'Hace' en la Biblia
Desde la ciudad gimen los hombres, y claman las almas de los heridos, pero Dios no hace caso a {su} oración.
Maltrata a la mujer estéril, y no hace ningún bien a la viuda.
El señorío y el temor están con Dios; El hace paz en sus alturas.
Edifica su casa como la polilla, y como la cabaña que hace el guarda.
Ciertamente espíritu hay en el hombre, e inspiración del Omnipotente los hace que entiendan.
que le hace que su vida aborrezca el pan, y su alma la comida suave.
He aquí, todas estas cosas hace Dios dos y tres veces con el hombre;
Cuánto menos a aquel que no hace acepción de personas de príncipes, ni el rico es de él más respetado que el pobre; porque todos son obras de sus manos.
Que nos enseña más que a las bestias de la tierra, y nos hace sabios más que las aves del cielo.
Tronará Dios maravillosamente con su voz; él hace grandes cosas, y nosotros no lo entendemos.
Así hace retirarse á todo hombre, Para que los hombres todos reconozcan su obra.
Ya sea por corrección, o por el mundo suyo, o por misericordia, El hace que suceda.
¿Sabes tú cómo Dios las establece, y hace resplandecer el relámpago de su nube?
¿Quién puso por cuenta los cielos con sabiduría? Y los odres de los cielos, ¿quién los hace parar,
hace burla del espanto, y no teme, ni vuelve el rostro delante de la espada.
¿Acaso a tu mandato se remonta el águila y hace en las alturas su nido?
Saeta no le hace huir; las piedras de honda se le tornan aristas.
Hace hervir como una olla el mar profundo, y lo vuelve como una olla de ungüento.
En pos de sí hace resplandecer la senda, que parece que el mar es cano.
Y será como el árbol plantado junto a arroyos de aguas, que da su fruto en su tiempo; y su hoja no cae, y todo lo que hace, prosperará.
Ha preparado también sus armas de muerte; hace de sus flechas saetas ardientes.
El que no detrae con su lengua, Ni hace mal á su prójimo, Ni contra su prójimo acoge oprobio alguno.
Quien su dinero no dio a usura, ni contra el inocente tomó soborno. El que hace estas cosas, no resbalará para siempre.
Dios es el que me ciñe de poder, y hace perfecto mi camino;
El hace mis pies como de ciervas, y me afirma en mis alturas.
El cual engrandece las saludes de su rey, y hace misericordia a su ungido David, y a su simiente, para siempre.
La ley del SEÑOR es perfecta, que convierte el alma; el testimonio del SEÑOR es fiel, que hace sabio al pequeño.
En {lugares de} verdes pastos me hace descansar; junto a aguas de reposo me conduce.
La voz del SEÑOR rompe los cedros; sí, el SEÑOR hace pedazos los cedros del Líbano;
y como becerro hace saltar al Líbano; y al Sirión como cría de búfalo.
La voz del SEÑOR hace temblar el desierto; el SEÑOR hace temblar el desierto de Cades.
La voz del SEÑOR hace parir a las ciervas, y deja los bosques desnudos, y en su templo todo dice: ¡Gloria!
El SEÑOR hace anular el consejo de los gentiles, y hace anular las maquinaciones de los pueblos.
Dálet Calla ante el SEÑOR, y espera en él; no te enojes con el que prospera en su camino, con el hombre que hace maldades.
Que hace cesar las guerras hasta los fines de la tierra; que quiebra el arco, corta la lanza, y quema los carros en el fuego.
Agravios maquina tu lengua; como navaja amolada hace engaño.
Clamaré al Dios Altísimo, al Dios que {todo} lo hace para mí.
el Dios que hace habitar en familia a los solos; que saca a los aprisionados con grillos; mas los rebeldes habitan en sequedad.
Bendito el SEÑOR Dios, el Dios de Israel, el único que hace maravillas.
Con todo, Dios es mi rey desde la antigüedad, el que hace obras de salvación en medio de la tierra.
Tú eres el Dios que hace maravillas; tú hiciste notoria en los pueblos tu fortaleza.
ni la pestilencia que anda en tinieblas, ni la destrucción que hace estragos en medio del día.
Y dicen: El SEÑOR no {lo} ve, ni hace caso el Dios de Jacob.
¿Se juntará contigo el trono de iniquidades, que hace agravio bajo forma de ley?
No habitará en medio de mi casa el que hace engaño; el que habla mentiras no se afirmará delante de mis ojos.
El SEÑOR es el que hace justicia y derecho a todos los que padecen violencia.
{El es} el que pone las vigas de sus altos aposentos en las aguas; el que hace de las nubes su carroza; el que anda sobre las alas del viento;
el que hace a sus ángeles espíritus, sus ministros fuego flameante.
El hace brotar manantiales en los valles, corren entre los montes;
El que hace producir el heno para las bestias, y la hierba para el servicio del hombre; sacando el pan de la tierra.
Y el vino que alegra el corazón del hombre, Y el aceite que hace lucir el rostro, Y el pan que sustenta el corazón del hombre.
Allí anidan las aves; En las hayas hace su casa la cigüeña.
Tú ordenas la oscuridad y se hace de noche, en ella andan todas las bestias del bosque.
Hace parar la tempestad en sosiego, y sus ondas cesan.
en ella hace morar a los hambrientos, para que establezcan una ciudad donde vivir,
El derrama menosprecio sobre los príncipes, y les hace andar errados, vagabundos, sin camino.
Y levanta al pobre de la miseria, Y hace multiplicar las familias como rebaños de ovejas.
que hace habitar en familia a la estéril, para que sea madre de hijos alegre. Alelu-JAH.
Nuestro Dios está en los cielos; El hace lo que le place.
Voz de júbilo y de salud hay en las tiendas de los justos, la diestra del SEÑOR hace valentías.
La diestra del SEÑOR es sublime, la diestra del SEÑOR hace valentías.
La exposición de tus palabras alumbra; hace entender a los simples.
Hace ya mucho que he entendido de tus testimonios, que para siempre los fundaste.
Mucha paz tienen los que aman tu ley, y nada los hace tropezar.
de la cual no llenó el segador su mano, ni sus brazos el que hace gavillas.
Todo cuanto el SEÑOR quiere, lo hace, en los cielos y en la tierra, en los mares y en todos los abismos.
El que hace subir las nubes del cabo de la tierra; hizo los relámpagos en la lluvia; el que saca los vientos de sus tesoros.
Al único que hace grandes maravillas, porque para siempre es su misericordia.
Pues el enemigo ha perseguido mi alma, ha aplastado mi vida contra la tierra; me ha hecho morar en lugares tenebrosos, como los que hace tiempo están muertos.
el que hace derecho a los agraviados; el que da pan a los hambrientos; el SEÑOR, el que suelta a los aprisionados;
El que cubre los cielos de nubes, el que prepara la lluvia para la tierra, el que hace a los montes producir hierba.
El hace la paz en tus fronteras; te sacia con lo mejor del trigo.
Envía su palabra y los derrite; hace soplar su viento y el agua corre.
el que guiña los ojos, el que hace señas con los pies, el que señala con los dedos,
Mas el que comete adulterio con la mujer, es falto de corazón; corrompe su alma el que tal hace.
La mano negligente hace pobre; mas la mano de los diligentes enriquece.
A su alma hace bien el hombre misericordioso; mas el cruel atormenta su carne.
El impío hace obra falsa; mas el que sembrare justicia, tendrá galardón firme.
Mejor es el que se menosprecie y se hace siervo, que el que se precia, y carece de pan.
El justo hace reflexionar a su prójimo; mas el camino de los impíos les hace errar.
El justo aborrece la palabra de mentira; mas el impío se hace odioso y abominable.
La respuesta suave quita la ira; mas la palabra áspera hace subir el furor.
La lengua del sabio hace grato el conocimiento, pero la boca de los necios habla necedades.
Cuando los caminos del hombre son agradables al SEÑOR, aun a sus enemigos hace que estén en paz con él.
El corazón del sabio hace prudente su boca; y con sus labios aumenta la doctrina.
El hombre malo lisonjea a su prójimo, y le hace andar por el camino no bueno;
El que guiña los ojos {lo hace} para tramar perversidades; el que aprieta los labios ya hizo el mal.
La discreción del hombre le hace lento para la ira, y su gloria es pasar por alto una ofensa.
La pereza hace caer en sueño; y el alma negligente hambreará.
Cesa, hijo mío, de oír la enseñanza que te hace divagar de las palabras de sabiduría.
El vino hace burlador, la cerveza alborotadora; y cualquiera que en ellos yerra, no será sabio.
Como bramido de cachorro de león es el miedo del rey; el que lo hace enojar, peca contra su alma.
Los pensamientos con el consejo se ordenan; y con sabios consejos se hace la guerra.
El rey sabio esparce los impíos; y sobre ellos hace rodar la rueda.
Cuando el burlador es castigado, el simple se hace sabio; y enseñando al sabio, toma sabiduría.
Cuando pones tus ojos en ella, ya no está. Porque {la riqueza} ciertamente se hace alas, como águila que vuela {hacia} los cielos.
Como quien liga la piedra en la honda, Así hace el que al necio da honra.
El que cava un hoyo caerá en él, y el que hace rodar una piedra, sobre él volverá.
La falsa lengua aborrece al que atormenta; y la boca lisonjera hace resbaladero.
El que hace errar a los rectos por el mal camino, él caerá en su misma sima; mas los perfectos heredarán el bien.
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