'Mas' en la Biblia
- 1.Gé 2:20-Éx 9:28
- 2.Éx 9:29-Levítico 22:11
- 3.Levítico 22:23-Deuteronomio 5:22
- 4.Deuteronomio 7:1-Josué 23:15
- 5.Josué 24:4-1 Samuel 9:2
- 6.1 Samuel 9:7-2 Samuel 14:10
- 7.2 Samuel 14:15-2 Reyes 3:11
- 8.2 Reyes 3:15-2 Crónicas 7:19
- 9.2 Crónicas 9:6-Ester 2:14
- 10.Ester 2:17-Salmos 20:8
- 11.Salmos 21:11-Salmos 119:99
- 12.Salmos 119:100-Proverbios 12:24
- 13.Proverbios 12:25-Proverbios 21:15
- 14.Proverbios 21:20-Cantares 6:9
- 15.Isaías 1:13-Jeremías 3:11
- 16.Jeremías 3:16-Jeremías 46:23
- 17.Jeremías 46:26-Ezequiel 32:27
- 18.Ezequiel 33:5-Oseas 14:8
- 19.Oseas 14:9-Mateo 8:12
- 20.Mateo 8:20-Mateo 28:17
- 21.Marcos 1:7-Lucas 9:61
- 22.Lucas 10:2-Juan 8:27
- 23.Juan 8:37-Hechos 28:16
- 24.Romanos 1:13-1 Corintios 12:31
- 25.1 Corintios 13:6-Efesios 3:20
- 26.Efesios 4:9-Santiago 1:4
- 27.Santiago 1:10-Apocalipsis 22:15
no se goza en la injusticia, mas se goza en la verdad;
La caridad nunca deja de ser; mas las profecías se acabarán, y cesarán las lenguas, y la ciencia acabará.
mas cuando venga lo que es perfecto, entonces lo que es en parte se acabará.
Cuando yo era niño, hablaba como niño, pensaba como niño, juzgaba como niño, mas cuando ya fui hombre hecho, dejé lo que era de niño.
Y ahora vemos por espejo, oscuramente; mas entonces veremos cara a cara; ahora conozco en parte; mas entonces conoceré como soy conocido.
Seguid la caridad; y desead los dones espirituales, mas sobre todo que profeticéis.
Mas el que profetiza, habla a los hombres para edificación, y exhortación, y consolación.
Yo quisiera que todos vosotros hablaseis en lenguas, pero más que profetizaseis; porque mayor es el que profetiza que el que habla en lenguas, a no ser que las interprete para que la iglesia reciba edificación.
Doy gracias a mi Dios que hablo en lenguas más que todos vosotros;
Si alguno habla en lengua desconocida, sea esto por dos, o a lo más tres, y por turno; y uno interprete.
Y después, fue visto por más de quinientos hermanos a la vez; de los cuales muchos viven aún, y otros ya duermen.
Porque yo soy el más pequeño de los apóstoles, que no soy digno de ser llamado apóstol, porque perseguí la iglesia de Dios.
Mas por la gracia de Dios soy lo que soy; y su gracia no ha sido en vano para conmigo; antes he trabajado más que todos ellos; pero no yo, sino la gracia de Dios que ha sido conmigo.
Si sólo en esta vida esperamos en Cristo, somos los más miserables de todos los hombres.
Mas ahora Cristo ha resucitado de los muertos; primicias de los que durmieron es hecho.
Mas lo espiritual no es primero, sino lo natural; luego lo espiritual.
Mas esto digo, hermanos; que la carne y la sangre no pueden heredar el reino de Dios; ni la corrupción hereda la incorrupción.
Mas gracias sean dadas a Dios, que nos da la victoria por medio de nuestro Señor Jesucristo.
En cuanto a nuestro hermano Apolos; mucho le rogué que fuese a vosotros con los hermanos; mas en ninguna manera tuvo voluntad de ir por ahora; pero irá cuando tenga oportunidad.
Porque ésta es nuestra gloria; el testimonio de nuestra conciencia, que con simplicidad y sinceridad de Dios, no con sabiduría carnal, sino por la gracia de Dios, nos hemos conducido en el mundo, y más abundantemente con vosotros.
Porque el Hijo de Dios, Jesucristo, que entre vosotros ha sido predicado por nosotros, por mí y Silvano y Timoteo, no ha sido Sí y No; mas ha sido Sí en Él.
Mas yo invoco a Dios por testigo sobre mi alma, que por ser indulgente con vosotros no he pasado todavía a Corinto.
No que tengamos dominio sobre vuestra fe, mas somos ayudadores de vuestro gozo; porque por la fe estáis firmes.
así que, al contrario, vosotros más bien debierais perdonarle y consolarle, para que el tal no sea consumido de demasiada tristeza.
no tuve reposo en mi espíritu, por no haber hallado a Tito mi hermano; mas despidiéndome de ellos, partí para Macedonia.
Mas a Dios gracias, el cual hace que siempre triunfemos en Cristo, y manifiesta la fragancia de su conocimiento por nosotros en todo lugar.
el cual también nos ha hecho ministros suficientes del nuevo testamento; no de la letra, sino del espíritu; porque la letra mata, mas el espíritu vivifica.
¿cómo no será más glorioso el ministerio del espíritu?
Porque si el ministerio de condenación fue glorioso, mucho más abundará en gloria el ministerio de la justificación.
Porque aun lo que fue glorioso, no es glorioso en este respecto, en comparación a la gloria más excelente.
Porque si lo que perece fue glorioso, mucho más glorioso será lo que permanece.
Que estamos atribulados en todo, mas no angustiados; en apuros, mas no desesperados;
perseguidos, mas no desamparados; derribados, mas no destruidos;
no mirando nosotros a las cosas que se ven, sino a las que no se ven; porque las cosas que se ven son temporales, mas las que no se ven son eternas.
Mas el que nos hizo para esto mismo es Dios, el cual también nos ha dado las arras del Espíritu.
Estamos confiados, y más quisiéramos estar ausentes del cuerpo, y presentes con el Señor.
Conociendo, pues, el temor del Señor, persuadimos a los hombres, mas a Dios somos manifiestos; y espero que también en vuestras conciencias seamos manifiestos.
como desconocidos, pero bien conocidos; como moribundos, mas he aquí vivimos; como castigados, mas no muertos;
como entristecidos, mas siempre gozosos; como pobres, mas enriqueciendo a muchos; como no teniendo nada, mas poseyéndolo todo.
No estáis estrechos en nosotros, mas estáis estrechos en vuestras propias entrañas.
Mas Dios, que consuela a los abatidos, nos consoló con la venida de Tito;
y no sólo con su venida, sino también con la consolación con que él fue consolado de vosotros, haciéndonos saber vuestro gran deseo, vuestro llanto, vuestro celo por mí, para que así yo más me regocijara.
Porque la tristeza que es según Dios produce arrepentimiento para salvación, de que no hay que arrepentirse; mas la tristeza del mundo produce muerte.
Por tanto, tomamos consolación de vuestra consolación; pero mucho más nos gozamos por el gozo de Tito, de que haya sido recreado su espíritu por todos vosotros.
Y su entrañable afecto es más abundante para con vosotros, cuando se acuerda de la obediencia de todos vosotros, de cómo lo recibisteis con temor y temblor.
Porque de su voluntad han dado conforme a sus fuerzas, yo testifico, y aun más allá de sus fuerzas;
como está escrito: El que recogió mucho, no tuvo más; y el que poco, no tuvo menos.
Mas gracias sean dadas a Dios, que puso en el corazón de Tito la misma solicitud por vosotros.
Y enviamos con ellos a nuestro hermano, la diligencia del cual hemos comprobado muchas veces en muchas cosas, y ahora mucho más diligente por la mucha confianza que tengo en vosotros.
Mas he enviado a los hermanos, para que nuestra gloria de vosotros no sea vana en esta parte; para que, como lo he dicho, estéis preparados;
Y yo, Pablo mismo, os ruego por la mansedumbre y bondad de Cristo; yo que estando presente soy humilde entre vosotros, mas ausente soy osado para con vosotros;
Porque aunque me gloríe algo más de nuestra autoridad, la cual el Señor nos dio para edificación y no para vuestra destrucción, no me avergonzaré;
Porque a la verdad, dicen: Sus cartas son gravosas y fuertes; mas su presencia corporal es débil, y su palabra es menospreciable.
Porque no osamos contarnos, o compararnos con algunos que se alaban a sí mismos; mas ellos, midiéndose a sí mismos por sí mismos, y comparándose consigo mismos, no son sabios.
Mas nosotros, no nos gloriaremos desmedidamente, sino conforme a la medida de la regla que Dios nos dio por medida, para llegar aun hasta vosotros.
Porque no nos extendemos más de nuestra medida, como si no alcanzásemos hasta vosotros; porque también hasta vosotros hemos llegado con el evangelio de Cristo.
No gloriándonos desmedidamente en trabajos ajenos; mas teniendo esperanza de que cuando vuestra fe crezca, seremos mucho más engrandecidos entre vosotros, conforme a nuestra regla.
Para predicar el evangelio en las regiones más allá de vosotros, sin entrar en el campo de otro para gloriarnos en lo que ya estaba preparado.
Mas el que se gloría, gloríese en el Señor.
Mas temo que en alguna manera, como la serpiente engañó a Eva con su astucia, así sean corrompidas vuestras mentes, de la simplicidad que es en Cristo.
Mas yo pienso que en nada he sido inferior a aquellos grandes apóstoles.
Mas lo que hago, haré aún, para cortar la ocasión de aquellos que la desean, a fin de que en aquello que se glorían, sean hallados semejantes a nosotros.
¿Son ministros de Cristo? (como poco sabio hablo) Yo más; en trabajos más abundante; en azotes sin medida; en cárceles más; en peligros de muerte muchas veces.
Ciertamente no me conviene gloriarme; mas vendré a las visiones y a las revelaciones del Señor.
De tal hombre me gloriaré, mas de mí mismo no me gloriaré, sino en mis debilidades.
Por lo cual si quisiera gloriarme, no sería insensato; porque diría verdad; pero lo dejo, para que nadie piense de mí más de lo que en mí ve, u oye de mí.
y me ha dicho: Bástate mi gracia; porque mi poder se perfecciona en la debilidad. Por tanto, de buena gana me gloriaré más bien en mis debilidades, para que habite en mí el poder de Cristo.
Y yo de buena gana gastaré y seré desgastado por vuestras almas, aunque amándoos más, sea amado menos,
mas sea así: Yo no fui carga a vosotros; sino que, como soy astuto, os he tomado con engaño.
¿Pensáis aún que nos excusamos con vosotros? Delante de Dios en Cristo hablamos; mas todo lo hacemos, muy amados, para vuestra edificación.
Porque aunque fue crucificado en flaqueza, sin embargo vive por el poder de Dios. Pues también nosotros somos débiles en Él, mas viviremos con Él por el poder de Dios para con vosotros.
Mas si aun nosotros, o un ángel del cielo os predicare otro evangelio del que os hemos predicado, sea anatema.
Mas os hago saber, hermanos, que el evangelio predicado por mí, no es según hombre;
y que adelantaba en el judaísmo sobre muchos de mis contemporáneos en mi nación, siendo mucho más celoso de las tradiciones de mis padres.
Mas cuando agradó a Dios, que me apartó desde el vientre de mi madre, y me llamó por su gracia,
mas no vi a ningún otro de los apóstoles, sino a Jacobo el hermano del Señor.
Mas ni aun Tito, que estaba conmigo, siendo griego, fue obligado a circuncidarse;
Porque antes que viniesen unos de parte de Jacobo, él comía con los gentiles, mas cuando vinieron, se retraía y se apartaba, teniendo miedo de los que eran de la circuncisión.
Con Cristo estoy juntamente crucificado; mas vivo, ya no yo, sino que Cristo vive en mí; y lo que ahora vivo en la carne, lo vivo en la fe del Hijo de Dios, el cual me amó y se entregó a sí mismo por mí.
Porque si la herencia fuese por la ley, ya no sería por la promesa: Mas Dios la dio a Abraham por la promesa.
Mas la Escritura encerró todo bajo pecado, para que la promesa por la fe de Jesucristo, fuese dada a los que creen.
Mas venida la fe, ya no estamos bajo ayo,
mas está bajo tutores y mayordomos hasta el tiempo señalado por el padre.
Mas venido el cumplimiento del tiempo, Dios envió a su Hijo, hecho de mujer, hecho bajo la ley,
Mas entonces, no conociendo a Dios, servíais a los que por naturaleza no son dioses.
Mas ahora, conociendo a Dios, o más bien, siendo conocidos por Dios, ¿cómo es que os volvéis de nuevo a los débiles y pobres rudimentos, a los cuales os queréis volver a esclavizar?
Ellos tienen celo de vosotros, mas no para bien; antes, os quieren apartar para que vosotros tengáis celo por ellos.
Pero el de la sierva nació según la carne; mas el de la libre lo fue por la promesa.
Mas la Jerusalén de arriba es libre; la cual es la madre de todos nosotros.
Porque está escrito: Alégrate estéril, tú que no das a luz: Prorrumpe en júbilo y clama, tú que no tienes dolores de parto, porque más son los hijos de la dejada, que de la que tiene marido.
Mas ¿qué dice la Escritura? Echa fuera a la sierva y a su hijo; porque el hijo de la sierva no será heredero con el hijo de la libre.
Mas nosotros por el Espíritu aguardamos la esperanza de la justicia por fe.
Yo confío de vosotros en el Señor, que no pensaréis ninguna otra cosa; mas el que os perturba, llevará el juicio, quienquiera que él sea.
Mas si os mordéis y devoráis los unos a los otros, mirad que no os consumáis los unos a los otros.
Mas si sois guiados por el Espíritu, no estáis bajo la ley.
Mas el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe,
Porque el que siembra para su carne, de la carne segará corrupción; mas el que siembra para el Espíritu, del Espíritu segará vida eterna.
Mas lejos esté de mí gloriarme, salvo en la cruz de nuestro Señor Jesucristo, por el cual el mundo me es crucificado a mí, y yo al mundo.
A mí, que soy menos que el más pequeño de todos los santos, me es dada esta gracia de predicar entre los gentiles el evangelio de las inescrutables riquezas de Cristo;
Y a Aquél que es poderoso para hacer todas las cosas mucho más abundantemente de lo que pedimos, o entendemos, según el poder que opera en nosotros,
Resutados de la Búsqueda continuados...
- 1.Gé 2:20-Éx 9:28
- 2.Éx 9:29-Levítico 22:11
- 3.Levítico 22:23-Deuteronomio 5:22
- 4.Deuteronomio 7:1-Josué 23:15
- 5.Josué 24:4-1 Samuel 9:2
- 6.1 Samuel 9:7-2 Samuel 14:10
- 7.2 Samuel 14:15-2 Reyes 3:11
- 8.2 Reyes 3:15-2 Crónicas 7:19
- 9.2 Crónicas 9:6-Ester 2:14
- 10.Ester 2:17-Salmos 20:8
- 11.Salmos 21:11-Salmos 119:99
- 12.Salmos 119:100-Proverbios 12:24
- 13.Proverbios 12:25-Proverbios 21:15
- 14.Proverbios 21:20-Cantares 6:9
- 15.Isaías 1:13-Jeremías 3:11
- 16.Jeremías 3:16-Jeremías 46:23
- 17.Jeremías 46:26-Ezequiel 32:27
- 18.Ezequiel 33:5-Oseas 14:8
- 19.Oseas 14:9-Mateo 8:12
- 20.Mateo 8:20-Mateo 28:17
- 21.Marcos 1:7-Lucas 9:61
- 22.Lucas 10:2-Juan 8:27
- 23.Juan 8:37-Hechos 28:16
- 24.Romanos 1:13-1 Corintios 12:31
- 25.1 Corintios 13:6-Efesios 3:20
- 26.Efesios 4:9-Santiago 1:4
- 27.Santiago 1:10-Apocalipsis 22:15