565 casos

'Desde' en la Biblia

Y desde el frente de la puerta de la entrada hasta el frente de la entrada de la puerta interior, cincuenta codos.

Y midió la anchura desde el frente de la puerta de abajo hasta el frente del atrio interior por fuera, de cien codos hacia el oriente y el norte.

Los umbrales y las ventanas estrechas y las cámaras alrededor de los tres pisos estaba todo cubierto de madera alrededor, desde el suelo hasta las ventanas; y las ventanas también estaban cubiertas.

Desde el suelo hasta encima de la puerta había querubines labrados y palmeras, por toda la pared del templo.

Porque estaban en tres pisos, y no tenían columnas como las columnas de los atrios: por tanto, eran más estrechas que las de abajo y las del medio desde el suelo.

Y debajo de las cámaras estaba la entrada al lado oriental, para entrar en él desde el atrio de afuera.

Y oí a uno que me hablaba desde la casa; y el varón estaba junto a mí,

Y desde la base de sobre el suelo hasta el lugar de abajo, dos codos, y la anchura de un codo; y desde el lugar menor hasta el lugar mayor, cuatro codos, y la anchura de un codo.

Y la parte del príncipe estará junto a lo que se apartó para el santuario, de uno y otro lado, y junto a la posesión de la ciudad, delante de lo que se apartó para el santuario, y delante de la posesión de la ciudad, desde el extremo occidental hacia el occidente, hasta el extremo oriental hacia el oriente; y su longitud será de una parte a la otra, desde el límite del occidente hasta el límite del oriente.

Y será que junto a él estarán pescadores; y desde Engadi hasta Eneglaim será tendedero de redes; en su especie será su pescado como el pescado del Mar Grande, mucho en gran manera

Y éste será el término de la tierra hacia el lado del norte; desde el Mar Grande, camino de Hetlón viniendo a Sedad;

Y será el término del norte desde el mar de Hazar-enán al término de Damasco al norte, y al término de Hamat al lado del norte.

Y al lado del Neguev, hacia el sur, desde Tamar hasta las aguas de las rencillas; desde Cades y el arroyo hasta el Mar Grande; y esto será el lado sur, hacia el Neguev.

Y éstos son los nombres de las tribus: Desde el extremo norte por la vía de Hetlón viniendo a Hamat, Hazar-enán, al término de Damasco, al norte, al término de Hamat; tendrá Dan una porción, desde el lado oriental hasta el occidental.

Y junto al término de Dan, desde el lado del oriente hasta el lado del mar, para Aser una porción.

Y junto al término de Aser, desde el lado oriental hasta el lado del mar, Neftalí, otra.

Y junto al término de Neftalí, desde el lado del oriente hasta el lado del mar, Manasés, otra.

Y junto al término de Manasés, desde el lado del oriente hasta el lado del mar, Efraín, otra.

Y junto al término de Efraín, desde el lado del oriente hasta el lado del mar, Rubén, otra.

Y junto al término de Rubén, desde el lado del oriente hasta el lado del mar, Judá, otra.

Y junto al término de Judá, desde el lado del oriente hasta el lado del mar, será la suerte que apartaréis de veinticinco mil cañas de anchura, y de longitud como cualquiera de las otras partes, desde el lado del oriente hasta el lado del mar; y el santuario estará en medio de ella.

Y desde la posesión de los levitas, y desde la posesión de la ciudad, en medio estará lo que pertenecerá al príncipe, entre el término de Judá y el término de Benjamín estará la porción del príncipe.

En cuanto a las demás tribus, desde el lado del oriente hasta el lado del mar, tendrá Benjamín una porción.

Y junto al término de Benjamín, desde el lado del oriente hasta el lado del mar, Simeón, otra.

Y junto al término de Simeón, desde el lado del oriente hasta el lado del mar, Isacar, otra.

Y junto al término de Isacar, desde el lado del oriente hasta el lado del mar, Zabulón, otra.

Y junto al término de Zabulón, desde el lado del oriente hasta el lado del mar, Gad, otra.

Y junto al término de Gad, al lado del austro, al sur, será el término desde Tamar hasta las aguas de las rencillas, y desde Cades y el arroyo hasta el Mar Grande.

Y Daniel habló, y dijo: Sea bendito el nombre de Dios desde la eternidad hasta la eternidad; porque suya es la sabiduría y el poder.

Sabe, pues, y entiende, que desde la salida de la orden para restaurar y edificar a Jerusalén hasta el Mesías Príncipe, habrá siete semanas, y sesenta y dos semanas; la plaza volverá a ser edificada, y el muro, en tiempos angustiosos.

Y desde el tiempo que fuere quitado el continuo sacrificio hasta la abominación desoladora, habrá mil doscientos noventa días.

Y le daré sus viñas desde allí, y el valle de Acor por puerta de esperanza; y allí cantará como en los tiempos de su juventud, y como en el día de su subida de la tierra de Egipto.

Desde los días de Gabaa has pecado, oh Israel; allí estuvieron; no los tomó la batalla en Gabaa contra los inicuos.

Pero yo soy Jehová tu Dios desde la tierra de Egipto; aún te haré morar en tiendas, como en los días de la fiesta.

Mas yo soy Jehová tu Dios desde la tierra de Egipto; no conocerás dios fuera de mí, ni otro salvador sino a mí.

Día de tinieblas y de oscuridad, día de nube y de sombra, que sobre los montes se extiende como el alba; un pueblo grande y fuerte; nunca desde el siglo fue semejante, ni después de él será jamás en años de generación en generación.

Jehová rugirá desde Sión, y dará su voz desde Jerusalén, y temblarán los cielos y la tierra; mas Jehová será la esperanza de su pueblo, y la fortaleza de los hijos de Israel.

Y dijo: Jehová rugirá desde Sión, y dará su voz desde Jerusalén; y las habitaciones de los pastores se enlutarán, y se secará la cumbre del Carmelo.

¿Rugirá el león en la selva sin haber presa? ¿Dará el leoncillo su rugido desde su guarida, sin haber apresado algo?

Pues he aquí, levantaré yo sobre vosotros, oh casa de Israel, dice Jehová Dios de los ejércitos, gente que os oprimirá desde la entrada de Hamat hasta el arroyo del desierto.

Oíd, pueblos todos: está atenta, tierra, y todo lo que en ella hay: y el Señor Jehová, el Señor desde su santo templo sea testigo contra vosotros.

Y haré un remanente de la que cojea, y de la descarriada una nación poderosa; y Jehová reinará sobre ellos en el monte de Sión desde ahora para siempre.

Pueblo mío, acuérdate ahora qué aconsejó Balac rey de Moab, y qué le respondió Balaam, hijo de Beor, desde Sitim hasta Gilgal, para que conozcas las justicias de Jehová.

En ese día vendrán hasta ti desde Asiria y las ciudades fortificadas, y desde las ciudades fortificadas hasta el Río, y de mar a mar, y de monte a monte.

Otorgarás a Jacob la verdad, y a Abraham la misericordia, que tú juraste a nuestros padres desde tiempos antiguos.

¿No eres tú desde el principio, oh Jehová, Dios mío, Santo mío? ¡No moriremos! Oh Jehová, para juicio lo pusiste; y tú, oh Roca, lo fundaste para castigar.

Porque la piedra clamará desde el muro, y la tabla del enmaderado le responderá.

Y habrá en aquel día, dice Jehová, voz de clamor desde la puerta del Pescado, y aullido desde la segunda, y grande quebrantamiento desde los collados.

Terrible será Jehová contra ellos, porque hará enflaquecer a todos los dioses de la tierra; y cada uno desde su lugar se inclinará a Él, todas las islas de las naciones.

Ahora, pues, Considerad esto en vuestro corazón desde este día en adelante, antes que pongáis piedra sobre piedra en el templo de Jehová.

Considerad, pues, ahora en vuestro corazón desde este día en adelante, desde el día veinticuatro del noveno mes, desde el día que se echó el cimiento del templo de Jehová; Consideradlo.

¿Todavía está la semilla en el granero? Si bien, la vid, la higuera, el granado y el árbol del olivo no han florecido todavía; mas desde este día os daré bendición.

Así dice Jehová de los ejércitos: Fortaleced vuestras manos, vosotros los que oís en estos días estas palabras de la boca de los profetas, desde el día que se echó el cimiento de la casa de Jehová de los ejércitos, para edificar el templo.

Y de Efraín destruiré los carros, y los caballos de Jerusalén; y los arcos de guerra serán quebrados; y hablará paz a las naciones; y su señorío será de mar a mar, y desde el río hasta los confines de la tierra.

Y dirá: No soy profeta; labrador soy de la tierra; porque esto aprendí del hombre desde mi juventud.

Y toda la tierra se volverá como llanura desde Geba hasta Rimón al sur de Jerusalén; y ésta será enaltecida, y será habitada en su mismo lugar desde la puerta de Benjamín hasta el lugar de la puerta primera, hasta la puerta del Ángulo; y desde la torre de Hananeel hasta los lagares del rey.

Porque desde donde el sol nace hasta donde se pone, será grande mi nombre entre los gentiles; y en todo lugar se ofrecerá incienso a mi nombre, y ofrenda limpia; porque mi nombre será grande entre las naciones, dice Jehová de los ejércitos.

Desde los días de vuestros padres os habéis apartado de mis leyes, y no las guardasteis. Volveos a mí, y yo me volveré a vosotros, dice Jehová de los ejércitos. Mas dijisteis: ¿En qué nos hemos de volver?

Reina Valera Gómez (© 2010)