Y habiendo tomado pan, después de haber dado gracias, {lo} partió, y les dio, diciendo: Esto es mi cuerpo que por vosotros es dado; haced esto en memoria de mí.

Simón, Simón, mira que Satanás os ha reclamado para zarandearos como a trigo;

Entonces ellos comenzaron a discutir entre sí quién de ellos sería el que iba a hacer esto.

diciendo: Padre, si es tu voluntad, aparta de mí esta copa; pero no se haga mi voluntad, sino la tuya.

De la misma manera {tomó} la copa después de haber cenado, diciendo: Esta copa es el nuevo pacto en mi sangre, que es derramada por vosotros.

Cuando llegó la hora, se sentó {a la mesa,} y con El los apóstoles,

Entonces les dijo: Pero ahora, el que tenga una bolsa, que la lleve consigo, de la misma manera también una alforja, y el que no tenga espada, venda su manto y compre una.

Se suscitó también entre ellos un altercado, {sobre} cuál de ellos debería ser considerado como el mayor.

Y saliendo, se encaminó, como de costumbre, hacia el monte de los Olivos; y los discípulos también le siguieron.

Y estando en agonía, oraba con mucho fervor; y su sudor se volvió como gruesas gotas de sangre, que caían sobre la tierra.

Llegó el día {de la fiesta} de los panes sin levadura en que debía sacrificarse {el cordero de} la Pascua.

Se acercaba la fiesta de los panes sin levadura, llamada la Pascua.

pero yo he rogado por ti para que tu fe no falle; y tú, una vez que hayas regresado, fortalece a tus hermanos.

Entonces se le apareció un ángel del cielo, fortaleciéndole.

Pero no es así con vosotros; antes, el mayor entre vosotros hágase como el menor, y el que dirige como el que sirve.

Vosotros sois los que habéis permanecido conmigo en mis pruebas;

Porque, ¿cuál es mayor, el que se sienta {a la mesa,} o el que sirve? ¿No lo es el que se sienta {a la mesa?} Sin embargo, entre vosotros yo soy como el que sirve.

Porque os digo que es necesario que en mí se cumpla esto que está escrito: ``Y CON LOS TRANSGRESORES FUE CONTADO"; pues ciertamente, lo que se refiere a mí, tiene {su} cumplimiento.

Y {Pedro} le dijo: Señor, estoy dispuesto a ir contigo tanto a la cárcel como a la muerte.

Pero {Jesús le} dijo: Te digo, Pedro, que el gallo no cantará hoy hasta que tú hayas negado tres veces que me conoces.

Habiéndole arrestado, se lo llevaron y le condujeron a la casa del sumo sacerdote; mas Pedro {le} seguía de lejos.

Cuando llegó al lugar, les dijo: Orad para que no entréis en tentación.

y les dijo: Intensamente he deseado comer esta Pascua con vosotros antes de padecer;

Y habiendo tomado una copa, después de haber dado gracias, dijo: Tomad esto y repartidlo entre vosotros;

y así como mi Padre me ha otorgado un reino, yo os otorgo

Porque en verdad, el Hijo del Hombre va según se ha determinado, pero ¡ay de aquel hombre por quien El es entregado!

que comáis y bebáis a mi mesa en mi reino; y os sentaréis en tronos juzgando a las doce tribus de Israel.

Mas he aquí, la mano del que me entrega está conmigo en la mesa.

Entonces Satanás entró en Judas, llamado Iscariote, que pertenecía al número de los doce;

Cuando se hizo de día, se reunió el concilio de los ancianos del pueblo, tanto los principales sacerdotes como los escribas, y llevaron a Jesús ante su concilio, diciendo:

Y les dijo: Cuando os envié sin bolsa, ni alforja, ni sandalias, ¿acaso os faltó algo? Y ellos contestaron: {No,} nada.

Mientras todavía estaba El hablando, he aquí, {llegó} una multitud, y el que se llamaba Judas, uno de los doce, iba delante de ellos, y se acercó a Jesús para besarle.

Y los principales sacerdotes y los escribas buscaban cómo dar muerte a Jesús, pues temían al pueblo.

Y {Jesús} les dijo: Los reyes de los gentiles se enseñorean de ellos; y los que tienen autoridad sobre ellos son llamados bienhechores.

Y se apartó de ellos como a un tiro de piedra, y poniéndose de rodillas, oraba,

Y ellos dijeron: Señor, mira, aquí hay dos espadas. Y El les dijo: Es suficiente.

Pero de ahora en adelante, EL HIJO DEL HOMBRE ESTARA SENTADO A LA DIESTRA del poder DE DIOS.

porque os digo que de ahora en adelante no beberé del fruto de la vid, hasta que venga el reino de Dios.

Los hombres que tenían a Jesús bajo custodia, se burlaban de El y le golpeaban;

Y uno de ellos hirió al siervo del sumo sacerdote y le cortó la oreja derecha.

porque os digo que nunca más volveré a comerla hasta que se cumpla en el reino de Dios.

Cuando estaba con vosotros cada día en el templo, no me echasteis mano; pero esta hora y el poder de las tinieblas son vuestros.

Entonces {Jesús} envió a Pedro y a Juan, diciendo: Id y preparad la Pascua para nosotros, para que {la} comamos.

Y El les respondió: He aquí, al entrar en la ciudad, os saldrá al encuentro un hombre que lleva un cántaro de agua; seguidle a la casa donde entre.

Entonces el Señor se volvió y miró a Pedro. Y recordó Pedro la palabra del Señor, cómo le había dicho: Antes que el gallo cante hoy, me negarás tres veces.

y él fue y discutió con los principales sacerdotes y con los oficiales sobre cómo se lo entregaría.

Dijeron todos: Entonces, ¿tú eres el Hijo de Dios? Y El les respondió: Vosotros decís que yo soy.

Cuando se levantó de orar, fue a los discípulos y los halló dormidos a causa de la tristeza,

Respondiendo Jesús, dijo: ¿Deteneos! Basta de esto. Y tocando la oreja {al siervo,} lo sanó.

Y una sirvienta, al verlo sentado junto a la lumbre, fijándose en él detenidamente, dijo: También éste estaba con El.

Entonces Jesús dijo a los principales sacerdotes, a los oficiales del templo y a los ancianos que habían venido contra El: ¿Habéis salido con espadas y garrotes como contra un ladrón?

Y diréis al dueño de la casa: ``El Maestro te dice: ` ¿Dónde está la habitación, en la cual pueda comer la Pascua con mis discípulos?'"

Y cuando los que rodeaban a Jesús vieron lo que iba a suceder, dijeron: Señor, ¿heriremos a espada?

Si tú eres el Cristo, dínoslo. Pero El les dijo: Si os lo digo, no creeréis;

Entonces él os mostrará un gran aposento alto, dispuesto; preparad{la} allí.

Pero Jesús le dijo: Judas, ¿con un beso entregas al Hijo del Hombre?

Pasada como una hora, otro insistía, diciendo: Ciertamente éste también estaba con El, pues él también es galileo.

Entonces ellos fueron y encontraron {todo} tal como El les había dicho; y prepararon la Pascua.

y vendándole los ojos, le preguntaban, diciendo: Adivina, ¿quién es el que te ha golpeado?

El aceptó, y buscaba una oportunidad para entregarle, sin hacer un escándalo.

Y saliendo fuera, lloró amargamente.

Ellos se alegraron y convinieron en darle dinero.

Después de encender ellos una hoguera en medio del patio, y de sentarse juntos, Pedro se sentó entre ellos.

Pero Pedro dijo: Hombre, yo no sé de qué hablas. Y al instante, estando él todavía hablando, cantó un gallo.

y les dijo: ¿Por qué dormís? Levantaos y orad para que no entréis en tentación.

Ellos le dijeron: ¿Dónde deseas que {la} preparemos?

Y ellos dijeron: ¿Qué necesidad tenemos ya de testimonio? Pues nosotros mismos lo hemos oído de su propia boca.

También decían muchas otras cosas contra El, blasfemando.

Un poco después, otro al verlo, dijo: ¡Tú también eres {uno} de ellos! Pero Pedro dijo: ¡Hombre, no es cierto!

Pero él {lo} negó, diciendo: Mujer, yo no le conozco.

y si os pregunto, no responderéis.