'Porque' en la Biblia
Porque así como los sufrimientos de Cristo son nuestros en abundancia, así también abunda nuestro consuelo por medio de Cristo (el Mesías).
Porque no queremos que ignoren, hermanos, acerca de nuestra aflicción sufrida en Asia (provincia occidental de Asia Menor). Porque fuimos abrumados sobremanera, más allá de nuestras fuerzas, de modo que hasta perdimos la esperanza de {salir con} vida.
Porque nuestra satisfacción es ésta: el testimonio de nuestra conciencia que en la santidad y en la sinceridad {que viene} de Dios, no en sabiduría carnal sino en la gracia de Dios, nos hemos conducido en el mundo y especialmente hacia ustedes.
Porque ninguna otra cosa les escribimos sino lo que leen y entienden, y espero que entenderán hasta el fin;
Porque el Hijo de Dios, Cristo Jesús, que fue predicado entre ustedes por nosotros, por mí, Silvano y Timoteo, no fue sí y no, sino que ha sido sí en El.
No es que queramos tener control de su fe, sino que somos colaboradores {con ustedes} para su gozo, porque es en la fe que permanecen firmes.
Porque si yo les causo tristeza, ¿quién {será} el que me alegre sino aquél a quien yo entristecí?
Pero a quien perdonen algo, yo también {lo perdono.} Porque en verdad, lo que yo he perdonado, si algo he perdonado, {lo hice} por ustedes en presencia de Cristo (el Mesías),
Porque fragante aroma de Cristo somos para Dios entre los que se salvan y entre los que se pierden.
el cual también nos hizo suficientes {como} ministros (servidores) de un nuevo pacto, no de la letra, sino del Espíritu. Porque la letra mata, pero el Espíritu da vida.
Porque si el ministerio de condenación tiene gloria, mucho más abunda en gloria el ministerio de justicia.
Porque si lo que se desvanece {fue} con gloria, mucho más {es} con gloria lo que permanece.
Pero el entendimiento de ellos se endureció. Porque hasta el día de hoy, en la lectura del antiguo pacto (testamento) el mismo velo permanece sin alzarse, pues {sólo} en Cristo es quitado.
Porque no nos predicamos a nosotros mismos, sino a Cristo Jesús como Señor, y a nosotros como siervos de ustedes por amor de Jesús.
Porque nosotros que vivimos, constantemente estamos siendo entregados a muerte por causa de Jesús, para que también la vida de Jesús se manifieste en nuestro cuerpo mortal.
Porque todo {esto es} por amor a ustedes, para que la gracia que se está extendiendo por medio de muchos, haga que las acciones de gracias abunden para la gloria de Dios.
al no poner nuestra vista en las cosas que se ven, sino en las que no se ven. Porque las cosas que se ven son temporales, pero las que no se ven son eternas.
Porque sabemos que si la tienda terrenal que es nuestra morada, es destruida, tenemos de Dios un edificio, una casa no hecha por manos, eterna en los cielos.
Porque asimismo, los que estamos en esta tienda, gemimos agobiados, pues no queremos ser desvestidos, sino vestidos, para que lo mortal sea absorbido por la vida.
Porque por fe andamos, no por vista (no por apariencias).
Porque todos nosotros debemos comparecer ante el tribunal de Cristo, para que cada uno sea recompensado por sus hechos estando en el cuerpo, de acuerdo con lo que hizo, sea bueno o sea malo.
Porque si estamos locos, es para Dios; y si estamos cuerdos, es para ustedes.
¿O qué acuerdo tiene el templo de Dios con los ídolos? Porque nosotros somos el templo del Dios vivo, como Dios dijo: ``HABITARE EN ELLOS, Y ANDARE ENTRE ELLOS; Y SERE SU DIOS, Y ELLOS SERAN MI PUEBLO.
No hablo para condenar{los,} porque ya he dicho antes que ustedes están en nuestro corazón para morir juntos y para vivir juntos.
Porque si bien les causé tristeza con mi carta, no me pesa. Aun cuando me pesó, pues veo que esa carta les causó tristeza, aunque sólo por poco tiempo;
{pero} ahora me regocijo, no de que fueron entristecidos, sino de que fueron entristecidos para arrepentimiento; porque fueron entristecidos conforme a {la voluntad de} Dios, para que no sufrieran pérdida alguna de parte nuestra.
Porque la tristeza que es conforme a {la voluntad de} Dios produce un arrepentimiento {que conduce} a la salvación, sin dejar pesar; pero la tristeza del mundo produce muerte.
Porque miren, ¡qué solicitud ha producido esto en ustedes, esta tristeza piadosa, qué vindicación de ustedes mismos, qué indignación, qué temor, qué gran afecto, qué celo, qué castigo del mal! En todo han demostrado ser inocentes en el asunto.
Porque si en algo me he jactado con él acerca de ustedes, no fui avergonzado, sino que {así} como les hemos dicho todo con verdad, también nuestra jactancia ante Tito resultó ser {la} verdad.
Porque yo testifico que según sus posibilidades, y aun más allá de sus posibilidades, {dieron} de su propia voluntad,
Porque conocen la gracia de nuestro Señor Jesucristo, que siendo rico, sin embargo por amor a ustedes se hizo pobre, para que por medio de Su pobreza ustedes llegaran a ser ricos.
Doy {mi} opinión en este asunto, porque esto les conviene a ustedes, que fueron los primeros en comenzar hace un año no sólo a hacer {esto,} sino también a desear {hacerlo.}
Porque si hay buena voluntad, se acepta según lo que se tiene, no según lo que no se tiene.
Porque en cuanto a este servicio a los santos, es por demás que yo les escriba.
Que cada uno {dé} como propuso en su corazón, no de mala gana ni por obligación, porque Dios ama al que da con alegría.
Porque la ministración de este servicio no sólo suple con plenitud lo que falta a los santos, sino que también sobreabunda a través de muchas acciones de gracias a Dios.
Porque las armas de nuestra contienda no son carnales, sino poderosas en Dios para la destrucción de fortalezas;
Porque ellos dicen: ``Sus cartas son severas (pesadas) y duras, pero la presencia física es poco impresionante, y la manera de hablar despreciable."
Porque no nos atrevemos a contarnos ni a compararnos con algunos que se alaban a sí mismos. Pero ellos, midiéndose a sí mismos y comparándose consigo mismos, carecen de entendimiento.
Porque no es aprobado el que se alaba a sí mismo, sino aquél a quien el Señor alaba.
Porque celoso estoy de ustedes con celo de Dios; pues los desposé a un esposo para presentarlos {como} virgen pura a Cristo.
Porque si alguien viene y predica a otro Jesús, a quien no hemos predicado, o reciben un espíritu diferente, que no han recibido, o {aceptan} un evangelio distinto, que no han aceptado, bien lo toleran.
¿O cometí un pecado al humillarme a mí mismo para que ustedes fueran exaltados, porque les prediqué (anuncié) el evangelio de Dios gratuitamente?
Cuando estaba con ustedes y tuve necesidad, a nadie fui carga; porque cuando los hermanos llegaron de Macedonia, suplieron plenamente mi necesidad, y en todo me guardé, y me guardaré, de serles carga.
¿Por qué? ¿Porque no los amo? ¡Dios lo sabe!
Porque los tales son falsos apóstoles, obreros fraudulentos, que se disfrazan como apóstoles de Cristo (el Mesías).
Porque ustedes, siendo {tan} sabios, con gusto toleran a los insensatos.
Porque si quisiera gloriarme, no sería insensato, pues diría la verdad. Pero me abstengo {de hacerlo} para que nadie piense de mí más de lo que ve {en} mí, u oye de mí.
Por eso me complazco en {las} debilidades, en insultos (maltratos), en privaciones, en persecuciones y en angustias por amor a Cristo, porque cuando soy débil, entonces soy fuerte.
Me he vuelto insensato; ustedes me obligaron {a ello.} Pues yo debiera haber sido elogiado por ustedes, porque en ningún sentido fui inferior a los más eminentes apóstoles, aunque nada soy.
Miren, ésta es la tercera vez que estoy preparado para ir a ustedes, y no les seré una carga, pues no busco lo que es de ustedes, sino a ustedes. Porque los hijos no tienen la responsabilidad de atesorar para {sus} padres, sino los padres para {sus} hijos.
Porque temo que quizá cuando yo vaya, halle que no son lo que deseo, y yo sea hallado por ustedes que no soy lo que desean. Que quizá {haya} pleitos, celos, enojos, rivalidades, difamaciones, chismes, arrogancia, desórdenes.
Porque ciertamente El fue crucificado por debilidad, pero vive por el poder de Dios. Así también nosotros somos débiles en El, sin embargo, viviremos con El por el poder de Dios para con ustedes.
Porque nada podemos hacer contra la verdad, sino {sólo} a favor de la verdad.