'Levanta' en la Biblia
Y él dijo: ``Levanta ahora los ojos y ve que todos los machos cabríos que están cubriendo las hembras son rayados, moteados y abigarrados, pues yo he visto todo lo que Labán te ha hecho.
Entonces Judá dijo a Onán: Entra a la mujer de tu hermano, y haz parentesco con ella, y levanta simiente a tu hermano.
Y tú, levanta tu vara y extiende tu mano sobre el mar y divídelo; y los hijos de Israel pasarán por en medio del mar, sobre tierra seca.
y se levanta y anda afuera con su bastón, el que lo hirió será absuelto; sólo pagará por su tiempo perdido, y lo cuidará hasta que esté completamente curado.
He aquí, un pueblo se levanta como leona, y se yergue como león; no se echará hasta que devore la presa y beba la sangre de los {que ha} matado.
Si se levanta en medio de ti un profeta o soñador de sueños, y te anuncia una señal o un prodigio,
Pero si hay un hombre que odia a su prójimo, y acechándolo, se levanta contra él, lo hiere, y {éste} muere, y {después} él huye a una de estas ciudades,
Si un testigo falso se levanta contra un hombre para acusarle de transgresión,
y a la joven no harás nada; no hay en la joven pecado que merece la muerte; porque como cuando alguno se levanta contra su prójimo, y le quita la vida, así es esto.
Entonces el SEÑOR dijo a Josué: Levanta la lanza que tienes en tu mano hacia Hai, porque yo la entregaré en tu mano. Y Josué levantó la lanza que tenía en su mano, hacia la ciudad.
desde el monte de Halac, que se levanta hacia Seir, hasta Baal-gad en el valle del Líbano, al pie del monte Hermón. Capturó a todos sus reyes, los hirió y los mató.
Estos, pues, son los reyes de la tierra que Josué y los hijos de Israel derrotaron al otro lado del Jordán, hacia el occidente, desde Baal-gad en el valle del Líbano hasta el monte Halac que se levanta hacia Seir; y Josué dio la tierra en posesión a las tribus de Israel según sus divisiones,
El levanta del polvo al pobre, y al menesteroso ensalza del estiércol, para asentarlo con los príncipes; y hace que tengan por heredad trono de gloria. Porque del SEÑOR son las columnas de la tierra, y él asentó sobre ellas el mundo.
Y si alguno se levanta para perseguirte y buscar tu vida, entonces la vida de mi señor será ligada en el haz de los que viven con el SEÑOR tu Dios; pero El lanzará la vida de tus enemigos como de en medio de una honda.
es como la luz de la mañana {cuando} se levanta el sol en una mañana sin nubes, {cuando brota} de la tierra la tierna hierba por el resplandor {del sol} tras la lluvia."
Y por mí fue dado mandamiento, y buscaron; y hallaron que aquella ciudad de tiempo antiguo se levanta contra los reyes, y se rebela, y se forma en ella sedición;
Que pone a los humildes en altura, y a los enlutados levanta a seguridad;
así el hombre yace y no se levanta; hasta que los cielos ya no existan no se despertará ni se levantará de su sueño.
Tú me has arrugado; el testigo es mi delgadez, que se levanta contra mí para testificar en mi rostro.
A la luz se levanta el homicida, mata al pobre y al necesitado, y de noche es como ladrón.
Pero El arrastra a los poderosos con su poder; cuando se levanta, nadie está seguro de la vida.
¿Tienen número sus ejércitos? ¿Y sobre quién no se levanta su luz?
El viento solano lo levanta, y se va; y tempestad lo arrebatará de su lugar.
A {mi} derecha se levanta el populacho, arrojan {lazos} a mis pies y preparan contra mí sus caminos de destrucción.
Su trueno anuncia su presencia; también el ganado, respecto a lo que se levanta.
A su tiempo se levanta en alto, y se burla del caballo y del que se monta en él.
Cuando él se levanta, los poderosos tiemblan; a causa del estruendo quedan confundidos.
Mas tú, oh SEÑOR, eres escudo en derredor mío, mi gloria, y el que levanta mi cabeza.
Si un ejército acampa contra mí, No temerá mi corazón; Si contra mí se levanta guerra, {A pesar} de ello, yo estaré confiado.
La voz del SEÑOR levanta llamas de fuego.
Levanta tus pies a los asolamientos eternos; a todo enemigo que ha hecho mal en el santuario.
¿Quién se levanta por mí contra los malignos? ¿Quién está por mí contra los que obran iniquidad?
El dijo, e hizo saltar el viento de la tempestad, que levanta sus ondas;
Y levanta al pobre de la pobreza, y vuelve las familias como ovejas.
que levanta del polvo al pobre, y al menesteroso alza del estiércol;
Sámec Sostiene el SEÑOR a todos los que caen, y levanta a todos los oprimidos.
Jehová abre los ojos á los ciegos; Jehová levanta á los caídos; Jehová ama á los justos.
El SEÑOR, el que guarda a los extranjeros; al huérfano y a la viuda levanta; y el camino de los impíos trastorna.
¿No clama la sabiduría, y levanta su voz la prudencia?
El hombre perverso levanta contienda; y el chismoso aparta los príncipes.
{Como} maza y espada y aguda saeta es el hombre que levanta falso testimonio contra su prójimo.
El hombre iracundo levanta contiendas; y el furioso muchas veces peca.
el lebrel ceñido de lomos; asimismo el macho cabrío; y el rey contra el cual ninguno se levanta.
También se levanta cuando aún es de noche, y da alimento a los de su casa, y tarea a sus doncellas.
Si la ira del gobernante se levanta contra ti, no abandones tu puesto, porque la serenidad suaviza grandes ofensas.
El SEÑOR se levanta para contender, está en pie para juzgar a los pueblos.
Por tanto el SEÑOR levanta adversarios de Rezín contra ellos, e incita a sus enemigos,
¿Se gloriará el hacha contra el que con ella corta? ¿Se ensoberbecerá la sierra contra el que la mueve? ¡Como si el bordón se levantase contra el que lo levanta! ¡Como si se levantase la vara como si no fuese leño!
Por tanto, así dice el Señor, DIOS de los ejércitos: Pueblo mío que moras en Sion, no temas al asirio que te hiere con vara y levanta su báculo contra ti a la manera de Egipto.
El Seol, desde abajo, se estremece por ti al recibirte en tu venida; por ti despierta a los espíritus de los muertos, a todos los jefes de la tierra; levanta de sus tronos a todos los reyes de las naciones.
Súbete sobre un monte alto, oh Sion anunciadora; levanta fuertemente tu voz anunciadora de Jerusalén; levántala, no temas. Di a las ciudades de Judá: ¡Veis aquí el Dios vuestro!
He aquí, las naciones son como gota en un cubo, y son estimadas como grano de polvo en la balanza; he aquí, El levanta las islas como al polvo fino.
Levanta en derredor tus ojos y mira: todos ellos se reúnen, vienen a ti. Vivo yo --declara el SEÑOR-- que a todos ellos como joyas te los pondrás, y te ceñirás con ellos como una novia.
Alégrate, oh estéril, la que no daba a luz: levanta canción, y da voces de júbilo, la que nunca estuvo de parto; porque más serán los hijos de la dejada, que los de la casada, dijo el SEÑOR.
Levanta tus ojos en derredor y mira: todos se reúnen, vienen a ti; tus hijos vendrán de lejos, y tus hijas serán llevadas en brazos.
Trasquila tu cabello, y arrójalo, y levanta llanto sobre las alturas; porque el SEÑOR arrojó y dejó la nación de su furor.
Les dirás asimismo: Así dijo el SEÑOR: ¿Por ventura el que cae, nunca se levanta? ¿El que se aparta, nunca torna?
Así dice el SEÑOR de los ejércitos: He aquí, el mal va de nación en nación, y una gran tempestad se levanta de los confines de la tierra.
Levanta para ti señales, coloca para ti majanos; presta atención a la calzada, al camino que anduviste. Vuelve, virgen de Israel, vuelve a estas tus ciudades.
¿Quién es éste que como río se levanta, y cuyas aguas se mueven como ríos?
Egipto como río se levanta, y sus aguas se mueven como ríos, y dijo: Subiré, cubriré la tierra, destruiré la ciudad y los que en ella moran.
Y pon contra ella sitio, y edifica contra ella fortaleza, y levanta contra ella baluarte, y pon delante de ella campamento, y coloca contra ella arietes alrededor.
Y El me dijo: Hijo de hombre, levanta ahora tus ojos hacia el norte. Y levanté mis ojos hacia el norte, y he aquí, al norte de la puerta del altar, {estaba} el ídolo de los celos a la entrada.
{y} no come en {los santuarios de} los montes ni levanta sus ojos a los ídolos de la casa de Israel, ni amancilla a la mujer de su prójimo, ni se acerca a una mujer durante su menstruación;
oprime al pobre y al necesitado, comete robo, no devuelve la prenda, que levanta sus ojos a los ídolos {y} comete abominación,
no come en {los santuarios de} los montes, ni levanta sus ojos a los ídolos de la casa de Israel, ni amancilla a la mujer de su prójimo,
Y tú levanta esta endecha sobre los príncipes de Israel.
Y tú, hijo de hombre, levanta endechas sobre Tiro.
Hijo de hombre, levanta endechas sobre el rey de Tiro, y dile: Así dijo el Señor DIOS: Tú sellas la suma de la perfección, lleno de sabiduría, y acabado de hermosura.
Hijo de hombre, levanta endechas sobre Faraón rey de Egipto, y dile: A leoncillo de naciones eres semejante, y eres como el dragón en los mares, que secabas tus ríos, y enturbiabas las aguas con tus pies, y hollabas sus riberas.
¿Cae un ave en la trampa en la tierra si no hay cebo en ella? ¿Se levanta la trampa del suelo si no ha atrapado algo?
Porque el hijo deshonra al padre, la hija se levanta contra la madre, la nuera contra su suegra; y los enemigos del hombre son los de su casa.
Los montes tiemblan ante El, y los collados se derriten; sí, en su presencia se levanta la tierra, el mundo y todos los que en él habitan.
Y él les dijo: ¿Qué hombre habrá de vosotros, que tenga una oveja, y si cayere ésta en una fosa en sábado, no le echa mano, y la levanta?
Y si Satanás se levanta contra sí mismo, y se divide, no puede permanecer, antes ha llegado su fin.
y duerme, y se levanta de noche y de día, y la simiente brota y crece como él no sabe.
Decía también a las multitudes: Cuando veis una nube que se levanta en el poniente, al instante decís: ``Viene un aguacero", y así sucede.
Mas {Abraham} le contestó: ``Si no escuchan a Moisés y a los profetas, tampoco se persuadirán si alguno se levanta de entre los muertos."
Porque como el Padre levanta los muertos, y les da vida, así también el Hijo a los que quiere da vida.
Y a su vez, Isaías dice: RETOÑARA LA RAIZ DE ISAI, EL QUE SE LEVANTA A REGIR A LOS GENTILES; LOS GENTILES PONDRAN EN EL SU ESPERANZA.
Mas nosotros tuvimos en nosotros mismos respuesta de muerte, para que no confiemos en nosotros mismos, sino en Dios, que levanta a los muertos;
destruyendo consejos, y toda altura que se levanta contra la ciencia de Dios, y llevando cautivo todo pensamiento a la obediencia del Cristo.
Y aún más manifiesto es, si se levanta otro Sacerdote que sea semejante a Melquisedec;
Porque apenas se levanta el sol con ardor, y la hierba se seca, y la flor se cae, y perece su hermosa apariencia; así también se marchitará el rico en todos sus caminos.