3393 casos

'Mi' en la Biblia

Si encubrí, como los hombres mis prevaricaciones, Escondiendo en mi seno mi iniquidad;

Porque quebrantaba á la gran multitud, Y el menosprecio de las familias me atemorizó, Y callé, y no salí de mi puerta:

Quién me diera quien me oyese! He aquí mi impresión es que el Omnipotente testificaría por mí, Aunque mi adversario me hiciera el proceso.

Ciertamente yo lo llevaría sobre mi hombro, Y me lo ataría en lugar de corona.

Si mi tierra clama contra mí, Y lloran todos sus surcos;

Y respondió Eliú hijo de Barachêl, Buzita, y dijo: Yo soy menor de días y vosotros viejos; He tenido por tanto miedo, y temido declararos mi opinión.

Por tanto yo dije: Escuchadme; Declararé yo también mi sabiduría.

Ahora bien, Job no enderezó á mí sus palabras, Ni yo le responderé con vuestras razones.

Por eso yo también responderé mi parte, También yo declararé mi juicio.

Porque lleno estoy de palabras, Y el espíritu de mi vientre me constriñe.

De cierto mi vientre está como el vino que no tiene respiradero, Y se rompe como odres nuevos.

Porque no sé hablar lisonjas: De otra manera en breve mi Hacedor me consuma.

He aquí yo abriré ahora mi boca, Y mi lengua hablará en mi garganta.

Mis razones declararán la rectitud de mi corazón, Y mis labios proferirán pura sabiduría.

Si pudieres, respóndeme: Dispón tus palabras, está delante de mí.

He aquí que mi terror no te espantará, Ni mi mano se agravará sobre ti.

He aquí que él buscó achaques contra mí, Y me tiene por su enemigo;

Porque Job ha dicho: Yo soy justo, Y Dios me ha quitado mi derecho.

¿He de mentir yo contra mi razón? Mi saeta es gravosa sin haber yo prevaricado.

Porque dijiste: ¿Qué ventaja sacarás tú de ello? ¿O qué provecho tendré de mi pecado?

Tomaré mi noticia de lejos, Y atribuiré justicia á mi Hacedor.

A ESTO también se espanta mi corazón, Y salta de su lugar.

Y establecí sobre ella mi decreto, Y le puse puertas y cerrojo,

¿Invalidarás tú también mi juicio? ¿Me condenarás á mí, para justificarte á ti?

Nadie hay tan osado que lo despierte: ¿Quién pues podrá estar delante de mí?

Y aconteció que después que habló Jehová estas palabras á Job, Jehová dijo á Eliphaz Temanita: Mi ira se encendió contra ti y tus dos compañeros: porque no habéis hablado por mí lo recto, como mi siervo Job.

Ahora pues, tomaos siete becerros y siete carneros, y andad á mi siervo Job, y ofreced holocausto por vosotros, y mi siervo Job orará por vosotros; porque de cierto á él atenderé para no trataros afrentosamente, por cuanto no habéis hablado por mí con rec

Salmo de David, cuando huía de adelante de Absalom su hijo. ­OH Jehová, cuánto se han multiplicado mis enemigos! Muchos se levantan contra mí.

Al Músico principal: sobre Neginoth: Salmo de David. RESPONDEME cuando clamo, oh Dios de mi justicia: Estando en angustia, tú me hiciste ensanchar: Ten misericordia de mí, y oye mi oración.

Hijos de los hombres, ¿hasta cuándo volveréis mi honra en infamia, Amaréis la vanidad, y buscaréis la mentira? (Selah.)

Está atento á la voz de mi clamor, Rey mío y Dios mío, Porque á ti oraré.

Vuelve, oh Jehová, libra mi alma; Sálvame por tu misericordia.

Heme consumido á fuerza de gemir: Todas las noches inundo mi lecho, Riego mi estrado con mis lágrimas.

Apartaos de mí, todos los obradores de iniquidad; Porque Jehová ha oído la voz de mi lloro.

No sea que arrebate mi alma, cual león Que despedaza, sin que haya quien libre.

Si dí mal pago al pacífico conmigo,(asta he libertado al que sin causa era mi enemigo;)

Persiga el enemigo mi alma, y alcánce la; Y pise en tierra mi vida, Y mi honra ponga en el polvo. (Selah.)

Jehová juzgará los pueblos: Júzgame, oh Jehová, conforme á mi justicia y conforme á mi integridad.

Al Músico principal: sobre Muth-labben: Salmo de David. TE alabaré, oh Jehová, con todo mi corazón; Contaré todas tus maravillas.

Porque has hecho mi juicio y mi causa: Sentástete en silla juzgando justicia.

Ten misericordia de mí, Jehová: Mira mi aflicción que padezco de los que me aborrecen, Tú que me levantas de las puertas de la muerte;

Al Músico principal: Salmo de David. EN Jehová he confiado; ¿Cómo decís á mi alma: Escapa al monte cual ave?

¿Hasta cuándo pondré consejos en mi alma, Con ansiedad en mi corazón cada día? ¿Hasta cuándo será enaltecido mi enemigo sobre mí?

Porque no diga mi enemigo, Vencílo: Mis enemigos se alegrarán, si yo resbalare.

¿No tendrán conocimiento todos los que obran iniquidad, Que devoran á mi pueblo como si pan comiesen, Y á Jehová no invocaron?

Alegróse por tanto mi corazón, y se gozó mi gloria: También mi carne reposará segura.

Oración de David. OYE, oh Jehová, justicia; está atento á mi clamor; Escucha mi oración hecha sin labios de engaño.

De delante de tu rostro salga mi juicio; Vean tus ojos la rectitud.

Tú has probado mi corazón, hasme visitado de noche; Me has apurado, y nada inicuo hallaste: Heme propuesto que mi boca no ha de propasarse.

Levántate, oh Jehová; Prevén su encuentro, póstrale: Libra mi alma del malo con tu espada;

En mi angustia invoqué á Jehová, Y clamé á mi Dios: El oyó mi voz desde su templo, Y mi clamor llegó delante de él, á sus oídos.

Asaltáronme en el día de mi quebranto: Mas Jehová fué mi apoyo.

Hame pagado Jehová conforme á mi justicia: Conforme á la limpieza de mis manos me ha vuelto.

Porque yo he guardado los caminos de Jehová, Y no me aparté impíamente de mi Dios.

Pues todos sus juicios estuvieron delante de mí, Y no eché de mí sus estatutos.

Y fuí integro para con él, y cauteléme de mi maldad.

Pagóme pues Jehová conforme á mi justicia; Conforme á la limpieza de mis manos delante de sus ojos.

El Dios que me da las venganzas, Y sujetó pueblos á mí.

Detén asimismo á tu siervo de las soberbias; Que no se enseñoreen de mí: Entonces seré íntegro, y estaré limpio de gran rebelión.

Dios mío, clamo de día, y no oyes; Y de noche, y no hay para mí silencio.

Public Domain