44 Versículo de la Biblia sobre la orientación y la fortaleza
Versículos Más Relevantes
El hombre sabio es fuerte; Y de pujante vigor el hombre docto.
Con Dios está la sabiduría y la fortaleza; Suyo es el consejo y la inteligencia.
Cuando faltaren las industrias, caerá el pueblo: Mas en la multitud de consejeros hay salud.
Hasme guiado según tu consejo, Y después me recibirás en gloria.
Porque con ingenio harás la guerra: Y la salud está en la multitud de consejeros.
Y reposará sobre él el espíritu de Jehová; espíritu de sabiduría y de inteligencia, espíritu de consejo y de fortaleza, espíritu de conocimiento y de temor de Jehová.
Fíate de Jehová de todo tu corazón, Y no estribes en tu prudencia.
Condujiste en tu misericordia á este pueblo, al cual salvaste; Llevástelo con tu fortaleza á la habitación de tu santuario.
Por Jehová son ordenados los pasos del hombre, Y aprueba su camino.
Los pensamientos con el consejo se ordenan: Y con industria se hace la guerra.
Salmo de David. JEHOVA es mi luz y mi salvación: ¿de quién temeré? Jehová es la fortaleza de mi vida: ¿de quién he de atemorizarme?
A ti, oh Dios de mis padres, confieso y te alabo, que me diste sabiduría y fortaleza, y ahora me enseñaste lo que te pedimos; pues nos has enseñado el negocio del rey.
Si alguno habla, hable conforme á las palabras de Dios; si alguno ministra, ministre conforme á la virtud que Dios suministra: para que en todas cosas sea Dios glorificado por Jesucristo, al cual es gloria é imperio para siempre jamás. Amén.
Bendeciré á Jehová que me aconseja: Aun en las noches me enseñan mis riñones.
Dios los ha sacado de Egipto; Tiene fuerzas como de unicornio.
Conozco, oh Jehová, que el hombre no es señor de su camino, ni del hombre que camina es ordenar sus pasos.
Enséñame á hacer tu voluntad, porque tú eres mi Dios: Tu buen espíritu me guíe á tierra de rectitud.
Aguarda á Jehová; Esfuérzate, y aliéntese tu corazón: Sí, espera á Jehová.
También esto salió de Jehová de los ejércitos, para hacer maravilloso el consejo y engrandecer la sabiduría.
Y el niño crecía, y fortalecíase, y se henchía de sabiduría; y la gracia de Dios era sobre él.
Los pensamientos son frustrados donde no hay consejo; Mas en la multitud de consejeros se afirman.
Porque este Dios es Dios nuestro eternalmente y para siempre: El nos capitaneará hasta la muerte.
Y Jehová te pastoreará siempre, y en las sequías hartará tu alma, y engordará tus huesos; y serán como huerta de riego, y como manadero de aguas, cuyas aguas nunca faltan.
En lugar de lo cual deberíais decir: Si el Señor quisiere, y si viviéremos, haremos esto ó aquello.
Sin profecía el pueblo será disipado: Mas el que guarda la ley, bienaventurado él.
El secreto de Jehová es para los que le temen; Y á ellos hará conocer su alianza.
He aquí el hombre que no puso á Dios por su fortaleza, Sino que confió en la multitud de sus riquezas. Y se mantuvo en su maldad.
Reteniendo la palabra de vida para que yo pueda gloriarme en el día de Cristo, que no he corrido en vano, ni trabajado en vano.
Mi fortaleza y mi canción es JAH; Y él me ha sido por salud.
Antes desechasteis todo consejo mío, Y mi reprensión no quisisteis:
Bienaventurado el hombre que tiene su fortaleza en ti; En cuyo corazón están tus caminos.
El principio de la sabiduría es el temor de Jehová: Los insensatos desprecian la sabiduría y la enseñanza.
Mi corazón ha dicho de ti: Buscad mi rostro. Tu rostro buscaré, oh Jehová.
Diré yo á Jehová: Esperanza mía, y castillo mío; Mi Dios, en él confiaré.
Una cosa he demandado á Jehová, ésta buscaré: Que esté yo en la casa de Jehová todos los días de mi vida, Para contemplar la hermosura de Jehová, y para inquirir en su templo.
Oh Dios, enseñásteme desde mi mocedad; Y hasta ahora he manifestado tus maravillas.
Porque tú eres mi roca y mi castillo; Y por tu nombre me guiarás, y me encaminarás.
Orando en todo tiempo con toda deprecación y súplica en el Espíritu, y velando en ello con toda instancia y suplicación por todos los santos,
Escucha el consejo, y recibe la corrección, Para que seas sabio en tu vejez.
Y Jehová dijo á Moisés: También haré esto que has dicho, por cuanto has hallado gracia en mis ojos, y te he conocido por tu nombre.
¿O cuál rey, habiendo de ir á hacer guerra contra otro rey, sentándose primero no consulta si puede salir al encuentro con diez mil al que viene contra él con veinte mil?
No hubo tal rey antes de él que se convirtiese á Jehová de todo su corazón, y de toda su alma, y de todas su fuerzas, conforme á toda la ley de Moisés; ni después de él nació otro tal.
BETH. ¿Con qué limpiará el joven su camino? Con guardar tu palabra.
Retén la forma de las sanas palabras que de mi oíste, en la fe y amor que es en Cristo Jesús.