darále ella bien y no mal, Todos los días de su vida.
Ella se hizo tapices; De lino fino y púrpura es su vestido.
Resultados de Búsqueda por Versiones
- J2000 (28)
- LBDA (20)
- NBLH (22)
- RV (25)
- SEV (28)
- RV1909 (28)
Resultados de Búsqueda por Libro
- Génesis (72)
- Éxodo (41)
- Levítico (54)
- Números (37)
- Deuteronomio (39)
- Josué (30)
- Jueces (40)
- Rut (17)
- 1 Samuel (25)
- 2 Samuel (24)
- 1 Reyes (33)
- 2 Reyes (35)
- 1 Crónicas (13)
- 2 Crónicas (13)
- Esdras (3)
- Nehemías (5)
- Ester (12)
- Job (22)
- Salmos (31)
- Proverbios (28)
- Eclesiastés (5)
- Cantares (3)
- Isaías (32)
- Jeremías (62)
- Lamentaciones (7)
- Ezequiel (87)
- Daniel (2)
- Oseas (4)
- Joel (2)
- Amós (3)
- Abdías (1)
- Jonás (3)
- Miqueas (2)
- Nahúm (3)
- Habacuc (3)
- Sofonías (5)
- Hageo (3)
- Zacarías (9)
- Malaquías (1)